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Roland Barthes Ensayos criticos “eaduccin dl francs por Carles Pj A Fronois Braunschseig i ii sel oe isaNasorsiasi impo Vp SA Pods rien puro land elie tere ct dpi quest ey 11225 AI reunir aud textos pulicados como preficos oar tials al largo de wos diez aos, su autor desearia ex: plzarse acerea del tempo y le exisenca que lr produ: ro pero no lees posible: tome demasiado que Ip retro: ectvo no sa nada mds que wna categoria dela male fe Eccribir ine que ir acompanade de ws calase; escribir fx en cierto mado, hacerse scallado como um mueron, converse en el hombre quien se niega la kim pala- bras escribir es ofrecer desde el primer momento ete ‘ma palabra al otro, ‘La razbn deel esque el senido de na obna (ode un texto) no puede hacerse solo: el autor muna ga a pro- Alucir mas que presunciones de sentido formas si se guie~ rey el mundo ese que ls lena. Todos ls textos que se ‘dan ag son como elabones de una cadena de entides, pero eta cadena es fltante. ;Quién puede fri, dale ‘un sgifcao gure? Quins el iempo:reunir textos an tiguos en un Tro nuevo es querer interogar al emo, solictar que mos de eu respuesta alos fragments que pro ‘eden del pasado; pero ol rmpo es dole, tempo dele: eribiry verso dela memoria, eta duplicidad require 2 eon sentido siguiente: el Fempo mismo esa for- ‘a. Hoy puedo hablar dl bnechimo o del enowveas 1 rman» (puesto que estos movimientos ocupan Ia primers parte de estos Ensayos) on terminos seménticos (puesto que at sr lenguaje actual) ntentarjstifiar aa wn eta itineraio de mi acs 0 de mf mismo, dare el as- ipecto de un destino ineligible, pero munca lograré imped que este lengua parordimica pueda ser eaptado por la Palabra de oto.» quizd ete otro sea yo mismo. Hay une Fireulaidad infinita de los lenguajes:éte es un pequcho ‘segment del crcl : "El equivale a decir que, aunque por su func has le del lengua dels otros, hasta el punto de querer ap rentemente (ya veces abusivamente)condurl, leita, como el esritor munca tiene ina palabra. Més ain, te mats final que forma su condicion comin ese ue desvela la verdadero identidad del critica: el erica es un ‘eritr, Esa es na pretension de ser, no de valor: el er- fico no pide que ele conceda urea wvsion» o un estilo, Sino tan sb que sete reconozca el derecho a una deter~ ‘minada palabra ue os a palabra indvecta Lo que se daa quis rele no es un sentido, sno un i= fideldad, 0 rsjor dicho: ef sentido de una infideide. Este sentido, siempre es forzos volver a este punto, muca nada ms que ws lengua, un sistema formal (sea cual Sea la verdad que lo anima); en un momento deteraina- do (que tal vez sea el de nuesiras criss profundas, sn ms relacin con lo que decimios qu la del cambio de ritmo), fst enguaje puede siempre ser hablado por oto lengua: escribir (a bo largo del emo) es buscar al descbierto el ‘mayor lengusj, ef gue es forma de todos los dems. El certo ex un experimentador public: varia lo que rco- tvienan bstinado e inf, slo conoce ws ate: del ema las variciones. Br ls variacions los combats, los wa loves las deoogis el tiempo, la avidee de viv de cono= «een, de participa, de hablar en una palabra, ls conteni- ‘os: pero ene ema la obstnacin dels formas, la gra funcion signfcante de lo imaginaro, es deci, la com- iprnsion misma del mune, Solo que, contrariamente a ‘qe ocure en misiea, cade una dele variaciones del s- ‘itor se considera como un tema side, cio sentido 2 supone inmedatoy definitv, Este eror dita de ser pe= ‘quero, constituye la Iteratura misma, y ms concrete mente exe didlog infin de ln erica y de la obra que hace que el tempo iteraro sea ala ez el tempo defo sores que avancan ye iempo de la efia que ls con: ‘ina, no tanto para dar un sentido ala obra enigndica como para desruir als que, dese el primer momento y 1 para siempre, la atboran, ‘Tal vez lt infidelidad del escritar tenga otra razb: csribir es una actividad; desde el punto de vista del (que escrite, el escribir se agota en una suceion de opera~ ions préctcas; el tierspo del ecrito es un empo ope- ator, y no wn tiempo historic, so viene una relaciin ambigua com el rempo evolutve de las ideas, cuyo movi- iiento no compart. Bn efecto, el tempo del esrb es "un tiempo defective: exrbir e, 0 bien proyectar, bien ferminar, pero nunca sexpresarss entre el comienzoy el fin falta wn eslabin, que, sin embargo, podria consid: rae como el exci ld la ora misma uc cribe, mas que para materializar una ides, para agotar tuna tarea que leva en si su propa felicidad. Hay una es- pecie de vocacin del exribir ala Hguidaciin; y ounque 21 mundo le remita siempre su obra como wn abet in- ‘movil, dotado de una vez por toda de un senso estable, 1 mismo esritor no puede viviela como una furdacién, sino més bien como un abandono neceario: el presente el esribir es ya pasado, su pasado de lo anterior muy le- Jano; sn embargo, en el momento en que él separa sdogrndvcamenten de elo (negdndose a heredar, a ser page ate {fel} el mundo pide al esritor que hag frente ala res ponabilidad de sw obra pus la moral socal exge de ti field a los contends, nientas que Slo cono- ce una fidlidad a las forma: lo que le sostiene (asus repos ojos) noes a gue ha exit sino ta decison, obs- nada, de esrb texto material libro), puede pues tener, desde et ‘punto de vita de quien lo ha srt un cardsterinesen- Cal incu, en crt medida, ianténic, As vemos a Imenudo cimo las bras, por oe agucia andamental no Son mas ques propio proyecto: a obra se escribe busca do lsobra,y cuando empena ftiiamente, termina préc- ticamente caso ef sentido del Temps Perdu noes ef de presenta ka imagen de us libro que se erie sélo bus Cando el libra? For una retorisn iigica del tiempo, la tna material ecrita por Proust ccupa as en a actividad ‘Gl nareador un lugar exretamente interes situado nie la vledad (quiexo escribe)y wra decisiin (voy & eri). Lo que our esque el empo del escritor noes ti temp diacrnic, sno wn tempo épic;earece de pre Sent y de pasado, ye plenamenteenread an arre- bat, en objerio, en eas de ser conocido, parecer tan inva aos ojo del mundo come lo evan ls novelas de ca Daler los oo de Tos contempordness de don Quijote. ste es tambien ef asi de que es impo activa del e- cribir se deserve cho mds acd defo que sel lamar Sen iineario (dom Quijote careia dey in embargo pertegul siempre la misma cova) En eect, so el hor fre ico, el hombre de a casa y dels viaje, del amor y de Tor amore, puede rpresentaros una infidelidad tan Jie. Un amigo acaba de perder a unser querido, y quiero ex: presale mi condolncia, Me pongo a eseibirle espn reais acta. Sin mbar, la plas ue me aren mo mesic: ones hag ssn on to ms afte dem ts ents ecg gee mani pu ura hacer gt ae ep, yen Condolence mia, en rere cats pod d= {unas pocs pala Reb mi pene, Sinem {self dela comuncacnseopne nel yu gie Sei an meme ay por eo de sed co i page gma ar nt tr demi sine, Ln cnc de qu pare de vida a mej se, resi eur, pr gus en ca) preci no stl var no ‘dents que ea variacin ea origina yc eta. Eset sci fold condones eo eros erature isa (ue mi ej fal ate {caper al sierra no se ua varecin thine une au dea tue). ope ni carta de same odo tertile comer eos cuts Puce veri, en deternade condiciones, am meric Primero (qe que sabi de ao, ss, compe Seco). te onions de varicose dela itera gu somalia ros Raabe eee raturnot lesley). yal gual que i car, tio pun fever rece sn gina det eum menage A hos de rina ncn ton sulgr Choy inane), concn de pnsra en teominos infrmaconaes (coo el lengua! lo erie et rina e por l onan fda tent mimo del tiaras wometndoe 1 ly tens pthiades de comin cm exaciud Toque gues dc on leraar, como nl coma iin privaa, canta mentale ors at ms “erie ge uc, ma aan de lomo ee nade que ver on apes cli de gue, sendo original, me mantendré lo més cerca poible de una especie de crac insprada, concdia ono wa gracias para garantaar a verdad de mi palabra To espontdneo no es frzsamente auténic. Lt razbn © que ete mensaje primer que dela servir para decir i fediatamente i pena, ee menseje puro que guises Alonotar simplemente Toque esté dentro de mi ese men= ‘ajo util lenuaje dels dems (y gu otro len sue podria exist?) me lo devuelve no mos inmetio- tamente decorada,complicad con na infil de men- Sales que yo no acpto. Mi palabra slo puede slr de una lengua: esta verdad sauuriana resuena agul mucho ms allée la ingisticas al exrbi sencilamente recibe mi pésame, nl compan 3 hae indiferancia, y la palebra Ie muestra como friamenterespetuoo de una detemi= Inada cstumbre, al escribir en na novela: Durante m= ‘ho tiempo me he acortado temprano, por secilo que Sex el eruncido, el autor no puede evtar quel stwacn dela fase adverbial el erpleo de la primera persone, la Inauguraciin mama de un dicurso que va a conta 0 mejor, rectar una detrminada exploracin del tem= + poy del espacio nocturos, desarollen ya un menses pune, ques yuna eterna Tieratura. ‘Quien queraexcribi con exacttud debe pues tral. arse alas fronteras del lenguje yates como esribird ‘rerdaderamente para los demis (ya gue si slo se hable 12a mio, le Bastard na especie de nomenclature e- Dontinen de sus sentiientos, puesto que el setimiento 5 inmediatamente propio nombre). Dado que toda ‘propiedad del lengua es imposible, ef escrito yet hom bre privado (cuando ecribe) estén condenads a vast desde principio sus mensajes originals, puesto que es fatal acer bs mor connotacion, agua cw carder raivcro, a Yees ity Aesvado, deforma To menes pes leno fo que quieren deci sno lo que quieren hace ofr text (amie) eps whore para gion ha bares mimedatamenteecachat su propia palabra; at se consttuye una pads tecbida (aunque sea palabra Cree), que es palabra isa de a terature Ex ‘fete esrb een todos ls nivel, la pala de tir, en ta inven pare puede vere el eda der edonn del exert; incluso e precio vero ls ‘ya que esa antcpacin de la palabra el ino mo ‘mento (uy rg) en qu el rior (como el amie gue dae pera) puede hacer comprender que mira hacia e otro; ya que mingin mensaje die puede comuniar inmediataente que nox compadecrs de alguien, sn ‘are ln rigs dela compas: sl la fora perite ‘Scapa aa iris de ln tmtmiertos, porque lala ‘one misma qu ene por fi comprendery dona teatro del erga {a oviginalida es pcs cl precio que hay que pagar ‘porta eipernca deer cio (yn slant copren- Aho) por quien nse. Estes na comuniccin dea )uque son neesaris muchos dtl para dec poe = {aston exact pero aoe vt, puso ue dee limomerto en qu a camaro es afetiva (tae la Aspen profanda dela iterate), latvia se Convert para lla en la peor dels amenssar. Debits & ue hay a angutia dee rv fangutia, pr le Treat, det propia wire), a erature no ext de codifcar ene cus desu historia, us informacion unas (ss connoacin) y denser el interior de ‘eros mirgnes de epi. As vemos cols ee las y las epocs fan en le comuicacin Itraria ana zona vigil lmiada de lad por a obliga de un Ienguaewvariadgsy del otro por el errant de eta sricin baj forma den euerpo recon de gras esi zona ital eo lama la retrial fan Gin esevitar quel teratara rasforme ong dla vivid (i fuse demasiado dete) y en vgno deta vigil (3 fcse demasiado indirect). Las fonteras dee retirica pueden agrandarse 0 dismin, del gongo tismo al escribir «blanco, par seguro esque la retr= fas ue no ess i a tera dela informacion exacts, Std vinculada no slo 2 toda iteratra, sino nso a Toda comunicaio, desde el morento en gve quire hacer omprender alot que [o recnoceros la retbrica es Ix dimers amorosa del esrb ite mensaje orginal que hay que variar para hacerlo cexaco, nunca es mis que lo que ade en rosotas en lt ‘hve ltevaria ne hay me sgficado primero que wr it~ to desc: escribir es modo del ros. Peo eft deseo, en rin, slo tiene a su diposcion un lenguae pobre y ular a afcividad que ay ene fondo de toda ltera~ tr sil comporta ur nero iersriamentereducido de furcines deseo, sur, me indigne, nego, amo, quiero Ser amado, tengo miedo de meri, cm eo hay que hacer ta tera infinit, La afetividad es trivial por de- reas tp, pelo determina todo el ser de a iteratu- ras: pues sel deseo de escribir slo la constelcion de temas coantas figuras obstinadas, al escritor slo le res- tauna aividad de varacién y de combinacin: munca hay eeadores slo combinadovs, a literatura es em Janie ale mave Argos la nave Argos no comtprtaba —em Ji lage historia ninguna crea, sino slo combina ones a pesar de estar ebigada a una funcion inmdvit ada piece se renavaa infnitemente, sin que el enjunt ‘ejara munca de ser le nave Argos. "Nadie puede por fo tanto escribir sin tomar partido apasionante (sea cul sea el despego aparnte de men oe) por todo lo que va bien © mal en el mundo; las der _graciasy ls dichas umtanas, logue iuscitan en oso, indgnaciones, juin, acptactones, uote, dees, angus tas, tod er la materia tnca de es sigs, pero ita {facia gu en un principio nos parece inexpresable bs te tal punto es primarsa, no tarda en converte exclu samen en algo nombeado. Volvemos una vex mis ala dua ley de lt comunicacin humana: lo eriginal slo es Ja ms vulgar de las Tenguas, slo por exes de pobreza, y ro de riquese, hablamas de ingable. ahora bien (a lite tua tiene que debatige con ete primer lengua, ete algo nombrado, ete demasiado-nombrado: la materia prima dela literatura no elo innombrabl, sno, por el onraria, lo nombyado; el que quiere escribir debe saber {que empieza wn largo concubineto com ur lnguaje que Siempre es anterior. Pr Io tant, elector no tiene en fbsalata que warrancars an verb lei, come se dice (or piadnashagografis Kerri, sino qu ala inversay ‘ant mas difciimente, mds cruclmentey menos gloro- ‘amen, ie que arrancar na palabra segunda dele scant dels palabras primeras que le proporcionan el mun, la Historia, su eistencia en ones trios un ineligible preexsent ad, ya que dl viene aun mundo Teno delnguaye,y no queda nada real que no et cla. {feado por los hombres: acer no mus que encontrar e3e ‘igo ya enteramente hecho y tener que adaptarse a él. A menudo se oye decir que el arte iene por msn expresar lo inexpresable: habia qu decir Io comtaio (in ning na intencin de paradoja:tda la tarea del arte consiste fn inexpresar io expestble, arvebatar ala lengue del ‘und, que ea pobre ypoderosa engus de las pasiones, luna palabvedistnt, une palara exact Si fuse de oro modo, el srt tuvieraverdadera mente por funcion dar una primera so @ algo setrir el lengue pr una pare slo podria hacer hablar aun re petcin insta, porque lo sonaginaro es pobre (lose lenvigquece se combina las figuras que lo constnaen, puraseseasas y escutas, por torencales que parezcan a Aqien las vive, y por otra parte Is literatura no tendria ringuna necesded de quello en que siempre se ha fr- dad: una tonea; no puede darse una tena (un arte) ‘da crac, sino so de la variacion y del area Ast vemos cma lat tenia de a Beata, many rumerosas Gal large dela Historia (aunque hayan sido mal recta ts) apron todas elas a distanciarse de fo mombnable (que etn condenadas a rvest. Estas tena son, ent (tras la retirica, que ee arte de vara lo vial rea Friendo ala suetitucones alas desplazamients de sen- fide areglo, que permite dar a um mensaje nico la ex~ tension de una perpecia infinita (en una novela por jempe); a iran, que eb forma que da el eutor 5 propio despeo; el fragmento, 0,515 prefire ail etc encia que permite een el entido, para que ass dis- pare mejor en dieciones abiertas. Todas estas. tenia {que nen su origen en a ecasidd del etritor de partir den mando y de un yo que el mundo y el yo har Hena dd yu com an nombre, aspran a fundar un lenguaje ndi- ecto, es deci un emo obitinado (om we eyeivo) y Uesvado (aceptanda estacions infinitamente vriadas). ste, coma sea vs, sn situacin fies pero es tam bin unastuacin abi no porque Orfeo scant, sno porque tant el eritor como Orfeo stan sujetos a una tnisma prohibition que da vide a su canto: a prohibicion < de volver hacia I que aman fi Madame Verurin, al hacer nota @Brichot que abusaba ‘el Yo en su articlos de guerra, ela causa de que ew “estariocambie todos sus Yo por Se, pero el Se no im- pedin al lector darse cuenta de que el autor bablaba de Simismos y permits a autor hablar ineesaniemente = fest misme.. sempre al amparo del wse. I hecho de serum pesonaje roto no imide que Brichot sea, ag: sar de toda, el escritor; todas las categortas personales ue ‘te maneja, mds numeosas gue as dela gramética, a ‘son mds que tentativas destnadas a dar 9 34 propia persona el esata de un signo verdaders: el problema, pera dl exrtr, noes nel de expresar wi el de enmase ‘rar su Yo (Brchot ingenuamente no lo consegua, ni por tr pare tenia ning deren de conseguir), ino el de dave brig, es decir, «un tempo amparariey algal. En general a esta doble neesidad es alo que coresponde Ia fandacon de wn cio: ef esrtor munca inteta otra cosa que trasformar su Yo en fragmento de ediga. Agus ‘sprig entrar una vez mse Ta tcnia del sentido, y tana vex mas tami la ling mos ayudar Jekobson,uttzando wna expresin de Peirce, ve en eh Yo un silo individual: como sme el Yo forma par te dean ego particular’ dierente aegis as lenguas Yo se convieri en Ego, Ich 0, Se amalda aos egos dell in del lend, del ingles); como ids remit wwe acim exsencial la del proferent, quien os resus euonas su iio sent, puto que Yo eae conpler ero también noes nada mds que el que dice Yo. Dicho en ras palabrs, Yo no puede ser defnido leccamente(s ne ‘srcuriendo a expedientes tales como eprimera persona ‘el singular), yan embargo participa enw lic (el el rants, por ejemplo) en del mensaje scabalga» el cig, {sun Shifer um desvador: de todos lr signs, eel mas Ail de manejr, puesto gue esl ihimo que adguiere el ito y el primero que pind el ofsico ‘Brel rade segundo, qu es siempre el del trata ayo escrito, ante el Yo, etd en a misma scuacin que lite el afisice sept eu novelita occ, Come el iio que die su propio nombre, al hablar de i, ef nove- lista se desgna ast mismo por medio de wna infnidad ‘deterceras personas; pero esta desgnacion, dita mucho de er un disfas, una proycibno wna disancia (tno no te disiana, no se rue ws alan se tata, por el con~ trara, dena opracon inmediat, Nevada de wr modo birt, mperozo (nada ms lara qu os Se de Brichot), 1 dela que el esritor tiene needed para bablarse asi ‘mii por medio de un meray normal ( ya no sal gunte), que procda plenamente del cig de los dems, de modo. que escribir, en vez de remit @ una expre= sions dela subjatividad, es por el cntrari el aco mismo (que comiore el imbolo indi (bastard) en signo pur Le terera persona na es pus una agucia de aiteratura fino el ato de insttcion previo acuslgier tr: escribir es decide a decir El (y poder hacerlo}. Ello exphia ue ‘cuando el ert dice Yo (lo eval acurre a meme), ste Dronombre ya no tenga nada ue ver con sino in al sno que 300 un signo stent codifcad: este Yo ho es adams ue un Ele segundo grado, Bl de truce (come lo praboria el andi el Yo proustiano). Al igual quee afi, el erica, privado de todo pronombre, Solo puede hablar on dtcureoaguereado;ineapas (0 des few) de tonsformar ef Yo et sgro, note queda mds Solucién que alll através de wna erpecie de grado cero Ge la pertona. EL Yo del erico nunca etd pues en To que tice sino eno que nadie, 0 mojo, en la disontinidad misma que marca todo dicurso erica; quad su exsten- fia es demasiado fuerte para que la consitya en sign, per tal vee a la inverse tambié demasiado verbal, flemasiadopenetada de clara, para dejarla on el estado ‘de simbolo indicia El ertio setae que no puede pro tducire El dela novela, pero qu tarpoc puede relgar el Yo aa pura vida privada,e dec, remuncia a seribir es un afsco del Yo, mientras quel resto desu lengua ub site, intact, marco in embargo pr los infiitos rodeos {que impone a la palabra (coma ene azo del afsico) el blogueoconstante de wn determined signa us comparacion podria incluso levarie md js, Sil novela, como el nit, decide codifcar u Yo bajo a for nade uma econ persona, es dbido a que ete Yo ain no tiene historia, 0 gue se ha decidido no otorgarsela, Toda novela er wna aurora, y por ello al pascer et la forma risa del queteresribie. Pusto que, del mismo mode {que al blor der ismo en trcera persona, el ni vive ‘ie momento fed en el que el lengua adultos presen 1224 como una insttucionperecta que ning simbolo impuro (mitad ebdigo, mitad mensje) puede ain co romper 0 inquietar, el Yo del novela, para encontrarse om los ores, va @ amparrse bajo el Bes decir bajo ue cSdigo ple, en el qu a exitencia todavia no cabal el ‘gna, Invesamente, en la afin del erica com respect al Yo, invie na sombre del pasado; su Yo contone de- masiado tiempo para gue pueda renunciar a ey daro al bio pleno de otro (hay que recordar que la novela prousiana slo fue posible una vex retirad el tiempo?) fal no poder abandonar esa forma muda de simboe, et ‘iio wolvidas el propio simboo, en integidad, come el afisico que tampoco puede dstrur su lnguaje mds que fla medida misma on qu exe lengusj ha ido. A Iienras que el novela eel hombre que consigue ifn tlzar su Yo hasta ef punto de hacer que se una al cdigo ‘adult de los ders, el ertco eel hombre que ensejeee1 sy, es decir, que lo enierra, lo preserva yl olvida, has- tel punto de susraere, macro incomuicale, al ebdi- 0 dea hteratur, Lo que caracterisa al erco es pues uma prtcsscreta de indireco: para permaneeer secrete, lo indiveco dee ‘qu ampararse bajo las figuras mismas de lo diet, de la tansitividad, de! dscurso sobre otro. De hi wn len- sje gue no puede ser recbido como ambigu,reticene, lasso deeper ere cma wn lpi gue le torn ss fone de agent ern, y sn ba pina qu fume con mack iad de no pe Sar mts uel desde su esc 1 edd Sin dejr te deer, por mee desma aca 5 tence cap les uncinatecmo igre rime deb exit tay pes srt eqioc vila por recta inate crea poo ee ec no pede er dena “iad on et prope lenguse ct, ocr eta donc ‘entra tv forma ice dei we ir splementras poe cube interrampa Jara gua el ri hale cde sf sm con exci, rd Frc ques ransformas en nove ei Maye fase dress el gu se apa por nn ret deat cool de oats eo ‘i ua ete mero de qu anova ce pret horse dl ei ei se gue va By qu somcinte al Nerrador poi, ecua est ‘Spe cn una aba spleentaria que eee bse seen nin learn at projec de eit, {Tempo qe sel ce Pleico em cero prow centr placate com sito es sree ‘uct To que cre ona deci gue he pad, {Terns pero a nr dl esr pede fat ee pemane cone rar oe Diciembre, 1963. BL MUNDO-oB}ETO En fos muscos de Holanda hay un pequeto pintor que quied merezca Is fama literaria de Vermeer de Delf. Saentedam no pinta al caras i objeto, sino, sobre todo, el interior de iglesias vaca, educidas ala aterciopeadasuavidad beige e inoensiva de un helado de avllana, Esta iglesias, en las que s6lo vemos Ken 20s de pated de madera y de cl tin irrmisiblemente espobladas, yest negacign va mucho més lejos de I ne por objeto desir Ia unidad del objeto, stuindalo ‘xageradamente, de modo que en prime lug Ia sus- tanciaquede abogada bajo la multitud de las ineasy de Jas orientaiones,, lego el abuso de los plans, dota dos sin embargo de denominaciones elisa, termine por hacer estar el espacio tradicional, afin de sti tuirlo por un nuevo espacio, provsto, como veremos enti de un instante, de una profundided temporal En sitesi, las operaciones descripivas de Robbe Grillet pueden resumizse as: destruir a Baudelsire uti ‘ando irrisoriamente a Lamartine, yal mismo tiempo por supuesto destrir a Lamartine (Esta comparscion ho es gratuit, si estamos dspuests a admite que nues: tea asensbilidad» ieraria ests enteramente educada, por refljasancestrale, segin una visién slamartin pa del espacio) Los ands de Robbe-Grile, mimi- ‘sos, pacientes hasta el punto de parecer estas paro- Giando « Balzac o a Faabert por su ultraprecsion, co rren sin cestr el objet, atcan esa pelicula objetiva que ‘lant lisico deposta sobre un cuadro pata evar a su Teco a la eufora de una unidad restiuida, El objeto clisco sgiegafatalmente su adetivo (el beillo hola {és el desertoracniano la materia superlatia de Bau- ‘elsire): Robbe-Grillet denuncia es fatalidad, su andl Sines una operacim anticoagulantehay que destuir a toda costae caparazén del objeto, mantenelo abierto, Aisponible a su nueva dimension: tempo. Para captar la naturalera temporal del objeto en Robbe-Grillet, hay que observar las mutaciones que le hace suffi, y tambien agus oponer la natualeza revolu- omar de su intento las normas de la desripeén sca, Sin duda éa ha sabido someter sus objets a fueraas de degradacién, Pero, preciamente, ea co#n0 i ‘lebjeto,constituido desde hacia largo tiempo ens s- sided bajada del empiteo; el Tiempo clésco no tieng ttre imagen que lt de un Destructor de perfeccién (Cronos y su guadafa)- En Balac, en Flaubert, 9 Baw wea mum, est eto evils ere, om0 ne ‘Remo eutmico sl fdas dd en cuaros (60 hue pitta dl ming) oen elo toque oe- $e gue, conraiiment a tdo ate hombre de teatro, Baudelaire imagina na historia completamente parrada, en vez de pattie dela excenasgentitamente el teat siempre es I concrecién ulterior de una fin en torno a un hecho ‘nica, que siempre es del orden el esto (ltuegla en Fsquilo, eiguemas de actores en ‘Molire) gui el teatro estévisblementepensado como lun avatar puramente formal, impuestoa posteriori aun principio crador de orden simbolico (Marquis du 1° Howzards)oexistencil (Llvogne). «Confieso que nu ca he pensado en la puesta en escnan, dice Eaidelsire ‘en un momento dado; ingenuidadimpesible en el me- nor de ls éramaturgos. ilo no quiere decir que los guiones de Baudelaie sean totalmente sjenos a una exten de I representa «ins pero en la misma medida en que pertenscen aun orden en resomidas cuentas novelesc, noes el tata, sino el cine el. que podria prolongarlos mejor, ya que el cine procede de la novela, y no-del tata, Los hates itinerantes los fash back, el exotismo dels eves, Ja desproporcin temporal de lor epsodios, en una pa Inbra, ese tormenta de desplegae la narracin de que da muestra el preteatvo de Baudelaire, es algo que, en ile timo término, podtafeeundar un cine rigurosamente puro, Desde este punto de vst, Le Marguis du 1° How- Zzards es un guid muy completo en este dram, todo, hasta los actores,coinckle com la tipoogiaclisica dels fanciones del cine, Porgue aqui el actor, procedente de tun personaje de novela, y no de un sueho corpéreo (como ain es el easo del hijo de Don Jus, interpreta do por una mujer, 0 de la esposs del Borracho, objeto de sadismo), para exstr no necesita para nada Ia po- fandidad de ln escena: forma parte de une tipoogia sentimental 0 social, pero en modo alguno morflégi- ‘2 puro signo narrativ, como en le novela y como eneleine.” {Qué queda pues de propiamente tata en los pro yectos de Baudelaire? Node, excepto precisamente un puro recurso al teatro, Pare como ila simple inten Gin de erbirun da algunos dramas hubiese bastado 1 Bouielaie,y le hubiere dspensado de nutcir estos proyectos de una sustancia propiamente tara, exten fida através de In obra, pero negadn en Tos dics tres en los que hubiera poddo talzarseplenamente Porque a este teatro con ol que Baudelaire pretende co nectar por un instante, se apresura a presale ls casos ‘ns indicados para hacere hit iameditamente: certs Cvivilidad,cierta pueda (corprendents en rlacion ton el dandismo bauelariano), nspradasvisiblemen te-en los supuestos plceres de la masala imaginacion odzonignnes de fos cuadroeexpectaculres (una bata- Ia, el emperador pasando revista alas topas; un bale de merendero, un campamento de gitanos, un asesina to compicade), toda une esti dela impresionabili- dad tosea,desgajadn de sus motivos dramsticos 0,5 se prefiee at un formalsmo del acto teatralconcebido en us efectos mis halagndores para la senilidad peque foburguess Plantedndose al cl teatro, Baudelaire so podia po ‘era teatraldad al abego del teatro; como si compren- Gira el atifici soberano amenazado por el caticer colectve de la isa o oct Ijs de a exces, leofe ‘é refogio en su literatura solitara, en sus poethas, sus Ensayo. sus Salone; y en este teatro imaginario qued Solo la prostitacién del ator, a voluptuosidad supuesta fel pilico or las mentras(y noel ari) de una puesta en escena prandilocsente, Ese taro es trivial pero de una trivaidad desgarradora en la medida mis fa en que es conducta pura, mutlada como volun tariamente de toda profundided poetic o dramatic, Uesigada de todo detarrlla que hubiese podido jusiic carla dlimitando eradamente eas nen le que Baw Aebie se construla de proyecto en proyecto, de Facaso én fraaso, hasta eifcr ese puro aesinato de la Liters tura, del que sabemes, desde Mallarmé, que ese tor- mento y I jurifcacign de excritor modern. DDebido pues a que el teatro, abandonado por una testraldad que buses refugio en cualquier ots pate, realzaentonces perfectameste una asturaleza social vl {2 Baudelaire Io eli6 por unos momentos come gar ‘hominal de una veledad y como signo de lo que hoy 3€ Tamaris un engagement, Por medio de ese gesto puro {puro porque ese gest slo transmit intencbn y xe teatro no vive més queen estado de proyecto), Batide Jaire se vincula de neva, pero esta vez en el plano de la creacion es sociablidad que gia postal y hui, 5 ims data de una eleczion que Sartre ha snlizado de un modo deisvo, Hacerle wn drama a Holstein, eld rector de In Gate era una gestion tan tranquilzadona como halagar a Saite-Beuve intrigar paca ingretar en a Academia 0 esperar la Legin de Honor. Este es el motivo de que esos proyectos de teatro nos impresionenprofundamente: en Baudelaire orman parte de ese vast fondo negativo del que surge fnal- ‘mente el logo de as Flores lel Mal, como un acto que yao debe nada al don, es dece, la iteraturs. Fueton necesarios el general Aupick, Ancelle, Théophile Ga ties, Sainte-Beuve, ln Academia, ln ery ee esto se do-odéonien, todss sux concesiones, por otra part mal dias, para que la obra consomada de Baudelaire fuera ce es posable ue hn para termi de vida un gran destino, Apreciariamor may poco Las Flo- 125 del Mal si no sapieramosincorporat ala historia de su cteador esta pasion atror dela vulgaridd. 1954, Pref LA CEGUERA DE MADRE CORAIE Mutter Courage! nose diige alos qu, direct 0 in directamente se enriquecen con le goers eri un rotesco quid pro quo descubrils el ardcter mercantil dela guerra! No, Mutter Courage ge dig los ques fren la guerra sin ganar nada con el, yet se primer motive de su grandeza: Mutter Courage es una obra to- talmente popular. porque et una obra cuya objetivo profundo slo puede ser comprendida por «pueblo, Este teatro parte de una dablevsin: la dl mal s- daly de sus remedios. En el caso de Mutter Courage se trata de acuditen ayuda de todos los que creen estar nla fataldad dela guera, como Madre Core, deseu- briendoles precisamente que la guerra, hecho hamano, no es fatal, y que, atacando ls causes mercantile, + puede legar a aboi Ia consecuencie militares, Esta es In idea, y he aquteémo ahora Brecht une a este objet vo capital un teatro verdadero, de modo que la eviden- ca de Ia proposicién nazca no de un sermén o de una argumentacién, sno dl mismo act testa: Brecht nos pone delante en su extensién la Guerra de los Trents 1. Reprctaanes de Mute Cog de Bh fore eine Emre Pa (Te ee Neos) en 194 ‘ios; impusade por its duracin implacable, todo se degrada (objetos, eats, aecos), todo se destruye (los hijos de Madre Corse, muertos uno tras oto): Madre CCorajes eaninera, para quien el comerco y la vida 20 tos poles feutor de I gure, est en la gueta, hasta el punto de que, por asl deci, no la ve (apenss un es plandor al Final de ln primera parte: 5 ciega, soporta ‘Sn comprender, para el, I goera es fatalidad indi cute Parnell, pero ye no para nosotros: porgue nosotros ‘masque Made Corae es cega, nosotros venos fo que {lla nove. Made Corfe e para nosotros wn sustaniia {iti ella no ve mada, pero nosotros vemos por ela ‘omprendemos,impresionados por esa evidencis drat tnatca que es i persuasion mas inmediata que exs- ter que Madre Corse, ieee itima de lo que no ve, Y que es un ml remdiable. Asie teatro opera en no- Totios,espectaores, un desdoblamiento decisive: so- fos ala vez Madre Coraje y los que Ie explican: pa Hlipamos dela ceguera de Made Cora y vemos esa Inisma ceguera, somos actors pasivos cops en I tulad dela guerra, yespectadores bees, impulsados a Ta desmitiicacion de ea falda. ara Brecht, a escena event, la sala jzga la esee- in es epic la sla es tiga, Ahora bien, esta es la de- Ficién misma del gran teateo popular. Tomemos a Gaignol o Mr. Punch, por ejemplo, ese teatro surgido de una mitologia ancestral: también aga publica sabe lo que el actor no sabe: ya vere obrar de un modo tan perjdicaly tan estpdo, se asomira, se inguieta, se fndigas, gta Ta verdad, enuneia Ia solucién: un paso ss y el pablico veri que esl mismo, el ator que 88> fre ignorante, sabré qu, cand ests sumergido en una ‘de ess innumerables Guertas de Teeinta Afios que 3% tiempo le impone bajo formas varindas, lex exacta- ‘mene como Nad Cor send ignorando est ume su propo poder de cscs dso S pes capa gue et testo nunca compromets completamente sl expectacor ee epetsals ee ctor no cones este poco de perspec necsaria ara verse sendy enguodo, odo sss prdde [Spector tiene qo ena patient con Ma dre Corse, dentine io com su segura pra. trarse dels empo y ons, Toa I roman de Brecht et sometda 4 won needed de adn, Yo esenci e tstro depend de ln eectvidad de et Gite ogee jg noe eto de un ta eamsico mas sno conienca sma del epee tndor por conse poder de cer Histor Brecht alae mplaeabemente como invicta so lucones damage sorb al especie en cspecteuoy por medio de una compasion dscns deo de un gto chao fvrecen un toa comp ded ete le vii de stor sus avo tess Brecht rechasenconecvnc lomo fs vero In tracalec afieel etn e {70 todos os eto deenicaents ode prt cin eapoces de impala l apetador Metis {ompictamente con Madre Cori a perdes en la Ars areas ceguens osu fda I prabema de paricpacin —pltopredleco de sues ets dl testo spre dichove cand pueden postr un religous del expects lo sasi ett pemado de an modo complement nuevo, anno hemos sab de dscbrit scones ‘uencias bends de ste mses prin, qe por ora pare guid sea un principio may antguo, puesto ie ‘epostobre el ena ans el eto iv, ee ae ln escen sempre es objeto dan Tuna ue et sons (ane osteo re}. Aor compen 6 Semos por qué nucns draaturgis wana son ‘Matar tas enc l exper, sn ‘Rip Js sbdeacin, La de Breet mast pore cori a poder mayetc pests ye ug Jopresionar sn ahoan ean eso de a oid nodal ets ‘ton dn seers concetos—y todo ta tne ror pos ea tna (Son ence qu Bey pede usta et meee pare termina rere f singuleridad de ae emo ante a Mater Curae dl Berne Peni emo toda yon obra, ade Brecht es un See det mal qe precede es pues de SETS potndamente ences por Miter Geaecrene epeelo gis no haya echo 080 Ree Secon ero ea enchnn se fade une eane hemes ve que eta ca profs edi ene tempo area deaerado qu pos eee Wtimeney que en un lah aparedoante eae no ada yy erecta 1955, Thre popular LA REVOLUCION BRECHTIANA Desde hace veinticuatr siglo, en Europa el teatro ts aristotlico: todavia hoy, n 1955, cada vez que varnos al teat tanto si es para ver Shakespeare como Mon therlan, Racine o Rowssn, 8 Maria Casas o «Piere Fresnay, sean cuales sean nuestos gusts y ust 2 2 nuestros gusts y nustas opi niones,deeretamos el placer y el tedioyel bien yl tal en fancion de una moral secular cuyo ctedo 6s els suiente: cuanto més ae conmueve el public, cuanto ints etfs con ol ros canto sen ‘tw ala acti, cuanto mejor eneatna el actor su papel, ‘cuanto mis mégico esl teatro, mejor esl espectscaa.! Ahora bien lega un hombre, cys ob yeuyo pen samiento se oponen radicalmente a eit atte, tan ances teal que teniamos los mejores motivs del mundo para ccerlosnaturals; un hombre que nos die, desdenando toda tradcion, que el pblizo s6lo debe identficarse ‘medias con el expecticulo, de modo que scanoace» lo que se le este en den vex de sultirlo; que el actor tiene que colaborar a que se forme esta concencia, de hnunciando sa papel, ao encarnéndol, gue el expecta dor no debe nunca identifiatse completamente con el 1, Ei pars nino 1 de Tie popu feb, 1989), dada» Bc héroe, de modo que pueda seguir send siempre libre de juzgr las casas, y ms tarde los remedios, de su s0- ‘Pimiento; que la acelén no debe ser imitads, sino con- ada; que el teatro che dejar de ser migico para con wertra en etc, fo cual edemss seré para el et mejor ‘odo de ser cluroso. ues bien, en le medida en que fs evoucionteatral de Brecht vuelve a poner en tela de jcionvestras coe tombres, nests gurtos, nuestros reflejos, las weyese inismas del etroen el que vivimos, nos hace renuncar Al ilencio 0 a Ix sonia, y mizar a Brecht cara a 37 ‘Nuestra evista se ha indignado demasiadas veces ante Tn medioeidado la euindad del teatro presente [ae sez de sus rebelionesy Ia escerosis de sus tenia, para fue pueda retraar por ms tempo el interrogae un fran dramatergo de nuestra epoca, que nos propor. tno sl una coca, sino adems un sistema, Fuerte, cobe- feote, sable, ta vez dic de apliar, pero que pose al ‘enos una virtud indiseuibl ysaludable de wescinds Jos y de asombro. ‘sea lo que sea lo que Bralmente ve decida sobre Brecht, al menos hay ue setalar el acuerdo de $4 pen~ Stoniento con los grades temas peogresistas de nucstea fpoca: que los males de los hombres estin en las manos {eos propios hombres, es deci, que el mundo es ma rable, que el arte pusde y debe intervenir en la hist fia que hoy debe colaboraren las mismas areas que las ‘Gencias de Ins que esolidari; que necesitamos un arte {dela ealicacion, y no ya solamente un arte de Is ex presdns que el teatro debe ayudar decdidamente a la Historia, revelando sa proces: que las ténicas dela es cena implican ens msmas un vengagements que, falmente, no hay sn wcsenciae del arte eterno, sind (gue cads sociedad debe iventar el arte que mejor d& a Tu su propia tiberacin. a atresia de Bred lean poe ima y ttn resent odo en un pa como Francs ue fora actuate un compo Naorcs tay disint de la Asati dl Este nrmero que Tare popula deca seh no pretend me Aeresos problems ni vee ota resent. Nora Siz objetivo por cl moment, ex cntrbur leona Cimento de rch Etreabrimor in dese, tos ej de conse sat cerad. nto nor datos por may siechos Sosectores de Trepp usr oor aa ‘testimonial compentas autor ola ‘anes ln inferenca de un nimere exces deine: Ics domes detec ctetowage quem nowtcrconsideramos, de tate modes un ‘ontemperioes capi 1985, There popula DE LA INDUMENTARIA TEATRAL Quisier esbozar aqui, no una historia nina ete tia, sino mis bien una patologia,o si se prefer at tune moral, del indenentara ete Popondré vatias reglas muy sencilla que qui24 nos permitan jugar si ua indumentaria es buena o mal, sana 0 enferma, En primer lugar tengo que defini. fundamento {que doy a ests moral oa esta salud. ;En nombre de qué Aeciiremos juagar la indamentaria de-unn obra tex tra? Podea responders (6pocas enters lo han hecho} Ja verdad historca ol buen gust, In idelida del de tale o l placer de la vista. Por mi parte, yo propongo fw cielo para nuestra morak el de la obre misma, Toda obra dramitics puede y debe reduces a lo que Brecht lamas gests social, li expresin exterior, ma tera, de Tos conflicts de sociedad de ls que e tet moni. Este gestus,exteeequema histrica particular ‘que hay ene fondo de todo espetscul, evidentemen tecesel director quien debe descubritla y maifertalo para ello tiene a su dsposicion el conunto de laste rica teatrles: la interprtaci6n del actor, la colo clon, el decorado, Ia luminacion, y preczamente tam bin: Ia indumentaia ‘Vamos pues a fundar nsestea moral da indumen taria en ls necesidad de manifestar en eads ocasién ol seus soil de Ta obt, Flo equivale a deci que sien emos al ndumentaria un papel puramentefoncional Yy que esta funciin seré de orden intelectual, mas que Dlstca 0 emocional, La indumentaria no es nada mis {que el segundo término de una eelaciin que debe en todo instante unit el sentido de I oba as exteriors dad. O sea que todo lo qu, en a indumentaria, ent bie le dariad de esta relacion, contradig, oscutenca © fale el gests social del especticulo, es malo; por et contrari, todo lo que, en as formas, los colores, las Sustancis y su disposicién, concbuys a facture de ‘te gest, es Bueno, ‘Pues bien, como en toda moral, empeceios por las reglas negtivas, wean pars emperar lo que ura indu= rmentaria tetra no debe ser (desde luego, a condicion ‘de haber admit las premises de nuesta moral) ‘De un modo general, Is indumencria de teatro n0 debe ser de ingin modo una carted, es deci, un otro Jagr una jusifcain Ia indurentaria no debe cons tiuir un Tugat visual Belante y derso hacia el que se crada ia stencién, huyendo dela realidad esendal del ‘ipecticulo, defo que poea lamarse su responsabi- {adh lego a indumentaria no debe ser tampoco una ‘especie de excusa, de elememo de compensicén az da gests de a obra, exlaye el naturalism. Brecht lo ha explicado admirablemente tratando de la indu- mentarin de La Madre! eretnicamente no se signa (sigoificae: separ e imponer) el despaste de una pren- da, sacando a cicena una prenda realmente usada, Pars smarifstarse, el desgaste debe ser aumentado (esa def- icin misma defo queen el cine se lama la fotogeni), dotado de una especie de dimension épic:e buen sig- no siempre debe Jr el frto db una elecesén y de une ‘ezntuacin Breet ha dado el dete de las operacio- nes necesaris para la construccign del igo del deseat ‘ersuinteligencia, su minuciosidad, su pacencia, son de lo mis notable (eratsmiento dela prenda con clo, ‘quems de color, (otacién con nav, maculacin por medio de ceas lucas, icidos grasos, agujers,remien- os}; en nuestros teatro, hipnotizados por la fnalidad cstdtica dea indumentari, an se ext may lejos de s0- meter el sgn de la vestimenta a tratamientos tan mi- fuiosos, y sobre todo tan emediados» (ya es sabido aque en Francia el arte es sospechoso si piensa): no nos imaginamos a Leonor Fini sphando el sldador a uno de eis hermosos eojos que hacen sonar al Todo- Parts ‘Otea func postva del vestasro: debe ser una ‘manidad, debe prvilegiar Ia etatra humana dl actor, hacer su compoteidad sensible, precisa, si es pouble, bro que sso puede sortenerte come eetico absolute de negacion, y por este motivo puede pasar a ocupar un lugar en esa 2ona tan estecha en ere vrtggraro ee que la literatura quiere destruitse sin poderl,y se ap- ta en un mismo movimiento, desructora y destuidn, Poeas abrasentan en este margen mortal, pero hoy 208 sin dude ls Unicas que cuentan: en la coyuntura social el tiempo present, la iterators slo pede estar 9 Is vex acorde con el mundo yadelantads con rspecto a, como requiere todo arte de superacién, en un estado de presuiidio permanente slo puede exist bajo I fige> 12 des propio problema, mortficados yperseguidora dest misma, Sino ess, ca cua ca a generosidad ola ‘exactitude st contenido, termina sempre por sacum- bir bajo el peso de une forma tradicional gue l com promete en la medida en que sirve de coarada a la Sociedad alienada que a produc, ls consume ast fica. EI Minn no puede separare del estatuto, por el momento constittivamenteresccionatio, de iterats- ‘2, peto al intentar asepizar la forma misma del slat, tal vez prepare sin legar a relizarlo, un descondciona- rien del lector co respecto al arte cienciliats de la novela burguera. Esta ex al menos la hipitesis que ete ibe permite proponer 1985, Catigue, (COMO REPRESENTAR 10 ANTIGUO (Cada vex que nosottos, hombres modernos,tene- :mos que representar una tragedi antigua, ns allamos ante los mismas problemas, y cada ver aportars, pa resolveros, la misma buena volantad y la mist ices tidumbre, el mise repeto y In misma confusin, To das las representaciones de teato antigua que he vito, ‘empezando por Ia mismas en Ins que yo he tendo si parte de responsabilidad como estudiante, dan muct- teas dea misma indecién, dela misma incapacidad de tomar partido entre exigenciatcontraiat De hecho, conscentes 0 no, nunca legamos lide samnos de un dilemsszhay que representar el teat an- tiguo como de su época 0 como dela nuestea? Hay que reeanseair 0 transponer? Subrayar precios o die- encas? Oscihimos sempre de una solucién a or, sin legar munca a cept claamente, bien intencionadoe y Tipu como habitado inconsintemete Dor Sree sana arte damit, que con Can hn ver leper na neo sot eS aur dello el personae dj avin It Sega Ue hecho, eta epi de jug en doble ere de inacecanciony de enato) funda vn ate rie aa mane devis ace deel une dspuncion posse ler eet dl personae, ee saps yn una. re one SiReespco se fonds via plr estat ‘eral en él la pasin no tiene ninginespesor interon, fst totalmente extavetida,dirigida hacia su conteato ‘vic. Un personae epsicolégic» nunca di: «Soy or tgllososs Ctemaestra lo dice, y toda la diferencia ra (4 abi. O,se0 que, mda mis srprendente, nada repre- senta mejor el error fundamental de It interpretacion, {que oira Mare Bell procamar en el texto una pas de Jn que toda su manera personal cad por la pritica de centenares de obras epsicolégicasy, manera hdbily de sacttzn,desmiente la exterioridad sin sombray sin pro- fundidad. Sélo Marguerite Jamois (Casandra) me ptece huberse aproximado a este arte de la consttacion que Ihubisemos dseado ver extendere a toda la ragedia ve y dice, dice lo que ve, nada mis y nada menos. ‘ha tragedia es un arte de la constatacin,y preci. samente todo lo que contradic ete modo de sero tar- «ds en converts en intolerable, Claudel lo habla com prendido bien al reclamar para el coro tigico una Inmovilidad tena, csi litdega. En su prefacio a esta misma Orestada, pide que secoloque a lot coreuts en ‘stalos, que s les siente de un extremo al ott dele pecticulo y que cada uno tenga ante sun ati en el que leas texto. Sin duda esta puesta en excena exten con tradicin con la verdad earquealigian, puesto que se ‘bemos que el coro bailabs, Per como estas danzas nos son mal conocidas,y como ademds, nciuso bien tecons ttuidas, no ejercerien sobre nosotios el mismo efecto, ‘ue el siglo ¥, es absolutamente necestrio encontrar quivalencis. Al restitur al core, por medio de una ‘orrespondencialitrgiea occidental, fancion de co ‘mentador literal, al expresar la naturaleza mativa de sus intervencones, al confeile de un modo expicito los atrbutos modeenos del sabidaria (el asiento ye pup tte) al redscubri a caricterprofdamente Epic de recitant, I solucin de Claudel parece er la nica que peda dar cuenta de Ia situacion del coro tigen. :Por (qué munca se ha probado? Barra ha queido un oro «dndmicoy, naturale, peto de hecho esta dein dats as mismas vacicio hes que el esto def represenacin. Esta confusion aqut ts ain mis grave, puesto que el coro es el nicleo duro fe la trageda: fc debe ser de una evidencia in Aiscatibleses precio gue en l todo, palabza,stuendo, i= twacién, sa de un solo blogu y de un soo efecto inal> ‘mente, aunque es spopular, sentencios y possio, en hingin momento pede obrar con una ingenuida ona train psiolgica, indviualizaa, pintoresca. El oro debe seguir siendo un organism sorprendente, es nec Sario que sombre y que extzane Evidentement, éte no Sel ease del coro del Marigny: en encontrar dos efectos contarios, pero que van ambos mis ali de la ‘erdaderasolucdms el énfass y ly wnataradads. Tan pronto los coreutas evolicionan segin vagos dibujos {ometrcos como en una festa de gimnasia (nunca se hublad bstante de fos extrago de a estéea Poupard en Ja tragedia greg); tan pronto intentan actitades reals tas familiares, juegan 2 la anargoia consciente de los rmovimienos; tan pronto dedaman como pastores ene Pilpto, como sdoptan el tono dela conversicién. Esta Confsin de los estos instal en el teatro un error fata: Inirresponsbilidad, Esta especie de estado veeidoso del coro parece ain ms evident, sino en la naturales, al ‘menos en la disposiion dl sustrato musica: se tene la Iimpresion de innumerables eortes, de usa mutacin incesente que cota el concutsa de laren, qu la re duce a unas antas mvestatexhibidas a usta, de tan modo cai culpable: en estas condiciones, eesulta di fil jurgara Pero To ques puede dectse deel, es que no sabemos por qué ets ahi, y eu e la ea que ha {guiado su datucion La Oretiada de Barras et pues un espectéclo smbiguo en el que se encuentesn, por ota parte slo en stado de esboa, opciones contaticoras. Falta pues decir por qué la confusisn er agul mis rave que en ‘otro cass: porque contradice I nica relacion gue nos ¢ posible ener hoy con In trageis antigua, y que es la Alardad. Representaren 1955 na tagedia de Esuilo ‘So tiene sentido s estamos decid a responder ce ramente a estas dos pregunta: qu es exactamente La (rest para los contemporsneos de Esquilo? En qué nos afecta a nosotros, hombres del siglo XX, el sentido setigu de a obra? Varios ecritos contibuyen 2 responder & la prime + pregunta: en primer gar, ls excelente introduccion de Paul Mazon a su uaduccién en la coleccién Guile ‘me Budé; luego, en el plano de una sociologia mis am- pla os libros de Bachoten, de Engels y de Thomson? [En su époc, ya pesar de a poscin politica moderda del propio Esquilo, La Oretiada era innegablemente tuna obra progresista; un testimonio del paso dela so edad matriareal, representada por les Erniay a sociedad pariarcal,representads por Apolo y Atenea No es ft e lar adecando para explicar esta tess ue se han beneficiado de una explicacin amplismen: te socilizada, Basta con coavencerse de que La Oreta: dda es una abra profundamente poliiada: eel ejemplo mismo de la relacin que puede nie una estructurs histéricaconcreta con un mito deterininado, Que otto se dediquen si quieren, a descuriren ell ua proble _msica eterna del Maly del juicios ello no impedirs que coh, nin, Ds Matt (8 dao ter) (Orig a tai des propia priva cl Ea), 4 1891 Gange Toons, Ancys n Aten (94D a Oren en ata a ore dun pen cone tu deamesad sol eerinad,y den est mo tl contingent % preiament et arin eI ie 205 pe ante roponde ep penta elactn de La ret con nostro, bres de 19555 eiden- mma supra. Ceca de einen {Jos nonepran de esa obras pao dl ataread al ‘rca austin de dns ties ds ey “titan por diss more ada de too fo can parte Jc mss hori y preaente por ta ‘Tend gem posers ugar con ina mitoda cr fea un ead clog y sacl dl que yx no par amon pau eno pce abjtent en ot 5 Tama Le etd neds og shoes deen Cores intentben sean ue tataban poco s poco desta; pro nos dice al mimo tem Pogue eos eshens som para nsais snares Fuels des nuevos gue qua eonizar on dio joc noes a ues temp, ya heros weno Hy una mach dels hora on evantamiento dif 2 incu de iota de I baba Se dod protesva de qu home oe dno que ite el Rome desu ae, dado oes debs osemtemene hacen coc, puto que Gore caine record, adgsee valor y epernn. gers tol que qn an por tear. ‘pues dando Le Oretiada ueacta gra no sig rds ino bite co mantesae- tmecl inal gor nos une ea ota Rprsentdaen spore ne spect onal, pores feed cn su yop pando pero bib en el Sn com mucosa a apt ats no Girne ean med en gue os permite comprendé ‘Tvomone, por medio de odo os estos tea ue la historia es plstica,fuida, al eerviio dels hor bres, por poco que éstos quieran hacerse dueior de ela ‘on toda lucider.Capar lo especiicamente historco de 4 Orstiada, su originalidad exact, ex para nosot0s el Unio modo de hacer de ella un uso dinimico,dotado de responsabilidad. Por estas razones, echazamos un puesta en ecena confuss en ln que las opciones, timid y parcalmente tadas, tan pronto argueolgieas como eteias ese sialstas (un debate moral eterno) camo exdticas (la festa negra), concucren todas elas finalment, en cmredado ensamblj, a aeebataraas el sntimiento de tuna obra clara, definida en y por Ia historia, lejana ‘como un pasado que ha sido el nuestro, pero ue ys no ‘queremos. Pedimos que, a exda gope, vega de donde ‘venga el teatro nos diga la fase de Agamend: Los laos se deshacen, el remedio exter 1955, Thre poplars. EW LA VANGUARDIA ;DE QUE TEATRO? Los dzcionarios no noe dicen de euindo data exc tamente el termino vanguaria, en el sentido cultural arece que éta es una nocign bastante relents nacida en aquel momento del historia en el que la burguesia aparecié para algunos de sus eieitores coma tna fiet= a estéicamente etrograda, ala que habia que ope. se. Es probable que a vanguardia nunca hays igo para artista ms que un medio de resolver una contradic: idm historia precisa: la misma de ana burguest de senmasearada, que ya no pela aspirar su universal ‘mo original mis queen forma de una protests vileta Airigida conta sf misma: violencia al principio este a. dirigida contra el filsteo, lego, de un modo cada ver mis compromtid, violencia ica, cuando las com dctas misma de Ia vide asuieron Ia isin de opo- netse al orden burgués (en los sureaisas, por ejem plo; pero violencis politi, unc, ‘Lo ocurrido esque, en ef plano un poco vast de Ix historia, esta prtesta nunca ha sido mis que una pro coracién: Ia burguesa dlegabs en algunos de su ces dores misiones de subversién formal. sin que e30 signi ficase romper verdaderamente con ellos: en resumidas ‘eentas, 280 no es ella misma la que dispensa alate de vanguardia ol moderado apoyo de su pblico, es decir de su dinero? La palabra misma de vanguardia, ttimoldgicamente, slo designa una porcién un poco feruberante, un poco excéntica, del ejército burguts arece como si ubiera wn equilbio seereto y profun- do entee ls tropas del arte conformistas y sus audaces tiadores Este es un lendmeno de complementaredad, bien conocido en socologa,cenciaen la que Claude Levi Stras lo ha desrito excelentemente: el autor de sanguatdia es un poco camo el hechcero de ls soe {ads llamas primiivas faa itegulardad para me- jor purificar de alla la masa social. No hay ninguna ‘ida de que, ens fase desendente, a burguesta a te- ido una profunda necesidad de esas conductas abe- Frantes, que procamnaban 2 grits algunas de ss tentac ‘ones. a vanguaria, ene fondo, slo e un fenéme= ho catitico més, una especie de vacuna destinada a Joel un poco de subjtvidad, un poco de libertad, aio In corteas de los yaloes burgueses uno se sente tnjor después de habérconcedido.una parte declarads, ‘ero limitada, ala enfermedad. Por supuesto, esta economia de la vanguard slo es real a esala dels historia. Subjetvamente yal nivel dl Ceador mismo, la vanguard se vive como un libera~ ian total Slo que el hombre es una cosa, yos hom= = bres son otra. Una experiencia creadora so puede ser radical si ataca a extract real es deci, pois, de a fociedad, Mis alls cel drema personal el escritor de, Srnguarda, sea cual se a Faerzejempla, sempre le fu un momento en que el orden recupera asus fanco- tiradores. Un becho probatoro es que nunca ha sido borgusia fe ve ha amenazado ala vangoat y cua do sl mordiente de los Tengusjes nuevos ha perdido su fueraa, no pone ninguna objecién a recuperaros, = ‘Maprcos a su propio 50: Rimbaud, anexionado por (Claudel, Cocteau aeadémico ol sureaism info en fl gran cine, I vanguardia rarament prosgue hasta el Final su carrera de hijo prodigo: tarde o traprano te ‘mina por teintegrarse al seno, que le habla dado, con la Vida, una libertad silo temporal ‘No, dece verdad, la vanguardia slo ha sido ame- razada por une Unica fuerza, 7 que no es bargues: Ie oncienca polite. Esurtalsmo se dslocd,no bajo et ecto de los stques burguess, sino bajo la vive rep seatacin del problema politico, por deco todo, det problema comunista, Parece que apenas conguistada por la evidenci de as taras revolucionaias, la van~ jguardia renuncia as! misma, acepta su muerte. No se trata de una simple preoeupscion de claridad, dela ne- cesidad pra el teador realist, de haere entender por el pueblo. La incompaubilidad es mis profanda. La vanguardis nunca ha sido mde que un modo de cantar Ia muerte burguess, pes su propis muerte pertenece tabi 3 a burguesia; pero Ia vanguardia no puede ir mis ejs; no puede cncebir el temino Fiebre que ex presa, como el momento de una germinacén, como el paso de une sociedad cervads una sociedad abiert et impotente por naturalza para poner en la proteta que leva la esperanza de asentimiento nuevo al mundo: ‘quiere mori, decitio,y que todo muera con ells. La Ie Deraeién, a menudo fasinant, que impone al lengua, «endl fondo no es mis que una condena sin apelacion: toda socabildad le produce horror, y no sin motives, Porque en ela slo quiere ver el modelo burgués Paristay propiedad de I burgues, es fatal que la ‘vanguardin sg la evolacon deéta: parece gue hoy ave ‘mot morir poco + poco; yt tex que la bargesta ie 3 Invesise completamente en ella y termine por asegu grandes éxtos «Becket ya Audiberti (ana seria los {de Tonesco, ya bien aclimatado por la eea humanist), ya tea que el creador de vanguardia, asumiendo una Conciencia politica del teatro, abandone poce a poco la Pura protest ica (Ete es sn dada el caso de Adamo») para emprender el amino de un nuevo realism. “Aqui! donde sempre hemos defendido la necviéad pital de los escrito sistematicos de Brecht no es debi far el valor cresdor de ete teatro el conidertla como un teatro pensado, or otra parte, la propa obra proporcona fos ele- rmentos principales dela ideologiabrechtiana. Aqui slo puedo sefalr los principales: el carieter hieérico,y no ‘natura de as desgracas humanas el conagio esp tual de I alienacgn econdmica,cuyo dim efecto et cxgee acerca de las causa desu servidambre a lot mis ‘mas a quienes ésts oprime; el estatato corregibe dela ‘Naturales, Ia manejbilidad dl mundo a adecuacién rnecesaria de los medios y de las sitwacions (por ejem plo, en una sociedad mala el derecho sélo puede ser establecdo por un jue que sea un bribén)s In tranee formacién de los antiguas sconfictos» psicolgicas en contradiccione hstricat, somsetidas como tales al po- der corrector de los hombres. ‘Aqui habria que precsar que estas verdades solo se presentan como las soluciones de stuacionesconcretas, Yq estas stsacones son infnitamente pistes, Con- trariamente al prejuicio de las derechas, el testo de Brecht noes un teatea de tei, no es un teatro de pro- paganda. Lo que Brecht toma del marzsmo, 90 son ‘consignas, una articulci6n de argumentos, sino un me- todo general de explicacién. Como consecuenca de cllo en el teatro de Brecht ls elementos marist pa recen siempre reereados. En el fondo, lx grandezs de Brecht, y también su soledad,consiste en que inventa sin cciar ol marxismo El tema ideogica, en Brecht, poles definise con gran exactitd como una dngmica ‘Se hechos que mercla a constatacin ya explcacié a ‘tieay Ia politica: de acuerdo con a ensehianea profin- a del marxismo, cada tema es aun tiempo expres y ‘querer ser de ls hombres y del ser dels cosa, esa un ‘empo protestant (porque desenmasara) y recon dor (porque expla. 3). Sensloga. La semiologia es el estudio de los signos y de las signiiaciones. No quero entrar agu en In discusion de eta cienca, pstuada hace wnos cn- ‘entaafos pore inghisa Saustire,y de a que en ge neta se recela mucho como formalist Sin dejarse it imidar por ls palabra, seri interesante reeonocer que 1a dramaturgia brehtana, la teoria del Episerung la del disanciamiento y toda la prétca de Berliner En- semble concerniente al decorado y ala indumentara, plantean un problema semiolopico declarado. Ya que lo ‘que postula toda la dramaturgia brectian es que, al _menos hoy el ate dramstivo, mas que expres lo rel, tiene que signifisca, Bs pues necesatio que haya una clerta distancia entre el significado su significant: el fre revolucionatia debe admit una certs abteaie- {dad de los signos, debe hacer coneesiones a un certo ‘formalismos, ee sentido de que debe tratar la forma Segin un matodo propio, que es el método semiolégeo. Todo el arte brechtinno provesta contra la confusion adanoviana entre a ideology a semiologa, que ya 5a bbemos a qué impasse esto ha conducid. ‘Comprendemos por otra parte por qué este aspecto del pensamiento brechtano e el mis antipitico ala cr- tica burguesay la 2danoviana: una y otra se vineulan ‘una estticn dels expresionwnatutals de lo real: el arte 5 sus ojo un faa Naturaleza, una seudo-Physis. Por ‘conteatio, para Brecht, hoy en dia, es deci, en el eno ‘de un conflict histieo, en el que lo que se ventia «5 In dessienacion humana, el arte debe ser una anti-Phy- si, El formalism de Brecht es una protesta radical con cl enviseamiento de I alsa Naturaleza burguesa y pequeioburguesa: en una sociedad aun lienada el arte fede er critica, debe cortar toda iusén, incluso a de Ie ‘sNaturalezi: cl signa debe ser parcalmentearbitari, fin lo cual volvemos a caer en un arte de la expreson, ‘en un ate de a ius esencialista ‘) Moral El teatro breeiano es un teatro morales decir un teatro que se pregunta con el espctador: qué flo que hay que hacer en esta stuacn? Esto nos le ‘aia a reapitular y 2 etcribir la sitaciones arquet- pieas de teatro brechtiano; a mi entender, estas situa: siones pueden reductse a un problema nico: jc6mo ser bueno en una sociedad mal? Me parece muy im portante destacar debidamente Is estructura moral del teatro de Brecht: se comprende perfectamente que el rmaraismo tenga otras tress ms urgentes que ocuparse te problemas de la conducta individual, peo lt socie- ad capitalista dura el propio comunismo se tansfo sma: ln accgn revolucionaria cada vez debe cohabitar ‘nis, y de un modo asi nstitucional, com ine normas de Jn moral burguesa y pequesoburguss: as surgen pro blemas de conduct, yya no de accion, Brecht puede ner asl un gran poder educadar,revelador. Sobre todo tniendo en cuenta que su moral no te ne mada de catequistica, que en la mayria de los casos es ‘strictamente interrogativa.Sabemos que algunas de sus ‘obras terminan con una intrrogaion literal al public, 43 quien el autor confia la tarea de encontrar por si mis mo la solucin del problema propuest. La fanein mo- ralde Brecht es ls de incertarvivamente una pregunta en sedi de una evidencis (te ee ema def excep yyla reg). Puesto que agt se tat, esencalmente, de luna moral de ly invencion. La invencién brechtians e& lun proceso ttico para ir al encuentro de a eorreccion revolucionaria. Bs decir, que para Brecht, a solucién de todo impase moral depende de un andlsis més eacto ‘de in stain cancretaen la que se encuentra el sjeto Sélo al ser viamente consiente de a paricolrided his toriea de esta stuacion, desu naturalena ati, pur mente eonformista, aparece In solucion. La moral de Brecht consiste esencialmente en una lectura correcta dela historia, y ln plasticdad de esta rhorl (cambiar, ‘cuando hac fala, el Gran Uso) procede de ls psticidsd misma deh Histor 1956, arguments, *QUEKEH NOS QUEMA.. «Queer nos gem y per nos dest ye: peo saber deja nuestra debi organize dan en un perpetio ertado de caliph» ‘Thibaudet ya haba adverido que 3 menudo existe nls produceién de ls grander etritores, una obra i ‘me, una obra singul, esi molet, en Ia que depos tan a un tiempo el secret ylacaricatura de su creas, sin dejar de suger en ell a obra aberrante que no e+ cribieron y que tal ver hubiesen querido esrb, ests ‘especie de sueno donde se mezclan de una manera rare To postive ylo negativo de un ceeador esa Vie de Ran f, de Chateaubriand, ese Boward er Picuche, de Faw bert. Podsamos preguntas si, en el cata de Balac, su obra limite no es Le Fase i primer lugar, porque Le Fiseures teatro, es de un érgano aberrante que se introduce trdiamente en un organismo poderosamentetezminado, adulo, es pedaiead, como esa novela balzaguiana, Siempre hay ‘que recordar que Balzac es la novela hecha hombre, la rovlalevada hasta el extrema des posible, desu vo ‘icin es, en certo modo, Ia novela defini a nove= In absolut, ;Que viene 2 hacer agut ese hueso suple- ‘mentario (cuatro obras dramétca frente a cen nove- las, es teatro por el que discurten,devordenadamente ‘mezclidos, todos los fantasmas de la comedia francesa, desde Molizte a Labiche! Sin duda a dt textimonio de tna energia (hay que extender esa palabra en el sentido balzaquiano de ima fuerza creadora) en estado puto, liberada de toda la opscidd, de tod la enti del re. Jato novelesco. Le Faseur quid sex una fet, pero na farsa que quema e&fsforo de ceacis qu la rapide ya no es gracos, agile insolente, como en la comed lsc, sino que e dura, implacable, clerics, vida por arrastar y despreocupads por aclrati una prisa ‘senca. Las fase pasa sn reposo de un setor a 0 como si por encina de Tos rebots de a intriga, en una 2ona de ereacion superior, los personajes ae halla i dos entre si por una eomplicidad de ritmo: hay algo se ballet en Le Faiseur y ls misma abundancia de los ates, esa temible arma del viejo arsenal de teatro, aviadé ala carrera una especie de complicacionintenst ‘qui e dislogo siempre tiene al menos dos dimensiones. El cardcter oratorio del estilo novlesca queda roto, => dco aun lengua mets, admirablementeiterpre- rade; éste es un gran estilo de teatro, el engusje mismo ‘el toatr emo et, le Faseur data de los dkimos anos de-Balac. En , 1848 la burguesa frances ha un movimiento de bie cula: al hacendado 0 al industrial, que administra aho- rrativa y prudentement la empresa familia, al eapit- lista lous phifppard que amasnbienes cancretos, va Suceder el aventurero dal dinero, el expeculador ene tado puto, el eapitin de Boles, el hombre que de la nada puede sacaro todo. Ya se ha hecho notar come en ‘muchos punios de su obra Balase describe por antici iz avo a sociedad del Segundo Imperio, Ello «5 certo para Mercadet, hombre de la mags capital, en ls cual el dinero va a desprenderse milagrosamente de 1a propiedad, ‘Mereaéet es un alquimista (tema féustico caro a Bal ‘zac, trabaa para obtener algo de la nada. La ads 2qst inliso es mis que nada, es an vaca postiva de dinero, ese agujero que tiene todos ls earacteres de Ia eisten- cis: Indes, La deua es una prisin (en la mien Spo- 2 en que existia Ia prisén por deudss, esa famosa Clichy que aparece una y oles vex com una obsesion en Feu; el propio Bala permanecis durante todas vida encerrado en Is Des, y podria decire que soba balzaguiana es la huella concreta de una farosshicha por sili de ell: esrb era, ante todo, extngui a deu- 4a, superarla. Del mismo modo, Le Baiear como obra ‘extra, como duracion dramatica, es una serie de fené- tieos movimientos destinados a emerger de I deca, 2 romper Ia prisién infernal del vacio monetario. Mere ‘det sun hombre que pone en juego todos us recursos pata esapar a la camisa de fuera de sus deudss. En ‘modo alguno por moral; mis bien por una especie de sjercicio dionsiaco de la ceacon: Mereadet no taba: jpara pagar sus deudss, trabja de un modo absolute para crear dinero dels nad. La especulacign es a forma sublimada, alquimica; del beneficio capitalist: como hombre mederno, Mercadet no trabaja ya sabre Bienes concretos, ino sobre ideas de bene, sobre Esencias de dinero, Su trabajo (concrete, come lo demuestra la con plicacion de la intign) se ejerce sobre objeto (abstac- tos). El papel moneda es ya una primera epiritaloa- ridos com una palabra, Invereamente, ene plano dl sis- {ema denominatve, Voltaie se escurre. Doctinalmente, {eeu delet lebniiano? zraionalisa? Siempre si y no. [Notiene mis sistema que el odio del sistema Cy saberos {que no hay sisters ms duro que éte); sus enemigos hoy serian los dotrnarios dela Historia, dela Ciencia {dase cm escarnece al ata clenciaen Lomme a ‘quarate Gus), 0 de la Esistencia; marist, progssis- tas exstencialsas,inteectuales de inquierda, Voltaire les hubiera odiado, se hubiese ensafiado con ellos coi ss ncesantesburlas, cori ensu tiempo hizo con los je- suites. Al poner continuamente intelgenca intelec tualidad,sirviéndose dela una para arruiar Ia ot, educendo ls calito de ideas aun especie de ache ‘maniqueaente la necedsd yl inteligencia, asimilondo todo sistema ala neceda y toda libertad de epi ala Intligencia,Volisice fandé el Hberalismo en su conta * diecion, Como sistema del nosistma, el antntlee- twalsmo esquiva los goles y gana en ls da bandos, jue {gando a un perpetuo torniguete entre Is malt fey la buena conciencia el psimismo del fonda yl legen de, Js forma, el esceptiisme proclamado y ly duds terro- ‘a fests volterians est constuida por es coarta- 4 incesante. Voltaire goipa yesquva als vex. Fl mun- do es sencilo para quien termina todas sus crtasya gui sade saludos cordiales, con el: eraone Finfme ee de it, el dogmatismo). Sabemos que esta simplicidad y sta felicidad fueron comprados al precio de una abla «in dela Historia, y de una inmovilizacion del mundo, ‘Adem, es una felicidad qu, a pesar des triunfo es. pectacular sobre el oseurantismay dejabs en In puerta a ‘muchas personas. Asi de acuerdo con In leyenda, e ant-Volaee fue Rousseau, Armando engicimente a dea de una corrupeion del hombre por ls sociedad, Rousseau volvia poner Ia Historia en movimiento, es tableca el principio de un desbordamiento permanente de a Historia. Pro, al mismo tiempo, hacia a laters ‘ca un regalo envenenado. A partir de ahora, incesan temente sediento y herdo de una responsabilidad ala ‘que yano podté ni hacer honor del todo ai eu com- pletamente, el intelectual va a defniee por eu mals ‘onciencia: Volate fae un ecritr feliz, pero sin dda fue elim, 1958, Prefacia \ NO HAY UNA ESCUELA RORREGRILLET Parece que Butor es! diseipulo de Robbe-Grillety ‘qu ellos dos, aumentados epxedicamente con algunos rds (Nathalie Saraute, Marguerite Duras y Claude Se mon; pero por qué no Cayrl, cay técnica novelesea, ‘menudo, es tan atrevda?,forman una nueva escuela de la Novel. ¥ cuando bay difeultades —y no sin mo- tivo— para precisar el vinculo doctrinal o simplemente tempirico que los une, sles mete todos mezeados en Ta vanquardia. Porque se necesita una vanguard: nada tranquiliaa més que na rebelin nombrade, Sin duds ‘ha Lega el momento en que la agrupacion abitraria. de novelists como Butory Robbe-Grillt —para na he blarms que de los que més a menudo han sido azo dos— empiera a er enojosa para uno y pata otro, Bu tor no forma parte dela Escuela Robbe-Grilet, por la razdn bisica de que est escuela no existe, En cuanto a Jas obras mismas, son atindmicas 1a tentatva de Robbe-Grilet no es humanisa, sa mundo no esté de acuerdo con el mundo, Lo que 6 busca es Ia expresiin de una negativdad, es deci ln ‘undtatura del creulo en literatura, No ete primero Hoy en dia conocemos obras importantes —aungut, a ecir verdad, pocas— que han sido 0 son deliberada tee resid glorioso defo imposible: la de Malla fhe, la de Blanchot, por ejemplo. En Robbe-Grilet la ‘hovedad conte en tstar de mantener Ia negacié al nivel dels téeneas novelscas (lo cules ver claramen- te que hay una responsabilidad de la forme, algo de lo ‘que nuestros antiformlist no tienen ni Ia menor lea). Hay pucs, al menos tendencalmente, en la obra 4d Robbe- Gril, aun Gempo rechazo del historia, de Ta angedota, de a psicalogi de las motivaciones, yr chazo de la signiicacin de los objets. De abl ia im portancia de In descripein éptica en este eseritor: 5) Robbe-Griliet describe easi-geométrcamente los obje- tos, es para liberalos de la signiicacion humans, para foregitos de ly meidfra y del antropomortisme, La Imimuclosidad de ly mirada en Rebbe-Grilet (por otra parte, se trata, més que de una misiuciosidad, de una al feracin) pues puramente negaiva, no dnsttoye ‘ads, , mejor dicho, insttuye precisamente la nade humana de objeto, ex camo Ia nube helada que oculta Te nada, y por consiguinte Ia designa. La-mirada es esencalmente en Robbe-Grillet un conducts purifica ora, ln euptura de wna solidaridad, aunque sea doloro- ‘savente el hombre y ls objets. La consecuencia es que ‘st mirada en ningin aspecto puede hacer reflecionar ho puede recuperae nada del hombre, desu soled, de su metaisica, La idea es ajena, la mis antipsica al ante de Robbe-Grllt, es sin duda a idea de tagedia puesto que agui nada del hombre se ds en especticlo, Di siguiera su sbandono, Ahora ben, e este rechaz0 ical de ia teagedin el que, 2 ei entender, dala tent tiva de Robbe Grille un valor preeminent-Latragedia noes mis que ua medio de recoger Is desgacia huma= ‘hn, de asumira es dect de justiferia bajo la forma de fina necesidad, de una sabiduta 0 de una puricac6n rechazar eta recuperacion y buscar los mediosténices de no sucumbir traiderameate a ella (nada més insido 0 que le tage) ex hoy en dia una empresa singular, sean cules sea sus rodeos aformalistas, importa te. Nos seguro que Robbe Grilles haya llevado cabo su proyecto: en primer lugar, porque el fracso etd en la naturaleza misma de este proyecto (n0 hay grado cero de la forma Is negativdad siempre se salve postv ad); y luego, porque una oben te ln expres retzasada de un proyecto niin el pro yecto es abién una infrenca del obra, La hima novels de Bator, La Modification, parece ‘panto por punto el polo epuesto de la obra de Robbe Grit. ;Qué es La Modification! Esencialmente, el con trapunto de varios mundos, capa correspandencis mi sma ests desinads a hacer sigiicar los objetos los hhechos. Hay el mundo de la et: un vse en tren de Pa tis a Roma. Hay el musdo del sentido: una concince modifica su proyecto. Sean cuales sean ia elegancia Ia discrecion del proceimiento late de Butor ex sib lio: l vine signin algo el itinerato expec! tines rio temporal y el ineraio espritual (© memorial) in tercambian su literaldad, yest intereambio eel que signifcacibn. Es decir, que toda lo que Robbe-Grillt ‘quiere desterzar de a novela (La olouse es en ete asp to la mejor de sus obras), el simboo, es dei destino, Botorlo quire expreiamente. Mucho mAs ain cada una elas res novelas de Robbe-Grillet que canocemos, fo ‘ma una irisin delrada de Is ides de itinerti (ieti- sion muy coberente, puesto que e itnerato, el desvela- mien, es una nocin trigica: en eada caso, I novela ‘termina cerrindose ens identi inca el tiempo ye Iga han eambiado, y sin embargo no ha sargido ning ra conciencia nueva. Pr el contrari, pata Bur ha cr eamin ex ceador, creador de conciencia: un hor bre auevo nace sin cesar: etempo sve par algo ces exlasvamen: Parcs qu eta posvided vga my Kosa eo den epirta Elsinbolo eu via een ere icin etre mb ye une; ms oat Inet, post I ctn mina de uno es dec ar ese: Ahora ben, Le Moietion 90 a 8 fhe mowl smb sa qu etumben una owl Eire os mee ey a tine Por pre, yo no ceo en mod algo qe Sgundn pera emplees po Boren La Modif ‘ies on arc fora a vaste stata de ln teers persona de nods, se pera acedior 1b code nga esos me ea ea dl cenordnndos saat Fi ombrada, contd, cress en Todos 5 actos fee un juceypenerdor snipe & epi Sb quetostaye conned oe ora de of 2 Jeera por una mirada perion el hoe se Site, tenn + conser adlro del que nla see ime propia dip bs Shyer en Bator ene pee eid aultamente Smunansco al ue seneen Robbe Geile Robbe Gilt Serb lo ojos ps expla de eos al Hombre Bor orl contr os coitus ree {Bored a ence homun,e enzos de poco de empo donde te pega patch, perverts de Je pesom eco se dacn su itmidad dlron co ‘Zam tate ean pon mul «pes Su propa dail sua una Che, una repo desis unaredencio, Las ob- Jos de Dtor hacen dese gue sel, asia 4 “eecbion de una een on slgios. PO el on- {fam os de Robbe Gilt son eae; no usian Mingo compli on cor: exces lf mitees ques penance en ue sledad indi, fut gus eased pcs debe ret ura se 1 Aad del ome, lo cual también seria un medio de 16 ‘uperie lo humano: ue el objeto este soo, sn gue sin embargo se plantee el problems de Is sledad humana. objeto de Butr, por el contrario, planta I toledad del hombre (able hay que pensar en el compartimento de La Modification), pero es para mejor retrarla de ¢, puesto que esta soledad engendra una concienci, ¥ mis ain, una conciencia contemplada, es dec, una conciencia moral. Por eso, el héroe de La Modification lanza la forma superlativa del personae, ue ea per sona: los valores seculare de muestra cviizacién se in visten en ,emperando por el orden trigico, que existe siempre all donde el suffimiento se recoge como expec. teal y se redime por su smodificacione. Parece pues que no es posible imaginar dos artes nds opuestos que los de Robbe-Grilety Butor El uno aspira a descondiciona In novela de sus refleos tradi- onales, a hacrles exprsar un mundo sin cuslidades, la novela ese jrciio de una libertad absoluta(que- ‘dando bien entendido que el cjercicio no es fans mente un logro de grandes resltador); de ah au for mmalsmo decarado. El otro, por el cntrario, et leno a rebosar,s asi puede decise, de positividad: es como Ja vertiente visible de una verdad oculta,e¢ deci, que, iteratura se define po a isin de ser rms que ell misma, ya gue ls obra ets destinads ai frar un orden tansiteraria, [Naturalments, la confasén establcide por Is gran crttiea entre estos dos artes no es completamente ino- cent. La apariién de Butor en el cielo enarecido del joven teratura ha peemitida reprochar abiertamente a Robbe-Grilet su srequedad, su formalisnos, su falta ‘de humanidade, como si estat facran verdaders lagu: ras, mientras que est negatidad,ténica y no moral (pero al «s constantey esd constantementeinteresado én que 36 confunds el valor y hecho), es precsamente lo que Robbe-Grilet busca mis ardvamente, ye! mot vo, viniblemente, de que excriba. Y simetricamente, e pdrinango trucado de Robbe-Geilet permite hacer de Butor un Robbe-Griletslogradon, que te supone que aade gracisamente ala audacia de as busqudas fr males, un viejo fondo muy disco de sabiduri, de sen sibilidad y de espirtusldad humana, Es un viejo truco de nuestra esta demostrar sv amplitud de vision, sa ‘modernism, bautizando con el nombre de vanguard Toque puede asm, unienda ast econémicarent la seguridad de a tradicion al ecalotto de la novedad. "Ynaturalmente eta confusion slo puede molestar 2 nuestros dos autores: Butor, a quien se formalia in Aebidamente la bésqueda, mucho menos formal de to aque scree, y Robbe-Grile, de quien se subestina el formalism mismo, en. medida en que se hace de él tana earenca, yo, om él aspira, un tratamiento me- fltado de lo real. Quid en ver de dediarse (aunque por otra part, siempre de pasada) a hacer esqueras a¢- bitrarios de fa joven novela, valria ms interrogarse ‘cera dea discontinuidad radial de las bisquedas ae tual, acsten de las causas de ese fraccionamiento in tenso que feina tanto en nustas letras en concreto, como en nuestra ineletlidad en general, en el mo- ‘mento mismo en el gue todo parece imponer la exige- sda dean combate comin 1958, Arguments. LITERATURA Y META-LENGUAIE a Loca nos ensena distinguir debidamente el lenguajeobjeto del metalenguaje- El lenguaje-objet es Ik materia misma que ests sometia a Ta investgacién gic el meta-tenguae es el lenguae,forzosamente a tical, en el. ques leva a cabo esta investigacién. As y ésta ea fancibn de a reflex lgica— puedo ex presar en un lengusje simbelico(metalengiaje) se Taciones, Is estructura de uns lenges real (Lenguaje objeto). ‘Durante sglos, nuestros escritores no immaginaban que fuese posible considerar Ia literatura (el termine ‘mismo es recente) como wn lenge, sometido, como todo otto lenguaje, «Is distincon Toca la teratara ‘nunca se refejaba sobre st misma (a veces sobre su f= sguras, pero nunca sobre su ser), minea se dividia en ob jeto 2 un depo contemplador y contemplade: en una palabra, hablaba, pero no se hablaba, ¥ mas tarde, pro bablemente con los primeroe resquebrsjamientot de ls buena coneienia burgues, Ia hteraturs Se puso a sen- tire doble: a ls ver objeto y mirada sobre este objeto, palibra y palabra de esta palabra, iteratus-objeto y rmetalteratura He agul rosso modo, ls fases de ste desarrollo: en un principio, ana concenci atesana de fcacionliteraria,Levada hasta ¢ eserpulo 4: ‘oso, hasta el tormenta de lo imposible (Hlaubet);lue- fle voluntad heroica de cnfundi en una misma sus tania ert terataray el pensamiento de la itera tua (Mallar); ego Is esperanza de legar a elu la tautologia literati, aplsando sin cess, por asi decirlo, To literatura para ol dia de masta, declrando lags mente que se va a escrbig haciendo de esta decir ‘ibn a Iiteratara misma (Proust); mis adelante, el pro- ‘eso de la buen fe Iiteraria, mubiplicando voluntara, Sistemiticamente asta el infnit, ls seatidos dela pa Tabra-objeto, sin deteners nunca en un significado uni- voce (eurealizm);y finalment, a I invers, enrare- ‘endo estos sentidos, hasta el punt de esperar obtener {un eiaraht del lege Uiterario, una especie de blan- cara del escribir (pero no una inocenia): pienso aqui fen la obra de Rebbe-Crilet “Todas estas tetatvas quiz permitan yn dla dfinir nuesro siglo (quiero deci desde hace cen aos) como de bs: gQué esl Literatura? (Saree ha respondido 2 tstapregnta desde el exterior, 10 calle da una posiion Ttraia ambigua), ¥ precisamente como esa interroga cid ee hace no desde el exterior, sno en la iteratura Inisma, o, ms exactamente, en su limite etremo, en ‘sta zona aintomatica en la quel Heratuta parece que se destruya como lenguaje-abjeto sin destrurse como rretalenguse, yen Ia que la busqueda de un meta-len- fusje se define en ultima instania como un nuevo Tenguaje-obeo, la consectencia es que nuestra literat- ray desde hace cien as, es un juego peligrse con st propia muerte, es decir un modo de vvina: es como quella heroina rciniana que mucre de conocer, pero vive de basearse (riphleenIphigenie) Ahora bien, ello Uefine un estatuto propiamente teigico: nuestra soce dad, encerrado por el momento en una especie de im- pause hisérico, slo permite 2 Mteratura i pregunte ‘ee por excelenca I de Epo Qui 10)? Por el mis {no movimiento le prof la pregunta dats: Qué ace? La verdad de neste teratara no e del orden del hacer, pero ya no es del orden de Is naturalezs es uns sniscara que se seala con el dedo, 1959, Phantoms, TAcITO ¥ EL BARROCO FONEBRE Si se cuentan los asesnatos de los Anas, el numero ts relaivamente eseato (anos cneuenta en tes priac- pads}; pero silos leemos, el efecto ex apocaliptic: al pasar del elemento a la masa, aparece tna nueva cual- dad, el mundo se ha wansformade.’ Quid sea eso el ba- roco: ua contradiccg progresiva entre la nid y Ia toxlidad, un arte en el que la extension no es una suma ‘ino ona multplicicidn, en una palabra, el espesr de tube acelracin en Tito, de aio en af, la muerte claj; y cuanto ms divididos estn los momentos de ‘sta slidfcacin, hs iniving el total: a mest ge- nérca es masiva, no es conceptual: aides agut no e el producto de una reduccén, sino de una repticin. Sin ‘duda tbemos ya perectamente que el Tetor 0 es un fenémeno cuantitativo, abemos que durante nuestra Revolucién, el numero ée suplcios fu issoro; peo también que a To Iatgo de todo el siglo siguiente, de Buchner Jouve (pienso en 8 prefacio a as piginas es copidas de Danton), ha visto en el terorun se, no un volumen.Estoieo, hombre del despotismo iasrado, he 1. Theo dc 1¥ 1) queso Tiberi ori eee chura de los Flavis,esrbiendo bajo Tajano la histo fia de I trans ju-cnudiana, Técto est en la situ ‘aon de wn Uber que vive las atrocidaes del sane Tonnes el pasado er aqu algo fantsmal,teato obses: 0, mie que leccén, excena: In muerte es un protocol ‘Yen primer luge, para destruite nmero a partir del nme, pazadjiamente fo que se necesita funda «la unidad, En Tito Iss grandes matanzas anima tpenasalcanzan la categoria de hechos, no son valores, se tata siempre de matatas servis: a muerte coe ‘ano es humana: la muerte slo empieza en el indi {u, es deci, en el patrcio. La muerte en Tito sem pre arrebats un estado civil, la victima es fondada, es tina, cetrada sobre su histori su career, su fancion, si nombre, La muerte en si, noes algebraic: siempre un morir; apenas un efecto; por rspidamnente que se vogue, aparece como uns duracién, un acto duativo, ssboreado: ninguna victim de a que no esters segue fos, por una vibracion inten de la fase, de que sabia ‘que mori ext conciencia ima de la muerte, Ticlto 1S otorga sempre a sar condenades, y probablemente en es es en To que funda esas muerte en Terror: por {re ita a hombre en el momento mis puro de su fi; la contradicion del objec y del sujeto, de Ja cosa y de ln concienca, es este timo suspenso estoico que hace del morir un acto propiamente humano: se mata come feras, se mvere como hombres: todas ls muertes de Técito son instants, aun tempo inmovilidad y « tlstrof, silencio y visi, El retobrills en detrimento de su causa: no hay nine guna distincion entre el azesinato el suicidio, es l ‘nisono mori, tan pronto administra como prescito: el envio de fa muerte el qu I ands; tanto sel cen- turidn hiere con #0 expada como si da ls orden, basta con que se presente como un dngel para que lo ierever~ sible se produrca: instante et ahi soln se hace presente, Todos estos asesnats apenas tienen metivos: basta la delicin, que es como un raya fatal, que mata a distance el delto queda absorbido inmediatamente por su denominacion mégica: basta con ser Hamada lpsbe, por quien sa, par estar ya condenado; lino cencia no es un problema, bata con ser senaldo, Por otra parte, dado que la muerte es ua hecho brat, y no elelemento de una Raz6n, es contagor Ia mujer sigue 4.54 mario en e! suicidio, sn estar obliga ello los Parintes mucren por racimos, cusndo uno de ellos es ‘ondenado? Para todos ls que se pecipitan ala muer~ te, como Grbouil al agua, la muerte es una vida, por. {que hace cesar la ambiguedad de los signos, hace pasar elo innombrado slo nombrado El acto se doblega a su nombre: no puede matarse a una viegen? Bastard con violarla antes de estrangslria: el nombre es ln que «rigid, ele el orden del mundo, Pata lear a a = furidad del nombre fatal, el gue ex aslo, el inde do, se suicida, No mori no es solo un accidente, sina incluso wn estado negatvo, cs irisoro: ello aslo ocu- re por olvido. Suprema razon de ese efit absurdo, (Coceivs Nera ensera todas las razon que tene pars vive (noes pobre, ni esta enfermo, nies sospechoso), y 4 pesar de los repreches del Emperador, se dala muer- {e Finalmente, aima confusion, a Ratio, desterada en el momento deo iereparable, vuelve a ser nvoeada der- pus una vez muert, ia vita e paadéjicamente ex traide del unverso finebre, itreducida en el de un proceso en el que la muerte no ex segura: Neti le his 2 Vets sgn yu ij, noc ot a atari con east ae inva cero pe Strate por deen cn uae panda os ao, See eral er (i bese perdonado, dice, si hubieravivido: bien se le da 2 elegr la muerte: 0 bien se estrangula el cadiver del sulci para poder confiscar sus bienes. Puesto que more ern protocol, la wctima sim- pre es arrebauada en el decorado dela vid: uno se ha- Taba sumido en sus ensuens, unto ala orl, oo, en- tado ala mesa, otro en sus jardines, iro en el bana. Una ‘ez presertada a muerte se supende por un momento: Se cian, vstan su hoguera,rectan verso, afaden un codicil asu testament: ese Hempo de gracia de lat tims ripe, el tempo en el que la muerte se arroll Tabla. Liga el act’ ete acto sempre es absorbido en un ‘objeto: etl objeto de Is muerte que est a Ia muerie 2 pris, cng, 1 modo es instrumental pul, espa 4a, cordon raxpador con el que se cortan las vena, p= ‘ms envenienada con la que se acriia a garg, garGo fo barn con el que se goes, borra que shee tragar Al que mere de hambne,stbanas con ls que se afi, peas dese el que precipita, techo de plome que se ‘lerromb (Apripina), eweo de basurasenel que se huye fen vano (Messina), a muerte pase sempre aga por la dulce materia de Is vids, la madera el metal Ia tea os utensil inocetes. Para destruirse el cuerpo entra en ‘contacto, eofrece, va a buscar la fancionasesina del ob- jeto,ocults bajo superficie instrumental: éte mundo ‘del Terror ef un mundo que no necests patbulo: es el ‘jet el que se desis por un instante desu vocacin, se presa ala miert, la sostiene Morir aqui ex percibir vid, De ahi, el sistema de ‘moi, coma dice Taito: abi oabritse ls venas, acer ‘ela muerte we guido, es decir convert en daracién ‘yen purifcacion: se slpican de sangre los doses, los pa- Tienes proximos, In merte es libaién; Se suspende, se vuelve @ tomar, Se ejrce sobre ells una libertad capri chosen el seno mismo de su fitaldad final, como Pe tronioabriendose ls vena yvoliéndols a errr a v0= luna, como Paulina, la mujer de Seneca, slvada por orden de Nerbny conservando «partir de entonces du ‘ante as en a plidez de su rostro exangi a seal misma de una comuniccion con ls nada. Porque eie ‘mundo del mori signifies que la muerte es I ex fil Y resitente; std en todas partes y huye: nadie ecapa a ell, y sin embargo hay que luchar oa ella adiciona oe ‘medios, afar al desangramiento I iat ya ex ‘emprenier sin cesar el ato, com un dibujo hecho de ta linens y caya belle inal depend a isn tempo de a makiplicacién y de Ia frmena del bravo esenc. Porque quizi sea eso el barroco: como el torment ‘de una finlad en Is profusi6n. En Técto la auerte es lun Sistema abierto, sometido ala vera uns esac y ‘un proces; una repeticion ya una diteeins pare «proliferar por todas parte, sn embargo permancce ‘autiva de un gran objetivo esincial y moral Tambien aqui ea imagen vegetal I que praca I presenci dl batroc: as mutes sé cortesponden, pero so simetla fal, esalonada en el tiempo, sometida a un mevi= iento, com la de los brotes en un mismo tal | iulaidad es enganosa, la vida diige hasta el mismo sis- tera finebre, el Terror no es contabiida, sina veges ‘ign: todo se reproduce, y sin embargo nada se repit, tales quiza el sentido de ex universo de Técito en el ‘qu a deseripeion billate del Ave Fenix (VI, 34) pare- ‘ce ordena simbelicamente Ia muerte como #! momen to mas puro dela vida, 1989, Lar La sonctene La Sori! ea mi entender, el Horo prdilecto de todos quienes gustan de Michelet. Por qué? Quiza po. ‘que en La Sorciére hay una auéacia especial y el Ibo, recogiendo de un modo desstinado toda le tentcio res de Michele, se nstaladelibradamente en la ambi aed, es decir, en la totalidad. Se twat aaso de unl bro de Historia? Si, puesto que su movimiento es dia crénico, sigue el hilo del tempo, desde la muerte del paganismo hasta el albs de In Revolucién, No, puesto aque ete hil es novelesc,ligado a una figura, en modo alguno a una institcidn. Pero precisamente esta dup Cidad esa que es fecunds; a un Gempo Historia y No- vel La Sorcire hace aparecer un nuevo corte de loreal, funds lo que podria Uamarse una ctnlogia o una mito Iogiahistérica. Como Novela, Is abrasaliifica dl tiem: po, impide a la percepcion histicadispersarse, subli- ‘arse en la vision de ideas dstintae: s hace evidente toda una vinculacsn que no e ora cosa que la tension de una historia hecha por los propics hombres. Como Historia exocciza de una vere fantasm de ia exphea- | cin seolopica: Ia hechcerfa ya no es un desilleci Iento del als, sino el rato de ang alienacin soca. La bruja es ast aun tempo un producto y un objeto, captada ene doble movimiento de una eatalidad y de tua ereaeidn:nacida de a misera de los sievos, no por tllo deja de ser una fuerza que acta sobre esta mses la istoria hace rodat perpetuamente a eausay el efee- to. En encruijada de una y de otra, una nueva teal dad qu ese objeto mismo de bro: el mito, Michelet cotrige sn cesar Ia psicologlacon la historia, y ego Ia storia con Is pieologs: de esta inesabldad nasi La Sori: ‘Sabiemos ya que peta Michelet la Historia tiene uns ‘ovientacidn sedge siempre hacia una mayor luz. Flo ‘no quiere decir que su movimiento sea siempre prope Sivor ln ascensin del libertad conoce paradas, retroce sos sein la metifora que Michelet rom6 de Vico, la Historia es una espital: el iempo vuelve a tratretados anteriores, peo es circus son cada ver mis amplios, nin estado reproduce exactamente su homélogo; Ib Historia es ast como una polifonia de lees y de scuri- dades, que se corresponden sin cesar, arastadas sin ‘eambargo hacia un repos final en el que los tiempos de ‘ben cumple la Revolcién frances Michelet inicia nuestra historia en la institucion de Jossieros: agus es donde se forma la idea dela Brjas aislda en #4 chon, la joven esposa del servo presta of Gos a estos ligeros demonios del hogar, rests de los an- tiguos dioses pagans que a Iglesia a desterrado: hace Ge ellos sus confdentes, mientras el maridotrabajefue- ra. En la expose dl sero, ln Braja s6lo es an algo vi tual, no ge trata mis que de una comunicacion sonada ‘entre la Majer y la Sobrenaturaleza: Sati todavia 80 «5 oneebido, Lusgo, los tempos se hacen mas drs, la Imiseria y 1a bumnllacin aumentan; algo aparcce en Ja Historique cambia ap relaciones de los hombres, ‘ue transforma la propiedad en expotacin, que vacia Ae toda humana el vincalo que une al sievo con ef efor eel Oro. El Oto, que en s mismo es abstracién ‘eos bienes materiales, abstrae la relaciéa humana; ef chor ys no conoce 2 sis campesinos, sno slo el oro ‘impersonal con el que deben dale tribuo. En ete mo= ‘eno, con gan hcider, con una especie de prscencia de todo lo que se a podido deci mais tarde del ale- ‘cin, Michelet sta el nacimiento de la Bruja: en el ‘momenta eo que fa relacion humana fundamental se Aestuye Is mujer del siervo se aleja del hogae, va ala Janda, pscta con Satin, y ecoge em su desir, como un Aepésito precios, ls Natraleza desteeada del mundo: lana vex le Iglesia ests desflleciente, enajenada 2 los grandes, desligads del pueblo, la Bruja el que ejerce fntonees la magisatura de consuelo, la comunicacién ‘on lor macro, ls faterndad de los grandes aqulares colectivos, la eraciSn de los males isco, al largo de tre igor en loe que triumi lsglo leproso (el 2), sig epileptic (el), sgl siftico (el x). Dicho de ‘otro modo, como e! mundo se orienta hacia a inhuma- nidsd, por la eribleeolision del oro y de los servos, a Bruja es la que, eetiindose det mundo, convntisndose na Exclida ecogey reserva la humane. Ast, alo Jnigo de todo el fn dels Bdad Medio, ln Bruja es una funcin: cas inti cuando las relacones sociales com- portan por si mismas una certs slidarida, © desaro- Nis en la misma propovcidn en que estas rlaciones se empobrecen: una vez eat relaciones son nulla Broja trig Yeamos cémo hasta agul, omo figura mica, la Bruja n hace me que confundirse con las faera5 pro iresivasde la Historia; dl mismo modo que a alquimia {ue la mate de la quimica a brojeria no ue oa cosa Gut primera medina, Frente a estridad dela ‘Bsn sinbelzada por la noche das mazmoras co ‘Er raja eesti expan be ec dels Naturale, aso aa dels venenos Come remedis, ya que lito magico aqui el ica form con la que una tenia de iberacion pod hacer 1c reconmcer porta una colds lends 7226 care en el sgl (moment tanto ss signfeativo Suanto ques iclt an dbemns la misma 10 Sion de Revacimint La corte onc stall tomo elope ye faim retoceden la ‘Sprain ea Natrlta pst anon os laos ‘Sosy medics, De repent a Bruj yo 0 neces witha n decadencit no detpree (i meroso5 procuns de brea demuestan netement Inia; pero, como dice Michelet, econ en pro fedonl pied de ua bens parte eu voscm tat tl pata yo en cucsons de pura magia {matefcion hecho), como eanidente elves dee sehra Y Michelet de Je interes por el. "cao trina gl ei? Nd ms od 0. La denparicin de a rj no gee dei que Ia Ne ture haya anf, Dest por I etrada ea image meio se convert nl ga progress de ro ds igs iene Gy XV, eof esi + cen sauce prolongs el confi ene noche fet da. ene el Cura ye Médico, Pr una serie dea “Sec mdanca, Michel invert ls fancones: sd fone a dd Media ea bene po ser misino mé- {Tc Sut pn sora lenin del medic e Cara it Mere un principio epom de Sat, cone {cents dempor mondrgicns enti. Estee Enid de bs canto grandes process de bjs que Michelet noes argument, em segunda mia de 8 io (auf bs pose e Loud, de Lovie caso La Cadre. Agu enemas, de un lado vitimas ‘esdichadas, confiadaty frgile, las monjas poseidas por el Diablo: de oro, al Cur sobornadorligetoo ma ‘qiavlico; dtr de estas figura, la Ilia, que lean ra, ns entega a as hogueras, as mazmortas conver tuales, por interés oscurantista 0 por guerra intestina centres lanes, monjesy carat; ms lejos an, el ME {ice aco, juezimpotente de estos crimenes, el Gn ‘0 cuys vos, por desgracia shognds, hubiee poido re ucir toda esa demonomania ss naturlers fsa (la plétorssanguines 0 nervioss de jvenes consagadas al tedio yal exbato). Tal el sees dels format, os quiere acep tar un termino mis etnolgico, de as hipéstasis, po as ‘que pasa la doble imagen del Bien y del Mal. #1 Mal es Is servidurbre y el Oro ls migra I humillacion del cclav en una palabra, I alienacion que exluye de la Naturales al hombre, es decir para Michelet, de a hi ‘manidad. HI Bien, es la contracorriente misma de esa alienacién, Satin, la Bruja, ls figuras que recogen la az ‘de un mundo agonizante, undid en las mazmorras de Ta Iglesia A a exclsion del hombre de a Naturaezs, ¢ ‘pone el desterra dela Bruja del mundo habitado, Por ue la Bruja es esencalmente trabajo, esfuerzo del hom bbe para hacer el mundo a pese del mundo la Braj se sdestiera pars poder atuar mejor Frente aa sequedad 4e a historia medieval (a pate del siglo x), definids por Michelet bajo as especies de los dos grandes temas 4e esteilidad, la Imitacion y el Tedio, la Bruja, en so edad triunante, rcoge toda Ia praris humana: esa la ver concencia de Is alienacién, impulso por romperla, sacudida de in iors anguilosads, en una palabra, fe undid del tiempo, Sazdn, dice Michelet, es uno de los pets de Dio Este movimiento de liberacion es un forma gene ral dea Historia, Pero el punto especifico de Satin, Mi- cheletinsstié mucho en ello, esque en relacion aI se vidumbre original, leva a cabo una subversin exacta y ‘como medida la Brjeriaes.un alent, Yas sabido que lor rtos demontacos, inviesten ks turin erstiana, Sa tin esl verso de Dis, Michelet ha profandizado mis ‘en eats inversion, entendéndola podticamente,hacien do verdaderamente de ella una forms total del mundo medieval: por ejemplo, el sero allenade vive de noche, no dedi, ls plantas venenosas son consolantes, ett fa. Nos hundimoe agus en el crazén de Is visi cheletiana: toda sustanca es doble, vivir no es nada mis {que tomar violenarente partido por uno de los dos ontraros es dotar de sgnifiacin la ran dualdad de Tae format. La eeparacén de as sustancias implica una jerarguia interna de eada una de las partes. Por ejemp, To sexo, que ex el distinsiv del in dela Edad Media, no t+ mis que un estado de lo este lo esti es lo divi {o,f partido, lo seperado, el anonadamiento dela co- ‘municacin humana; Michelet oponded pues a lo seco todas ls sustancae indiveas como sustancas de vide: lo hdmedo lo caliente, defiiesn la Naturales, porque Ja Naturaleza es homogénes. Eta qumica adquiere ev entemente una signfcaion historica: como forma tmikica de la Naturale, Is Bruja representa un estado indiviso del trabsjo humano: es el momento mis 0 me nos sofado en el que el hombre es feliz porque ain no he dividido sus tres us teenies. Est sel comunis: imo de as fanciones que expres la Bruja tascendiendo Ia historia, atestigua la ficidad dela sociedad primiti- vay prefgura la de I sociedad Futura: auavesando el tiempo ala manera de wna esencia més 0 menos ocala, bila slo en los moments teofinicos dels Historia: en Juana de Arco (Ggurasublimads de la Bruja), en I Re volucén, Estos son los tet grandes estadoshistSrcos dela Bee: un estado atente (ls modest mujer del servo), un ee {ado triunfante (la bruja sacerdovin), un etado deca- sente (a raja profesional, a equlvocaconfidente de Is fran sefor). Después de lo cal, Michelet pas al & gua del Satan-Sacerdte. En este estado del alisis no Se tata en sua mis que de fee de una mista inst tucidn, es dei, de historia, Donde aparece Ia Novela es cuando Michelet expeta, por ai dectio hilo hist 0, lo transforma decididamenteen filo biogsic: la funcin e encaens en una persona verdadera, a madu racion organics sustituye a la evolucin istic, de modo que la raja rene en ela lo general yo particu lar el modelo a criatura: elses Ta wer una Beja y la Bruja. Esta intencién novelesca ex may audae porave, fen Michele, dista mucho de ser metaérico: Michelet sigue rigurosament la linea que se ha ava s total ‘mente fil alo que se ha propuest, habla de es brujs ao largo de trescients aos como de una soa y inca mujer. 1s exstencia novelescaexté fondada, muy exacts ‘mente, a partir del momento en que [a Broja ests pro vista de un cuerpo, minacioramentestuado,abundan- temente desrite. Tomemios a la Bruja en ss incios, cuando no es més que la espa dl sero: estamos ante tuna mujer delgads, dbl, temerosa, marcada por calidad fia que podia impresionar mas a Michelet, lappequenic, es deci, pensabs dln fragilidads 8 modo de existencia corporal es el dvlzamiento ninGseul, una especie de ocosidad hogarefia que le hace estar oidos alos expritus del hogar, ess amiguos dioses pu {anos que la Iplesi ha condenado al destiero y que se hha efugiado en la choza del iervo: lo existe por una clorta posvdad del od ste eel cuerpo y a atm fera, Mas adelante, motrida por la miseria misma de los tiempos, y debido a que esta seria es enorme, la se- funda Bruja es una mujer alia exuberant; ha pasado del cuerpo humillado, al cuerpo trinfante, expansvo. os propios lugares eroticos se moditian: antes era et tale eel la paider de la carnacién, un nerviosismo pasivo, ya que el cuerpo se hallaba reducido a todo lo aque puede romperseen d; ahora son los ojos, de un Amarillo maligno sulfrosos,armados de miradasofen- ‘Seng, lo qe Michelet Ima el flgr, queen siempre ‘sun valor sniesto; es sobze todo la cabellera, negra, Serpentina, como lade la Medea antigua; en una pala- bra todo lo que es demasiado immaterial © demasiads exible para ser destruido, La tercera Bras es un estado combinado de lo dos euerpos anteriores Jo grécil del primero queda corregido pr lo cambative de segundo: In Bruja profesional es una mujer pequef, pero mal dos, fina y obliua, dlicada y stata su tétem ya noes Ia cierva miedosa 6 la Medea falgsrante, sino el Gato, acoso y maligno (que es también el animal ttémico del siniesteo Robespierte). Si seguimos fees ala temi- tica general de Michelet, la cercera Bruja procede dela ‘Moos Despierta (munca, alhajaperversa), imagen per iciosa puesto que es dable,dividida, contradictoria, reuniendo en el equivoco In inocencia de Ia edad y la ‘dencia de lo adult. Por otra parte, la ransformacién de a Bruja a través de sus tres edades es en si misma ifpics contradictori: se trata de un envejecimiento,y ‘sin embargo la Braj sempre es una mujer joven (ve 2 en particular todo el desarrollo sobre ls jovenes bx js vasea, a Murgui, la Lslda, que Michelet conden, ‘Sn dear por ello de sentissevistlement atrado), YY fuego, y este er un signe novelesco importante, Bruja sempre ents aljada, participa sustancialmente de ‘un lugar fico, decorado (objets 0 paises). En un principio ese hogar, sutitato espacial de lo inti el hhogar ex un haga eminentemente bendfco ela medi- dda en que exe eeposo terminal del rapt, el ugar don. de el hombre dispone de la mujer dit como propits- Fig absolute y vuelve encontrar con cla estado na tural por exelencia, la indvisin del pares (Michelet precisa que el hogar ha constituido un gran progreso fespecto al comunismo erdtico de la vila primitva). Aderis, este hogat, dfindo por una serie de objetos contigs, a cama, ¢l arco, la mesa, el ecabel, sla ex presién arquitectural de un valor privilegiado (ya ade ‘vertido a propésito del everpo misma de ia pe-bruj) Ja pequene. Muy ditnto eel hibit dela maga aul (a: bosque de zara, landas con espinos, lagats eri dos de amtiguos dalmenes, el tes et aq lontrincado, lo enmaratado el estado de una Naturalera qué br ab- sorbido ala Bruja, se ha cerrado sob ella, A ae ato ‘es divisiones de Ia sociedad medieval (en su fase de- sradada) cortesponde esta paradoja el encierro de ln Bruja en el lugar abierto por exelenci: In Naturales. La Naturaleza se converte sbitamente en un lugar ior- posible: lo humano se efugiaen lo inbumano, En cusn to ala tercera Bruja —dela que por otra parte Michelet Ihabla macho menos como confidene equiva def ran sefor, su habitéculo mito (lo sabemas por tos 08) el tocadr, la sloba, el espacio profesional de 1a Doncella (personae destacado por Michelet como ri: val insidioso del marido), en uns plabrala categoria esgraciad de lo inti lo ahogado (que hay que vin cular con el tema maleien de la itega monérguies) sts Bruja general es por consguiente una mujer completamente rel, y Michelet maniene con ela rla- cones ques precise, queramos 0 no, calificar de erti- ‘2s Lo ersuco de Michelet, ingemsamenteexpuesto ss libros lsmados «naturales, aparece fagmentara- mente en todos sus libros historic, sobre todo en Ia segunda mitad de su vide, despats de su segundo ma- teimonio (con Athenais Mialaret), La Sgure central precisamente esta Athénais que se parece mucho a fmagen que traza Michelet dela primera Bruja. La cal ddad general det objeto erica «pars Michelet I fragi- lide (aqui, pequefie2) Jo cal permite al hombe al ‘er eativar y proteger poster yrespetar: se trata de un ‘rctismo aublimado, pero cuya sublimacion, por uns ‘specie de retorno propiamente micheletano, valve a converte en erotimo. La Bruja, sobre todo en su pri= ter estado, es indudablemente la esposa de Michele, filly sensitiv, nerviosa yabandonada, la pia vos, ly que provoca el dable movimiento erdico, de concu piscencia yd elevacion. Peto e30 no es todo. Saberos {por la Femme, FAmour) que Michelet embelece es ura fri con una ftogenia singular: a Sangre. Lo que ‘onmucve a Michelet en la majere5 lo que cal: no la ‘esmuder (lo cual seria un tema banal), sino la funcion "anguinea, que hace Ia Mujer rtmada como Ia Natu- ‘aleza (como el Octano, sometido también al ritmo lu- hat), El derecho y Ia ler del marido es llegar este sserto de natraleza,posee: por fin en la mvj, gracias 4 esta confidencis inaudita, una mediadora entre el hombre y el Universo. Michelet exalts este privilegio marital en sus libeos sobre la Mujer, lo defend contra tl rival mis petigroso, que no es el amat, sino la Don fella la confidente del secreto natural. Todo esi tera tts prevnte en Lt Sorte: consituivamente, podria ‘eciee, puesto que la Bruja es sibia,otorgada ala Na- turaleca por el ritmo Isnar y Jago, cuando la Bruja ‘cede sa higar al Sacerdoe el tema aparece de nuevo in= Giscretamente Ia relacion del cura seductory de la rmonja elegda slo es plenamente exotica, en el estilo de Michelet, cuando comport la confidencia eencial la ‘comunicacin de ees cous vergonsonas pedals cays onfeson estan dura pra una mur Pues, en resumidas cuentas lo que Michelet conde 6 en solictacionsacedotal osténiea, es tambien fo que siempre describ con dlc Ia povesiéninsidioa, Ia insercién progresiva en ol sceeto de la Mujer. Las imagenes, en este mismo libro, son innumerabes an pronto eel genio infantil que se desizn en I esposa dl servo, como los esititus que se instalan en eli come !una tenia, 0 Satin que empala a a Braj con un azo de fuego todas partes domina la imagen, no de una pe- netracién, metfors hanal del edtico ordnario, sno de ln ateavesamentoy de una instlacgn. La utopia mic cheltiana es visiblemente que el hombre sea prssito de Ja Mujer, el despesoro ocetico de os tiburones, que nnadan en el mar dorante mes, unidor una'al ot ventura dia en la que la peneteaign imévil de los cuerpos se dobla con el deizamientaexterno de I aguas (Michelet deserbi6 eas uniones de poces en La Mer). Mic lla de la Mujer, se tata evdéntemente de ‘oda una cinestesia del homibreenla Saturalers, ycam- prendemos por qué la Bruja es una figura mayor del panteon micheetiano: todo en ella lt dispone = una aran fancion mediadors:istlindose en alls el hor bre vata sumergire en la Natraleza enter, como en un medio sustancialy vital." Vemos que la presencia de Michelet en Le Sorcidre 5 algo completamente distinto de sna simile expan sion romntiea de In subjeivdad. Se teats, en sume, para Michelet, de pariipar mégicamente en l mito, sin por ello dejar de desribiro: el eato es aqua aver nattaiéa y experiencia, tene por funciacompronster al historiador, mantenerle al borde de Ia sustancia m- ica, en el estado de un espectador que sth a puto de cede l trance; de ahi ln ambigicdsd de! ico nacional sqe Michelet tein y no creia al mismo tiempo, seein Je brmala que él mismo emplebrefiriéndose ala acti td reigns de los griegs con respecto a sus fabuls, Igo sy notable en La Sorin esque Michelet no ds ‘ane nunca Ta efiacia del acto magico: haba de os tos ‘dele Braje, como de ténica coronadas por el Et, 72° ‘Gomaimenteconsumadas, aunque iraconalments con~ ebidan. Eva contradiceén, enojost para tatosbisto- fladores positivist, nunca crea conflictos a Michelet fable de los efectos micas como de hechos reales: 1o ‘gue la narracion le permite omits s precisamente la husalidad, puesto ue en la narracion novelesa, aie Son temporal sustitaye siempre a asain Lica. Vea~ or cémo trata por ejemplo Ia transformacion de la {omen lobe al exer In noche, La Bruja Te hace beber el fro Un historiador raconal hubierarecorido a una lat de tesimonio, a una expliacion del ius, Este noes el metodo de Michelet. Es eleva cabo, dice, ¥ por fa matana la dama se encuentra agtada,extenua- vtas ha cuz, ha matado, ee. Eta distorin entre 10 fealy lo racionaly esta primacla del hecho sabres eau arate (sto se leva cabo), es precsamente fo gue rata tiene que manifstar; de este modo, nada esti tris cerca del relato mitico que Ia novela micheetana, dui a leyenda (es deci, Is prolongaci de a narra- ‘n), finda, agu alls po s sola, una nueva raciona- Iida. En ve de alejtle de Ia verdad, Ia Novel ayuda Mi hele a comprender la broera en su estructura objet va. Al enfentarse com la magia, Michelet no se aprox- tsa bistoriadores positivistas, sino a sabiosigualmen- te rigurosos, pero cuyo tbo se adapta inintamente ‘esr le hit de Bij 0 dee brea, Sonne ps de lgnos dogo pas de moda Satie some ene naan ran feat sr ene roe Spenalos distingui del tna confontcion ela ft mundo como una enc inmvil, tern, el ese tnando que se ace. Como consecuenciaparadca {pera comet) de esta nun, tenemos e echo de ccala Bruja de Michele er en donde hay menos e- Nostow spas Evidenterent ay ete ama ‘Rhglon aa estecho raion qve Mauss ha anaiado Bey gue ed propio Michelet define com un al ree or Ysirecamente una rlacn complementra 0 ress la magia etl aren dela regione ‘Besta ser de las ous ys encarg de a wasfr tracon ee lo-que hac Ia Beja miheetina, mi Sho mas obrera gue mcedotisn Firalmene,anuncando el pnp de toda socio loge: Michelet ita mucho de abersterprtao la ‘ius como un Owo, no ha ecko deel gra ag dl Singular, coma clomanismo Ba odie cone {ira Poet ot Mago. isu rape feet this (ors anda loe bosques), 0 est socimente ‘Shr todeaa coectvdad evince ells express en ‘a aay deel a ve de oponese noblemen ala steed (como lo ce po rebelde, Bra mich Rite patie fandamenament en au economla- La Fatale go opone en oto ior lind a 5 eG Michlt a resol de manera mis oder Serbs omprend perectamente que ens a sing Pend eu Brom y soldat ee des no tubs ain de opositn sino de camplemento:e eto emer el qe nd la parila dea fancn separa ls hombre eecharan a Bj, es porge Is Treboocen, porque proyectan en ll una pate de mi Boe un tempo legis stole median I ‘ro ealizan une ecanoria compl una tension di punto qe en tos momentos shreds del i cls sperma vive Sin dud, arasuado sbjet ‘meme por lo postive papel, Michele describ poco 0 ml el conportaino dea soda normal Frente ate Braj no do gue en ernines deere {oa por jmp. ingsscn pad tener onion Ira que ap lo grandes pocsos de bjt con vis une econo general ec A menor fn vara orton indo gus ete l soda mor tal yl rj gu sb cali de el abla ua Int dead, y no to de evi, yu por on Siuct ea soda conn puede ec a Bruja que tena anlar Aas mo do Mace en igi pa est on sorprendene de gue hacen mo. rials Brij ous do elle En cscs, cer prtcpr a ods msde a oid en esac complementana que LS atlas 2 Prop precumente des vce unis yo fe en ene cao eater pars I sola, noe msqueun media dvs canrdiciones Yl qe, nese oid acl, prolongria mejores Sennen eh re mn e Mat gata isd tect de au un ha Tamadoet rsdn sncontemnte agate del coc dad par comer ens ead, onto hacia tum conecin dela ely sin emu mpotnte pte lei: x te mney nc ls Jo did hac I pray peo lo partpand en a por medio dl elevator dun lena a ig gi Bra medal slain adeeb rh or melo de io y ape de ne soe Si podemos as encontrar en La Soriére el flgor de una descrpcin toaente moderna del mito magico, ello se debe a que Michelet tuvo la audacia de legar basta fondo dest mismo, de preservar et ambigiedad temible (que fe hacia la ver tcador (en sentido mio) Shalit (en el sentido racional) del historia Su simpa- tis por la Bruja no tena nada que ver con In de un au tor liberal qu esfcres por comprender alg que le es ajeno: parteipd en el mito dels Bruja exactamente del mismo modo como la propia Bruja participabe, sey. fu isdn, en el mito de [a proxs mégica:& un tempo Soluntaria«involuntariamente, Al escribir La Sorcé, To que Michelet jeri wna ver mis no fue ni una ro fesgn (la de histriador, ni un sacerdocio (ct de poe ta), sino, como dijo en otro loga, una magstrarara Se ena obliga por I sociedad administra su intl fencia, a nerea todas su aneione,ncusoy sobre todo fu funeionesaberrantes, gue aqui presinié que eran vir ules Al vera su propa sociedad desgarrada entre dos postuados que estimaba iualmente imposible, eb pos fulado cristiano yal postal materialist mismo es hous el compromiso magico, se hizo Brujo, wnidor de Ihvesosfesutador de muertos, asumi6 el deber de decir po, deresperadament, 4 iglesia y ala cencia, de sus thus el dogma o el hecho brato por el mito ‘Estee el moto de que hoy, cuando la historia mi- toldgies es mucho mis importante que cuando Miche- Tee publiabs La Socére (1862), su libro waela a tenet sctualdad, vuelvo a 42r serio, Los enemigos de Miche- fet, numerosos, desde Sainte-Beuve a Mathie creyeron ber de que conto artanc el Pastor de Velanatranca dde may lejos una conclenciaenloguecia, somvetida fncesamtemente a la resin de una culpabildod enor- ze, que procede no slo de Dios (Jo cual es obvio}, sino también, y mis an, dal mundo; © més exactamente 5 ff mismo mundo el que ostenta I fencion divina por texcelenca, Inde ls mirada: ef Pastor es contemplade, fa conteraplacion de la que es objeto le consituye en tspecticulo desdichado: se sene y se converte en fe, fen desnudo, Siendo de esenciay de la peor, ade mismo cuerpo, el pecado eshoaa fente a una inoeencia que so puede ser la dé la vrlidad,definida menos como ta fetes sexual que como ins dominacin coneca de In realidad. El mundo proleario seconcibe asi como un mando fuerte y justo, es deci, apenas accesible; natural= mente, el caricter fantasmagorico de esa proyeccion ‘nunca es enmascarado; sin embargo ese fantesma mis- to ere que pone en accin tna concencia corecta de las relaionessociles; pues aoe obreroe, esa gente del pueblos, dela que el Pastor queda exludo por funcén 3. see semido objetivo dl ptaio en gue Pstor sine wn oui pli dare. “2 pop near eiboue uns ee dee enlogus mo dle (20), ¥ por estilo, y que sin embargo le fascina, forma a sus ‘ojos una humanidad muy preissmente ambigua: de tuna parte son fs Juces, puesto que contemplan afi- ‘man sin cesar una raza que es negada al narrador,y de ‘our hay entre els y el Pastor una complicidad profun- dda, que ya no es de csencia, que ain no es de hace, que ya es de stuacin todos som consderades oman blo- ‘que por la gente de orden, estn undo pola misma r- probacién, lz misma exclusién: la misria ica se une ‘aqut a Ta misera politica; podria decirse que todo el var lor de este libeo consist en mostrarnos el nacimiento ico deun sentimiento politico; y todo su sigor en hax bers alrevida a tomar este pnt de arrange lo ms le jos posible, en Is 2ona casi-neudcca dela moralidad, alli donde el sentido del ben, exapando ala hipoteca de a mala fe, so es ain el sentido defo originario, Este es, a mi entender, el objetivo del ibe, esto es lo ue justifea su tence, sus rodeos, la manera prof damente desconcertante con que hace surgie de una ncurosis un sentido politica, con que habla del proet- ado con ese lengua mitad metafseo, mitaderStico, especialmente adecuado para irritar 2a ver narxstas, creyentésy eaistas® priv asa héroe del beneficio de toda buena conciencia, Porque el Pastor de Velan noes en modo alguno ua pastor weojo; ni squiera lo post Jas mismo lo nombra, es dece que lo desmsifics an- ticipadamente, En cierto sentido, el libro mo termina, no consituye propiamente hablando un itnerri, es deci, una hiberacin o una tage: describe una con tradiccion profunda surcada por flgore,es0 es todo; 5. Ditase que ie, se montng, por un poet de alpine spectra Seay prs mao aos equacs su héroe no es «positives, no arrasta sin dads el pro letavado se deja adivinar como un valor; pero su repre- sentante, si ast puede decirse, apologtico, Vietor, el amigo de Pastor, que posee todas le foere3s que dno tiene (el atcismo y el Patide es deci Is susencia. de miedo), se queda en wun personae perilérico: es una funcién desprovista de lenguaje propio, como si preci- samente el erorestuvieraen el lengua. En cuanto al propio Pastor, su palabra, aungue ney sostenga la no- ‘ela, noes completamente naturak no suena como una antes) y esta historia es la que ain prevalece en los ‘manuals escolares, mis estrictamente todavia, en ‘auestras sitesi de Hteraturscontemporsnea; mis ade- Jame, bajo la influenca ya de Taine, ya de Marx, e em- prendié aqui yal una historia de ls significado ite ‘aris; la empresa mas notable en este plan es sin duda In de Goldmann: Goldmann he ido may lejos, puesto ue ha intentado vincular una forma (h ageéa) a un ‘contenido (la vsibn de una clas politic}; pero a mi en- tender la explcacién es incomplets, en la medida en que [a vnculacién misma, es decir, enresumidas cuentas, a signiicacién, no es pensoda: entre dos términos, uno Iistéricoy oto litera, se posta una relacién analé- ‘ge (a decepcion trigica de Pca y Racine roproduce ‘amo una copia la deepcion politica del ala derechista el jasenisme), de modo que la signifcaién a la que Goldmann apela con una gran intuici sigue siendo, a smi entender un detrmininmo disfazado, La que seria preiso hace (sin dud es fil el deci) es no hacer la historia de los sgnficadoeIterarios, sino la historia de la signieaciones, dec en resumen a histori de as téenicas semdnticas gracias 2 Is cuales la teratua im- pone wn sentido (aunque sea svacios) alo que dice en ‘una palabra, habia que tener el valor de penetar en sla cocina del sentido. UL Usted ha eerios «Cada exeritor que nace abe el proceso de la iterates Bite incesanie, te necesarioreplaneamieno, 20 puede en el futuro sigificar un peligro, en el sentido de toecer una influenciatemibl sore ciertasescritoes para ‘quienes el «rsplanteamiento» puede no ser masque un revo rituals lierara, es dct, algo sin aleance rea? (No eee ated, or otra parte, que la ocie de we ‘fracas necesari para el loro» profunde de wa obra pueda converte semejantemente en alo con excsva frecuencia deiberado? Hay dos clases de facass: el facaso histrico de, ‘uns literatura que na puede responder a las preguntas {el mundo sn aera el carder deceptivo del stems ‘gniicane que constiuye sin embargo su forma mis ‘adult: la literatura, hoy, seve reducia a formar pre juntas mundo, mientras que el mundo alenado, ne- ‘eit respuesta yelfacaso mundano dels obra, ante tun piblico que la rechaza. El primer fracaso puede ser vido por todo autor, 5 lcido, como el eacaso exis- tencial de oa proyecto de excribir; no hay nada que de- ir de ell, no es posible sometrle a una moral, ain nos a una simple higiene: qué deci a una concien cla desgraciada, y que, hiséricamente, tiene ran de ser? Este facaso pertenece a esa sdoctrina interior gue ‘nunca hay ue comunicary (Stendhal). En cuanto fra caso mundane, slo puede interesa (ademis de al pro- Pio autor, evidentemente) a sociblogos o historiadores, ue se eforzarin por interpreta el echazo del piblico como el indicio de uns aetitad socal histories; puede observarse que, sobre este punto, nuesea sociedad re chaza may pocas obras y que I waculturacion» de las ‘brat malditas (por ot pate escasas),no-conformis tas 0 ascéticas, en una paabr, de lo que pod lamar- se la vanguatdia, es partculmente rp no se ve por ringuna parte esa cultura del facaso dela que usted ha- bla ni en el public, nen la ediin (evdenterente), nen los autores jovenes que, en la mayora de fos ca- sos, parecen muy seguro de fo que hacen; quiz por ‘otra part, el sentimiento dela literatura como facaso silo puede afectar alos que le son exteriors. IL, Br Le degre aro de Vécritute y al final de las Mythologies dice used que hay gue buscar suna recon- tihcin del realy de los home, dela descripeény de ta exlcacin, del objeto y de saber. Esta reconiacin, se tuna ala possi de os surrealist para quienes la ‘sracuran ene el mde ye expirtu human no eine ‘rable? “{Chmo reencliara ets opinion con su apologia dl scompromito fasrador (halsana) de esrtor? ‘Puede precsar eta ultima nocién? aca el surrealism, a pesar de ls tentacionis poli> ticas del movimiento, I coincdencia de loaly del es pirita humano era posible inmediatamene, es decir, al tnargen de toda mediaién, aunque fuese revoiconaria (e incluso podtladefnirs el sureaismo como una i nica de inmediacin). Pero desde el momento en que se piensa que la sociedad no puede desalenarse al margen ‘de un proceso politics, o, mis ampliamente, hstrico, ‘a misma coincdenci ( reconiiacon),sin dejar de fer erefle, pata al plano de la utopia; hay, pues, desde cntonees, una vison utdpica (y media) y una vision 2. Bond Sei 953 1957 real (¢ nme de a teatr: ets dos vanes 10 s0n contador sno complementaria "Naralment, nisin elt snmediata, le tise a una sociedad alenad, en modo siguno pede ser una sapoogiaw: en una sociedad aienada a er tuts et nad no hye pes ninguna ears el (qunque frat de Katia) de a queSe pueda hacer sla apologise no el iteraura lo que vibra al mun Go. Sin embargo, en ete estado areucidon ene que Ia Iori nossa hoy end, ay wri manera eb cer hteratra es posible a lccién por eonsiguente, tay si no una moral al menos ana respoctbidad dl sci, Se ue hier dea Irate un valor ae vo, ys sa en plore, acorinola con los valores con Servadores dela sociedad, y na tension, haiendol fnstrumento de un combate de ercin; lates, se puede conde a ieratura un aloe eens te imeropati a eras se comer enone ene Signo (yguizs el sic sign pose de ee opacdad Historica en la gue vivo sbjeswaments admirable: sent sevide por ete stem signeante decry, ue, mi entender, consiae la Herta elector Pode entonets «un vempoinsertarprfundament Shea en of mundo, en las preguntas del mundo, peo suspender ests intercon precsrente all donde las dela raudn a historia dela filosfi se piensa, se es cribe, se enseha, forma part, sas puode deciee, de tuna buena slud de las socedades; pero a esta historia ‘de la raz6n, todavia nunca ha respondide una histo ria de Ia sinraz6n; en este empareamient, Feera dl ‘ual ninguno de lo terminos podria consttuiese, uno 4e os miembros es histeico, participa en los bienes de 1a civilizacibn, escapa ala fatalidad del ser, conquista a libertad del hacer el otro queda excaio de le historia, ‘encadenado 2 una esencs en sobrenatural, sa moral, sea médica; sin duda una fracibn, por ora parte inf ‘ma, dela cultura, reconoce la locura como un objeto respetable, incluso ineprado, al menos a través de al- fgunos de sus mediadores, Holderlin, Nietzsche, Van Gogh: pero esta mieada es muy reciente, y, sobre todo, no cumbia nada: en resumidas cuentas, e& una mirada Iver, na mirada de buena volustad,dsposicin yl, otente para retirar a mala fe. Porque nuestro saber, ‘que nunes se separa de nuestza cultura, es esencialmens te-an aber eacion inclso ewando la historia obliga « laandn a amplinese, 3 corregiseo a desmentire: es un discurso dele razon sobre el mundo: discurse sobre Ia Tocura, «partir dl saber, sea cual eae! extreme al que se lege, eno slr en modo alguno de una antinomia funcional cuya verdad queda as stead en un expacio ‘an inaccsible lo locos como a los hombres cuerdos Porque pensar ests antinomia es siempre pensarla a pa tir de uno de sus teminos: a distancia aqui slo es la ‘ims setucia de la tex6n ‘Resuriendo, el saber, sean cuales sean sus conqul tas, aus audacse, ue generosidades, no pede eseapar a Ja reaizacion de excision, no puede dejar de pensar ta rlaci en términs de incision, ni siguiers cu- fo la descubre en su reciprocidad; en la mayorta de as ‘easiones, a refuerza,a menudo en el momento en que cree ser més generora, Miche! Foucault demuestra muy bien que, a 6m de cuentas, la Edad Media es una epoca {ue se abrié macho ms y mucho mejor’ Ia locuta que Jos tiempos modemos, ya que entonets la locura, en vee 4e ser objetvizada bajo forma de una enfermedad era ‘definida como un gren paso hacia la sobre-natualeza, ‘n.una palabra, como una comunicacién (este e el term {de La nave de os locos); ye progzeism mismo de fedad moderna el que patece ostentar aqul la mala fe ‘nis denso; al bear de sus eadenas alos locos, al eon: ‘ert [a sin-tazén en alienacin, Pinel (que agul no es nis que la represntacién de una época) enmascar bala antinomia funcional de dos humanidades, const tia Ta Focura en objet, es deci, que Ia desposeia des verdad; sunque progesiva en el plano fio, ls ibera- én de Pinel era reptsiva en el plano antropeégico. {a historia de Is loura slo podria ser werdaderas i fuesesngenua, es des, seria por a loco; pero en as ‘ste caso no pode estar excita en teminoe de hist yy wolvemos a caer en la mala fe incoerible del sabe Esta es una ftalidad que desborda con mucho las sim- ples relaciones de Ia Tocatay dela sinazén; de hecho, aecta a todo epensamienton , para set mds exacts, 2 todo reeutso un metalenguse,se8 el ue sea ada vez que los hombres ablan del mando entean en el co- rz6n de I relacién de exclusion, incluso cuando ha blan para denunciata el meta-lengne siempre est rrovista.fstaes una diaketcainfnt, que solo podria parecer sofsicada alas ments bien provistas de una ‘ann sustancal como un naturalera 0 un derecho los otros la vivirin dramatic, generosao estoicament todos modes, conocen bien este véstigo del discus, ‘que Michel Foucault acabs de Nevar a un hr dela: Dradora, que no surge tan soo al contacto de I acura, sino cada ver que el hombre, tomando aus distance, humano. Ex obvio que en Mobil pretentacinalfabétics de los Estados de la Unign significa a su vez, en la medida fen que nigga todas las dems clasifiaciones, de tipo ‘e0grifice 0 pintoresco, por ejemplo; recuerda al lector Ta naturalea federal, es decir arbitrata, del pals descr to, le da a lo largo de todo el libro ese sie clvico que procede del hecho de quelos Estados Unidos es un pris onstreido, una lita de wnidades en Ia que ninguna de fllas tiene superiordad sobre las demas. Procediendo ‘en ax hemp, tambien ¢l, aun senaayo de represents ‘idn» de Francia, Michelet organizaba nuestro pais ‘como us cuerpo quimico, el negativo en e centro, as parts actvas en ls bordes, equilibrindese por medio e ese vacio central, neuro precsarente (pues Miche> Jet no tema alo neuteo) del que habla sald la veal; pra los Estados Unidos, noes posible nada semejante Ios Estados Unidos son ta sur de estrellas el alfabe- to consagrs aqui un historia, un ensimiento mica, tun senimiento civien; ex en fondo la claiicacion de Jn apropiacion, lade las eniclopedias, es dei, de todo saber que quiere dominar el plural de las coss sin por ello confundisas, yes verdad que los Estados Unidos se hhan conquistado como una materia encielopédica, cosa eas cosa, Estado tras Estado. Formalmente el orden alfabético tine otra vet al romper, al nega as afinidadessnatarlese de los Ee tados, oblige a descubriles otras relaciones, tan intl- _gentes com las primera, puesto que el sentido de todo ‘este combinado de teritorios vino despus na ver et tuvieron todos alineados en la bella list alfbetica de a CConstiticion. En resumen, el orden de las letras dice {que en los Estados Unidos slo hay contiguidad de et picios abstracts; contemplemos el mapa de les Estados (en Ia primers pigina de Mole): zqué orden seguir? ‘Apenas empieza a moverse, el dedo se embrol, Ja de- ‘daccién huye: Is contiguidad snatural et nul pero [or eso mismo, nace In contigidad potica, muy fue te, obligando a una imagen a sata de Alabama 2 Alas 4a, de Clinton (Kentucky) a Clinton (Indiana), et bajo la prsion de ees verdad de Int formas, dels es one itrales, de las que tods la poesta moderna nos a tnx ensena el poder eurstico: si Alama y Alaska no fueranparientes tan proximos,alfaticamente hablan- do, como se confundivan en esta noche que es a ese tna y es otra, que es simultneay sin embargo dvidida por todovwn da? a casfacion allubéica a veces se completa con otras asocaciones de espacos, gualmente formals. En los Estados Unidos no fatan ciudades del mismo nom- bre; en reac a a verdad de cova human esa cit cunstanci es muy fi sin embargo, el autor de Mobi Tele ha prestada la mayor atencin; en un continente ‘marca por uns criss permanent de identided, la pe nuria de os nombres propios participa profundamente del hecho americano: un continente demasiado geande, tun léxica demasiado pequeno, toda una parte de Ame ries essen lafrotacion extra de as cosy dela ps Inbras. Al vinculr las cudades homénimas, l someter Ta contguidad espacial a una mera identidad fica, eb sutor de Mobile no hace més que manifesta un fccreto de las cosas; y por eso mismo es escritor: ee: citar nose define por el empleo de ls iis especial rads que exhie Ia literatura (dxcurso, poema, concep 1o, rtm, rasgo de ingens, mejor, segin el etslogo perentorio de ino de nuestra eiicos), a no ser que 5 considere la tertura como un objeto de hier, sino por el poder de sorprender, al radear una forms se cual fa, una colusén particular del hombre y dela natura- leza, es decir, un sentido: y en esta esorpresan a forms ula, la forma vela,instrue, sabe, pense, compromete; {ees el motivo de que no pueda tener cto juez que lo. ‘que encuentrssy aqui, lo que encuentra es un determi= nado saber concernente 2 América, Este saber no ests ‘nundiado en terminor intlectuaes, sino de acuerdo con un tabla particular de signos, preisamente esto ts laiterature codigo que hay que acepar desir. A in al eabo, jeaso Mobile es mis dificil de com: render, su saber mae dll de econstrui, que el edi 0 ret6rcoo precossta del siglo xv? Es Gerto que en ‘quella pace elector adits el aprender a ler no pa recia cxorbitante conocer I mitologia ola erica para recibir el sentido de un poems 0 de ws discurso. El orden fragmentario de Mobile ene otro akance. Al detrir en el dacutso I nocin de apart, remite a luna movilidad infnitamente sense de elementos ce- rade, 2Cusles ton estos elementos? Ens no tienen forms no $00 ni ideas, ni imagenes, ni senaciones ni siguera notaciones, ya que no proceden de un provec- to de esttueion de To divin; aqul es una enumeracion ide objetorsgnaléicer, all un cecorte de prensa, ns le js un prrfo de iro, en oto agar la cia de un pros- ecto, en ato Finalmente, menos que todo eo, el nom bre de un helado, el color de un automévil o de una ca ria, incluso un simple nombre propio. Diriase que el. ccritor realign xcatas, toma muestra variadas, sin preter ninguna senein 2 su origen material. Sin em Dargo, eta cata sn forms etable, por angruieas que parezcan al nivel del detalle (puesto que, sin tascen- Aenciaret6rea blo son precisamente eso detalles), ‘uentran paradejicamente na unidad de objet al nivel sis vast que existe, el ms intelectual podriamos de- cir que ¢ el dela historia. Las muestras de unidades se Inacen sifmpre, con una consancia notable, en tes «pa- quetes: los indos, 1890, hoy. La wrepresentacon» que ros da Mobile de Amica dsta pues mucho de ser mo- ernista; es una.cepresentacion profunda, en la que a dimension perspective eté constituida por el pasado Este patado es sin duda corto, sus momentos principa>“; les se tocan, no hay mucha distancia desde el peyot! a los helados Howard Johnson. A decie verdad, por otra parte, ls longitad dela diacronia americana carece de importani; lo importante es que, al mezar incest mente ex abrupt ela de indo, agin sl de 1890, Y los astoméviescoloreados de hoy, el autor percibe y ‘daa percbie América en una perspectiva soar, con ‘esta nica reserva, original cuando se tata de América, ‘que el sueho aqui no et exico, sino histéico: Mobiles Una anarnesis profunda, tanto mas singular por cuanto procede de un francs, e deci de una nacion gue tiene jor sf misma ampia materia que recordar y que se apli ‘a 8 un pais mitoldgicamente eavevor: Mobile deshace 2s le funcibn tradicional dl europeo en América, que ‘onsste en asombrarse en nombre de ss propia pasado, Jaci a sus hermanos» (virales), sino en relacién a fur avecinos» (actus; en homo homin’ lupus, lupus ‘antiene cere relaciones con homo y hominis en la in- ddumentaris lo elementos de un atuendo se asocan se- fin determinadas regs: ponerse un jersey, una cha- ‘ucts de cero es crear entre estas dos pezss uno as0- del sig- tno) en €l a forms ext inceeantemente desbordada por Ja fuera y lovimiento del contenido lo que ocure es ‘que, de hecho, para la concienciasimbolic, el simbo!o 6 mis que unt forma (codifcada) de comunicaién, {bce todo un instrumento (afectivo) de participacion. {a palabra smal hoy a envrjecido un poco; sole re- cemplaairea por sgn o sigacién. Este deslizamiea- to terminolgco teduce un cierto agotamiento de la concienca simbolica, sobre todo en lo concerniente al ‘arcter analgico del sigificatey del signitindo; a pe- sade todo esta concencia sigue siendotpic, mientras Isaacs os mea ea por gor 0 [por oponere sels) por las relacionesformales de os Signos entre f pues la concinci simbalca es esencia- mente negacign de [a forma: en el signo, lo que Te inte rest ex el gnfcado: para ell, el signiieante nunca es is que wn dterninado. Desde el momento en que las formas de ds sgnos «= comparan,o al menos seven de un modo algo com- pacativo, se dale apuicén de uns certs concencia pa Fadia; incuso al nivel él simboo clisic, que es {menos desigado de los signos, si se presenta ln oca- sion de advert Ia variacion de dos formas simbétis, lar otras dimensiones del signo se descubrenrepentina mente; te e por ejemplo el caso de Is oposiionentee (Cove Roja y Media Luna Roja: de una parte, Cuz y Me- dia Lama dejan de mantener una reac slitara con su significado respective (ersanisme e ilaismo), todo se incluye en un sintagma esteeotipado;y de ota parte forman ente sun juego de términos distintves, cada tun de los cuales corcesponde aun signiieadadiferen- te: ha nacido el paradigms La concienciapacadipmtien da, esta llamada es lato soberana dela sigaiiacin: imaginacin de ageimensor, de gedmetes, de prope rio del mundo, en el que se encuentra 2 gusto, puesto aque el home, para significa, soo tiene que legen tee fo que se le presenta ya preetructurado, ya se por su cerebro (en Is hipStess binaries) ya sx por lai ‘ud material de las forms. La imaginacign sntagmit «aya nove (0 ve menos) el sgno en su perspectiva, sino {que lo preven sa extensién: sue vinculs antcedentes © consecueates, los puentes que lanza hacia otros sig: nos; e trata de una imaginacion estemenities, a deta ‘cadena o del red a dindmica de la imagenes tambien qui la de un ensamblamiento de partes méviles, uti= ‘utivas, cuya combinacion produce sentido, o mds gene ralmente un objeto nuevos se trata pes dena imag hacién propiamentefbriative, tambien funciona (el tezmino es flamente ambiguo, puesto que emite ala vee I idea de una rlacion variable ya lade on wo). Tales son (quis) las tes imagnaciones del signe Sia duda es posible vinular 9 cada una deel un de terminado numero de creacions diferentes, en los orde- nes mis varias, pues nada de lo que se constrye hoy ‘nel mundo esapaal sentido ara seguir en el orden de Ta ereacininteletal (recente), ene las obras de ln imaginacion profunds (simbolca), se podr citar Is i= ica biogrfica 0 histrca, la socolgis de as wvsionesy, Taovela east o itrospectiv,y de una manera gene ral las atts o los lenguajessexpresives,postulando un Signifeado toberano,extrado ya sea de wna intriori- 4a, ya sea de una historia. La imaginacion formal (o paradigmatic) implica una atencion agud ala aria- ‘in de una serie de elementos recutrentes; se vinclaré pues aes ipo de imaginacin el seo y os relatos ont- Ficos las obras fuertement terstcs yaguellascuyaes- tics implica el ego de certs enmutaciones (ano ‘eae de Robbe-Grilet, por ejemplo). Lx imaginacin Funcional (0 sntagmitic) aliments finalmente todas at ‘obras cuya fibrcacén, por ensamblaje de elementos iscontinuos y mévilee, constituye lespecticulo mis- ‘mo: la poesia, el teatro pico, la nsca serial y las com posiciones eteuturales, de Mondrian a Bator. 1962, Arguments {LA ACTIVIDAD BSTRUCTURALISTA {Qué ese extrcturlizmo? No et uns eseuela ni si 4uiera un movimiento (al menos todavia'no), puts la Imayoria dels autores que suclen ssoiare a ete temi- no distan mucho de sentirse gados entre sf por un so- lidaridad de doctrinao de combate. Apenas es un Kex- co exractra es un término ya antigua (de orgen an ‘mic o gramitico), hoy may usados todas as ciencas sociales recuren abundantement aye uso de apa labra no puede dstnguir «nadie, a no ser que se poe ‘mice sobte el contenido que se le a; fucone, formas signosy signifcacones no son muckio mis pertinentes hy en dia son palabras de uso comin alas que e sl ty dels que se obtiene todo lo que se quiet, y 40: bre todo camufar el vejoexquema determinsts de la ‘causa del producto; sin duda hay que rementarse 2 tempartjamientos como los de sgnfcame-signifieade y sineronia-acronia para aprosimarse alo que distingue al estracturalsmo de otros modos de pensamiento; el mero porque remite al modelo lingdistco, de origen saussuriano, y que al In de la econcm, ba lingistcn spo? S01 de Senta Mesos Co, as sen el estado actual de las cosas la cencis mista de In estructura; e] segundo, de un modo mis decsvo, porque parece implies una cierta revision de Ta nocion {Se istri, en a mea en quel ies de sineronia (2 pesar de que en Sausure éte sea un concepto sobre todo operstovi) acedita una cirtainmovlizacén del tiempo, y en que la de diacrona tend a repesentar el proctso histrico como una pura sucsion de Formas; tte ultimo emparcjamiento es tanto ms dstntivo a pee ue incl sec tre Tso sea hoy deorigen marxista y que se centre en tor~ role nocian de historia (y 90 de estuctura} de todos ‘n0dos es prabablementee curso serio al xico de a nifcacion (yn al palabra misma, que, paradéjiae ‘mente, no es nada ditingva), en el que hay que ver en {Ecntiva el signa hablado del extractaralismo: svg Tamosa quien emplee sigifante significado, sincronta 7 diacronia,sabremos sila visidn estuetualsa est ‘constitu, Elo vid para el satlenginj incl, que usa epctamente concepts moses Pe como ible. La operscién del recorte produce as un primer ftado dispeso del simulcro, pero las unidades de la ‘structura en modo alguna ton ansrguicas: antes de ser Aistribuidasy encetadas ea la coitinuidad de la com> posicidn, eada una forms con so propia reserva virtual {un arganisma itcligente, sometide un principio me” tor soberano el de a menor diferencia. ‘Una vee propucstas las widades, el hombre etruc- tral debe descubriles 0 fale reglas de aociaion: th esa actividad dl ensamblae, que suede al aet- vided de Imada. Como es sabio, la sintais dels at- texy de los dscursor es extemademente variada; pero To que encontramos en toda obra de proyecto estructa- ta es sumisin a obligaciones egulares, cuyo form lstho, impropiemente ieriminado, imports mucho menos que la exadiidads pues lo que se produce en este tsadio Segundo dela actividad de simalacro es una es pesie de combate conta el snr, ta en causa de que Ins obligaiones de recurrencia de In unidades tengan un walr casi demidigico: pore retorao regular de las ubidadesy de lo arociciones de undades, la obra pa- rece consruids, es decir, tad de sentido; los lingis- tas llaman a ents rela de combinacién forme, Sera ‘muy interesante mantener este empleo rigutoso de una palabra demasiado empleads a forme, se ha dicho, es lo que permite aI contiguidn de las uniades no aps- reer como un puro efecto del sar ls obra de rt es Lo que el hombre aranca al ana. lo quieé permita com- render, de uns parte, por qué las obras llamada no f= iuratras son, a pesae de todo, obras en el mayor grado, Ja que el pensamiento humano nose inscribe en la ana- logla dels copia y de loe moos, sina en a regular dad dels conjuntos,y de otra pate, por qué ests m= ‘mas obras se muesttan precamsente com fortis y por ello mismo ims a los que no adviesten en ells hinguns forma ante un euadre abstacto, Keuschet in- siseuiblemente se equtoca al no ver mas que el astro ‘dena cola de asno pseal por fa tela; al menos abe a fs manera que el arte es una cera congista del azar (olvia sencillamente que tods rela se aprende ants se quiere apical como desir) El simlaco ai edfcado no devuclve el mundo tl ‘como lo hatomado,y ln importanca dl estucturalis- ‘mo reside ahi. En primer lugar, manifesta una catego- ra nueva del objet, que no es ni fo real no racionl, sino lo funcional, vinculindose asia todo un complejo sientfico que se est desarollando en tomo a investiga- ‘nes sobre la informacion. En segundo lugar y sobre todo, saa a plena luz el proceso propiamente humano por el eual os hombres dan sentido a as cosas. esto go nuevo? En cierta medida i evidentemente en ins fins pcs el mando ha cessdo de buscar el sentido de To que se le day de lo que produce lo que es nuevo es tu pensamiento (0 una spodtieas) que buses, mie que asiqnar sentids plenos alos objets que descubre, saber como el sentido es pole, a qué precio y sepin qué vias Incluso podria decirse que el objet del estructura sme no es el hombre rico de cierto tentidos, sno ol hombre fabricador de sentidos, como sn mado alg no fuse el contenido de los setides lo que agoas los Fines semntcas de la humanidad, sino niente el facto por el que se producen estos suntidos,vatlantes histércas, contingentes. Homo sgnficans:éte seria et nuevo hombre dels nvestgacion estractra ‘Segin dectu Hegel? el antiga griego se asombraba de lo natural dela naturale; le prestaba incesantermente ‘ldo, interzogaa el sentido de Is Facnts, de Jae mon- tafas, e los bosques, de las tempestades, sin saber lo ue todos esos objetos le decian de un modo concreto, adveria en el orden vegetal 0 cOsmico un inmenso tee= Dior del sete, al que dio el nombre de un dios: Pan Desde entonees& hoy, ls aatraleza ha camblado, se ha licencia. En términos formales(yyase ha dicho hasta {90 punto la forma cerrads predeteminaba este mun do} la aces pobre, que no esti iluminadas por nin- {guna mirada pois, som ese puro exterior sn el cual la bburguesiay la arstocraia no podelan sentir su ser pro= io (vate el fragmento 31 delos Biens de Fortune, don deel pucblo ve sls grandes vivir una exisencaenfi ‘a, como en un testo} ok pobre son agull «partir elo cual se exste: som el limite constittvo de cerra- ‘mien. ¥naturalmente,en tanto que pura funciones, los hombres del exterior no tienen ninguna esencia. No posible atribuiles inguno de esos caraceres que ‘torgan una exstnciaplena a ls habitants del inte- Flor. un hombre del purblo no es a nei, a distaido, ni vanidos, ni svar, ni glotén (icbmo ibaa se lotén {y avarot}; no es més que una pura tautlogi: un jan heroes wn andinero, un albatil er un alba, eto es todo lo que # puede decir de ellos la nica euslidad doble la unica lamada de ser, que, desde e interior, y missilé desu uilidad (limpiae a jardin, construe une pated), a veces puede reconocérsle, es ser un hombre: 1no unser humano, sino un macho que las mujeres del ‘mundo deseubren exando viven demasada retiradas (Des femones nim. 34): el verduga (el que aplica e or mento} no & en medo algun crue ello impicaria un scaritere]; es sencilamente su joven que tiene ls hhombrosanches, achaparrado, por ota part, de clr, un hombre negro» (Des femmes, nr. 33). H scaricter»e5 una mefor: el desarvlla de un adjetivo. Privado de defnicién (es un puro limit), el [pueblo no puede recibir ni adjetivo, ni carder despa tece pues de discurso. Pore peso mismo éel postlada formal que consegea el encerado lst los Caractere se ‘concentran en la plentud interior del certamient™ a donde se mulipian os caractees, los adjtivos, la situacones, las anedotas. Per esta profs, es, por ecirlo at, ara, paramenteeuslitatva; no es una pro fon del numero; inland de a mandani, aunque Meno de er hasta reventar es un territrio estrecho ye ‘asimente poblado; en else produce un fendmeno del ‘que nuestra sociedades de masa pierden cada vex mis Ja nocin: todo el mundo se conoce, todo el mundo tiene lun nome, Esta familaridad interior, fundada en una {em el sentido de justo temrino madi véase Des bins de fortune rim 47): reemes ot una nueva profesiin de ‘harm a ley hind que prescribe la nmoviidad de as cosas y dele casts. As aparece ene el hbo y el autor tuna especie de dstorsgn sl ve srprendente yejem= pl, sorprendente porque, a pesar de lo esfuertos que lator hace por acomodarse a todo, libro sigue ara Sindolo todo a su paso; ejemplar porgue, al fundar un orden designs en la distancia del testi del testino- io Ia obra parece remitr a une talzaién particular del hombre en el mundo, que se lama precisamente f= teratura En definitva pues, cuando eremos haber Ile ado en La Bruyére a a extemidad mis lejna de noso- tos mismos, un personaje surge bruscamente en eh, personaje que nos conciemne dl modo mis inmediato y que es sncilamente el ert ‘Claro est que nose tras dl wescrbir bien. Hoy en dia reemos quel literatura es una nica a In wee mis pro- finda que le del estoy menos diecta que la el penss- riento; reemos que es un tiempo palabra y pen- siento, pensamienta que se busca a nivel de ss pase bras, palabra que ze mira pensativamente af misma ‘sto La Bruyere? Podtiamos dec qu la primera condicbn de Ia teratura es, aradojicmente ade conseguir un lengua je indirecte: nomibrar en detale las costs 2 fin de no ombrar su sentido ultimo y tener sin embargo ince- santemente este sentido amenazador, designr el mun- 40 como un repertorio de signos de ls que nose dice lo que significa. Alors bien, or una segunda para: jel mejor medio de ser indiecto para un lengua, es teferise lo més eonstantemente posible aloe objets y no a sus conceptos: porque el sentido del objeto sien pre oscil, peo no el del eoneepto; de ahi ia vocacén onersta dela literaia, Ahors bien, Los Ceracters son ‘una admirable coleccién de sustancas, de lugares, de twos, de acitudes;exshconstanemene, el hombre es asimilado por un objeto o un incidente:indumentar lengua, modo de ander, igrinns, colores ates, 05 ‘ros, alimentos, putaje, mele, visitas, bahos, tas ste, Ys €5 sabido que el libro de La Bruyére no tiene hada que ver con in sequedad algebraca de las maximas de La Rochefoucauld, por ejemplo, enteramente fands das en el enuncado de paras esencias humanas at nica de La Bruytre es dstinta: consist en poner enact, tiende siempre» enmascarar el concept bajo a percep- ‘én gueriendo enuneiae que el movil de fs aciones modest no siempre e# forzosamente la modesia La Brapéreinventa en pocss palabras una historia de piso (0 de comida (Aquel que se loa en um placa, con ds dependences para la dot estacones,y va a dormir al Lowe en wn entresueo, etc. Du Mérite., rs. 41), toda verdad comings af como un enigma, el que sep ral cosa desu signfiacion el arte de La Bruytre (y= ‘Demos que el arte es decir, In eae, coincide con e ser mismo de I literatura) consist en estalecer la mayor distancia posible ens a evidenci de los abjetosy de os hechos, por it exe ator inaugura la mayora de ss ‘bservaciones, yin ides que, en definitiva, parece reo: sctivementeclegitos, arreglorles, moverls. La mayor Ae os caractre se constryen pues como una ecuacin, “semantic: a Jo concreto le Fanci del significant; alo abstraction dl signtiades y del uno al otro un ape se, porque nunca S sabe por antcipado el sentido final {que el tor va a soca des cosas que mane. Ta ect smdotica dl feagment estan fuer # cen La Bruyere que puede vincalare sin dificultad a uno {de los dos aspects fandamentaes que el inghista R.Ja- ‘kobson ha distinguido certeramente en todo sistema de sgnos.Jkobson ditingue en el lenguaje un aspects: lectivo (elegir un sgno en una reserva virtual de sgnos similares) y un aspecto combinatorio (encadenar los signos asi elepdos de acuerdo con un discuss; a cada tno de esos aspects corresponde una figura ipica de Jn anigua retérica, por la cul puede se designado: al aspect slectivo, la metifoa, que es susttucén de un Signiticante por tr, teendo ambos mismo sentido, sino el mismo valor al apeeto-combinstorio, I mete nimi, que es desizaaieno, a partic de un easmo Se tido, de un sgno a otros estécamente, el cecurs pre dominante al procedimiento metafrico es Ia base de todas has artes de la varacia: el recurso al procedi ‘mento metonlmico es bate de todas as del relate, De Inecho, un retrato de La Braye tiene una estructura ceminentemente metaforica; La Bruye cg rasgos que tienen el mismo signfiado,y los acum en una me: téfora contin, exyo significado snico se dn al final véase por ejemplo el reteta del rico ye el pobre, al 8- ral del capitulo Der bins de fortune (nm. 83): €0.Gi- tom st enumerao, «on apretado ritmo, toed lor signoe ‘que hacen de €l un ico; en: Pha todos ls dl pobre: ‘vemos asi que todo Jo que ocurre a Gitony a Phédon, aunque en aparienci e algo contedo, propiamente ha biando no pertenece al det del eat; se ata tan 610 de una metifora extend, dela quel propia La Brit 1 dio muy perinentemente Istaria chanda dijo des Ménalque que ast es menos un cardeter particular que una recopilacion de hecho de ditacions (De Foe, ‘num, 7); eniendase por eso que todas las dstraciones ‘numeradat no son realmente ls de un ole hombre ‘siqulera fctcamente nombrado, com se producira en tun reato verdadero (orden metonimico); sino que se ‘rats mis bien de unlésico de I dstaceidn en el. que a se puede clegir sep su gustowe 3530 ms significa vo (orden mtafrico), Quits ast nos aproximemos al rte de La Buyer: el wcardeter es un fab relat, es una netifora que toma 6 aspecto del reato, sn legar a ser- fo verdaderamente (por otra pate, recurdese el despre cio de La Bruyece pore eontr Des ugements nan 52) To iniacto dela Heratura ee vai 8 ambigu,iter- rediario entre la dfiicén y I iusitacon, e! discus ova inceantemente una y ote, sin querer lear a ser ringuna de as dos: ene omen en que cremos cap- tar el sentido clao de un retrato completamente meta- orico (lxico de los rsgos de distracciones), est sentido senos ecapa bajo is sparincias de una historia vivida {on dia dea vida de Ménalgue) Relao frasirado, metsfora enmssarads: eta stua- idm del discus de La Bryere quiztexpliqu le esruc tara forma (lo que antato se lmabs la eomposcin) de Ibs Carer unio de foes pores et samente el fegmento oeupa un lugar inermedio entre la maxima, que es ane metsfora pura, puesto que define (ase La Rochefoucasls el anor propo es el mayor de fos aduladorn) y Ix anécdova, que no es mis que relato: cl discurso se entiende un poco porque La Broyere no et apse de contentarse con un simple eeuacion (sobre tela se expiaal final desu prefcio); pero no tarda en fletenerse, cuando asoma la smienaza de derivar en fi bla La verdad esque te es un término muy peculiat, {que tiene pocos equivalents en nuestra Kiteratura, muy Imbuida de la exelencia de los genros bien éeliita- dos, a palabra en asia la maxima) ola palabra con- tinuada (la novela); sin embargo, también se le pede fencontrat una relerencin prosaca y una referencia s- blime. La referencia prosaica del fragmento seria lo que hoy se lana el serape-ook,reopiacién misclines de rellcones y de informaciones (por ejemplo, de recor de pre) ch on nce an der ado sent: ent leCaatoe son elspa ata undid es tna pct inempora tse Jos pena son como lo Aiton daconins de Wo el amino. a vee sible sero qe boy lamas pa poses por une pro hi csrenln oc des ree apo see tan dscur comin, de esucture metonimin, 7 no metafsies (pra ura dticn de chlo Inbid que pera ponds sabvesion spore a lenguse pore surreal para eben wn ple apna extend sno pote ea mi tna rapmentacin (vase po simple Ta pare a. “hip de Chari fete pot, io dea Beare overt en odo algn tn poo, sos le manere Setrminass compere dena ne pala ‘la: quel eto secre un ae +m tad elses (scarce) yen oto ne src tilidds pots, no ars en tad ca comun dad nf experienc et agent Soi tail dl logy pod ser vrida por Le Braye como hoy en dt por René Char Quiad donde fs Caraceres puedan hoy afectarnos mis 43 a nivel del lengusje (y no del esl}. Ea efecto, en lls ves cémo un hombre leva a cabo una cers ex- periencis de la literatura: el objeto pede parecernos anscrénico, como hemos vito, peo Is palabra dita ‘mucho de elo. Esta experiencia se eliza, asi puede decinse, en tres planos {En primer Inga, en el plano de la institucin mit- fece como si La Bruyére hubiese reflesionsdo ‘uy conscientemente acrea del ter de esa palabra si ‘gular que hoy lamamos iteratura, y que, con una ex prin ae pstancal ue conceptual Haaba ls Shr dl eprint des peta que una Srton dco empresa ie! da dca cosa eo taco um expo deo or, yee capt se prinra camo toa fain sobre hoe wren primers qe nda e princi ape Spe lstontieneBideement,naguells moreno ‘var pola magia que ec se un veo Meee desrvine de jseacon mor La Baye vee pu pans Sn embargo ea al Teed ubmrih por an cop de eicnes me Rena moder ecb un of, ctl 6 un soso ange de desmorslnaro ye de Se ejecta ees (De ong: de pe 3), “Thombecde tesa (ooo tones nas) st abe samo: ym eg ops en une 00 SPU Rundi (Der Ban de one 1) se “ehromet che ro en enor oc Silke qoc exes ura ecg. Sn querer forar ‘odertida de ss ntact, en todo ell in .betpeyec dean enge ingle aver Is jogo prec (o matal er on oma dea poe) y seein mony eset 8 Gale ee Sn cto modo de corre mundo en pl Tee cee gear al el dun abso ee Shnmene wera (te ae Elo nos conduce al segundo plano dea experiencia titers, que eel compromiso del escrtor en as pa bran, Hablando de sus predecesores (Malberbe y Bil> ach; La Bruyere observa sha puesto en el dscuso todo ‘onde 9 toda a wide de que es capa (que puede hin eto conduceinsenilemente a poner en esprit El vespity equi designa precsamente una especie de in- feniidad intermedia entre la intlignciay la ténica Tres en efecto la literatura: un pensamiento formado or ls plas, un sentido surgi de fom. Fava Erupts ser exrtr ex reer queen certo sei fondo depend de frm, que tmbsjandoy moi caro letras de a frm; termine Por Po orignal del een tenutnen, un sete nce iene por un clog La rue sabe Bien gue se vin del mundo en certo modo wi de terminada para reveling del eames de 5 Sih, y mis ala de starve, por su pulera Personae especie deter del aca gue fe ace Ell fguea yn ain, a ctr yn ‘elit o entra y nolo peconon ‘Aseatirma in cers responsiblid del esi queen eneraidr cents may moderns. Yeo nos ie ala teers dterminaciOn de a experienc tee tnt ripe at cb ee nade "er con lo que hay lsmaros el enggemens Yu eh ‘uel Goce amabe sss, Eien 1s esrtores cscs podan ear conmecios de que imu, ols neo cian ut das es moni, Perosn dtr por clo deer stance Yinclads al mndo lca eto oe parte func, al menos en el eno de ete modermad que comiena conta Bryce, nos vapor decane tc ren que ne el mnde sae modes ym miter evar regan Borge desu respusts, consi cca ani cecinsn Negra lala a rape no ela nae de Fevohicionaro ni sigiers de demsra, como dein tos potas dl nl pasado no tents Ie menor idea de quel servidambe, i epresn, a miter pe diem express en trina plot sn embargo $u descrpcon de lo campesings pose ef lr prof do de un deta, la ha queproyec a rsa so bee a destcha humana es nde, road en ama yori de los nos de un concen cea, impotent fare cptr as asa prs peer a slacione Pe Ete misma conde inde sen a valor atte, ue pesca alex dea ma enn ert, Tiel de la, el errno dipone de ing dere tho Insliin das eracas amanas no es para tn Haber inf: u stb slo et pra de- Sima una perarocib, Et fe fo ie ia La Bre fe po el eth de babe quero seer hpi del Homie lp verdadero fondo 1963, Prefacin LA METAFORA DEL O10, ‘Aungue ls Histone de PCE comport algunos perso ‘sjes nombrados y la nareacién de sus juegos erica, Batile dist macho de haber escrito en este libro a his tori de Simone, de Marcel ode narador (com Sade cscribié Ia historia de Justine o de Juliet) La Hise ‘de YC es verdaderamente a historia de-un objeto Como puede tener historia un objet? Sin dda puede pasar de mano en mano (dando lugar entances a insipi Aas fciones del tipo de Historia de mi pipe 9 Memory critics, sies que existe, depende de tuna aptitud, no de descubir In obra inerrogads, sino por leona decir os caplet pos ble por st propio lengvate. Se tata pes, una vez mis, de una actividad esen- cialmente formal, 90 en el sentido esttico, sino en, Sedo logico del termino. Podrla decise que para la ‘rite, el Unico modo de evita la buena concenca» 0 Ta ema fer dela que se ha hablado al comienzo, consi te en proponeree como fia moral, no descifar el sentido dela obra estudiad, sin reconseuir a easy ls Jeciones de elaboraciin de este sentido; a coneicién de ‘dain rmediatamente que In obra iteraria es un sste- ‘ma semntice muy particular, cuya fnalidad es poner ssentidos en el mundo, pero no sn sentido: obra ‘menos ln que sel llega a mirada crc, y quiz éta sea una defnicisn posible dela sbuena» itratura, In obra nunca es completamente insignificant (miseriosa © sinspiraday), como nunca es completamente clara por asi decir, tiene un sentido supens: se ofece al lector ‘como un sistem significante declarsdo, pro le rei yeeamo objeto significado. Esa especie de decepcion, Sine) sos sits dps ev ontop es dec, Saver eps ened sities sues) {gut ac tc cts No ene igi ‘teams (por deficit uenen sempre sie resign! {Cneen evan sent nia Cal Inreuion qu foe ne ives de un tempo a menado may lrg, ee sentido fol que po dei tv lentil eespecvo, peso gue nase Shovels cmbrg so queda rou ver ha ‘Cminado I obra Por ots pat emo forma el Siguiente eal {sles son mods? Como ya ‘hemos signe ings no exec» (pale Shasta no spree an by), et ormado por teens un cog dg pr os os {amen diganos prs inp les seater ik fen go etn oltarent sobre cea Tost presetcn esun ato sola sremadarente dn Serra cig dl jug dei, dea gs Fla pla) natura (ana, snboli, con “enon to ot sooner snes Ur ee ino sjecones de encadenanint, denote Seay comotcin et mena, odor esos pobmas £ findamertaes de neninlog cn preteen lie fori pn ce to cost Sbjct temo piled, puesto quem stem, ‘mente reaciovles). Sin embargo, eta resistencia invie-"* tarno es insgnifcante: porque ses dif! psiceanalizar 2 Ravine en términos de sustancias, es debido a que la ‘mayor parte de las imigenes racinianas pertenecen & Um especie de fale de 6poc, si se prefiere, 2 un ‘digo general, que fue la lengua retriea de toda una ya ave lo imaginari raciniano noes rs que ve — PRA emnahansinanictnenscmeniunessintinin sins cnntn rns una palabra surgi de este lengua el cardcereoecti> vo de ete imaginaiono le sstae en mad algano un Prcoandlisis sustancial,y soo le obliga a ampliar cnsi- tovided,y este operaciones, una ve terminadssy con samads,remiten a una masa iteligibilida historica, ‘imagen colectiva participa dela misma forma de da sificacin en resumen, una vasa idetidad aba ls fetivdades las imagenes; pero entre los dos quedan fos wpapeless (sociales), y Ios del artista yel sabi ain son may dstntos:aqul estamos ante, ura oposicign ‘aya fuetea mitica reposs sobre una economia vital de ‘uestras sciedades, 2 que el artista tiene por funcion ‘rorczar lo racial ijéndolo en Tos limites de wna insttucin (el warts), ala ver teconociday contenida: formalmente, el artista es, por ast decil, el separado ‘euya separacin misma se asimila a titulo de separacion, Imientras que el sabia (que en el curso de nuestra histo ria ha legado a tener tarmbign este mismo esauto am- Tiguo de excision reconocida: los alqimisas, por ‘jemplo) es hoy wna fgutaplenamente progress Sin ‘anbargo, e= muy posible que la bistovalibereo inven te nuevos proyectos, cleccones desconociss, funciones de las que nuctra sociedad no pucde an tenet ni ides Yo empiezan a car fonteras, sino ene elatista yet sabio, al menos entre el intelectual el artista, Lo que ‘care esque estos ds mito, tn tenaces, etn en Vins, sino de derpazecer, al menos de desplazare; por une parle, un cierto nimero de esritores, de cineastas, de ‘scos, de pintore, se intelectual el saber ya no es tia de un abi estetico;y por air parte (pero esto ex complementaro) Is ienias humanas pierden algo de ls obsesin positivist: el esructuralismo, el reudis- ‘no, incluso el marten, se rrantienen mis por la Cohercncia desu sistem, que por la wprucbas de su de tales se tabsja para eificar una clencia que se incluye 436 misma en su objet, y esta reflexivida infinta es Ts que, en rene, consitye prcismente el arte: cen- cay astereconocen en comin wna reativdad inédita Gel objeto dela mirada, Uns anteopologla nuev, de itibucionesinsospechadas, quid est ya nacendo; se rehace el mapa de hacer hurano, yl forma de esa in- _menearefundicin (per, desde luego, no sucoitenigo) no deja de evocar ef Renacimieno. PK, Usted ajo en «Argumens 6: «Tada obra es dogindtic, yen otro lugar (Arguments 2): El esr torso contaro de un dopmdicaw ;Puee expiar ea contadiin? La obra es siempre dogmtics, porque el lengusje sempre es asertiv, incluso sobee todo cuando $e 0 dea de una nube de precauciones oratories. Une obra hho puede conservar nada de Is ebuena fev de su autor: sus silencos, sus Lamentaciones, sus ingenuidades, sus ‘scripuloe, ss temeres, toda To que haeia eaten bra, nada de todo ello puede pasar al objeto escrito; porque si el autor ce pone a deil, no hace mais que cexhibic lo que quiere que le eean, no sale de wn site: ‘a del teatto, que siempre conminatorio. O sea que ‘noha habido nunca ningtn enguaje gneroso (a gene fosidad es una conduct, n es una pala), porque un lengua generoso munca es nada mas que un lengua arcade por los signos de la geneosidade escrito es tlgien agen se mieg Ia wautetiidad iI cotesa, nie tormento, ai It humanidad, ni siguera el humor de un estilo, pueden vencer ef carcter absoutamente terrorist del lenguse (una ver mis, esl eedter pro ‘cede de I natural sistemtics del enguae, que para fer aeabado, no necesita mis que ser vido, y no Ser verdadero). Pero al miso tiempo escribir (ene sentido curio= samente‘intransitivo del tino), ecibir es un acto ‘que desborda I obr; escribir es peciamente aceptar ‘er co el mundo transforma en dicurso dogmstico ‘una palabra que sin embargo se a querdo (si se ses: critr) hacer depositaria de un sentido ofrecidosesebir dejar que otros ierren por si mismo la propis pala boa de uno, y el escribie 20 es més que una proposiciin de la que nunca se sabe la respuesta. Se eseribe para ‘sstar se leido sin poder sero, esta distancia es, sin buds is que consitaye al escrito 1963, Tel Que. invice B ” 105 10 7 ny 1 167 7 195 201 ns a 259 Pro Er inunde-bjto Literatura objeto eae de Baaelire La ceguers de Made Cae Levon Brechin [Gas enermedsdes det indumenaria etal Titec erat Como rpreentar lo stigue nla vanguadia de que teatro? as taress de a vita breton {Queer nos quem. limo exritor ie [No ay as eeuela Robbert Literatura y meta tengje ‘ieto yl haroco fnebre La Sorcee Zany iterate brerosyPastores a resp de Kaha Sobre La Madre de Brecht Berens y série La erat, hoy Porambas parts Litera ydseonsinuidad xructra del osceroe we a a7 ‘Resumen de Robbe-Griet? La imapinacion designe Ls sctvidad estractrlit LaBrie Lamers del jo Lae do Qi en erie? Literatura y sigaifscon ot

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