YVES M.-J.CONGAR EL ESP{RITU SANTO BARCELONA EDITORIAL HERDER 1988 Vert estas ty A id noe "Ye Goro tos Pp Sa HS eater e ten es 1 ive gen + Go, og eee Haat (© 1960 Ler Bon be Car, Prt © 18 Boral ede $4, Bane ~ san wastes te ISON 4254309. sion debt nba i Sabi Pare 0 5 Gui | Raa 80 - PacesINDICE Introduccion general plincsén 6 slgunot iéminon LIBRO FRIMERO: EL. ESPIRITU SANTO EN LA 2. amora?, De entre Jos carismas, el mis tatado es el de Ja profecia, La Didabhe dedica gran expacio En Ja Iglesia antigua sia, La profecia deberé acompatarla dorante toda su historia hasta final . Si san Pablo habia sefatado reglas del buen uso de los pnewmatika, ‘hay motivos para ver una oposicién ‘cién — entre is texto de antropolopia epiitval a la ‘vamenie, el obispo era consideradoel Espiritu ariamas y el papel que te les atribuye — es ifeciaa — explica que, cuando Montano co- hacia el atio 172, se viera rodeado de una aten. En Ia Inlesia antigua a cnueva profecias, Pero esto trala consigo un peligro, ncebir y edificar la vida de la Iglesia, gozan de carismas profttic a Y que, por Ta virtud del Espi- rita, hablan todas las lenguas; revelan, mass, aflade: porque «quien lo espiritu con él y un cuerpo espiritual>®. de esto a Novaciano, contemporineo de antes de su cisma, es decir, antes del de teologia o de eclesiologia del Es ue dio tos dicipulos ef dan de no tomer, por el nombre Doderes del mundo ni lox tornenten), ests mind Eaplit hace como fore, 0 In expose de Cristo, In Iglea, sista profetas eCambié —y tal vez 2 peor— Ia situacién después de la paz de Constantino? Es cierto que los favores otorgados a la Iglesia por Constantino y sus sucesores entraflaban una cierta relajacion de Ia ‘que son testigos tos padres del siglo rv que lamentan tal situacidn®, Los carismas extraordinerios y mis o menos milagrosos parecen darse en menor abundancia ®. A menudo, se ha presentado a la corriente ‘mondstica como la que toma el testigo del mértir; se Ia ba presentado como una protesta, como un ctistianismo excatol6gico opuesto al Siglo; como desatio frente a una Iglesia demasiado carnalmente. po fen Vrale et jause réforme dant Tiger, Pans Verdaderas y felts reformar en la Teles, Estudios En ta Iglesia antigua derma, testa por i amen tunianinne Bs cto que ot monaguismo representa, en st alate, en forma de vida y en sus formas de avtoriad, una fuera espirial orginal, relativamente independiente de lo que Tertulano lamaba la Iglesia ecoleccion de los obigpors. Encontaremos més de uta vez textiooaion de un pat Cémo no reconocerlas en un sen Martin (t 397), en un san Pa- tricio (f 460)? Una tradicién los ha relacionado, Escuchemos a Patti= cio mismo en su ®, 0: ‘<\Que rex pondast Por nosotros los sanctt vate, hoy como antafo, los que futon vomo Ix boca y érgano del Espiritu Santol> SO. 2s excttlo Briana, e.62: ckado por J. Cheval, op city». 60% 41 Tid, 6 37: eiado en p. 414, ad ee 190 0 HACIA UNA TEOLOGIA Y UN DOGMA ACERCA DE LA TERCERA PERSONA ida a ta experiencia tianos, en Iglesia, tienen del Exprita, En una pégina otiebre, san Gregorio Nazianceno, muerte después de haber sido patriarca de Constantinopla en el afio 390, puso de ma: aifesto el lento progreso de la revelacién del misterio de Dios 2 lo largo del Antiguo Testamento, después en el Nuevo y en la misma reflexi6n cristiana: te "abate, Soto), Par 1957 4 is, A. Orbe, La eologa de’ pine Santo, IV, Roma 198 101de Ia Trinidad Dumisara a los que ‘Cheol. V), 26: PG 36, 161) Ch Ane 147 D; «8. Chr» 1i8 p62. redacaba au erangel, pero fueron proouniadas pot le ee te labras atribuidas al Seffor resucitado? Los exegetas te a ‘os En Ireneo aparece desartotiada en una confesién de fe'en la que se fexpresa una catequesis: En primer lugar, ella (In fe) recomisnda que nos acordanos de que hemos ‘eebido ol bautiomo para Is remisioa de nuestros pesados etal nombe de tee Padre y en el nombre de Jesus, ol hijo de Dior eocsrtedo, mannose ‘ado, yen el Espirit Seato de Dios. ‘ Por esta raz6a, en nuestro nuewo nec tes antes (@ bostima), ave nos ios Padre por medio de i Hilo e al boutimo se realisn por ‘acin dl macro nacizns co ‘int i6o en cap, de ta edi. de texto contin de le sig ‘de Dios ton conducidos al Ver warts Acerce de la tercera Persona En Oriente, Is hereia de Macedonio y de Jos «pneumatémacos', Jos enemigos del Espiritu Santo, suscitaron la reaccién de los doctores ortodoxos. Para los «pneumatémacos», el Espiritu era una fuerza, un instrumento de Dios, creado para actuar en nosotros y en el mundo. ‘Dios mismo y de su ser, Ta reaccién de Atanasio, . En sus Cartas a Serapién entre concluye, de la férmula bautismal, que el Expl Padre y'con el Hijo la misma divinidad, en la unidad de una misma sustancia®. San Basilio (t 379), tomando la argumentacié arroll6 en grado sumo la posicién tradicional que si doxologia se justfica por Ja Escritura y por la tr argumenta como To hace en muchas cartas de la misma 6p preciso ser bautizado segin la forma que se ha recibido, creer como ‘0 es bautizado, alabar como se cree. Basilio evita lamar expresamente Dios al Espiritu, ya san Atanasio lo habla evitado. Y esto por dos motives: por una parte, cuando se habla de Dios es preciso perma- necer fieles a los términos de las Sagradas Escrituras; por otra parte, 103ologis y un dogma > como la fe de Nicea habia confndido a los sonvocado en Constantinopla por los emperadores Gra \dosio t reunié a 150 obigpos ortodoxos y complets la fe rticulo del Espiritu Santo, en Ia linea de Atanasio . No se le decia «Dios» ni al papa Dimaso ¥ @ otros obispos de Occidente, los obispos, reunides de nuevo en Constantinopla, exponian Ia obra del concilio empleando los témmtinos ‘ousia mila, aktisto kai homo-ousio kal sunaidio triadi, una sustancia, 4a Trinidad increada, consustancial y eterna, Asi es nuestra fe. La roclamamos cada domingo con esto simbolo llamado niceno-constan- inopolinato, que nos viene de Atanasi idres. Por aquellos mismos aos, el papa Démaso formu. misma fe: desde 374, en su carta Ea gratia, drigida a los obispos orientales. En el 382 —tal es la fecha mis comdamente ad. ‘mitida— reunfa un sinodo en Roma que, en 24 cinones, formulaba exactamente la misma fe que los padres de Constantinopla En Ia perspectiva de los padres orientales, y también para nosotros, 9 trataba no sélo de la verdad de. ‘COD, p, 25.0, {Care Bs erate: DSch 145; Synode, 2% 152477. Seguinos las fechas de colecign, Ch. Pletsi (Roma christians... Roma 1976, p. Bais) ita exon . Acerea de la trcera Persona orientales: el Espiritu Santo es Dios porque realiza lo que slo Dios puede obrar ”, mocieran un progreso decisivo. ¥ esto a pesar de que fa teologla de este mismo Tertuiano quedé en lun estadio que no es satisfactorio #. Tambié al bantismo, en la que confesamos al En el latin de Tertuliano, substantia y persona se entendian per- fectamente, aunque el segundo término —que evo empetiado — podia favorecer el modalismo (pero fl sentido juridico de indi1) La epiclesis 0 invocacién it Santo sobre el pan y el vino ofrecidos existia ya (ef. la ipo, a Ceiewels Vv 7- de san Cio de Jrulta, sor Juan, La Hamada titorgia cl problema de Ia epiclests, en un libro posterior. 2) 1 Crit, Se abe que la reaccign antasiana favoreis esta. préctica (tesis y articulos de J.A. Jungmann). tar presentar una historia del dogma pneuma- ria necesario presentar a san Hilario ({ imo (th. 398), a 106 Yy actia, de manera particular, en ‘6a, bautismo, confirmacién, encaris invocacién para que la realidad deJay un dogma wado = Agustin y al que és le Jos platénicoss, habla escrito: 10 del Padre del Hit rocesée el Hi, res el Esp Santo Agustin parte del hecho de que determinados atributes son co- anes al Padre y al Hijo, no les oponen al les distinguen, Ast, la boo. {seria esto el Espiritu Santo? Agustin no se atreve ‘ata de propiedades de ia esencia. Pero Agustin no que puede verse todavia en algunos sitios. El obispo de Hipona’ {uch més firme y preciso en sa comentario de Jn 1613, del que foms tode una pagina en su De Trinitate®. Tl Padre no es Poure més que del Hijo y el Hijo Espiritu es ef Espirita de los Mt 10.20 y Rom 8,11 no ¢s Hijo més que 5 dos, it = : ios del Pade (memoria) © del Hijo (intelligent) «Se ha Parte eg Nag en su esencia esas tres perfecciones»™. Existe un sentido general o it tin ita scrtura aplcan el nombre de amor al Bap Sots, Agustin ott ¥ alien Un 4749; Rom 55% Briten otros jemplos en Tov que Me Rocio sae ‘lio mine toto on tn spo ‘some en ol sentido restringido y propio: asi ala Iey> 0

culznes Ia hemos rel a ‘oat yr "por bea foe ie ‘ole or iar ‘s en ela ca Ia congrenac In rem ino ea el ‘as imagenes de la Trinidad que Agustin ha des- . ma ente interesantes para nusstro tema, En los libros =e [Nos encontramos aqui en Ia entratia de la eclesiclogia de san Agus: jo hemos puesto de manifiesto en otro lugar®, Agustin ve elesia como dos niveles o dos drbitas, el de In communio sa- im, que es obra de Cristo, y el de la societas sanctorum, Expirity Santo, A esta entrafia denomina Agustin eccle- tas, caritas, pax y también columba, porque sa prin- ‘1 Espiritu Santo. Bste hace en la Iglesia to que el alma rea- teresantes; sirven para percibir Verbo y la del Espiritu, entrem teologia y un dogma izando la terminologia de nuestros dias dirfa- Santo®, Su visién alcanza una lad verdaderamente ‘eo-légica: Dios quiere reanimos a to- por ei mismo Espiritu que es el tazo entre el Padre y el lecir, cin Spiritu Seneto, quo in unum Ecclesia congregatur» 2. ‘misién del Espiritu Santo en la Iglesia y en nuestra vida nal de gracia es inegablemente importante. Agustin habla cono- a Jos por medio de Marius Victorinus. Sin duda de ellos Ta idea del retorno del alma a su fuente, el regressus Tomas de Aquino estructurara su sintesis siguiendo el esquema cares. us reditus). El Espiritu, téemino y sello de la fecundidad intradivina, nosotros, es también el principio de nuestro retorno al Padre por el Hijo, Es, en profundidad, el deseo que nos mueve hacia el Padre y que nos hace desembocar en él. eDouee re Quiescat in Tes unauaire de Temple chee 8. 454 8 464); De Trint, XV, 21, 48