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: i i i Vera Pina: Lom Cine etnografico: tecnologia, practica y teoria antropoldgica* Paul Henley SAR DEL esa del generac pone A eittie ieom m pera nies cogs, cine que 4 at margn dl proyecto antopoigic duane todo cus del sig psd Sin marge an combi tacin de aac tenis cambios edetesen ls paradigmatic en la antopcoa fee ahora la poxbildad de una mayor interac dl cne dentro delsinvexgacin eno. pene acl! pre tere entific la Base ara ext ncorporcin tia ylct gus des anes prt por xls «line spe ila ahora como un medio page= nerarel ententimint nog vet meee: Director dl Grand Cente for Visa Anti ology ena Univers de Manchester Desacats, sm. 8 invierne 2001, pp.7-36 * te areas glen en ings con “tho ganic Fm Technology Paces Anthro Thea en Ve opal v1 ao oa pp aor 38 Se ube on ris de sto Tadcein de ibe Maran y Hs Reyes re "ids por Vira Nveloy Aes Noa. "aia tos geese una ones pablis n honor Cienamens, le dina ns imporancia ee rods de sine pede rca co sian dea prac de x inignesn general en anopelogs a qe. cmo ssp toga solic un mento mucho meno recunt cn ableaons anropologis a arte dea dade W206 ie, to: MacDougal 7 Desacatos cn la conclusin dela segunda eicin de infayentebi- to eitorial, Prins of Visual Anthropology Principe dela antrpolgia visual. Aqut apuntaal hecho simple y lano de que a mayoria de os antopélogos ain siete, un siglo después de Haddon, que pueden skanzar sus tetas profsionales sin usa fotografla de ning tipo (Gockngs, 1995: 507) Sibienexsten buenas azones para quedl cine se haya ‘quedado al margen de a investigacon etnogrfcaen el transurs del siglo pasado ay a su ver razones igual ‘mente buenas para ter que esto cambiar pronto: toda Inevidenciasugiere que una combinacién fruta de pa raigmas tric cambiantes en a antropologa yo re- clones adlanostecnolgicosfnalmentebrindarin ls eondicones que pueden resulta en la ampliaadopcin el cine como un medio importante de la investigacion ctnogrdfica, logrando asi cumplin a in, as espeancas de Haddon. os adelantostecnoligicos que nspitanoptinismo son evidentespaatodsypuden resume ripidamen- ‘te. En esencia consisten en el desplazamiento de la tecno- lopa de pelicula de 16 mm por una combinacion cada ‘er ms interdependiente dea tecnologia de video y de ‘computadora. Mientras exsen bases para lament este proceso—sobe todo porque calidad de imagen de a pelicula de 6 mm es muy superior ala dels medio lecttnicor—, sin dada la nueva tecnologia a faita- doen gran medida a produccién de peliculas etnoget- ‘cas ens insttucones academics. Las cimaras de video son mis ficies de usary mis barat que ls de cine, yl tecnologia gal halevado as normas de calidad téeni- «ade transmis laleane presupusal de muchasins- ttucones academics, Una vex reuidas, bs imgenes ‘visuals son ahora mas files ybaratas de manipula, a seaencuaros de edicién no lineakes en computadoras personales, Asimismo, la calidad tcnica de proyecion ha mejorado mucho en es times aos E desarello de los hipermedios nos permite utilizar imagenes vise, yea jas oen movisento, junto con textos grficos. Almismo tiempo la expansin vertignosa dela Internet promt la posbilidad de bajar material exgenoy, sas consideracones de derechos de ator lo permite, yusta- poneroa nuestro propio material de diversas mancras. wd (Quedan algunos problemas pricticos por resolver. La axlqusicion de los conocimientos propos del cine sigue siendo esencial ytardada.Actualmente,elconocimiento téenico necsario para hacer peliculas es quiza menor a Uo que sla ser. No obstant, atin se equiere de un gra- do considerable de experiencia técnica, a peicia en a direcciin yen siguen siendo tan importantes como siempre. Hoy en dia a demanda de oportunidades para adquirir dichos conocimientos es mayor que la oferta, como lo sabermos muy bien ene Granada Centre, tro gran problema es que en la actualidad no existe un me- dio saisfactrio de almacengje para el vdeo. De acuerdo con ls expetos técncos, el deterioro puede comenzar trasun fo y cirtamenteafectaréatodaslascintasden- tro de diez aos, Paree improbable que cualquier cinta srabada hoy se pueda ver dentro de so aos, aunque la tecnologia de reproduccn habe’ cambiado mucho Entonces, todas las videotscas que se forman asidus- mente en los departamentos de antropologia en todo el ‘mundo tienen una eorta vida por delante, Todo esto puede contrastase desfavorablemente con el hecho de aque las peliculas de 16 mm producidas en la década de ago atin pueden proyectarse hoy en dia sin mucha dil caltod. Quiza sea posible sobreponerse a estos proble- ‘mas de almacenaje transfiendo el materia a otro medio, inclusive, ionicamente, ala pelicula, aunque sigue sen- «do un proceso muy costoso, Pero en este caso tambien tecnologia digital puede resultar mis satisfctoria que el sistema de vdeo anélogo, que esti siendo desplazado rpidamente parte deest tm punto a mayor de os prole- :mas teenolgics asocados eon la produccién de pe lila etnogriticas han sito superados en gran medida Pesea toda I intensadiscusion sobre cl video digital, a Internet, ol gran potencal proporcionado por ls capa- cidades de almacenaje de diferentes soportes expresado en términos de megabytes, terabytes ¢ inclusive peta bytes, no debe cogarnos al hecho fundamental de que si cline etnogrifio ha de wolverse deimportancia central a lantropologia, su estatus tedrico tiene que artiulase «de manera mas general enterminos relacionados con las inquitudes teicasy metodolgicas dela antropologia Quiz el aparato es indispensable pero no es sfiiente Desacatos cn si mismo: esl tuna exposici tesa razonada para que el cine etno- rico sea aceptado fnalmente como una actividad acs démicavalosa vidente que también es necesaria CINEYTEORIA EN LA ANTROPOLOGIA, Para algunos defensors del cine etnogefico, la inca manera en que pudierainsribirse dentro de lv antro- plogia seria que a disciplina misma cambiara radical ‘mente. Esta opinién se ha asociad con las ambiciosas propuestas por desarolla un lenguae visual que permi- ta una forma de entendimiento antropol6gico que est _misll del poser de las palabras. En una temprana ein fluyente disertacin, Jay Ruby, uno de fos mis articula dosde estos defensoves, sugiid que dela mista maneea nla cua las cineastas radicals tales como Eisenstein y Godard han quer hacer peliculas revolucionaris, no ‘sé peliculas sobre a evolu as tambien losanto- pélogos deberian asprara hacer peliculas antropologi- cas més que peliculas sobre la antropoogia (Ruby, 1975) Sibien aborda la cuestin desde un dngulo un tanto di- ferent, mis recentemente David MacDougall también hizo un lamado por un serio replanteamiento de as 2 tegoriasantropoligicas dl eonocimiento con el fin de permitir un cambio dl pensamiento antropolgico ba sado en l palabra y oracion a uno basado en la imagen y seevencia” (MacDougall, 1997293. ‘Admito que me parece citclconcebircémo se vera ‘un Jengusje visual especificamente antropoligic, Qué forma tomaria la analgia antropoldgica de la teoris de Eisenstein del montajo? MacDougall aporta algunos da tos: los medios vsualesutilizan la“implicacion, a reso nancia visual. la identificacion y la perspectivacambian- te": en los érminos de Bertrand Russel, nos permiten construirel conocimiento a partir de una forma de “f rmiiaridad” mis que de “descripcion’; es posible elabo- rarel detalles sacrificarel efecto general de modo que, tal como la poesia en et dominio verbal, os complejos culturales puedan entenderse como totalidades mis «que come fragmentos la metfora casi siempre esti pre= sente,vnculando.alosamibientes ya los objets con los dap, uti Estrada sentimentos, las accionesy los estados mentale; enton ces los medios visuals ffecen caminosa otros sentdos que aquellos akcanzados por lo puramente verbal, re uiriendo respuestas"psicoégicas 0 cinesttcas” ade _mis de interpretativas (MacDougall 1997: 286-288) Si bien todas éstas pueden ser caracersticas precisas de a manera en la cl Jos medios visuals imparten el conocimiento del mundo, ain no suman en i mismas tun lenguaje visual especiticamente antropolgico, Parte de a diticultad agus, sospecho, es que la antropologia es cn i proverbialmente dif de dfinr puesto que toma muchas formas dstntas en tod el mundo ya teavés del tiempo. En vista de esta difcultad, me parece mis ficil suscribir el argumento mis pragmitico le MacDougall 4que, mis que hacer campana por una “antropologia visual madura, con sus principios antropolégicos ens Sitio’ deberiamos ver qué princpios emergen “cuando losinvestigadores de campo. en efecto, intentanrepantear lnantropologia usando un medio visual” (1997: 293).Sin embargo, es evidente que los investigadores de campo Desacatos antropoligios slo se verininlinados a Hevarse una cimara sicreen que esto puede product resultados que les scan ities. Sibien par la generacén pionera de an- ‘rop6logos fue fil asignar un papel para sus cimaras, dada su concepeién de la discipina, posteriormentefal- ‘Gelinterés en tanto cambiaba el paradigms dominante Fue hasta la década pasada” que este paradigma domi: nante cami de nueva cuenta, de tal suerte queel us de Jos medios visuals como medios de investigacin ant. pologica encontraron cabida El entusiasmoinicial de aquellos como Haddon, Spen: «ery Boas se basaba ena firme creencia del valor dela ct mara como un medio objetivo de documentacin visual Un siglo mis tarde, la mayora de los antropelogos pen sarian que dicha ereenca es un tanto ingen ibien es posible abogar porel cine en la investgacin emografica «es cierto que ahora no se hava bajo la base de que lac mata puede producir datos objetivos y‘centifcos” Pero ‘en esos primeros aos, el papel que Had. don ysus contempordneos otorgaban a cimara seinsrbia ene caricter dstntivo lei lide por ator ombud: coma ct poscncirar Ne) Desacatos explorado estos asuntos por mucho mis tempo que los escritoresetnogitins. Quiz el mejor ejemplo de esto se encuentra en Chronic ofa Summer [Crénica de era ro) de Fea Rouchy Edgar Morin. Esta pelicula seetrens en 1960, al menos dos décadas antes de que se puseran «de moda las inguietudes sobre asunos de representacin entre los escritores etnografens. La conciencia precoz que desarolaron los cincastas antropoldgicos en torno a asuntos de representacion fue simplemente una consecuencia de la naturaleza de su actividad, Pueshay que reconocer queel cine esen gene ral una actividad mucho mis invasora que otras formas de investigacion de campo antropokdgica. Como tl tie- ne le capacidad de traer aa superficie ls amibigiedades enlasrelaciones de poder entre el observador el obser~ ‘ado de manera mucho misrgida queen el caso de, pon- gamos, un investigidorequipado solo con wna libre ste timo puede tomar unas nota y decir qué hacer con ells después; pero con frecuencia el cineasta tendra «que negociar mucho mas especiicamente Ios trminos en los cuales puede vara cabo su actividad. Por consi- suiente, el nexo de relaciones mediante las cuales seen gendra una representacin tiende a ser més evidente en una pelicula queen un texto escrito, sobre todo ene «aso de una pelicula filmada en e estilo observacionl Con el fn de obtener el consentimiento de los protago- ristas, el cneasta a menudo tiene que aceptar que sus ‘ooes representand sus puntos de vista particulars ten sgn un lugar predominant enl pelicula final, Estas caracersticas generales de la procuccion de peliculas tienden a socavar fs intentos dela autoridad “monofnea” en ls peliculas etnogrias. También lo «sel hecho de que una pelicula es regularmente una re= presentacin mis aierta que un texto escrito et cual, pesar de los mejores intentos de su creador, puede pe ‘manecer recalcitrant al andlissdefinitvo. Las peliculas tienen una calidad que podria llamarse, de manera ite ‘verente,“inscripcidn grues”: esto es los eventos age te,los puntos de vista y demas elementos retratados presentan en una manera tan detallada que por lo gene= ral esisten Ia total dominacién de la interpretacin, inevtablementeligada al iempo,otorgadaa éstos por el cineasta Los cabo sueltos que sobreviven el proceso de cdicién pueden proporcionar las bases para una einter- pretacion, un mejoramiento o de hecho una profonda critica del significado orignal que el cineasta usc darle ala pelicula, Esta einterpretacin puede levarse a cabo muchos aos, décadas 0 incluso un siglo despugs. Aun que esto es obviamente cierto hasta un punto también para los textos escritos, es un efecto particularmente ‘marcado en el cine Hay también un buen nero de eementosenel pro cso de posproduccin que obigan alos cineastas a estar mis conscientesyatentos als convencionesretércas de sat medio de comunicacin delo quelo estan por la gene rallosescrtores Uno de los elementos masimportantes se relacona con el hecho de que mientras la escrtura de un libeo representa regularmente un proceso de ex: pansiny elaboracién de notas de campo, la produccion “ial, Guerrero: Agustin Estrada Desacatos cde una pelicula representa un proceso de sintsis re duccion. Hl cineasa estéentonces abligado a luchar por Ja mayor economia para transmit lo que quiere comu- nicat. Elo a sa vez fomenta una consideracin mis ‘uidadosa dels convenciones mediante as cuales la a licncia eventual “lee” y entender la plicl Pero quis atin mis importante para este proceso ese ‘compromiso continuo con las consecuencias de lo que de manera vida ha sido lamado laveracidad seducto- n° de la imagen fotogeticaindexistica (Banks, 1990), ‘Tedos os cineastas dacumentalesestin muy conscintes dela paradoj establecida po a necesidad de manipular sus propios rushesen a etapa dea edicn de manera que yano provean un recuento literal de fa realidad, mientras al mismo tiempo se mantene fa ius del realism, Poe supuesto,losescrtores etnogrificos también estin com rometidosruinariament con as ransfraciones pro Pias de las verdadesliterales entreteidasen sus notas de ‘ampo, pero hasta la reciente explosion de interés en la _antropologia conserada como una forma de literature, ellos simplemente no le ponian mucha atencion a este proceso (of inter ali Marcus y Cushman, 1982; Van Maa ‘nen, 1988; Hammersley y Atkinson, 1995: 239-262) CINEY PRACTICA ETNOGRAFICA Pero, zcbmo se relaciona todo esto con el uso actual del «ine por la antropologia? Existe una amplia gama de po- sibildades. No hay una buena razén por la cual uno ne dba seguir usando la cimara de cine como un simple Aispositvo para grabar datos, sobre todo para grabar ac cones, tales come aquellas de una presentacin musical ‘dandistca que son difiles de seguir para el ojo hums: no bajo circunstancias normales. Enel otro extremo de Aicho uso documental,est la estrategia de acerar I te: nolagia alos protagonisas del estudio etnogrifico y ver Enalgin lugar entre estas dos posibilidade existe un interesante y emergente ge nero de peliculas de defensa de los grupos indigenas, aque impli Todas ésos son objetvos perfectamenteleitimos para los antropélogos intersados en producir cine; como Jo que pueden hacer con ela la colaboraciin entre étos y los cneasas aw Estado de Mess Agustin Estade sobre todo aquellos que tatan de temas tales como la tecno- también lo esl producir cine confines didcticos, logla la etnomusicologiay otros, en os cuales lilt cin visual puede er extemadamente it, Peo mientras todas estas maneras de uso son importantes y perti= nents a la discusién y el interés disciplinario, me ocu- paré aqui sélo del uso del cine parahacer un recuento de Ja experiencia de la invesigacién de campo, yx que di cho recuento, por consenso general, permancceen el eo- raz6n de la disciplina académica de la antropologia De cualquier manera, en este punto, es imposible Le gar mis lejos sin toar el controversial tema de cémo se definen realmente las peliculas antropologicas lo etno- igrilica, Este ha sido tema de extensos debates en afi teratura dela antropologia visual yno se puede resolver aqui de manera ripida. Sin embargo, hay dos puntos en particular que se deben dejar clare, El primera implica una simple distncin heuristca entre el cine antropols ico el etnografco, Aunque los adjtivosetnogrica” Desacatos y“antropologico” se usan a menudo inistintamente, es ‘tl dstnguir entre ambos, por lo menos en reacién con el cine. La distincion convencional es que mientras que la antropologia se ocupa de los temas tebricos generaes de la altura humana yla sociedad, a etnografa es mis, tuna cuestin de la desripcién de casos partculaes, Por supuesto, en laprctica no se puede hacer una distincién ‘an tajante y répida, ya qu, por lo general, cualquier teo sia general contiene alguna referencia a casos particule, ycualquier descripein de un caso particular inevitable- ‘mente contiene algunas suposiciones te6ricas, incluso si slo son por implicacién, Peo de todas mado es una ‘cumentary Educational Resources, Watertown, Mass huss Edgar Mori, 1961, Chronicle of Sunsmer, pelicula ‘in, go min, Corinth Films, Londres,

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