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Biografa
Infancia y Juventud
Aurelio Agustn naci en Tagaste, en el frica romana, el 13 de
noviembre de 354. Su padre, llamado Patricio, era un funcionario
pagano al servicio del Imperio. Su madre, la dulce y abnegada
cristiana Mnica, luego santa, posea un genio intuitivo y educ a su
hijo en su religin, aunque, ciertamente, no lleg a bautizarlo. El nio,
segn l mismo cuenta en sus Confesiones, era irascible, soberbio y
dscolo, aunque excepcionalmente dotado. Romaniano, mecenas y
notable de la ciudad, se hizo cargo de sus estudios, pero Agustn, a
quien repugnaba el griego, prefera pasar su tiempo jugando con
otros mozalbetes. Tard en aplicarse a los estudios, pero lo hizo al fin
porque su deseo de saber era an ms fuerte que su amor por las
distracciones; terminadas las clases de gramtica en su municipio,
estudi las artes liberales en Metauro y despus retrica en Cartago.
A los dieciocho aos, Agustn tuvo su primera concubina, que le dio
un hijo al que pusieron por nombre Adeodato. Los excesos de ese
"pilago de maldades" continuaron y se incrementaron con una
aficin desmesurada por el teatro y otros espectculos pblicos y la
comisin de algunos robos; esta vida le hizo renegar de la religin de
su madre. Su primera lectura de las Escrituras le decepcion y
acentu su desconfianza hacia una fe impuesta y no fundada en la
razn. Sus intereses le inclinaban hacia la filosofa, y en este territorio
encontr acomodo durante algn tiempo en el escepticismo
moderado, doctrina que obviamente no poda satisfacer sus
exigencias de verdad.
Maniqueo y luego Escptico
Sin embargo, el hecho fundamental en la vida de San Agustn de
Hipona en estos aos es su adhesin al dogma maniqueo; su
preocupacin por el problema del mal, que lo acompaara toda su
vida, fue determinante en su adhesin al maniquesmo, la religin de
moda en aquella poca. Los maniqueos presentaban dos sustancias
opuestas, una buena (la luz) y otra mala (las tinieblas), eternas e
irreductibles. Era preciso conocer el aspecto bueno y luminoso que
cada hombre posee y vivir de acuerdo con l para alcanzar la
salvacin.
A San Agustn le seduca este dualismo y la fcil explicacin del mal y
de las pasiones que comportaba, pues ya por aquel entonces eran