Me siento a escribir lo primero que se me venga en mente y en lo
primero en que pienso es en tu recuerdo. Tu linda cara, tus ojos
alegres y tu sonrisa llenaron mi vida de felicidad. Fuiste como un bello amanecer, una tierna ilusin, un fugaz sueo de amor. Que poco tiempo tuve para mirar tus ojos, pero lo suficiente para alojarlos en mi mente y en mi corazn. Y es que conocerte a ti y no quererte es como mirar el sol y vivir en la oscuridad. Sabes... es difcil comprender que no era el momento o que no eras para mi, pero me consuelan los maravillosos instantes que el tiempo me permiti a tu lado y le doy gracias a Dios por conocerte y a la vida por darme la oportunidad de amar. Perdona si he querido llenar de ti el vaco de mi corazn. Pero desde que te conoc t has vuelto a encender la llama que haba estado apagada por mucho tiempo. Hoy quisiera fundir mi alma con la tuya, convertirnos en uno solo y aunque no ests a mi lado nunca mas y a pesar de todo el dolor que siento. Siempre, siempre te recordar como mi ms bella ilusin.