Está en la página 1de 4
Bol Ker, Sincis. oka. de Jerson {prodigio ‘es inconcebible, nunca visto. Por eonsiguiente, no hay jo verosimil que nos halague con esta esperanza. Yo deseo mis que otro alguno ver formar en Amiérica la més grande nacién del mundo, menos por su extensién que fos med y gone “Atmgue espro ® ix perfecein. del wo 0 de mul paiva, no puedo persuadiriae qua al Nuevo Mundo ‘dl momento regio por una gran como es ime teed * non deseo ans monsrgula imposible. Los abusos que a nuestra regeneracién seria infructnosa. Los estados ame- menester de los cuidados de gobierngs paternales que Suen las lagasy las heridas dl -y Ja guerra. La me- sal pt por Seemploy seria México, que es la tinica que puede sopace aie hase cinta de punto céntrico para Tole los cxtremos de ete visi’ contigesee, eno continuarian tots ete 7am ees a Pa get vida, anime, Pee los resortes ae publica, corrija, Y Betfeocone al Nuevo Mundo, seria necesario que tuviese las facultades de un Dios, y cuando menos las Iuces y virtades de todos los hombres. El espirtn de partido que, al presente, ata nuestros estadoe ‘se encenderfa entonces con mayor encon: ausente la Fonte del poder, que Gnicamente pucte reprimirlo. Ademis los magnates de las capitales no sufririan la preponderancia de los hetropolitanos, 2 quienes considerarian: como a otros tantos tira- ‘nos: ‘sus celos llegarian hasta el: punto de comparar @ éstos con Jes odiosos espaiioles. En fin, una monarguia semejante serfa un tls dsforme, que su propio peso desplomarta a ls menor con- whet Patan Tadepenticnts entre a gebersodes por entre si, por “antes nionacas. Bday de weve ca care o prime, ak ‘América comporta la ereacion de diecisiete naciones; to 2 lo segundo, qunque es més fécil conseguirlo, es ‘gpsee"atl, y asi no soy de la opinién de las monarquias ameri- es. He ‘aqui mis razones: el interés bien de una se circunscribe en la esfera de su conservacién, pros- y gloria. No ejerciendo la libertad imperio, porque es gimente su opuesto, ningiin estimulo excita a los republica- 68 Dees eee ee nos a extender los términos de su nacién, en detrimento de sus propios medios, con el tinico objeto de hacer participar a sus vecinos de una constitucién liberal. Ningin derecho adquieren, 1a ventaja sacan venciéndolos; a menos que los reduzcan Sionias, conquistas 0 aliados, Siguendo el ejemplo de Roma. ‘Maximas y ejemplos tales, estén en oposicién directa con los prin- cipios de justicia de los sistemas republicanos; y aun diré més, en oposicién manifiesta con los intereses de sus ciudadanos: porque un estado demasiado extenso en si mismo o por sus dependen- cias, al cabo viene en decadencia y convierte su forma libre en otra tirénica; relaja los principios que deben conservarla y ocurre por tiltimo al despotismo. El distintivo de las pequefias repiblicas es la permanencia, el de las grandes es vario; pero siempre se inclina al imperio. Casi todas Jas primeras han tenido una larga duracién; de las segundas s6lo Roma se mantuvo algunos siglos, pero fue porque era republica la capital y no lo era el resto de sus dominios, que se gobernaban por leyes e instituciones dife- rentes. Muy contraria es la politica de un rey cuya inclinacién cons- tante se dirige al aumento de sus posesiones, riquezas y faculta- des: con razén, porque su autoridad crece con estas adquisiciones, tanto con respecto a sus vecinos como a sus propios vasallos, que temen en él un poder tan formidable cuanto es su imperio, que se comer pe moti el pea ee cg. Por estas Comey spake peck sre # fan a los reinos; Sores ee Sue dar se omiftuattor br mie dele Europa. No convengo en el sistema federal entre Jos populares y re- tativos, por ser demasiado perfecto y exigir virtudes y ta- entos politicos muy euperiores a los nuestros; por igual razén rehiiso la monarquia mixta de aristocracia y democracia, que tanta fortuna y ha procurado a la Inglaterra. No sién- donos posible lograr entre las repiblicas y monarquias lo més perfecto y acabado, evitemos caer en anarquias demagégicas, o en tiranias monécratas. Busquemos un medio entre extremos ‘opuestos, que nos conducirian a los mismos escollos, a la infelici- y al deshonor. Voy 1 arriesgar el resultado de mis cavilacio- nes cabre le suerte utara de le América: no la mejor sino Ja que sea més asequible. 69 zPor la naturaleza de las localidades, riquezas, poblaciones tavicter de los mexicanos, imagino que intentaréa a) principio ee tepiiblica representativa, en la cual tenga grandes ones el poder concentréndolo en un individu qe si desempefia sus con acierto y justicia, casi natu- tacos vendré a conservar su autoridad vitalicia. Si su incapa- © violenta administracién excita una conmocién popular ‘qe -triunfe, este. mismo | ejecutivo quizds. se difundiré en pa asamblea. Si el.partido preponderante es militar o aristocrs- Ee: Probablemente una monarqufa. que al principio seré itada y constitucional, y después inevitabl in ftada | Ly dest lemente dectinard en ta, puss debemos convenir en gus nats hay més df en orden itico que la conservacién de una monarquia mixta; {también ex preciso convenir en que sélo un tan patriota Como el inglés es capaz de contener la gutoridad de un rey, y de sostener el espfritu de libertad bajo un cetro y una corona. Los estados del istmo de Panamé hasta Guatemala formarin quiz una asociaci6n. Esta magnifica posicién entre los dos gran- les mares podr4 ser con el fiempo el emporio del universo; sus canales acortardn las distancias del mundo; estrechiargn los Tazos famercales de Europa, América y Asta; tracrdn a tan feliz region ie tt r,s cute pine | globo. jAcaso sélo alli podré la tierra como prete - rh oe fuese Bizancio Iz del antiguo hemisferio! eee ueva Granada se unird con Venezuela, si Il a conve fine ven formar una replica central, cuya capital fea! Marecai- poco woe nueva ciudad que, con el nombre de Eas Casas. en hs oe héroe de la filantropfa, se Funde entre los confines le ambos paises. en el soberbio puerto de Bahfa-honda, Esta po. sicién, aunque ‘desconocida;1es mds. ventajosa por todos respectos. Sw acceso es facil y su situaciém tan:fuerte que puede hacerse inexpugnable. Posee un clima puro y saludable, un territorio tan propio para: Ia agricultura como para Ia cria de ganado, y una |

También podría gustarte