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Legans-3; Alcorcn-0.

que cinco aos sobre ochenta sean ahora


una medida relevante a considerar.

Lo de llenar porque s pginas y pginas


de peridicos, minutos y minutos de
radio o imgenes e imgenes de
televisin lleva a soltar obviedades,
nimiedades e insulseces por doquier.
Desde el peinado favorito de Menguano
hasta a la tcnica de sonado de mocos
de Fulano tienen cabida en esos sesudos
medios de comunicacin. Incluso, ya
puestos, se repiten como el ajo los
derbis, lo sean o no.
Originariamente,
tal
concepto
englobaba un enfrentamiento de
mxima rivalidad entre equipos vecinos.
Luego, por aquello de la proliferacin
de tal consideracin, fue extendindose
hasta aplicarlo casi a cualquier
encuentro donde se halle el ms mnimo
nexo en comn. Llegado el caso, hasta
se le cambia el nombre y se le llama
clsico. Todo sea por ponerse cursi y
rozar la nusea.
Toda la semana vociferando lo del derbi
por el Legans-Alcorcn y los calores
corporales que me iban subiendo.
Lgicamente, quienes as hablan ni la
menor idea tienen. Cuando alcanzan a
escupir la palabra rivalidad, ya expelo el
humo cual olla a presin haciendo
cocido. Si se hubieran molestado en
conocer algo de la historia, alcanzaran
a averiguar la nulidad de tal afirmacin.
Nunca
fueron
rivales,
nunca
encarnizados, nunca se chocaron. Salvo

Por fortuna para los sufridos


espectadores de Butarque, el Lega
volvi a ganar. Tambin, por suerte,
Bordols no andaba por el banquillo
visitante y nos ahorramos el dolor de
cabeza de la indignacin de contemplar
su asco por el ftbol. Y es que tanto
Legans como Alcorcn cuentan con un
puado de futbolistas como para dar
ms de un susto a los equipos de la
clase noble. Los amarillos en su
delantera. Los pepineros en el medio
campo.

Gan fcil el equipo de Garitano en el


partido donde menos pareci ser tan
superior. La clave anduvo all por la
mitad del primero tiempo, donde en dos
minutos Guillermo y Szymanowski
sentenciaron el choque. Porque, esta vez
s, los locales supieron mantener la
ventaja, no dar concesiones tontas al
rival e, incluso, incrementar la ventaja
en el segundo perodo. Guillermo, el
pretendido pichichi pepinero, quit las
telas de araa de su escopeta para volver
a anotar desde la primera jornada. La
puntera fall en el rival.

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