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DISENO sISMICO DE CONEXIONES ENTRE LOSAS RETICULARES Y COLUMNAS MARIO RODRIGUEZ + ROBERTO MELI + +Investigador, Instituto de Ingenieria, UNAM a1 2.2 2.3 2.4 25 2.6 27 3d 3.2 3.3 3.4 RESUMEN INTRODUCC ION Désefio siamico de sistemas Losa plana-columa Objetivos det estudio ESTADO DEL CONOCIMIENTO SOBRE COMPORTAMIENTO DE CONEXIONES LOSA PLANA~COLUMNA Tras ferencia de momentos en La conexién Losa plana-columa Teorta de La variacisn Lineat det esfuerzo cortante Teorta sobre anatogta de La viga para Losas planas sin estribos Reguerzo por cortante Predécci6n de resistencia Rigidez Laterat Comportamiento de La conexi6n Losa plana-columna ante cargas efeLicas atternadas que trasmiten momentos y contantes PROGRAMA EXPERIMENTAL Objetivos Execetin de La conexi6n prototipo Especémenes Deserépeién de Los ensayes 9 14 19 2h 25 28 31 35 35 36 38 4o 4.1 4.2 4.3 4.4 4.5 4.6 5.1 6.2 RESULTADOS 45 Aspectos generates 45 Espécémen E1A 48 Espécdmen £2 52 Esp6cémen 3 55 Espécdmen Eb 57 Espécomen E5 60 INTERPRETACION DE RESULTADOS 63 Reséstencéa cetima 63 Canactertsticas del comportamiento de ta conexibn ante cargas cieLicas alternadas 68 Rigideces experimentabes obtenidas ante cargas ofeLioas atternadas B CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES PARA DISENO SISMICO 73 Conelusiones 79 Recomendaciones 8 RECONOCIMIENTO 31 REFERENCIAS 3 TABLAS 99 FIGURAS Ww ABSTRACT This paper presents the results of tests to failure on five reinforced concrete waffle slab-column specimens contain ng integral beam shear rein forcement and subjected to high intensity reversed cyclic moments. The specimens were intended to represent to scale the portion of a flat plate extending out from the interior column to the likely’limits of con traflexure in the slab and between points of contraflexure in the column. According to the tests results, is concluded that the width of the slab considered effective for stiffness calculations for lateral loading is smaller than the given by the Mexico City Building Code 1976 (RDF-76). It is proposed an effective width for the stiffness calculation for lateral leading. For low loads, less than 50 percent of the ultimate strength, was found that the specimens had high stiffness degradation. Tt is con cluded that a waffle slab to column connection will behave ina reasonable ductile manner and, after severe reversed cyclic loading, still have adequate shear strength if integral beam shear reinforcement is provided in the slab. an approach to design the integral beam is presented. Tt was found that the RDF-76 approach is unsafe and some approaches given by other authors are complicated and are not better than the proposed in this paper. It is presented an approach to design for shear the zone of ribs just outside of the solid zone. Ductility factors are presented to be used with the seismic analysis section of the RDF-76. RESUMEN Se presentan los resultados de estudios experimentales en cinco especti nes de concreto que representaban a escala 1:4 1a parte de losa limitada por las probables 1ineas de inflexién en la losa de un sistema de losa pla na aligerada y puntos de inflexién en una columna interior. La estructu ra prototipo se estudia con base en los criterios de andlisis sismico del Reglamento de Construcciones para el Distrito Federal 1976 (RDF-76). se ensayaron cinco especimenes con diferentes tipos de refuerzo por cortante (estribos) y sujetos a trasferencia de momentos alternados, 2 niveles altos de carga, hasta lograr la falla del espécimen. Con base en los resultados obtenidos se propone un ancho equivalente, para propésitos de anglisis eldstico ante cargas laterales, menor que el esti lado por el RDP-76. se observé que la degradacién de rigidez ante cargas laterales repetidas es bastante considerable, aun para niveles de carga me nores del 50 por ciento de la resistencia maxima. Para lograr una mayor eficiencia, respecto a ductilidad y absorcién de ener gia, es necesario formar con estribos cerrados una viga embebida dentro de la zona s6lida. Se presenta un criterio de c&lculo para obtener la resis tencia por cortante de esta viga: el disefio de ella, de acuerdo con el RDF-76, est del lado de 1a inseguridad; algunos criterios de cAlculo pro puestos por otros investigadores son laboriosos y no mejoran apreciable mente el propuesto en este trabajo. Se presenta un criterio de revisién para evitar la falla por cortante en la zona de nervaduras fuera de la zona maciza, y se proponen coeficientes de reduccién por ductilidad para todos estos sistemas, aplicables a las or denadas de los espectros de disefio que estipula el RDF-76. Us INTRODUCCION ae Déselto stamico de sistemas Losa plana-cofumna 1.1.1 Aspectos generales Fl sistema estructural losa plana-columna se caracteriza poraue la losa se apoya directamente sobre columnas y no presenta aumento del peralte en las zonas de " de losas apeyadas sobre vigas y columnas y, desde el punto de vista arqui_ tect6nico, permite una amplia seleccién de ambientes; estas ventajas han hecho que esta estructuracién sea muy utilizada en algunos paises. El comportamiento y los métodos de disefio de losas planas por efecto de cargas verticales han sido estudiados ampliamente y sehaestablecido su efi. ciencia ante este tipo de cargas. Respecto al comportamiento de este sis. tema estructural ante cargas laterales, los estudios son limitados, por lo que atin existen dudas acerca de su eficacia ante acciones sfsmicas que producen momentos flexionantes en las columnas que se trasmiten a la losa; es diffcil que esto ocurra sin producir en la misma una falla local por cortante, la cual es poco dictil y da lugar a un detericro progresivo de resistencia y rigidez que limita la capacidad del sistema losa plana~colum na para disipar la energia del sismo. La experiencia acerca del comporta miento de edificios a base de losas planas y columnas ante sismos intensos es escasa; sin enbargo, en la literatura reciente se mencionan diversos ca sos de fallas locales o de colapsos producidos por sismos. Fl criterio de las nuevas especificaciones ATC propuestas tentativamente 1a ra las zonas sfsmicas de los BUA (ref 1) y el de las consideraday para Nueva Zelanda (ref 2), es limitar severanente el empleo de estos sistemas para re sistir acciones sfomicas, y se sugiere el uso de muros de vigides o contra venteos que gidicen la estructura para evitar excesivos desplazamientos de entrepiso. En las dos G@ltimas décadas, el sistema losa plana-colunna en su versién ali gerada ha sido la solucién més comin para estructurar edificios de alturas intermedias o grandes en zonas sismicas de algunos paises de Latinoamérica, especialmente de México. Esta variante consiste en disminuir el peso de 1a losa colocando casetones en las zonas donde el concrete trebaja a tensién, quedando el refuerzo agrupado en nervaduras. Su uso se extiende cada vez mis; sin enbargo, el disefiador se enfrenta con incertidunbres que provienen del escaso conocimiento de la rigidez, resistencia y ductilidad del sistema. De los estudios sobre comportamiento s{snico de sistemas losa plana-columna, en sa versién losa maciza, destaca una serie anplia de ensayes realizados por Hawkins y colaboradores, cuyos resultados se resumen en la ref 3. Otros estudios son los de Park (refs 4 y 5), Taisei Corporation (ref 6), y Hanson (ref 7). Una descripcién detallada del problena de cortante en conexiones losa plana-columna aparece en la ref 8. Los estudios mencionados se refieren principalmente al mecanisno de falla, cAlculo de resistencia a cortante de 1a conexién losa plana-columna, y mo dalidades del disefo de refuerzo por flexién y cortante que permitan incre mentar dicha resistencia y alcanzar cierta ductilidad. Todas estas inves tigaciones tratan Gnicamente el caso de losas planas macizas. No existen investigaciones sobre el comportamiento de losas aligeradas, el cual se dis tingue de las anteriores en que a) en las nervaduras se concentra el refuer 20 por flexién, @ su vex confinado generalmente por estribos, y b) la falla por cortante puede ocurrir no solo en la zona maciza alrededor de 1a colum na, sino también en las nervaduras. 1.1.2 Marcos formados por losas planas y colunnas El andlisis de sistemas losa plana-columna generalmente se hace suponiendo marcos planos en que 1a losa plana se sustituye por una viga equivalente cuya rigidez se calcula como 1a de una franja de losa con ancho especifica do por los reglamentos (ancho equivalente). Los criterios propuestos para calcular anchos equivalentes mediante anflisis de cargas laterales son di versos y dan lugar a diferencias en los resultados, que ponen en duda su va Lider. BL Reglamento ACI-77 (ref 9) especifica este método Gnicamente para el and lisis por cargas verticales, sin referirse a la forma de realizar el anéli sis por cargas laterales, debido a que acepta el criterio de que estos sis temas no pueden emplearse para resistir acciones s{smicas y por tanto es ne cesario recurzir a muros de rigidez. En las recientes normas de disefio sismico ATC, para ios EUA (ref 1), se hace énfasis en este criterio al pro poner en el andlisis ante cargas laterales un ancho equivalente de dimensio nes reducidas que, para los peraltes usuales, produce desplazamientos de en trepiso mayores que los permisibles por los reglamentos, a menos que se empleen muros de rigidez; adem4s, especifican que en esta viga equivalente debe ser posible concentrar todo el refuerzo para tomar los momentos por cargas laterales. Estas limitaciones tan severas impiden précticamente el empleo de sistemas losa plana-columna en zonas sismicas de EUA. EL Reglanento ROF-1976 (ref 10) define un ancho equivalente deducido de es. tudios analfticos y experimentales de placas delgadas a pequefia escala in cluidos en la ref 11; dichos estudios se realizaron ante carga lateral constante. La validez de este ancho equivalente ha sido puesta en duda por yes © na-columa sujetas 2 carga lateral ciclica ze41 gue se obtionen en el andlisis ser resistidos por ie franja de columna y 12 n proporciones clara cadas cuando ics mente definidas y bi sé deban a cargas verticales. Bl 0: distribucién -76 especifica los mist tanto para momentos producidos por sismo, coz anjas para car gas verticales; sin embargo, es practica cont momentos de sismo able. rece razon se asignen totalmente a la franja de coli 3 Trasmisién de momentos entre columna ta carga vert: sobre la losa plana debe de esfuerzes cortantes gue se consideran cri in amedio pe ralte de la cara de 1a columa (fig 1.1a), en 2a es 1a dimensién de ede la resistencia da columa en le direcciénen que se analiza. en cortante de esta seccién critica se produce une faila por punzonamiento, ja cual se caracteriza por un agrietamiento = de la superficie de un cono (o pirfmide) truncado en toda 1a secci ica. adenfs, puede ser necesario trasnitir un monens de desbalanceo entre 1a lo s asimétricos o de sa y 1a columna, deb lo a cargas verticales « srilla, o @ cargas laterales. Este momento de! itivse de columa a osa en la misna zona erftica que se consideze coxtante, y serd equili, nto flexionante 7 a rado por el sistido en es zona y por la variacién e esfuerzos cortantes en el perimetro de la =egiés critica (fig 1.1b). nos métodos de anflisis propuestos originalne: = Di Stasio y Van Buren (ref 12), ac consideran que los tados por diversos autores y reg esfuerzos cortantes varfan’ linealmente respecte roide de 1a seccién ftica. Esta variacién de cortantes da lucaz 2 ento torsionante re sultante que debe ser igual a una fraccién o mente de desbalanceo; el sto es resistido por el refuerzo de fle: seccién critica. En la fig 1.1c, aparece la expresién que los reglamentos especifican para a; en caso de colunnas cuadradas, 4 = 0.4. En la misma figura se muestra la for maen que, segiin este criterio, se calculan los esfuerzos cortantes m&ximos que se presentan en el perimetro crftico, para valores dados del momento de desbalanceo y de a. ta fig 1.2a muestra el modo de falla de cortante por punzonamiento, caracte ristico de una losa sujeta a cargas verticales distribuidas alrededor de una columna, y 1a fig 1.2b el modo de falla por cortante debido a momento de des Palaneso en la conexién losa plana-columna; esta @ltima empieza con agrieta miento por tensién diagonal en 1a cara frontal de la seccién critica, donde se suman los esfuerzos cortantes por carga vertical y los producidos por el momento de desbalanceo. Este agrietamiento progresa con la sucesiva falla Por torsién de las caras laterales de la seccién critica y la debida a cor fante en direccién contraria en el extremo opuesto. Bl modo de falla resul ‘ante en una conexién losa plana-columna sujeta a momento de desbalanceo y carga vertical, serfa una combinacién de los mostrados en ambas figuras y se caracteriza por ser inherentemente frégil. En un edificio construido con josas planas sujeto a acciones sismicas, regir& usualmente esa combinacién. Los marcos formados por vigas y columnas pueden disefiarse f4cilmente para que 1a falla se rija por la formacién de articulaciones plasticas en las vi gas, sin que se exceda 1a capacidad por cortante de las misnas; coo resul tado se obtiene un mecanisno de falla muy dfictil y con gran capacidad de di sipacién de energia. En edificios de losas planas, un mecanismo de falla equivalente corresponderia a la formacién de 1ineas de fluencia de momentos negativo y positivo a lo largo de todo el tablero (fig 1.3a). otro mecanig mo de falla por flexién en losas planas serfa una falla local en forma de abanico (fig 1.3b). Ambos mecanismos requieren que se alcance 1a capacidad en momento negativo en un lado de 1a columna y la de momento positive en el otro, con lo cual el momento de desbalanceo en la conexién es la suma de anbos (fig 1.4). Es preferible tratar que se produzca alguno de los neca nisnos por flexién mencionados, antes que la falla por cortante; para ello ser necesario disefiar la conexién, no para el momento de desbalances de sefio, sino para un momento de desbalanceo igual a la suma de la resisten cia por flexién negativa enun lado de la columma y la resistencia por fl xin positiva en el otro lado, tomando 1a mayor de estas sumas. Esto nor malmente no se hace en los disefios de la pr&ctica, y da lugar a estructuras con un modo de falla poco diictil en caso de sismo! El cAlculo de la resistencia en cortante de 1a conexién segtin los reglamen tos ACI-77 y RDP-76 se basa en la determinacién del esfuerzo actuante con la hip6tesis de 1a variacién lineal de esfuerzos descrita anteriormente y suposicién Oe ee eee ea propuesto diversas modalidades de refuerzo (fig 1.5). Ensayes realizados en otros paises (refs 4 y 13) demuestran que ninguno de estos procedimientos mejora sustancialmente el comportamiento ante cargas laterales revetidas, excepto el de la viga embebida, Por tal raz6n, el reglamento RDF-76 especi fica que si se excede 1a resistencia en cortante del concreto puede incre mentarse 1a resistencia al reforzar con estribos una viga que tenga el mis mo peralte de la losa y un ancho igual al de la seccién critica; esta viga debe revisarse por cortante con los mismos procedimientos que para vigas usuales. Sin embargo, el incremento en resistencia que puede alcanzarse con ese procedimiento es pequefio, ya que no puede excederse un esfuerzo cor tante total de-1.5 Ae en kg/cm*. #1 reglamento ACI-77 no da criterios para reforzar por cortante cuando el esfuerzo coztante actuante debido al momento de desbalanceo excede yen kg/on?. Respecto a losas planas aligeradas, no se conocen ensayes ni estudios anal ticos acerca de su comportamiento ante carga lateral monoténica ni ante car, gas laterales repetidas. En dichas losas, ademas de 1a posibilidad de falla por cortante alrededor de 1a colimna en la zona maciza, puede fallar en una seccién exterior a través de 1a zona aligerada (fig 1.6); en este caso es probable que sea v4lido extrapolar el procedimiento empleado para la zona naciza, 0 sea,suponer que 1a misma’ fraccién a (fig 1.1c) del momento de des palanceo, se eguilibra por fuerzas cortantes en las vigas en direccién per pendicular a la del andlisis, y que la distribucién de esfuerzos cortantes es lineal; 1a fuerza cortante que debe resistir cada viga, seuin este crite rio, se obtiene en la fig 1.6. un cuanto a la ductilidad de 1a falla y al comportaniento ante cargas repe tidas, parece probable que el arregio del refuerzo en vigas reforzadas con estrinos a6 lugar a un nejor comportaniento que en las losas macizas en que el refuerzo est& distribuido en parrillas no confinadas. 1.2 Objetivos det estudio gn vista de las incertidunbres acerca del comportaniento de conexiones entre josa plana aligerada y columna, en el Instituto de Ingenierfa, UNAM, se emprendié un programa de investigacién cuyos objetivos eran aclarar el com portaniento sismico de las edificaciones con sistemas de piso formados por Josas planas aligeradas, revisar los procedimientos actuales de refuerzo por flexién y cortante, y desarrollar procedimientos de disefio més congruentes con el comportamiento observado experimentalmente en la conexién, ante es tados de carga similares a los que se presentarfan durante un sismo. La in vestigacién experimental consistié en ensayar cinco modelos de conexiones entre losa plana aligerada y colunna. ta investigacién se enfocé principaimente a obtener reconendaciones raciona ies sobre cémo disefiar y reforzar las conexiones entre losa plana aligerada y columna, cuando son afectadas por acciones sfsmicas, estudiando tanto la resistencia Gitina cono las caracteristicas de ductilidad y @isipacién de energia de esas conexiones cuando en ellas predomina la falla por cortante, adengs de analizar el efecto en dichas caracteristicas de diversos procedi, nientos de refuerzo por flexién, xefuerzo por cortante, y dimensiones de ja zona maciza. Se traté de encontrar modalidades de refuerzo para 1a cone xién que aieran lugar a un comportamiento dictil y con poco deterioro, de manera que pueda emplearse en el disefio por sismo un factor de reduccién por ductilidad nés o menos amplio. Bn forma paralela, conocer la rigidez de este sistema ante cargas laterales, fue otro de los objetivos. 2. ESTADO DEL CONOCIMIENTO SOBRE COMPORTAMIENTO DE CONEXIONES LOSA PLANA- COLUMNA 2.1 Trasgerencéa de momentos en £a conexién Lcsa plana~columna Todas las investigaciones realizadas hasta la fecha se refieren a conexiones josa plana-columna, cuando la losa es sélida, y no contenplan el caso de lo gas planas aligeradas; no obstante, considerando que este problema es de na Di Stasio y Van Buren (ref 12) propusieron, en 1961, un método para determinar la resistencia a cortante de las conexiones entre losa plana y columna suje tas a monento de desbalanceo, cuando no tienen estribos; este es un crite rio de esfuerzos permisibles, cuyo método se considera en el Reglanento ACT-63 y es la base de la Filosoffa del disefio de las especificaciones res, pectivas de los Reglamentos ACI-71, ACI-77 y RDF-76. También en 1961, Moe (ref 14) ensay6 doce conexiones interiores losa plana- columna, sujetas a carga monoténica. Con base en sus resultados y en los de otros autores, propuso un criterio de resistencia Gltima, aplicable cuando la conexién sin refuerzo especial por cortante esté sujeta a momento de des. balanceo, el cual conduce a resistencias por cortante del lado conservador, 10 dado que se intentaba gobernase 1a falla por flexién y no por cortante. Con base en el trabajo de Moe, el Comité ACI 326 (ref 15) establecié expresiones para calcular 1a resistencia por cortante y definir la zona crftica por cor tante. En 1964, Khan y Sbarounis (ref 11) realizaron estudios analfticos y experi, mentales tendientes a definir un ancho equivalente para fines de cAlculo de rigidez ante cargas laterales. tos resultados de esta investigacién sirvie ron para definir el ancho equivalente propuesto en el Reglamento RDF-76, a in de analizar tanto cargas verticales come laterales. Hanson y Hanson (ref 7) en 1968 efectuaron ensayes de tres conexiones inte riores losa plana-columna, sujetas a cargas laterales alternadas, y de tres conexiones con las mismas caracterfsticas pero sujetas a carga monoténica; ensayaron adicionalmente once conexiones bajo carga monoténica, de las cua les ocho tenfan aberturas localizadas alrededor de 1a colunna, Ninguno de estos espectmenes tenfa estribos. Con base en este trabajo, el Reglanento ACI-71 especifica el valor de la fraccién « del momento de desbalanceo que se trasmite por excentricidad de la fuerza cortante alrededor del centroide de la seccién. Bn 1970, Carpenter et af (ref 16) realizaron ensayes en 1a PCA con cinco espect, nenes de conexiones interiores losa plana-columna, sujetas a carga lateral alternada. Uno de ellos estaba reforzado con crucetas de acero (fig 1.5a), y otro tenfa refuerzo con estribos formando una viga embebida, lo cual mojo. v6 1a resistencia y ductilidad respecto a las conexiones sin este refuerzo. Fueron los primeros ensayes en losas planas con una viga embebida; los re sultados demostraron que las especificaciones del Reglamento ACI-63, refe rentes a la eficiencia de la contribucién de estribos en losas de espesores menores de 25 cm, no eran validas. De 1970 a 1973, Zaghlool (refs 17 y 18) efectué investigaciones tendientes a definir la resistencia Gitima de conexiones de esquina losa plana-columna. u En la primera etapa de la investigacién ensayé cuatro paneles, cada uno compuesto por cuatro conexiones de esquina losa plana-columna. En la segun da ensay6 nueve especfmenes que simulaban la zona de dicha conexién; ningiin espécimen tenfa estribos y se aplicé carga monoténica. De este trabajo se concluyé que el criterio del Reglamento ACI-71 para calcular la resistencia de conexiones de esquina, lleva a resultados conservadores. Se propuso que el cAlculo de 1a resistencia por cortante de la conexién de esguina, se ba se no solo en la resistencia del concreto, sino también en las relaciones ancho de columa a peralte de losa y momento de desbalanceo a fuerza cortan te, aplicados en la conexién. La Taisei Corporation en Japén (ref 6), Llev6 a cabo, de 1972 a 1978, un programa para investigar el comportamiento s{smico de conexiones losa pla na-columna. Al principio se ensayaron 25 especimenes que representaban 1a conexién entre losa plana maciza y columna, sujetas a carga gravitacional, carga lateral repetida o combinacién de anbas. Laref 16 presenta los resulta dos obtenidos, de los cuales se concluyé que las especificaciones del Regla mento ACI-71 para calcular la fraccién de momento de desbalanceo tomado por flexién en 1a seccién erftica, llevan a una excesiva concentracién del re fuerzo por flexién en dicha seccién; los valores experimentales para la fraccién citada resultaron menores que los estipulados por el ACI. Estas in vestigaciones probaron la mejora en el coitportamiento desde el punto de vis ta sfsmico de las conexiones con estribos formando una viga embebida respec to a losas sin estribos. Como Gitima parte del programa de investigacién, Kanoh y Yoshizaki (ref 6), realizaron ensayes de ocho conexiones losa pla na-columna, sin estribos, sujetas a carga lateral monoténica, a fin de tras mitir el momento de desbalanceo solo por torsién y conocer asf 1a verdadera capacidad de esa conexién en este mecanismo de trasmisién de momento. Asi mismo, determinaron expresiones para calcular el momento de desbalanceo. Allen y Darvall (ref 19) en 1975 realizaron investigaciones analiticas re solviendo las ecuaciones diferenciales de la teorfa de placas, tendientes a definir las rigideces de conexiones losa plana-columna, ante cargas late, rales. © (ref 20), con base en el método de elementos finites eces ante carga lateral de conexiones entre losa plana aligera le eval constituye el primer estudio para cbtener rigideces de piso formades por losas planas aligeradas. cy Pak (zef 4) realizaron ensayes con ocho especimenes que sonexién interior entre losa plana y columna, cuatro de ellos ales aiternadas. Tres especimenes no tenfan refuer argas L ©, uno nds estaba reforeade por cortante con varillas de re as, otzo tenfa crucetas de acero (fig 1.5a) y los tres restan tados con estribos formando una viga embebida, con ancho Se observé mejor, desde el punto aniento sfsmico, de lae conexiones con estribos forman sshebida, respecto a las conexiones sin estribos. En el misno autores (ref 5),con base en sus resultados experimentales, presen para calcular la resistencia de la conexién cuando est& to de deshalanceo, con o sin estribos, formando una viga enbe, 3), en 1977 resumié los. resultados obtenidos de una amplia serie Hawkine (x Ge ensayes d= conexiones losa plana-columna, iniciada en 1975; se ensayaron es bajo ciclos de carga lateral alternada. Los detalles y resul sevie de ensayes se incluyen en las refs 13 y 21 a 24. que las conexiones sin estribos fallan por punzonamiento, de ecomienda formar con estribos cerrades una viga embebida, de refuerzs 1a conexién alcanza rotaciones del orden de ocho hen la primera fluencia de la losa, sin péraida apreciable Ge absoreién de energfa en ciclos posteriores de carga. Es iclicas alternadas, 12 contribucién del concreto cergas nte es 0.5 Jf (en kg/em®); los estribos de 1a viga embe c ix esfuerzos cortantes mayores, de manera que no lleguen sia para lag aceiones de disefio Gitimo; recomienda también lini 13, tar el esfuerze cortante Gitino a 1.5 ff y que 1a dimensién de 1e colun na en la direccién del nomento aplicado sea mayor que 1a longitud de ancia je del refuerzo por flexién de la losa. Hawkins desarroll6 ecuaciones (analogia de la viga) que permiten una prediccién aceptable de la resis. tencia por cortante de 12 conexién losa plana-colunna con estribos o sin ellos, sujeta a momento de desbalanceo. Hawkine, en sus ensayes, determiné rigideces de la losa de aproximadamente la mitad de la calculada con 1a seccién agrietada y con el ancho equivalen te reconendado por el ACI-77; esto se debe a 1a existencia de una rotacién local en la zona de losa a cara de columna. Los resultados de un andli sis inel4stico con el método de elementos finitos (ref 3) muestran que la rotacién local la producen altos esfuerzos cortantes en la zona de conexién y las condiciones de anclaje del refuerzo que pasa por 1a colunna; adenés, estos factores influyen en la forma de los ciclos histeréticos. Hawkins concluy6 también que al incrementar la dimensién de la columna en direccién del momento trasferido, es decir, mejorando las condiciones de adherencia el refuerzo por flexién de la losa que pasa por la columna, se logra dis, minuir hasta en 20 por ciento la rotacién local, y que los ciclos histeré ticos toman la forma ancha y acostada solo para esfuerzos cortantes altos. Asimismo, si las caryas gravit pleanial mitad del esfuerzo de fluencia del refuerzo por flexién, se puede conside rar que el ancho equivalente, para andlisis ante cargas laterales, consi derando la seccién agrietada, varia entre c, +d para una columna cuadrada ac, +2d para colusnasenlas que c,/c, = 3. Se sugiere utilizar este ancho para niveles de carga en la que no ha fluido el refuerzo por flexién en la losa, y se recomienda que para estudiar el comportamiento ineldstico se empleen otros procedimientos que consideren el comportamiento no lineal. En 1978, Long (ref 25) ensayé tres tableros de losas planas; cada uno te nfa una conexién de borde y una interior, sin estribos; los especimenes fueron sometidos Gnicamente a carga vertical monoténica. Se concluyd que el criterio del marco equivalente del Reglamento ACI-71, respecto a car, 14 gas verticales, conduce a una estimacién razonable del valor del momento trasferido de la losa a la columna; en la mayorfa de los casos se obtuv ron resultados del lado de la inseguridad para conexiones interiores y otros relativamente conservadores para conexiones de borde. 2.2 Teorta de ta variaci6n Lineal dek esfuenrzo cortante La fig 2.1a representa la zona de conexién losa plana-columna en la que actilan las fuerzas P,, P, y un momento de desbalanceo My en uno de los Planos de sinetrfa paralelo a las caras de 1a columna (MyM, +M,). Estas fuerzas externas son resistidas en las caras AD y BC por momentos torsio nantes M, y también por esfuerzos cortantes (figs 2.1a y b), respectiva mente; ademas, en las caras AB y DC actian esfuerzos coztantes constantes ¥ momentos flexionantes Mr y Mr» que son genevalmente diferentes, y que no pueden exceder los momentos resistentes My y ne @ados, segin el ACI-77, por f ptf (1-0.59 p' -Y) ba? y e © (2.1) - ( Ay wat Motof (1-0. bd’ Re ty 590 ¢ donde b ancho de 1a cara AB y CD d peralte dti1 resistencia caracterfstica del concreto en compresién f esfuerzo de fluencia del refuerzo © cuantia de refuerzo en el lecho inferior, para la cara CD p' cuantfa de refuerzo en el lecho superior, para la cara AB 15 La distribucién de esfuerzos alrededor de la columna es muy compleja y eben plantearse hipétesis simplificatorias para establecer expresicnes de disefio; por este motivo, la teorfa de la variacién lineal de esfuerzos cortantes supone que los esfuerzos son constantes en planos perpendicula res al del momento exterior My y que los esfuerzos varian linealmente @ lo largo de los otros dos planos. Por equilibrio de fuerzas en direccién vertical, la resultante de los es fuerzos cortantes actuantes debidos a carga vertical, es una fuerza V de valor P, - P, (fig 2.1b); esta fuerza se localiza a una distancia e del centroide de la columna, en otras palabras e es la excentricidad de 1a fuerza V, la cual es nula para una conexién interior, Adem&s, el momento exterior My debe ser equilibrado por 1a sua ée los momentos internos, por tanto - + Nyt 2M, +m, +My + Ve (2.2) Se puede expresar M, en funcién de V haciendo 2m vx donde X es el brazo del par (fig 2.14); entonces VxX= ~My Me (2 po Mo MR ve +3) Suponiendo que 1a parte del momento My resistido por les esfuerzos cortan tes verticales es una fraccién a de My , se tiene: Vx= aM) (2.4) aes un factor que se determina experimentalmente. La superficie de con tacto entre losa y columna tiene cierta restriccién al alabeo, por tanto no seria aplicable la teorfa de torsién pura de Saint Venant. Con este 16 argunento, se considera que deberfa usarse el momento de inercia de la seccién en todo su perfnetro. Considerando J vy x dA= aM, para el bloque de esfuerzos de la fig 2.1h amy x/2 Fi (2.5) es el esfuerzo cortante en la seccién critica, debido al momento aM)/¥ D D x se indica en la fig 2.1c. Moe (ref 14), establece que ves x da (2.6) A La integracién se hace para todo el perfmetro de la seccién. Con la nomen clatura de la fig 2.1c se tiene 2 ls x64 @? 26 (2.7) Moe propone que para losas sélidas y sin refuerzo especial por cortante, & = 0.33, y sugiere disefiar 1a conexién con el criterio de tener resisten. cia por flexién menor que la resistencia por cortante, para lo cual plan tea expresiones que limitan los esfuerzos cortantes. Di Stasio y Van Buren (ref 12) sugieren, para conexiones interiores (fig 2.1) que AL = 2h (x + 2) donde x= oc) +2 (h- 1.5 pulg) (2.8) z=c, +2 (h~ 1.5 pulg) para dimensiones en pulyadas; adexs,a diferencia de ce, catablecrn Jelxradae i yaa La primera integral tomada sobre el 4rea tozal en tre caras, ¥ segunda en las caras AD y BC ; en ellas,xe y son les distarcias horizoncal y vertical, respectivamente, decdu un elenento diferencial de area dA al eje centroidal, lo cual significa que la fraccién de momento « M,adenés esfuerzos cortantes verticales,produce cortantes horizon‘ (2.9) como Los autores propusiezon ve 8h fu Mot tent x] y (2.19) mx 7 d |A J 2 2 lees Bl factor $ tiene por objeto continuar la pr&ctica usual del diseic en época, ya que se calculaba el esfuerzo cortante como V/bjd, suponiendo J *&. k, es una constante que modifica a J y AL, para omar en cuenta el efecto de dowel action e incrementar asi la resistencia 21 cortante. ba ec 2.10 debia usarse para esfuerzos permisibles, a diferencia de las expresiones desarrolladas por Moe. Bl Comité ACI 326 (ref 15) para un criterio de resistencia Gltima, da une expresién similar a la de Moe, donde A. = 2d (x + 2); aqui x yz definen 18 J e6té dade po: fen kg/em*) y a El Comentari del Reglanento ACI 1963 (ref 26) consigera las expresiones ae Di Stasic, en las que se establecla x= c, +d, z= c, + 3h; este né todo de esfuerzos permisibles, daba factores de seguridad menores de 2 pa grupo de losas ensayadas sor Moe (ref 14) y por E + En esta dltima investigacién, para dise‘o ror resistencia Gltins, se propone G = 0.4. Este co: erio es aceptado por los Reglanentos ACT 77 (wef 9) y 2OF-76 (ref 10), los cuales estipuler ante 2 fered ree SV oe Fara colunnas cuadradas, resulta a = 0.4; la seccién crftica por cortante esté situada a una distancia d/2 de 1a cara de columna; por tanto, pare ana conexién interior, como la de la fig 2.1c, le seceién erftica esté de 2 por x=, + d, 2 = c, + d; con estos valores se calcula J seciin le ec 2.9. Aden&s, debe verificarse aue se trasmita Ge momento (1 - a) en una seccién critica mayor que 1a espect: cada por ef 8); esta seccién tien: pide un ancho de ¢, + 3h, sado como (2.12) donde x = c, +d, A, 19 Para la cara CD se tendria J ‘co oPle< ix y se llama V, a 1a fuerza cortante maxima que puede trasmitirse a Ja co nexién cuando no hay momento de desbalanceo y M, al momento de desbalanceo maximo que puede trasmitirse a la conexién cuando no hay ninguna fuerza cortante V, de acuerdo con 1a ec 2.12, se tiene Van AL Vf (2.13) (2.94) a (c, +4) La relacién de V/V, con My/M, se indica en 1a fig 2.2 con la recta AB? la recta CD representa un posible limite de la relacién c My/M, » determinada * por los momentos flexionantes resistentes My »Mq » dados por la ec 2.1, en la que b=, + 3 hy dicho Limite queda expresado por (=a) My = Hate (2.15) EL témino MP debe enplearse en la expresién anterior solo cuando Vey Sea negativo, esto implica gue en la cara CD la fuerza cortante actuante esta dirigida hacia arriba, opuesta a la fuerza cortante por carga vertical di rigida hacia abajo. 2.3 Teorta sobre anatogia de La viga para tosas planas sin estribos El enfoque de este criterio trata el problema del c&lculo de resistencia de 1a conexién losa plana-columna eujeta a trasferencia de momento de des balanceo, sin dar informacién sobre la rigidez de 1a conexién. ela vigas en dos dizecciones formant cada cara de la cclumna. Estas ‘Sexionantes, monertes torsiones viga puede alcanzar su resiste: 2528 mecfnicos, y 5: puede tomar ellos. El procedimiento de of sesistencias (iltimes congruentes cx= ¥ con las con: cidad permisible de una viga sox ces. sin permitiy ninguna -edistribuciga e calcula sumanic las puestas de ans: ofa a ée Hawkins y 13) propone una teorfa sobre 1 veso de falla de una viga consiste ex S slementos mecdniccs: nomento flex ante: se supone gue la conexiéa ¢ sores conduce a lograr la resists ite encontrar cy gece Le ao78 y dibujar para Gltimo contra Park e Islam a que se alcanzan simult&neamente, en la cara AB (fig 2.1a) la resistencia Gltima por flexién negativa Mage x cortante Vag; en la cara CD, el mo iLtima por £1 gativa Mag, y por cortante Vagi en 1 2 mento flexionante positive Gitimo Mj, 7 y en las caras DA y BC , las resis encias dltimas por torsié Ty, + respectivamente. La cara AB tiene te ‘Ltimas por torsién Tye + Tyg + respectivamente. La cara AB tie! un ancho c, +d, y la BC, c, +d. Si las acciones internas en la losa son My =Mpy Vy =P, 7 Py (fig 2.12), las ecuaciones de equilibrio son Vv, = Yap * Yee * Yep * ¥ (2.16) (2.17) - + Las expresiones para Myg Y Mop SOP las mismas de Mp y Mp, respectivamen te (ec 2.1), haciendo b=c, + 3h. Tye ¥ Tyg se calculan, en kg-cm, como: =T,. 22 f -(= Toa Tac 7 yz M Ce, +4) 1-26 JFL / ve © (2.18) donde e+ 4) ate +a nla cual oct yn las jones de V. que se tri nen las caras en 1a cual Kgs Kpq son las frace: de V, que se trasmite 1 BC y DA. cabe observar que en la ec 2.18 se ha duplicado el esfuerzo cortante por torsién admisible por el concreto en vigas, a fin de considerar el efecto de accién de losa en dos sentidos, de manera andloga al criterio de dupli car la resistencia por cortante vertical permisible en vigas cuando se trata de losas. 22 has expresiones para las fuerzas cortantes, en kg, son Yap tf, fe, +8) d (2.19) =| JFL (c, +4) d- Kyg Vy (2.20) L Cuando la losa es cuadrada, se trasniten fracciones iguales de Ven las cuatro caras, por tanto Kap = K, ‘ag = Key = 0-25 La resistencia @itima al cortante de 1a conexién, cuando M, es cero, esta dada por (2.21) Je [2 (c, +4) #2 (e, +4) Finalmente 1a expresién que da el valor de M, es tm) (cy +d) + [ [leg +d) = 05 Vy Ugg + Keg) |ecsae stnttc saree fe fh - Abe (2.22) 3 , vfe J = Ne En la fig 2.3 se muestra el Giagrana de interaccién H, Vs Vi resultante de las ecs 2.21 y 2.22, Se debe observar que el momento de deshalanceo resis tente Gitino en ausencia de fuerza cortante Ves distinto al dado por el criterio ACI-77. Otra diferencia es que esta teorfa reconoce en forma explicita que cuando V, = Vp no hay trasmisién de momento de desbalanceo por torsién 0 cortante, pero la conexién es capaz de trasmitir un momento 23 de desbalanceo igual a la resistencia a flexién en la seccién crftica, la cual es igual a la suma del momento flexionante resistente negativo en la cara AB (fig 2.1) y el momento flexionante positive en la cara CD; este i (+ Mo en 1a fi mento de deshalanceo se indica como Mp + Mp en la fig 2.3. 2.3 Criterio de Kanoh y Yoshizaki Este criterio (ref 6) se considera una variante del anterior, ya que la expresién que se propone para calcular My, momento de desbalanceo resisten te en la conexién cuando no existe fuerza cortante Me se obtiene de la ec 2.23 7 cuando V, = 0 se puede escribir: Net +m, (2.23) Aqui se distinguen las tres aportaciones de resistencia al momento de des balanceo M, D momento resistente por flexién en la seccién critica M, momento resistente por las fuerzas cortantes en las caras ABy CD M, momento torsionante resistente en las caras BC y DA Ademas (m, + mi) (c, #4) w= Vy fe, +d) v. (c, + d)d; por tanto 2 e [ip lg + 8 dla +8) 2 t°3 donde V, x h? (c, +d) 1.26 cambia la expresién a para valuar N_; en el criterio de Kano’ flee esién para el momento resistente plastico caleulade con 1a (2.24) que es la ex analogfa dei montén de arena, Otros experimentos realizados por Kanoh en conexiones sujetas a trasferencia de momento torsionante Snicamente, indican te alto con respecto al propuesto para vigas y al de la ec 2.22. que ¥ 124) puede tomarse cono 6.4 ,/f (on ky/en®) valor relativanen Bl valor V, » duerza cortante resistente cuando no existe momento de desbalan ismo de 1a ec 2.21. 0, es el a flexién y cortante, cuando ambos ovopene que las resistencias My Vy, estén presentes simulténeamente, se x acionan con: v gts (2.25) me Ve esta expre: a resultados aceptables cuando 1a conexién no tiene estri bes 2.4 Regsuerzo por contante de conexiones losa plana-columna con estribos es més frecuente y por tanto de mayor interés que el de conexiones sin es, El Reglanesto ACI-77 no incluye criterios para disefiar estribos cuando hey tyesferencia del momento de desbalanceo de 1a losa a la columna, pero indi ca cue el concreto es la Gnica fuente de resistencia al esfuerzo cortante actuante, el cual no debe ser mayor que /f 25 A continuacién se revisan las investigaciones sobre conexiones losa plana~ columna con refuerzo por cortante, sujetas a trasferencia de momentos de desbalanceo tanto por carga monoténica como por carga ciclica alternada; el comportamiento observado se analiza en los subcaps 2.5 a 2.7. 2.5 Predéceéén de resistencia La teoria de 1a variacién lineal de los esfuerzos cortantes se aplica en los Reglamentos ACI-77 y RDF-76 para calcular los esfuerzos cortantes actuan tes debidos a la trasferencia de momentos en la conexién (subcap 2.2), y segin las ecs 2.1 a 2.4, el esfuerzo cortante que actfa en la seccién cri tica est& dado por la ec 2.12. El esfuerzo cortante resistente que especifica el reglamento RDF-76, esta dado por (2.26) (2.27) Para conprobar 1a validez de estas expresiones, en la tabla 2.1 se comparan las resistencias experimental y calculada de modelos de conexiones entre losa plana maciza y colimna sujetas a cargas laterales alternadas, segtn diversos autores. Los resultados indican que el procedimiento propuesto por 1 ROF-76 predice en forma razonable la resistencia, siendo mejor 1a concordancia para el caso de conexiones con estribos. El valor a, especificado en los reglamentos ACI~77 y RDF-76, se obtuvo experimentalmente suponiendo @icha variacién lineal de esfuerzos cortantes y cierto valor del esfuerzo cortante resistente Gltimo en la seccién criti ca. EL valor de a es apropiado para fines de cAlculo de la resistencia por cortante de 1a conexién (tabla 2.1). Por otra parte, en Japén se rea lizaron ensayes (ref 6) que consistieron en someter a cargas laterales mo 26 delos de conexiones losa plana-columna, registrando las deformaciones del refuerzo a flexién que pasaba por la seccién critica; para calcular (1-«) , porcién del momento de desbalanceo trasferido por flexién en la seccién crf 2 de cortante, el momento trasferido por flexién en esta ceccién se igua 16 2 1 - a; asi, se cbtuvieron valores de a que variaron entre 0.6 y 0.9, ual demuestra que los valores de 4 propuestos por los reglamentos ACI-77 y RDF-76 deben incrementarse cuando se disefie el refuerzo por flexién que pasa por la zona crftica, definida esta con un ancho c, + d; en caso contra rio, llevarian a una concentracién excesiva del refuerzo por flexién en la zona critica por cortante. Este problema lo toma parcialmente en cuenta el Comité ACI 426 (ref 8) al especificar que 1a fraccién 1 - a , no trasmiti, a por cortante lo sea por flexién en un ancho c, + 3h, dimensién mayor que el ancho de la zona critica por cortante; esto implica que en esta Gltima seccién el valor a, empleado en el cAlculo de 1a fraccién 1 - a, es mayor que el propuesto para el cAlculo del esfuerzo cortante actuante en la como en el caso en que no existe refuerzo por cortante, se han propuesto va, rias teorfas para calcular la resistencia de 1a conexién reforzada por cor tante, entre ellas, las de 1a analogia de 1a viga (refs 5, 8 y 13). Los re sultados de 1a tabla 2.1 indican que la prediccién de resistencia propues ta por el reglamento RDF-76 puede considerarse satisfactoria y no es nece sario recurrir a procedimientos mis refinados, aun cuando se mencionan en este trabajo para fines de comparacién. En el subcap 2.2 se estudian las diversas teorfas de 1a analogia de la vi ga para calcular la resistencia de la conexién losa plana-columna sin es tribos; con iguales bases tericas, los autores de estas analogias propo nen expresiones que toman en cuenta la contribucién de estribos a la resis, tencia por cortante, excepto la teorfa de Kanoh y Yoshizaki. Las aplica ciones de estos criterios, en especial el de Hawkins, son laboriosas, por Jo que solo se menciona el criterio de la analogia de 1a viga propuesto por Park e Islam (ref 5), para el caso de conexiones con estribos que for man una viga embebida. 27 2.5.1 Criterto de Park e Tsfam para conexiones con estribos considera que el momento de desbalanceo M, se desarrolla por dos elementos resistentes, uno debido al concreto M, y otro a les estribos M,, es decir Mos M+ M, (2.28) une Ms La expresién para H_ se deduce de 1a ec 2.22, haciendo reducciones de resis tencia dado que ahora se considera aplicable la teorfa de resistencia a cortante para vigas; luego, en las ecs 2.19 y 2.20 se sustituye ,/f! por 0.5 ff! yenia 2.18 1.26 f/f. por 0.63 Nie Ast, queda Hos Gay tm) (ec +4) + [es JFL ley #8) d= 0.5 Vy Kay + Keg) [Cer #2) c u + } he (c, + d) 0.63 (2.28) La contribucién de los estribos se expresa como afd 2a, x7, A, AO fe, +) + (2.30) a, = 0.66 + 0.33 y,/x, < 1.5 (2.31) donde A. rea, en om®, de una rama de estribo cerrado que resiste la tor sién a una distancia s A, rea del estribo en 1a seccién critica considerando el ninero de 2 ramas, en cm’ esfuerzo de fluencia del estribo, en kg/cm” S espaciamiento de los estribos 28 El primer términe de la ec 2.30 representa el per formado por las fuerzas que se producen en los estribos cuando aparece una grieta por tensién dia gonai a 45° a cara de colunna y cruza la zona critica, y es la expresién que se usa en diseio de vigas; el segundo término corresponde al momento torsionante que se resiste con estribos en las caras BC y DA , expresién también usada en vigas. Algunas variables de las ecs 2.30 y 2.31 se ilus tran en la fig 2.4 El esp ciamiento s no debe ser mayor que d/2 a fin de asegurar que 1a grie ta por tensién interseca los estribos; ademis, 1a ec 2.30 no es dagona: apliccble cuando V, > Vj ya que algunos estribes tendrfan que tomar una parte de V, y se modificarfa dicha ecuaci6n, determinando 1a parte de estri bos que contribuyen a resistir V,,, pues el resto de ellos contribuye a re sistir M. e 2.6 Régidez Lateral Bn el andlisis de edificios se suele recurrir a ia idealizacién ée marcos planes; en el caso de sistemas losas planas-columnas se suponen marcos pla nos en los que la loga plana se sustituye por ana viga equivalente. El Re glamento RCI-77 (ref 9), solo especifica este método para el anélisis por g, SenominSndolo de fn estmuctuna equivatente, y estipula ivalente est@ fornade por un anc no Ge losa limitado lateral al Ge los tableros 2 cada lado del eje de columnas. la rigidez de la viga equiva cales y laterales, se calcu ie lose plana e del momento ge inevcia de en ancho a cada la 0.5L, 8.3 ¢, (2.32) 29 L, es el claro en la direccién de andlisis, L, el claro en la direccién nor mal a la anterior, y Cz el tamafio de 1a columna en la direccién de L,. La aplicacién de esta f6rmula se ilustra en la fig 2.5. Recientemente se han realizado investigaciones tedricas (refs 19 y 20), ten dientes a definir 1a viga equivalente de un sistema losa plane-columna con fines de anflisis ante cargas laterales. Allen y Darval (ref 19) caleula von el ancho efectivo de 1a viga equivalente expresando los resultados en funcién del parémetro adimensional n Allen y Darval estudiaron una conexién interior losa plana maciza columa, sujeta a la trasferencia de momento de desbalanceo (fig 2.6). El procedi miento consistié en resolver 1a ecuacién diferencial de 1a teorfa de placas delgadas con las condiciones de frontera mostradas en 1a fig 2.7, represen tando la solucién mediante series de Fourier. Se dan valores de n para va rios casos de dimensiones de tablero y columa. las variables estudiadas fueron: a) Relacién de aspecto del tablero, L,/L, b) Relacién de aspecto de la columna, ¢,/c, c) Tamafio de 1a cotumna, ¢,/ly Se encontré que n cambia principalmente con 1a relacién L,/L, siendo menor la variacién con las relaciones ¢,/e, y ¢,/L, Reyes (ref 20) aplica el método de elenentos finitos para estudiar el valor dei ancho equivalcnte de conexiones interiores losa plana aligeraéa colunna; las condiciones de Frontera que deben cumplirse son las de la fig 2.7. Las variables consideradas fueron las mismas del estudio anterior y, como en ese caso, se encontré que n varia principalmente con la relacién L/t,- 30 Os myuivalentes ae les Realamento RDP-76, cuando jue el procedimiente del EDP-75 subestina 1 iosa en el intervalo eldstico, cuan do se consi a en todo el claro «: ite de inercia de la zona aligerada. Si es vai #1 momento de inercia, la rigidez aumenta en 25 por ciento, apreximadarente, para casos usuales y se ap roxima mejor a la que resulta en las investigaciones teéricas. Incluse bajo cargas de servicio, debe tenerse en cuenta que la losa se en asrictada y 9u rigidez ante cargas lateratce serd menor que la sina para la seccién eldstica intacta. gn la ref 25 se dese: formado por varios ciaros, sujetos a carga gravitaciona! se enté que tos desplazanientos orevistos por el nétodo de elementos fi. nitos elsticos, eran menores que los exzerimentales, lo cual se atribufa a la existen 2 de rotaciones inelasticas locales en la unién entre column nay losa. Aéemés, los resultados de los ensayes de Hawkins con especime nes sujetos 2 carga lateral (refs 3 y 13) indican que, desde niveles de car ge bastante pecuefios, ocurren rotacicnes locales en la unién entre columna y losa, que pueden considerarse como de cuerpo rigido, y reducen la rigidez 4e 1a lesa oximadamente la mitad ée iz se se calcula para la seccién acho eguivalente © por el ACI-77, es decir, limitado latevainente p 1 eje central de los tableros je de columas. La escesa rigider a1 te cargas latezeles de la losa plana, hace que para li mitar las & exiones laterales a los valores admitidos por el reglamento se requiera rrir a dimensiones de cols y losa que en edificios de eaultan antieconémicas, naciendo, por tanto, necesario re rigidez. 31 2.7 Comportamiento de La conexién Losa plana-cotumna ante cargas cLcki cas alternadas que trasmiten momentos y cortantes 2.7.1 Conexiones interiores La mayor parte de la informacién sobre el comportamiento de conexiones in teriores, en su versién losa plana maciza, ante cargas laterales alterna das, proviene de las investigaciones de Hawkins; en la ref 3 se discuten los resultados de ensayes en 26 especimenes, cuyo objetivo era definir la resistencia, rigidez y comportamiento histerStico de las conexiones en cues tiém. Al respecto, también en Japén (ref 6) y en Nueva Zelanda (ref 4), se han realizado pruebas ante cargas laterales alternadas. a) Efecto de la cuantia y distribucién del refuerzo por flexién En las investigaciones mencionadas, se observa que 1a rotacién de la losa respecto a la cara de columna aunonté mas répidamente después de 1a fluen cia del refuerzo por flexién en la zona de losa limitada por la columna. Se encontré que el efecto de 1a concentracién del refuerzo por flexién en un ancho dos veces el peralte de losa a cada lado de 1a columna, fue beng, fico ya que aument6 la rigidez de la conexién tanto en el intervalo eldsti co como en el ineldstico; también se incrementé la resistencia ditima. Cuango 1a cuantfa de refuerzo por flexién en 1a vecindad de la columna fue menor de 0.9 por ciento, los ciclos histeréticos aun después de 1a fluen cia del refuerzo por flexién conservan su forma esbelta y delgada; mientras gue cuando tal cuant{a fue mayor de dicho porcentaje, los ciclos histeréti cos, después de 1a fluencia del refuerzo por flexién, se caracterizaron por tener mayor capacidad de absorcién de energia. Por lo expuesto, estas in vestigaciones recomiendan concentrar el refuerzo por flexién de 1a losa en un ancho de una vez y media el peralte de 1a losa a cada lado de 1a colum na, y que se evite que la carga gravitacional cause esfuerzos inelagticos en elmencionado refuerzo. Ademfs, se sugiere tener una longitué de colun na en la direceién del momento aplicado mayor que 1a longitud de desarrollo ei refuerzo que pasa por 1a columna, y verificar que 1a suma de la cuantia 32 de refuerzs super eee mento, sea menoz de b) Los especimenes si de manera fr€gil. £1 comport go una viga embebida con rodean al refuerzo por que pasa por ia columna, fue mejor con respecte al de ios modelos sin estribos. Algunos detall bos, 13), sultados de an ensaye > de conexiones con 2.9. Para el caso Ge cargas reversibles se reco! aracién de estribos a ¢/3, y localizar cada barra de re 2s de los estribos, flexién que pase por mia en las esqui ese ée manera que ia distancia ed en la fig 2.10 sea mayor que e2 esvesor Ge losa h; adem&s se recomienda que el esfuerzo corten ated xo axceda de 0.5 JF) 2.7.2 Conexiones de borde y de esquina “77 file 4e los reglanentos AC: ROP-76. para disefiar conexiones lo de escuina eujetas a nonentos de desbalanceo, sa plana-columna de be: conexiones interiores. procedimiento desa: lado para 0 Ge deshalances 2 sujeta a un momen} Por esa razéx, en una direceién, se calcula el esfuerze cortante m&ximo con ia ec 2.12, amide yd, se cbtienen de la geonetrfa de la £ a de esquina siempre estaré suieta a momentos aun en ausencia de acciones sfemicas, ya que el earga gravitacional en cada ut a de les dos direc momento de desbalanceo; por elle, 4 tos de desbalanceo My, y Mp» dedos por x (2.33) donde H,, 4) son los momentos flexionantes actuantes en cada una de las ai reociones del andlisiss e,, e, son las distancias medidas en la direccién xe Y, respectivamente, del eje de la colunna al centroide de la seccién critica por cortante. El esfuerzo cortante actuante maximo est dado po! a(M - Ve) a, a (M) - Ve) 5 “ey (2.34) cx cy eee en esta ecuacién, los subindices x, y estén asociados a las dos direcciones del andlisis y las cantidades correspondientes se caleulan con 1a geometrfa de 1a fig 2.12. En la ref 18 se describen ensayes realizados en Canad& por Zaghlool et al, con conexiones losa plana-colunna de esquina sujetas a carga lateral nono ténica y carga lateral reversible. En las refs 17 y 18 se describen los ensayes que realizaron los misnos autores en conexiones losa plana-columa de esquina y de bore, bajo cargas monoténicas y sin estribos en ninguno de los especimenes. Los resultados mostraron que la aplicacién del crite rio del reglamento ACI-71 para calcular 1a resistencia @itina de 1a cone xién de esquina, mediante la ec 2.34, da valores muy conservadores y en opi. ni6n de Zaghlool esto se debe a que tal criterio toma en cuenta solo el pa rémetro J , siendo que 1a capacidad Gitima de la conexién depende tan bién de la cuantZa de acero de refuerzo por flexién de 1a losa en la vecin dad de 1a columna y de las relaciones c,/d y M/V. ademas, se encontrd que esta diferencia de resultados es menor para el caso de conexiones de borde, lo cual puede explicarse porque en este caso existe la aiscontinui dad en solo una cara. Los ensayes bajo cargas laterales reversibles no cenbiaron en forma significativa le resistencia Gitima y 1a ductilidad res pecto a especfmenes similares bajo carga lateral monoténica. 34 Una explicacién adicional al sentid conservador de la ec 2.34 para cont, 0 de la teorta xiones de esguina, es gue se dedujo con base en el cone de la variacién lineal de esfuerzos cortantes, considerande 1a supertosi cién de efe 3 de los momentos de desbalancec actuantes en las dos direc ciones del andlisis. Esto supone, en forma implicita, que los esfuerzos cortantes producidos por cada uno de los dos momentos de desbalanceo, se superpenen simelt&neamente causando un esfuerzo cortante constante en cada osicién en una de las caras de 1a seccién critica por cortante. La superp realidad no sucede asi, ya que los esfuerzos cortantes miximos, se alcanzan solo en dos esquinas opuestas de la seccién critica por cortante. En la situacién de momento de desbalanceo en una sola direccién, los esfuerzos cortantes en la cara critica son constantes, mientras que bajo condiciones de monento de desbalanceo en dos direcciones, en cada una de las caras erfticas por cortante, se tiene variacién lineal en los esfuerzos cortantes. Esto significa la existencia de una porcién en cada una de las secciones criticas, de esfuerzos cortantes menores que los obtenidos si se considera que existe momento de desbalancec en una sola direccién. Por estas razo nes, bajo condiciones de momentos de desbalanceo en dos direcciones, 1a re visién de la resistencia por cortante de la conexién podrfa hacerse consi, gerando el efecto de cada uno de ellos por separado; este criterio proba plemente conducirfa a resultados que se acerquen mis a la situacién real. 3. PROGRAMA EXPERIMENTAL 3.1 Objetives Los resultados de las investigaciones en losas planas macizas (cap 2), es. pecialmente los de estudios realizados por Hawkins y colaboradores, eviden cian la importancia del trabajo experimental en sistemas de piso formados por losas planas. Por lo anterior, y dado que se conoce poco sobre el com portamiento sismico de los sistemas de piso formados por losas planas ali geradas, el Instituto de Ingenierfa llevé a cabo un prograna de investiga cién tendiente a aclarar dicho comportamiento. Paralelamente al estudio analftico del problema, se desarroll6 un programa experimental que consistié en ensayar cinco modelos, escala 1:4, gue tra taban de representar 1a zona de conexién entre losa plana aligerada y colunna. Estos modelos se sujetaron a momentos de desbalanceo, causados por la aplicacién de ciclos de cargas est&ticas alternadas. Una discusién del criterio de utilizar este tipo de carga para estudiar el comportamien to sfsmico de estructuras,se encuentra en las refs 2 y 28 a 30,con base en las cuales se puede aceptar su validez. 1 objetivo principal de 1a parte experimental del programa de investigacién fue obtener las caracte, 36 rigticas de resistencia, ductiligad y absorcién de energia de las 0, cuando en ellas predomina Ja falia nos de los sistenas de piso en estu por cortante. Se analizé el efecto sobre dichas caracteristicas de un ti po especial de refuerzo por cortante, similar al propuesto por Hawkins en las investigaciones que realiz6 con losas planas nacizas; dicho refuerzo consistié en estribos cerrados formando una viga embebida centrada a eje Ge columna; tanbién se estudiaron los efectos del escaso o nulo refuerzo con estribos en las conexiones. Adicionalmente, se buscé proponer un cri terio adecuado, desde el punto de vista del comportamiente sfsnico, para ja revisign y disefio del refuerzo vor cortante en 1a zona de losa aligera otre objetivo fue obtener, con base en resultados experimentales, la rigidez de sistemas de josas planas aligeradas, para fines de andlisis ante cargas laterales. 3.2 Efecei6n de fa conexidn prototipo Durante el programa experimental se ensayaron conexiones interiores repre sentatives de una conexién prototipo elegida. ta estructura prototipo pa ra diselar los modelos se muestra en 1a fig 3.1; es un edificio de concre to, tipico para oficinas en el Distrito Federal, ubicado en una zona cuye welo se clasifica come compresible; tiene siete pisos y la distancia a 1 todos les sistemas de piso consisten en lo sis y disefio éel edificic se hicieron con el Regiamento RDF-76 (refs 10 y 31); el espesor de losa minimc requerido por dicho Reglamento (en su secoién 4.3.6h) es de 32 om, valor que permite omitir el cfleulo de Geflexiunes de la lesa. Se escogié un espesor de lose de 36 cm y colum nas cuadradas de 30 x 50 cm. para véluar los éesplazamientos horizontales, la rigidez de la losa alige rada se caiculé con el ancho eguivalente propuesto en el RDF-76; 3 dez de entrepiso se determiné con la férmula de Wilbur. El coeficiente sismico especificado para este caso por el Reglamento RDF-76 es 0.24; con siderando un factor de reduccién por ductilidad igual a 4, los elementos mec&nicos se calcularon para un coeficiente de 0.06; debido a que la altu ra del edificio es menor que 60 m, se admite el andlisis sfsmico est&tico de 1a estructura. El desplazamiento relativo de entrepiso més desfavora ble resulté 4.6 om, menor que el desplazamiento horizontal maximo permiti do por el Reglamento RDF-76 (ref 31) en la seccién 242, el cual era igual a 4.8 cm, considerando elementos ligados a la estructura en forma tal que no sufran dafios por las deformaciones de esta. La revisién posterior de la resistencia a cortante de 1a conexién, segiin el criterio del RDF-76, re querfa de estribos para el espesor de losa supuesto de 36 cm; esta condi cién eza la que se buscaba, a fin de estudiar conexiones criticas por cox tante; asf, se adoptaron las dimensiones mencicnadas para 1a estructura prototipo, Para determinar el refuerzo, se disefio el edificio considerando las siguien tes cargas de servicio: merta de 700 kg/m*, viva de 250 kg/m* para el c&l culo de acciones por carga vertical o 90 kg/m* cuando el analisis fue ante acciones sfsmicas. Los momentos y cortantes sfsmicos para un marco tipico del edificio se obtuvieron empleando el método del portal (fig 3.2); en ellos se incluy6 el factor de carga 7e 1.1, especificado por el RDF-76. ba zona de la estructura prototipo que se reprodujo experimentalmente (fig 3.1) es una de las conexiones sujeta a mayores elementos necénicos cuyo perimetro se hace coincidir con las zonas de inflexién donde los mo mentos flexionantes son nulos; con esta condidién en el perfmetro solo es necesario aplicar las fuerzas cortantes producidas por las cargas latera les. En la fig 3.3 se representan las fuerzas de disefio para 1a conexién elegida. El resultado de 1a combinacién de los diagranas de monentos sis micos (fig 3.2) y los momentos obtenidos por cargas verticales, indica que los puntos de inflexi6n, en direccién del movimiento sismico, se en cuentran a 0.32 L a eje de columna (L distancia entre ejes); para la di reccién perpendicular, el punto de inflexién se encuentra a 0.25 L a eje 38 de columna, lo que determina la geometria de la conexién prototipo de la fig 3.4, Las dimensiones de la losa son 480 x 380 cm, casetones dr 60 x 60 om, espesor de losa 36 cm y columna de 50 x 50 cm 3.3 Espectnenes 3.3.1 Justificacién de la escala Los modelos para representar 1a conexién prototipo se construyeron a escala 1:4, Luego se obtuvieron las siguientes dimensiones: losa, 120 x 95 om: es pesor de losa, 9 om; columna, 12.5 x 12.5 om; altura del modelo, entre pun tos de inflexién de columna, 89 cm (fig 3.5). Como los esfuerzos no estén escalados, el uso de 1a escala mencionada tiene la ventaja de que las car gas experimentales se reducen como el cuadrado de 1a escala, por lo que fue necesario aplicar al modelo solamente 1/16 del valor de las fuerzas que se requerirfa aplicar en 1a estructura prototipo, y los momentos expe vimentales se reducen como el cubo de la escala, con lo cual se obtuvo un marco de pruebas de dimensiones reducidas y un sistema hidrdulico de carga de construccién sencilla, adends de las consiguientes ventajas econémicas. La mayor parte de ensayes con modelos de estructuras de concreto, realiza das en diversas partes del mundo, han sido con escalas que varian de t:1 a 123, aunque también se han probado muros de microconcreto a escala 1:8 (ref 32). La diferencia de materiales para concreto normal y micro conereto, es que este tiene granulometria de dimensiones reducidas; los re sultados obtenides con modelos de microconcreto a escalas 1:4 y 1:8 (refs 32 y 33), demuestran gue estos reproducen en forma satisfactoria el comportamicnto de elementos a escala natural, tanto ante carga nonoté nica como alternada, y diferentes modos de falla. 3.3.2 Materiales Bl refuerzo por flexién consistié en barras comerciales corrugadas, de digmetros pequefios, acero de alta resistencia trabajado en frfo (TEC-60) con fy 6000 kg/cm? ; las varillas se sometieron a recocido, a 700 °C, 39 durante dos horas, con 1o cual se obtuvo una zona de Fluencia definida pa ra un esfuerzo promedio de 2400 kg/cm*, La curva carga-deformacién tipi ca de este material se presenta en le fig 3.6. Las losas se reforzaron con varillas de 3/16 pulg de didmetro en 1a malla superior y de 5/32 pulg en la malla inferior; e1 refuerzo por flexién de 1a columna tenfa difnetro Ge 1/4 pulg. Bl acero para los estribos se cbtuvo de alanbre gaivanizado liso, sometido a proceso de moleteado mediante un dado que le producia corrugaciones; adems, se recocié a 600 °C durante una hora para obtener una gona de fluencia definida; 1a curva carga deformacién tipica resultan te se muestra en la fig 3.7, donde se observe que 1a zona de fluencia de. finide no es muy amplia pero puede considerarse aceptable; se obtuvo un esfuerzo de fluencia entre 3600 y 4500 kg/om? (tabla 3.1). Les modelos se construyeron con microconcreto de cemento Portland tipo III, fraguado répido: 1a granulometria que se empled se indica en la tabla 3.2. La relacién agregado-cemento fue 2.5 y la relacién agua-cemento 0.75, para el modelo 52, y 0.8 para los demas modelos. La tecnologia empleada para el microconcreto se describe en la ref 33; los resultados sefialan que los materiales que se utilizaron tienen idénti_ cas propiedades que los de estructuras de concreto a escala natural; las xelaciones entre carge y monento en prototipo y modelo estén escalagas, pe ro no las relaciones entre esfuerzos en el prototino y cargas por unidad Ge rea en el modelo; por tanto, los esfuerzos en el microconcreto, acero Ge refuerzo y los de adherencia en el modelo, son iguales a los de la es tructura prototipo. 3.3.3 Construccién de los especimenes Las mallas de refuerzo de la losa y el acero de refuerzo de la columna se construyeron antes de su colocacién en una cimbra de madera; como caseto nes se emplearon cubos de yeso, imperneabilizados para que no absorbieran agua en el proceso de fraguado; estos casetones se destruian después de fraguar el concreto. Para el colado de cada modelo se hacfan dos revoltu 40 quella; el colade se iniciaba por la zona maciza y yas en una mezcladora al @ltimo el trance de columna superior del modelo, en la cual se colocaba 2 que en el ducto se hiciera el postensado de la columna. un tubo de PVC pa Para evitar huecos en el concrete después del fraguado, se vibraron las mallas de refuerzo mediante un dispositivo construide para este fin; la ope racién requerfa cuidado especial, dado que en algunos modelos el espacio las de refuerzo era minimo. El proceso de colado Gisponible entre vai denoraba de 2 a 2 hy se obtenfa un niimero suficiente de cilindros de pruc bas de 5 om de difdmetro por 10 om de altura, para determinar la resistencia del material. Aproximadanente tres dias después, se descimbraba 1a parte superior de colunna y partes laterales de 1a losa; aproximadamente cuatro dias nis tarde se hacia el descinbrado total y 1a remocién de casetones. iuege se procedfa al proceso de postensado de la columna para simular la erza axial debida a cargas verticales actuante en ella. 3.4 Descripedén de Los ensayes a 1 Condiciones de apoyo y carga za fig 3.5 ilustra ei espécimen tipo que se ensay6 junto con la modalidad de carga, y 1a fig 3.8 la conexién en estudio y puntos de inflexién debi dos a cargas verticales y acciones sfsnicas; en realidad estos puntos va rian de posicién durante el movimiento sismico, pero dado que los cambios no sern grandes, se consider aceptable mantener constante la ubicacién, calculada en el subcap 3.2; este dio como resultado las Gimensiones del modelo (fig 3.5}. La fig 3.9 muestra el estado real de cargas y desplaza, mientos en le conexién losa-columna; P es 1a carga axial actuante en la columna de la conexién, V representa las fuerzas cortantes sismicas que se aplican en le estructura, H las reacciones inducidas en los extrenos tas columas, y W la carga vertical existente en la estructura. Este sistema puede tener un desplazamiento relativo horizontal, 2A, entre los extrenos de la colunna, mientras que los extremos de las losas permanecen en linea horizontal. Za fig 3.10 muestra el espécimen tipo ensayado cu yos desplazamientos se caracterizan por los extremos de las columnas que permanecen en su linea vertical original y en cambio los extremos de las 41 losas tienen desplazamientos verticales; 6 es el desplazamiento vertical producido por la carga V en los extremos de la losa, y que durante la prueba se mantuvo igual para ambos; 4 es e desplazaniento en dichos ex tremos debido a la carga vertical W. El tipo de carga utilizado en el mo elo no hace intervenir'el efecto P - A originado por la carga axial en la columna, dado que los extremos de columa no pueden desplazarse lateralnen te; sin embargo, dicho efecto se puede considerar restando a los momentos experimentales el momento P - A calculado con la carga axial actuante y los desplazamientos del modelo; A se calcula suponiendo que el modelo debe ria tener 1a misma rotacién de cuerpo rigido que la estructura real, ror tanto éh 6 4 z fr 7 de donde A= 5 Las cargas V se produjeron con dos gatos hidrfulicos de 5 ton de capacidad naxima cada uno, de accién reversible (podian jalar o empujar) y trabajaban en forma independiente porque se pretendfa obtener desplazamientos 6 igua les en cada extremo; cada gato tenia 2 puntos de aplicacién de la carga (puntos B, fig 3.5). La carga vertical total, causante de una porcién de los esfuerzos cortantes en la seccién critica de 1a conexién, se represen taba por la aplicacién de cuatro fuerzas concentradas en la losa (punto A, fig 3.5) y producidas por cuatro cables de acero conectados a un sistema de gatos hidrdulicos. gn el transcurso de 1a prueba se puso especial cui, dado de mantener constante 1a presién en estos gatos, con lo cual se bus caba disminuir las variaciones de la carga vertical durante el ensaye; el valor promedio de 1a misma en los cuatro cables era de 2 600 kg,con una variacién de 10 por ciento (disminufa cuando el sentido de la carga late ral era el mismo que el de la carga vertical y aumentaba cuando 1a carga lateral era de sentido contrario) . La carga axial en la columna aplicada mediante el proceso de postensado fue aproximadamente 13 ton en todos los modelos, con lo cual la columna quedé sobredimensionada en 20 por ciento, aproximadamente. 42 3.4.2 Instrumentacién Se midieron las cargas aplicadas, asf como desplazamicntos y deformacio nes en puntos previamente establecidos. a) Catgas. Las reversibles se controlaron mediante lecturas en un puente de Wheatstone de celdas de carga, previamente calibradas, las cuales tenfan una sensibilidad de + 25 kg, mientras que las verticales median te lecturas en manémetro; posteriormente, los cables que trasmitfan estas cargas se instrumentaron con celdas de carga, cuya sensibilided era de +3 kg. b) Desplazamientos. Se registraron con seis micrémetros (Mi) colocados a lo largo del eje de la losa (fig 3.11). Las rotaciones de 1a losa respecto a la columna se registraron en cua tro micrémetros (MCi, fig 3.11). ©) Degormaciones. Se instruments cada espécimen con defornémetros coloca dos en cuatro varillas del refuerzo por flexién en 1a losa y las defor, naciones se lefan en el puente de Wheatstone; ia distribucién de los deforménetros se mestra en la fig 4.2. 3.4.3 Programa de prueba La investigacién experimental consistié en ensayar cinco especimenes, que representan a escala un cuarto 1a zona de conexién entre una losa plana aligerada y columna de un sistema de piso prototipo. Los especinenes E1A, E2, £3 se construyeron para estudiar diversas modali @ades de refuerzo por cortante y verificar las disposiciones de disefio sismico del RDF-76 para las conexiones entre losa plana aligerada y colun na, tanto para el refuerzo por cortante como para el refuerzo por flexii Los modelos E4, E5 tenian los mismos objetivos, pero se pretendia obtener recomendaciones racionales sobre el disefio sismico de la conexién entre 43 losa plana aligerada y columna, considerando qua posiblenente curva Falla por cortante no solo en la zona sélida sino también en la zona aligerada. Todos los especimenes estaban disefiados de manera que tedricamente se lo grara la fallade la conexién debido al efecto de los esfuerzos cortantes inducidos por 1a aplicacién de momentos de desbalanceo, antes que 1a falla por flexién. Esto implica que no regia el mecanismo caracterizado por 1a formacién de lineas de fluencia de momento positivo y negativo a lo largo de todo el ancho del modelo (fig 1.3). En la tabla 3.1 se resumen las propiedades principales de los especimenes. Bl modelo E1A se caracterizaba por no tener estribos de refuerzo por cor tante; se colocaron algunos estribos, pero solo en las intersecciones de las nervaduras en la zona aligerada, para facilitar la colocacién del re fuerzo por flexién. Bl modelo E2 tenia refuerzo por flexién parecido al de EIA, pero con estri bos de dos ramas en las nervadures, con una separacién de d/2 , siendo d el peralte de la losa; esta modalidad de refuerzo intentaba representar ja pr&ctica usual en el Distrito Federal. El modelo £3 tenia refuerzo por flexién ligeramente menor que los anterio res, con estribos de seis ramas formando una viga enbebida disefiada con el criterio del RDF-76. Fuera de la zona sélida los estribos eran de dos ramas con separacién d/2. 1 modelo Eh tenfa més refuerzo por flexién que los anterores y estaba reforzado por cortante con estribes de seis ramas en 1a zona maciza, for mando una viga embebidar en 1a regién aligerada, los estribos en las ner, vaduras eran de dos ramas a 1a separacién de un peralte, de manera que no contribuyesen a la resistencia al cortante. El modelo E5 era similar al fk en todas sus caracteristicas, excepto que 1a nervadura central tenia un ancho menor, a fin de hacer m&s desfavorable la resistencia por cor tante de la losa en su zona aligerada. als Los modelos E1A, £2 y £3 tenfan las mismas dimensiones de la zona maciza y de casetones, que eran de 47.5 x 47.5 x 15 om, respectivamente. Bn Ibs modelos El y £5, esas dimensiones eran diferentes; para el primero, la 20 na maciza fue 35 x 35 cm y los casetones de 10 x 10 cm; para E5 , la zo pa maciza fue 31.2 x 31.2 cm y casetones de 10 x 10 om. RESULTADOS 4.1 Aspectos generates Se presentan los resultados de los ensayes, y se hace énfasis en el primer modelo (EIA), ya que son tipicas las gr&ficas del mismo y se emplearon pa xa los otros modelos. En primer lugar, se describen los desplazamientos registrados en los ensa yes. El desplazamiento vertical total (A...) del modelo, respecto a su estado inicial sin ninguna carga, registrado por los micrémetros M (fig 3.11) es producido por las cargas Py y P., que simulan las acciones sismicas, y por la carga vertical W (fig 4.1). La carga Py se aplica en el lado nor te y Py en el lado sur; ambas producen un momento de desbalanceo a eje de columna My. Ay es el desplazaniento debido solo a 1a carga vertical W. La diferencia 6 = 4... - Ay rcorresponde al desplazamiento del modelo cau sado por las cargas que representan sismo. Se distinguen tres fuentes que originan el desplazamiento A, La prime tot” ra, Ajay, es causada por el giro de 1a columna en 1a cara donde se inter seca con 1a losa ebido @ 1a flexién en 1a columna; 1a losa debe tener este mismo giro, que produciré los desplazamientos 4.4). La diferencia 4... - 4.,) = 4;,, es el desplazamiento que tendria la losa si se supone rigida la colunna. Se considera que 4,,, es la suma ded), 46 ¥ 4 gig: 1a segunda fuente de desplazamiento, A_,.. es 41 debido a la rotacién concentrada de la losa, en la zona prdxima a la cara de columnar esta rotacién se registrd en los micrémetros MC (fig 2.11). La tercera fuente de desplazamiento, Se),, » 08 el causado por flexién en la losa entre el eje de columna y la cara extrema de la losa. En la fig 4.1 se muestran los desplazamientos mencionados. La historia de los desplazamientos 4... para las cargas néxinas de cada ciclo (lado sur) se presenta én la fig 4.3, 1a cual incluye el tipo de carga que se empled en los ensayes, niimero de carga, y nivel de desplaza mientos en el cual se encuentra la carga respectiva; por ejemplo la carga 74 corresponde al nivel de desplazanientos 1V. Para cada nivel de despla zamientos, el ciclo inicial se repetia una o dos veces. Za fig 4.4 corresponde a las curvas histeréticas momento de desbalanceo- rotacién (My - 8. 4)7 8.5, es el cociente-A.9./L, siendo L 1a distancia a eje de columna del extremo de 1a losa; en todos los modelos L = 57.5 em. Para estudiar los desplazamientos se eligié el extreno sur de 1a losa. En dicha figura se muestra la historia en conjunto de los ciclos de carga pa ra todo el ensaye. La historia de deformaciones unitarias que se registraron en los deformé, metros SG, para las cargas ndximas de cada ciclo aparece en la fig 4.5, donde se indican las de cuatro Ge los instrunentos colocades en el refuer, zo por flexién de la losa. 1 No 1 corresponde a una varilla de refuer zo de la nervadura central del lecho superior; el No 2, a una varilla de la nervaduva extrema (fig 4.2); e1 No 3 se ubica en una varilla de la ner vadura central del lecho inferior, y el No 4en la misma nervadura que 2, pero en el lecho inferior. EI origen de las abscisas en la fig 4.5 corres, ponde a la aplicacién del total de cargas verticales y sin carga lateral. La historia termina con el @itino ciclo ée carga. Para estudiar 1a energfa disipada por defornacién se enpled 1a fig 4.6; en la parte superior se representa la historia de energfa acumulada en a7 cada ciclo durante el trascurso de la prueba, hasta el Gltino ciclo de carga, y en la otra la energia disipada por deformacién en cada ciclo, a fin Ge comparar 1a degradacién de disipacién de energia de un ciclo inicial respecto a su ciclo repetido. =n la fig 4.7 se aprecian los perfiles de la losa para las cargas maximas de cada ciclo inicial, pero no se indicaron los de ciclos repetidos; los niimeros se refieren al nivel de desplazamientos en que se encuentran las cargas maximas. En la fig 4.8 se dibujé el desplazamiento (6) del extremo de losa, lado sur, debido solo a carga lateral, para valores m&ximos de los ciclos ini ciales de carga, donde se superponen de manera aditiva la carga lateral y la vertical; asimismo, se distinguen las tres fuentes de desplazamientos para 6. Dicha figura se divide en dos partes; 1a primera muestra la varia cién de las fuentes de desplazamientos, indicadas cono porcentajes del des plazaniento correspondiente al momento de desbalanceo méxino alcanzado en el ensaye; 1a segunda indica, para cada niimero de carga, los porcentajes respectivos de las fuentes de desplazamientos. 4... se obtuvo calculando Ja rotacién de 1a columna mediante ecuaciones de drea-momento. Se toné el momento de inercia de la seccién agrietada cuando el momento flexionante en la columna era mayor que el de agrietamiento, lo cual se cumplid en to dos los especimenes para los niveles de cargas maximas. EL desplazamiento A. se calcul6 cono 4.4, = LO.,,+ donde L tiene el ais mo significado y 8... es la rotacién concentrada en la losa a cara de co lumna registrada en los micrémetros MC (fig 3.11). Para el lado sur , Son 8¢ calculé con la expresién g.__ = Desplazamiento de NC2 - Desplazamiento de MCh ‘con t 48 donde t es la distancia vertical entre los puntos medidos por los micrd, metros MC2 y MCh, 1a cual varié entre 16 y 19 om, segin el modelo ensaya @0. a Gltima fuente de desplazamiento es A, se calcula come Li le despl ento es Ap, gue oul AFiex El Gltimo tipo de gr&fica (fig 4.9) se empled para evaluar los resultados yn la envolvente ae écimen; las Myo e obtuvieron o cada espécimen; las curvas M, - 6... se obtuvier de los ciclos histeréticos del tipo de la fig 4.4. Se muestran las envol ventes para las cargas miximas B, las cuales se obtienen cuando las car gas lateral y vertical son aditivas, y la gr&fica de cargas maximas D, que corresponden al caso en que las cargas lateral y vertical son de sentidos opuestos. Ademfs de 1a envolvente de los ciclos iniciales, se muestra la envolvente de los ciclos sostenidos 0 repetidos. #1 objetivo de ambas ord Ficas es facilitar el estudio de la rigidez, resistencia y 4 ctilidad, ob tenidas en el ensaye de cada espécimen. 4.2 Esp6oimen EIA En este espécimen la losa tuvo refuerzo por flexién (fig 4.2 y tabla 3.1); los estribos que se colocaron servfan Gnicamente como elementos constructi vos para las varillas longitudinales pero no como refuerzo por cortante, ntersecciones de las nervaduras. Con este por lo que se ubicaron en las i refuerzo, el momento de desbalanceo My , requerido para formar un mecanis, mo de flexién con lineas de fluencia positiva y negativa en todo el ancho de 1a losa, era 20 por ciento mayor que el momento de desbalanceo, Myy_ , correspondiente al que segtn el RDF-76 se requiere para producir falla por cortante en la zona de losa maciza. La historia de desplazamientos en el extremo de la losa, para las cargas maximas en cada ciclo, se muestra en la fig 4.3. Los ensayes se contro 49 Jaron a través de los valores que se iban asignando a estos desplazamicn tos; la historia de desplazamientos se £146 segiin el siguiente criterio: el desplazamiento maximo del extremo de 1a losa, debide solo a carga late ral, en el primer ciclo de carga fue del orden de 1.5 veces ol desplaza niento debide solo a cargas verticales: el momento de desbalanceo corres pondiente fue aproximadamente 25 por ciento de Mj); cada ciclo se repe tia una o dos veces, #1 siguiente nivel de desplesaniento resolt6 del of den de 1.5 veces el desplazamiento 6 mdximo alcanzado en el ciclo anterior. Les incrementos producidos por las diferentes cargas aplicadas durante un ciclo, eran iguales para el lado sur y para el lado norte, por las razones expuestas (subcap 3.4). Bl criterio para defini la historia de desplaza mientos se utilizé en todos los modelos. En la fig 4.4 se muestran las curvas histerGticas momento de desbalanceo-rotaciéa (Mp - 9,,,) resultantes. t El momento de desbalanceo m&ximo alcanzado ocurrié en la carga 142, con un valor “en = 135000 kg-cm, muy similar a la resistencia tedrica, M 138 000 kg-cm. La historia de deformaciones (fig 4.5), se inicia con 1a carga No 4, 1a cual corresponde solo a cargas verticales y produce un momento flexionante a cara de columna de 35 000 kg-cm, con una variacién de + 10 por ciento; este momento es ligeramente mayor que el de agrietamiento de la seccién sélida de la losa, considerando 1a cara infer‘~ . rmpresién, zn la Figura se observa que en la carga No 4, en una seccién de losa a cara dé columa, las defornaciones unitarias en los SG son similares en el lecho de xefuerzo superior e inferior, 10 cual indica que para cargas verticales, 1a disteibucién de esfuerzos por flexién es uniforme en todo el ancho de 1a losa, tanto en el lecho superior cone en el inferior. Por lo contra rio, para 1a misma seccién, 1a aplicacién sucesiva de momentos de desha lances produce concentracién de esfuerzos por flexién en 1a nervadura central (S¢1y 3), 1a cual es més notable a medida que se incrementan los niveles de carga, llegando incluso a la fluencia el refuerzo por flexién 50 de la nervadura central, mientras que al mismo ticmoe (fly 4.9),en el re fuerzo de la nervadura extrema, lechos superior © inferior, se alcanzan esfuerzos del orden de 25 y 50 por ciento del esfurrzo de fluenvia, respec tivanente, Tal comportamiento indica que la 2ona sdlida de la losa esta sometida a mayores esfuerzos, debido a que ahf se trasmite el mayor porcen taje del momento de desbalanceo. Se aplicaron 16 ciclos de carga, corres Pondientes a nueve niveles de desplazamiento diferentes. En las curvas histeréticas momento-rotacién (fig 4.4), a partir del cuarto ciclo con las cargas mximas 35 y 40, se iniciael deterioro de rigidez, aunque no marcadamente; esto se explica por la presencia de grietas en la zona s6lida de 1a losa que aparecieron para las cargas 23 y 29, miximas del ciclo anterior (No 3). B1 deterioro de rigidez es mas pronunciado a partir del ciclo 9, con cargag ndxinas 206 y 117; el My méximo de este ciclo fue 90 por ciento del My. Bn el Gltimo ciclo (16) con cargas méxi mas 249 y 256, la rigidez es pr&cticamente nula en una parte amplia de la curva nisterética: los momentos My nfinos alcanzados ene nisno varia ron entre 30 y 40 por ciento de *. Bn la fig 4.102 se define 1a energia absorbida por deformacién (£4); para conocer 1a variacién de esta durante el ensaye, se observa (fig 4.6a) que hasta e1 ciclo No 8, con cargas maximas 89 y 97, se disipé el 10 por cien, to de la energia total de deformacién liberada en toda la prueba; adends, se deduce (fig 4.6b) que los ciclos histeréticos hasta el ciclo 8 son razo nablemente estables, es decir, la energia disipada en un ciclo dado y en el siguiente repetido son similares. A partir del ciclo No 9, con carcas m&ximas 106 y 117, es notable el incremento de la energia disipada por de formacién (fig 4.6a) y los ciclos histeréticos repetidos son menos esta bles: los porcentajes de £4 para los ciclos repetidos respecte a los ind ciales son: 60 por ciento para el ciclo 10, 60 para el 13 y 30 por ciento para el 15. En la fig 4.4, se observa que a partir del ciclo 9 1as curvas histeréticas My ~ ®,,, Son m&s anchas; comportamiento que en su inicio tot coincide con el comienzo del marcado deterioro de rigidez ya mencionado. 51 Puede definirse una rigidez inicial como la pendiente dada por los ciclos 1 y 2 (figs 4.4 y 4.9), 1a cual disminuye con 1a fluencia del refuerzo su perior en su nervadura central (carga 23); no fluyé todo el xefuerzo de 1a cara superior de 1a losa, sino solamente el de la nervadura central, 10 ial. cual contribuy6 en forma importante al deterioro de la rigides i La fluencia posterior en el refuerzo del lecho inferior en la nervadura central (carga 82) produjo un considerable aumento en £4: este es el ca $0 del ciclo 9, cuyo nivel de desplazamiento fue el siguiente a aguel en el cval fluyé el vefuerzo de la nervadura central del lecho inferior. Para calcular la rigidez lateral de este sistema de piso, se determinaron tres fuentes de desplazamientos (subcap 4.1) que producen la deformacién 6 del extremo de 1a losa debido a cargas laterales; en la fig 4.8 se mues tra 6 para los m&ximos de los ciclos iniciales, hasta el ciclo en el que se alcanz6 la resistencia maxima; la gr&fica corresponde a los desplaza mientos del lade sur de 1a losa, donde las cargas lateral y vertical son aditivas. Se deduce que 4,,, contribuye a 6 con 10 por ciento, Ai, + 55 por ciento y p),, con 35 por ciento. Cuando las cargas lateral y verti cal son de sentidos opuestos, estos porcentajes son 10, 45 y 45, respecti vamente. El agrietamiento empieza desde el nivel de cargas verticales donde aparecen grietas por flexién en la cara superior de la losa con origen en la vecin dad de 1a columna; ademas, en la interseccién de la cara superior de la lo sa con 1a cara de colunna perpendicular al plano del momento aplicado, se forma una grieta més pronunciada que las anteriores, cuya longitud es la dimensién de la columna . Desde niveles bajos de los momentos de desbalan ceo aplicados, el agrietaniento moncionado se hace nis marcado, ademis, aparecen grietas por cortante en la zona de losa maciza, en el plano de aplicacién del momento de desbalanceo, como se pudo observar en la carga No 29; el momento de desbalanceo correspondiente a esta carga es aproxima Gamente 45 por ciento del m&ximo alcanzado en el ensaye; para este nivel de carga, las grietas por cortante y flexién en las nervaduras fuera de 52 1a zona maciza, no scr muy notorias. ‘También pudo observarse el agrieta niento en 1a cara inferior de la losa, en su interseccién con 1a columna, acompafiado de grietas por flexién similares a las de la cara superior de la losa. En general, ia direccién de las grietas por cortante coincide con la que se tendrfa si se supone que son aditivos los esfuerzos cortan tes debidos a carga vertical y los producides por el momento de desbalan ceo. El aumento en los niveles de carga produjo la falla, descrita como el in cremento del agrictamiento mencionado, con las caracteristicas siguientes: alrededor de la zona de losa maciza, en 1a cara superior de ella, se for ma la mitad de un cuadrilétero, como se observa en la fig 4.11b, correspon ¢ 2 la carga 205; este modo de falla es ms pronunciado en la carga 243, fig 4.11c, También se produjo una anplia grieta por cortante en una nervadura extrema (fig 4.112) correspondiente a la carga 205: esta grieta ocurrié debido a que las nervaduras no estaban reforzadas con estribos y se aprecia mejor en la fig 4.114 correspondiente a la carga 243, ocurrien do la falla por cortante en estas; adenfs, Gado que no estaba confinado el refuerzo por flexién, el agrietamiento hizo que este se pandeara lateral mente, caracterfstica que sumada a la repeticién sucesiva de los ciclos de carga, provocaron falla en la adherencia del refuerzo por flexién (fig 4.118). la falta de simetrfa del modo de falla (figs 4.11b y ¢), se expli, ca considerando que el marcado agrietamiento por cortante en las nervadu ras se produjo en un solo lado de 1a losa. En ciclos cercanos al @ltimo, en la zona de losa maciza se aprecié la for, macién de una parte de pirémide truncada invertida, 1a cual se considera como una combinacién de los tipos de fallas tedricas por cortante (fig 1.2), 4.3. Esp6cémen £2 El refuerzo por flexién de este espfcimen se miestra on la fig 4.12 y en la tabla 3.1; el refuerzo por cortante consistié en estribos de dos ramas, 33 en todas las nervaduras, separados 4 om, excepto el primer estribo que se colecé a 2 cm a cara de columna. En la descripcién de resultados del espécimen E1A, se definié e1 momento de Gesbalanceo Mpp- » Si se considera que el esfuerzo cortante es resistido solo por el concreto, se encuentra Moor = 160 000kg-cm, (tabla 5.1). Si se considera la participacién de los estribos, se obtiene Myyp = 96 000 kg-cm (tabla 5.1). BI momento My fue 172000 kg-cm: 8 por ciento mayor que Myy¢- El momento Me de desbalanceo teérico requerido para producir fallapor cortante fuera de 1as hervaduras fue 80 yor ciento mayor que Myp, (tabla 5.2). Bn la tabla 3.1 se observa que este fue el Gnico modelo que tuvo més refuer 20 por flexién positive que negativo a cara de colunna, a lo largo de todo el ancho de la losa. El desplazamiento m&ximo 6 del extremo de la losa para el primer ciclo fue Gel orden de tres veces el desplazamiento A, ; el valor My aplicado corres, pondiente fue 28 por ciento de Maye Bn la fig 4.13 se muestran las curvas histeréticas Ny - 9,5. foe a mix El valor méxino para My ocurrié en ta carga 162, con MDo* =155 000 kg-cn , © sea 3 por ciento menor que Mppe Se aplicaron 25 ciclos de carga, que corresponden a nueve distintos nive les de desplazamientos. La fig 4.14 se inicia con la carga 8 que corresponde a la aplicacién de cargas verticales Gnicamente. Como en el modelo EIA, en este caso se tie ne un momento flexionante a cara de columna de 35 000 kg-om, y en la fi gura se observa que se origina una distribucién de deformaciones uniforme 54 en todo el ancho de 1a losa, la cual deja de ser asf a partir de la apli cacién de los ciclos de carga lateral, siendo 1a variabilidad de esta dis tribucién creciente conforme aumentan los ciclos. De las curvas histeréticas momento-rotacién (fig 4.13) y de 1a envolvente de estas curvas (fig 4.15) se ve que a partir del ciclo 5, con cargas maxi, mas 32 y 36, se inicia el deterioro de rigidez, aunque no my marcadamente. Para las cargas D, el deterioro se inicié posteriormente, en e1 ciclo 9, con cargas méximas 67 y 72, B1 deterioro de rigidez es més acentuado a partir del ciclo 11, con cargas méximas 88 y 93; el mayor Mp en este ciclo fue 92 por ciento de N* . El Gltimo ciclo fue el 25 con cargas n&xinas 234 y 239, que dleron iugar a nonentos My iguales al 22 por ciento ce 4 La variacién de la energia de deformacién disipada en el trascurso de la prueba es similar a la del espécimen ETA. Se puede definir una rigidez inicial con la pendiente de los ciclos 1, 2 y 3 (fig 4.15);esta rigidez disminuye con 1a fluencia del xefuerzo supe, rior de la nervadura central, en la carga 32; en la carga 93, simulténea mente al incremento en 1a degradacién de rigidez, se produjo la fluencia del refuerzo inferior de 1a nervadura central. Por tanto, puede concluir se que Gicha fluencia contribuye en forma importante en el deterioro de ja vigidez. ta fluencia posterior del refuerzo de la nervadura extrema, lecho superior, en la carga 181, coincide con el inicio de la degradacién ée resistencia del espécimen. zn la fig 4.16 se analizan las fuentes de desplazamientos que dan origen 6. Se observa que 4 trib 10 por ciento, A.) con 30, a 8, Se observa que A,,, contribuye con 10 p con COP 30, ¥ Seley COR 60 Bor ciento. Para el caso en que 1a carga lateral y 1a verti cal son de sentido contrario, los porcentajes promedios son 15, 20 y 65, respectivamente. 55 Las grietas por flexién se inician desde 1a aplicacién de las cargas ve: ticales, carga 5 (fig 4.17a) y se ubican en la cara superior de la losa de manera similar a las descritas para el espécimen €1A. Las primeras grietas por cortante aparecen en el ciclo 3, tanto en la zona maciza como en algunas nervadurgs, y el monento My correspondiente es aproximadanente D 45 por ciente dem ~ > 2 D En general, 1a configuracién del agrietamiento y el mecaniswo de falla, parte del cual se aprecia en 1a fig 4.17b, fueron bastante similares a los que presenté e1 espécimen EIA, excepto que en el £2, el agrietamiento en las nervaduras no fue significative debido a que en ellas se colocaron es, tribos separados a medio peralte. 4.4 Espbodnen £3 Bn la fig 4.18 y en Ja tabla 3.1 se mestran los refuerzos de este espéci men, por flexién y por cortante. Este filtimc consistié en estribos de seis ramas dentro de la zona s6lida, separados 3.8 cm, excepto el primero que se colocé a 1.9 om de 1a cara de columna, y distribuides de manera que de de ancho ¢+d, en cuyos extremos se colocé refuer wan una viga embe! 20 adicional al existente en las nervaduras, Fuera de la zona s6lida los estribos eran de dos ramas con separacién de 3.8 om. do con 1a expresién del 2DF-76, considerando la contribucién de los estri 0S, es 123000 kg-cm. El momento Myp result 159000 kg-om. El desplazamiento m&ximo § del extremo de 1a losa para el primer ciclo fue igual al desplazemiento A,; el valor My correspondiente fue 28 por ciento de My», calculade considerando 1a contribucién de los estribos. tot? 2 valor ga 267 con un valor de 126 000 kg-om. Se realiza g 4.19 se muestran las curvas histeréticas My ~ pcurrié en la o: ha fig 4.20 se inicia con 1a carga 3,correspondiente 2 la aplicacién de xticales. También en este modelo, se observe que para esta car ga la Gistribucién de deformaciones unitarias del refuerzo por flexién en losa 2 cara de columna, es uniforme en todo el anche de la losa y deja serio 2 partir de 1a aplicacién de los ciclos de carga, aumentando la para ciclos posteriores. vas hister&ticas (fig 4.19) y de la envolvente de estas curvas ) se observe que a partir del ciclo 3, con caxgas éximes “6 y 4 el deterioro de rigidez; el momento Ny correspondiente e: max ciento de M™. BL deterioro en rigidez es casi com del ciclo 9 con cargas méximes 102 y 111, que corresponde ge Hmex ee valor H, de 85 por ciento Eitino ciclo (24) con cargzs méximas 394 y 401, proéujo Lo de HEX Gez ee la pendiente di °: y Gisminuye en la aungue no puede efirmarse con certeza, porque el on6 corvectenente; es rrcbeble que en esta carga haya flui ceo superior central. También se observa, en esa £4: n&s GGccil reszecto « los especinenes ElA y FZ. ar que las fuentes de desplazamientos en ios ciclos ini Aug; 7 20 por clento, 4.0, = 50 por ciento, ae), cliente; en despiazanientos Citimos se tienen como porcentajes promedios = 30 por spectivamente (fig 4.22). » 50 y 45, ha aplicacién de cargas verticales caus6 un agrietamiento por flexién si milar al obtenido en los especimenes EIA y E2 , aunque menos pronunciado. Las primeras grietas por cortante aparecen en la zona maciza; en el ci clo 3 con cargas m&ximas 16 y 22, el momento de desbalanceo correspondien te fue 40 por ciento de M™™* ; para este nivel de carga, el agrietamiento por cortante y por flexién en 1a zona de losa naciza, fue en general sind lar, aungze mucho menos avanzado que el descrito para los espectmenes ETA y £2 (fig 4.23a y b) correspondiente a la carga 210 y a la 394, carga nd xima del @ltimo ciclo de carga aplicado. También se observa que el agrie tamiento en las nervaduras fue, como en el espécimen £2, poco significati vo. En dichas figuras se aprecia que en el espécimen E3 se produjeron en general menos dafios que en los especimenes EIA y E2. 4.5 Espfcémen Eb En este espécimen las dimensiones de 1a zona maciza, casetones y nervady xas fueron diferentes a las de los especinenes anteriores (fig 4.24); el tamafio de la zona maciza se redujo con objeto de disminuir la resistencia por cortante fuera de esa zona. De las resistencias calculadas (tablas 5.1 y 5.2), se concluye que la Ge cortante, en la zona de losa maciza, con siderando la contribucién de los estribos, es prdcticamente la misma que la resistencia en la zona fuera de ella. El refuerzo por cortante en la zona sélida consistié en estribos de seis vanas, formando una viga enbebida de ancho c +d, de manera similar al mo. delo E3, con la diferencia de haber quedado a una separacién de 2.2 om, excepto el primer estribo colocado a 1.1 om a cara de columna; fuera de Ja zona maciza los estribos en las nervaduras se ubicaron a una distan cia d entre ellos. £1 refuerzo por flexién fue considerablenente aunen tado respecto a los modelos anteriores con objeto de incrementar el momen £0 Myp » que fue 223 000 kg-on, y tener asi un factor de seguridad adecua do contra falla ante el mecanismo de flexién dado por My . Los refuer, zos por flexién y cortante se muestran en la fig 4.24. 58 En el primer ciclo, conun desplazamiento Senelextrenode la losa 1.% veocs el desplazamionto 4, el valor M, correspondiente fue 20 por ciento de. max yevas histeréticas 4, - 8 se observa que De las o histerét 1b Sco (Fig 4.25) seo 5 ocurrié en la carga 235 y fue 140 000 kg-cm, Para el lado suz, el momento flexionante negativo maximo alcanzade ocurri6 en 1a carga 360 con 85 000 kg-om, 75 por ciento de Wpi y el positive maxi mo, en la carga 163, con 85 por ciento de M le A @iferencia de los modelos anteriores, en este 1a distribucién de esfuer 20s en los deformémetros no es uniforme desde 1a aplicacién de las cargas verticales; en efecto, para la carga 2, comparando las deformaciones uni tarias de los SG 1y 2, se observa que la deformacién en el refuerzo de la nervadura extrema, lecho superior, es del orden del 50 por ciento de la correspondiente al del refuerzo en la nervadura central, lecho superior; esta diferencia es mayor con la aplicacién de los ciclos de carga lateral, como se observa en las gréficas de deformaciones (fig 4.26). En las curvas histeréticas (fig 4.25) y en las envolventes (fig 4.27) se observa que a partir del ciclo 3, con cargas maximas 18 y 23, se inicia el deteriora de rigides, el My correspondiente es aproximadanente 25 por ciento de HO"; la degradacién en rigides es casi total a partir del cL clo 11 con cargas maximas 116 y 126, y un momento M, max 90 por clento de MP de aproximadamente Bl Gltimg ciclo (23), con cargas mfximas 360 y 370, alcanzé el 70 por cien to do Previamente al ciclo 11, en que se inicia la degradacién total de rigidez, solo se habfa disipado 6 por ciento de 1a energia liberada por deformacién en toda la prueba y los ciclos repetidos fueron razonablemente estables; después del 11, dejan de serio, increment&ndose notablemente 1a energfa di. sipada por deformacién en cada ciclo, de manera similar que en los modelos descritos. 59 En este espécimen, a diferencia de los anteriores, 1a rigidez inicial no se modifica apreciablemente con 1a Fluenciadel refuerzo de la nervadura central, lecho superior (fig 4.27); ademas, 1a fluencia del refuerzo cen tral, lecho superior y el inferior en el ciclo 11, coincide con el inicio de 1a degradacién total de rigidez. Las fuentes de desplazamientos en los ciclos iniciales son 4, = 20 por ciento, 4... = 35 por ciento, A), = 45 por ciento. En desplazanientos filtimos se tienen como porcentajes promedios 5, 45 y 50, respectivamente (2ig 4.28). El agrietamiento por flexién se inicia desde la aplicacién de las carcas verticales, en forma similar a la de los modelos E1 a £3; el agrietamien to por cortante en 1a zona de losa maciza se observé a partir de niveles de carga de aproximadamente 50 por ciento de cia el agrietamiento por cortante en las nervaduras fue menos notorio; para este nivel de carga, tanto el agrietamiento por cortante cono por flexién fueron similares a los Gescritos para los especfmenes anteriores. Este comportamiento se ilus tra parcialmente en la fig 4.29a, que muestra el acrietamiento alrededor de 1a columna en su interseccién con ia losa, descrito en los especfnenes anteriores. No obstante, en las configuraciones de agrietamiento por cor tante y por flexién se notaron diferencias: en las caras de la zona de losa maciza, coincidentes con el plano de aplicacién del momento de desba lanceo, se observé que las grietas por cortante se produjeron en sentido opuesto al que se obtendria por supezposicién aditiva de esfuerzos cortan tes por carga lateral y vertical; este Gltimo tipo de agrietamiento se pro dujo en las nervaduras y en las caras de 1a zona de losa maciza perpendicu lares al plano de aplicacién del momento de desbalanceo (fig 4.29b). A diferencia de los casos anteriores, el modo de falla es mas evidente en la cara de losa maciza perpendicular al plano del momento de desbalanceo 60 y en las nervaduras orientadas en el sentido del lado corto de la losa, caracterizéndose por presentar amplias grietas por cortante y otras incli nadas en la interseccién de la losa maciza y nervadura central, las que tienden a ser horizontales en esta al alejarse del capitel (fig 4.29b). En el plano de aplicacién del momento de desbalanceo, e agrietamiento fue menos pronunciado, aunque se presentaron grietas por cortante tanto en la zona maciza como en las nervaduras. Asimismo, como parte del modo de falla, al igual que en los especfmenes anteriores, alrededor de la co luma se observé pérdida de recubrimiento del refuerzo tanto en la cara superior (fig 4.29a) como en la inferior. 4.6 Espfoimen €5 sus ensiones (fig 4.30) fueron similares a las del E4 , con la variante de disminuir en 3.7 cm el ancho de la nervadura central y el de la zona ma ciza, a fin ae hacer aiin mis desfavorable el comportamiento por cortante de la conexién y buscar la falla por cortante en las nervaduras, fuera de la zona maciza. BL refuerzo por cortante en la zona maciza consistié en estribos de seis ranas, con una separacién de 2.4 om, excepto el primer estribo colocado a 1.2 ma cara de columna, formando una viga enbebida de ancho c+d_, de manera similar al espécimen E4; fuera de esa zona, los estribos en las nervaduras se colocaron a una distancia d entre ellos. £1 refuerzo por fae 230 000 kg-om. flexién fue similar al del espécimen £4, el momento ¥, MF Los refuerzosporcortante y por flexién se miestran en la fig 4.30. Las resistencias calculadas (tablas 5.1 y 5.2) demostraron que teéricamen te deberfa fallar por cortante fuera de la zona maciza. El primer ciclo de carga fue para un desplazamiento § en el extreno de la losa 1.6 veces el desplazamiento A, , el momento de desbalanceo correspon, diente My fue 23 por clento de Nyp, considerando 1a contribucién de es 61 max os. El momento dedesbalances méxino, M = 187 000 kg-em ocursis en la carga 176. Para el lado sur, el momento flexionante negativo maximo ocurrié en la carga 165 con 703 000 kg-em, 89 por ciento de M, , y el positivo maxino, LF a en 1a carga 176 con 59 000 kg-om y 66 por ciento de HM). La Gistribucién de esfuerzos registrados en los deformémetros de 1a seccién trasversal de la losa a cara de columna, solo es uniforme bajo las cargas verticales, existiendo diferencia de esfuerzos desde la aplicacién de los ciclos de carga lateral; es mayor 1a diferencia conforme aumentan los nive les de carga (fig 4.31). Se observa que en los ciclos posteriores al No 3, con cargas m&ximas 21 y 25, empieza el deterioro gn rigi max damente 35 por ciento de MH, 7 1a degradacién en rigidez es total después lez; el My correspondiente es aproxima del ciclo 11 con cargas méximas 118 y 127 (figs 4.32 y 4.33). El Gitimo ciclo fue el 24, con cargas m&ximas 451 y 461, alcanzAndose 50 por ciento ae we ° Se pudo observar que hasta el ciclo 11, inclusive, después del cual enpie, za la degradacién total de rigidez, se Gisip6 10 por ciento de 1a energia liberada por deformacién en toda 1a prueba, y que los ciclos repetidos de, jan de ser estables después del ciclo 7. Posteriormente al ciclo 11, 1a energia disipada por deformacién acumulada en cada ciclo aumenta en forma pronunciada, los ciclos repetidos dejan de ser estables, encontrandose co mo valor extremo que un ciclo repetido disipa 30 por ciento de la energia de deformacién disipada por el ciclo inicial. Se observa (fig 4.33), andlogamente a los modelos E1A, £2 y E3,que la ri gidez inicial disminuye con la fluencia del refuerzo de la nervadura cen tral, lecho superior; asimismo, a diferencia de todos los modelos mencio. nados, 1a fluencia del refuerzo de 1a nervadura central, lecho inferior, da lugar a rotaciones del extremo de 1a losa cercanasaia@ltina, © en curva, M- res descendente. en que 1a curva, H- @,.,,e8 desce: En la fig 4.34 se observan los promedios de las fuentes de desplazamientos en los ciclos iniciales: 4.4) = 30 por clento, 4... = 30 por ciento, 4 i ara iclos finales, los porcentajes promedio ‘lex 7 40 por cientos para los ciclos finales, los p. P: son 15, 35 y 50, respectivamente. El agrietamiento por flexién producido por cargas verticales fue similar al del espécimen EIA. Las primeras grietas por cortante se generan tanto las nervaduras, fuera de la zona maciza, como dentro de esta; el nivel An max Ga correspondiente fue 65 por ciento de N°” 7 asimieno, el agrietamiento Por cortante y por flexién en la zona de losa maciza y nervaduras, fue prdcticanente similar al del espécimen £4, ya que esta vez, en las nervadu & ras se notaron grietas por cortante claramente definidas, las cuales se produjeron en el mismo sentido del que se obtendria de un agrietamiento Por cortante en el estado de superposicién aditiva de esfuerzos cortantes por carga lateral y vertical. E1 modo de falla en el espécinen £5 consis tié principalmente en la ampliacién de estas grietas (fig 4.35); también forman parte del modo de falla las grietas por cortante en las caras de 1 losa maciza (fig 4.35); asf como el agrietamiento, descrito para los espe cimenes anteriores, alrededor de 1a columna en su interseccién con la lo sa, en las caras superior e inferior, Adends se noté pérdida de recubri miento del refuerzo en la cara inferior de la zona de losa maciza. 5 INTERPRETACION DE RESULTADOS 5.1 Resistencia detina Para estudiar la prediccién de resistencia de conexiones entre losa plana aligerada y columna, se elaboraron las tablas 5.1 a 5.4 correspondientes a los modelos ensayados descrites en el cap 4. En la tabla 5.1 se considera que la falla es por cortante y ocurre dentro de la zona maciza; se aplican los criterios del RDF-76 considerando, para fines de comparacién, que el esfuerzo cortante resistente es proporciona do ya sea solo por el concreto, 0 por este y los estribos, denominados Yar Y Ypg + respectivamente, Las columnas 2 a 4 se refieren a las carac terfsticas de la viga embebida en 1a zona maciza; la 5 muestra los esfuer zos cortantes por carga vertical actuantes en la seccién critica por cor tante; las columnas 6 y 7 indican dos criterios para evaluar el esfuerzo cortante resistente y las colunnas 8 y 9 contienen los esfuerzos cortan tes actuantes debido a los momentos de desbalanceo teéricos, los cuales se calculan en las columnas 11 y 12. En la tabla §.2 se considera que la falla por cortante se produce fuera de la zona maciza; se empled el criterio descrito en el subcap 1.1. ilus, 64 trado en la fig 1.6. Las columnas 1 y 2 de la tabla citada indican terfsticas del refuerzo por cortante en las nervaduras de la conexién fuera de 1a zona maciza y las columnas 4 a 6 seflalan diferentes criterios para evaluar el esfuerzo cortante resistente de las referidas nervaduras, dado que estas presentan caracterfsticaspara resistencia al cortante, tanto de vigas como de losas. La tabla 5.3 resume las re stencias experimentales y calculadas para los especinenes ensayados en el Instituto de Ingenierfa; las segundas provie de las tablas 5.1 y 5.2. ta columna 1 indica el momento de desbalan ceo maximo alcanzadc en los especimenes: 1a 2 los esfuerzos cortantes de bidos a cargas gravitacionales, actuantes en la zona critica por cortante en la zona de losa maciza; 1a columna 3 se refiere al esfuerzo cortante actuante debide al momento de desbalanceo maximo alcanzado en los ensayes e Hy + el que se calculé con 1a ecuacién ” oD x (5.1) onde 2d kta ea La columna 4 indica el momento de desbalanceo miximo resistente por cor, tante, calculado considerando que el esfuerzo cortante resistente esta jo que el esfuerzo cortante resistente est dado por 1a viga enbebida, Ja columna 6 mestra el momento de desbalanceo maximo resistente, calcula do considerando que 1a falla por cortante se produce fuera de 1a zona ma a y que el esfuerzo cortante resistente esté dado por _/f! El momento de desbalanceo que produce el tipo de falla general por flexién, en losas planas tanto macizas como aligeradas, se muestra en la fig 1.3a y est dado por ¢ - 1 = (MP am) (1+ (5.3) Myo 2) ( Cr donde Hh + ML nonentos flextonantes resistentes positive y negative, res pectivamente, en el ancho total de 1a losa L, dimensién del claro de losa 1 longitud de colunna en direccién del andlisis EL mecanismo producido por la falla general de flexién, da la resistencia indicada en 1a columna 7 que fue siempre mayor que los momentos experimen tales méximos (columna 1); los factores de seguridad correspondientes se muestran en la columna 8. La tabla 5.4 permite juzgar la validez de los diferentes criterios para predecir 1a resistencia por cortante de 1a conexién losa plana-columna. Se incluyen los resultados de ensayes de conexiones entre losa plana maci, za y columna, efectuados en Nueva Zelanda (ref 4), y los obtenidos en el presente estudio. Los resultados de la teorfa de 1a analogia de la visa (subcaps 2.3 y 2.5), se mestran en las columnas 6 a 10; en la 9 se compa xa la resistencia experimental con 1a calculada,considerando que la resis tencia al cortante estd dada por la contribucién del concreto en presen, cia de estribos (ec 2.29) y la contribucién de estos (ec 2.30). En la columna 10 1a comparacién se hace considerando que el concreto contribuye a la resistencia al cortante como si no existieran estribos (ec 2.22) y se toma la contribucién de los mismos como en el caso anterior (ec 2.30). Los resultados de aplicar las ecs 2.26 y 2.27 del reglamento RDF-76, se muestran en las columnas 11 y 12; para los especimenes descritos en la ref 4, el esfuerzo cortante resistente te6rico se. limits a 1.5 /f' dado que rebasé este valor el calculado considerando 1a accién de 1a viga. 66 Para efectos de comparacién se hace una modificacién al reglamento RDF-76, Linitande el esfuersa cortante resistente del concrete al valor /F" (os resultades se muestran en las columnas 13 y 14);adem&s, se indican las me adidas y coeficientes de variacién que resultan de estos criterios. Se obser va que el de la analogia de 1a viga, sintetizada en la columna 9, da valo res conservadores; la variante de este criteric, resumida en la columna 10, da resultados que en algunos casos son del lado de la inseguridad. La apli cacién del Reglanento RDF-76, columnas 11 y 12, es también del lado de la Inseguridad, pero el coeficiente de variacién es més aceptable. La modifi cacién al Reglanento ROF-76 (columnas 13 y 14) lleva a valores conservado, res en algunos casos, aumentando el coeficiente de variacién respecto al caso anterior. Cabe sefialar que los especimenes de la ref 4, cuyos resul tados se muestran en la tabla 5.4, son conexiones cuyas losas son macizas, por lo que se esperan respuestas diferentes de las que tienen las losas aligeradas; por tanto, no deben extrapolarse totalmente los criterios de prediccién de resistencia de un sistema respecto ai otro; en esta tabla se aplicé el mismo criterio en ambos sistemas solo para comparacién. Por los resultados de 1a tabla 5.4, es factible que el criterio del Regla mento RDF-76 pueda conducir a resultados inseguros, segiin lo demuestran los ensayes de la ref 4 y los especfmenes £3 y E4, especialmente este dit mo; la prediccién de resistencia de este espécimen puede mejorarse si se considera que el esfuerzo cortante resistente esti dado por JF,» como se hizo en Jas columnas 13 y 14 de la tabla citada; sin enbargo, este crite rio no es extrapolable a todos los especimenes, porque Lleva a resultados conservadores en algunos casos. Esta situacién pone en evidencia la nece sidad de modificar el criterio del RDF-76 para calcular la resistencia por cortante de la conexién, puesto que conduce a resultados del lado de la inseguridad debido a que la ec 2.27 sobrestima el esfuerzo cortante resis sente. Se propone considerar 1a siguiente modificacién a la ec 2.27 Ji — 1 a inane —— e Falla fuera Espéci Por grav | Por My | com vay | £0" Yay | zona sdlida | Mu men | con | we Rt ¥e ® @ ® ® © ® ea | 1.35] 4.23 11.34 1.38 | 0.44 2.85 1.26 e2 1.55 | 4.23 13.02 1.60 | 0,96 3.33 142 £3 1.26 | 4.23 10.58) 1.44 | 1.23 2.98 } a2 eh rio | 4.23 12.60 | 1.46 1.86 va | aa | ast &5 1.87 | 4.23 15.50 1.43 | 1.91 1.01 Jaan | oa Wi momento de desbatanceo nixino experimental var = 2 sft 4 M, momento de desbalanceo m4ximo teérico val = momento de desbalanceo calculade con la teoria de lfneas de fluencia Ji Esfuerzos, en kg/cm? Momentos, en ton-m TABLA 5.4 COMPARACION DE RESISTENCIAS EN CORTANTE, CALCULADA Y EXPERIMENTAL, DE CONEXIONES LOSA PLANA~COLUMNA Analogia de ta viga RDF 76 Modificacién del ROF 76 Espécimen No de ec “2.22 © 0.0063 7s 0.0056 0.0056 0 0.0008 0.0018 0.0030 v, fuerza cortante experimental, actuante en la seccién critica, Esfuerzos, en kg/cm por cortante dentro de la zona maciza y, fuerza cortante tedrica resistente,en la seccién critica,en Momentos, en ton=m ausencia del momento de desbalanceo momento de desbalanceo méximo alcanzado en e] ensaye cot momento de desbalanceo resistente tedrico TABLA 5.5 REGISTROS DE DEFORMACIONES UNITARIAS EN EL REFUERZO POR FLEXION DE LA Losa __ _ Refuer —— carga) & de 62 | carve soa | Modelo] No _— ° Fluye Wn Fluye Y | ®o @) © o ® — ela | 23 | 50 no | 82 100 } 0 e2 | 49 | 55 ast | 93 100 no 83 16 | 55 |no Functions no | 22h 100 no eh [116 | 90 | 100 | 40 no | 126 100 n0 «5 | 60 | 63 | 100 | 58 no | 335 100 no max 0 * Fluye en carga No 181, 65 por ciento de M TABLA 5.6 RESUMEN DE RESULTADOS EXPERINENTALES Célculo lye ] max Factor de Myr en |My sen n iclo so: duct ii ye T rcemna} Caron | Prot” So) oieTe! | tenia se ton =m | Porcents. rad x 10° je 0) ® | o ® ® © T 0.70 52 163 58 | 3 400 | 2 050 0.60 | 11500 | 0.30 | 10.8] 8.5 4 0.60 47 156 62 5 350 2 750 0.52 13 300 O.4o 11.3 [10.5 6 | | 0.60 56 256 59 | 4350 | 2 850 0.65 | 9850 | 0.44 | 8.3] 10.7 | 8.5 0.50 36 198 61 | 6 100 | 3 600 0.59 | 15200 | 0.40 | 9.4 |10.8 8 0.67 36 269 6h 6 150 3 900 0.63 | 19 800 0.31 | 10.6 | 8.8 | 6.5 + en kg-em TABLA 5.7 CONTRIBUCION DE LAS FUENTES DE DESPLAZAMIENTOS PARA EL EXTREMO DE LOS ESPECIMENES Fuentes de desplazamientos para § (debido a cargas laterales), en porcentaje Desplazamientos por carga vertical, en cm “los ©+®@ | O40» ® ® ® © oO 0.096] 0.42 40 0.53 } 10 | $0 40 0.56 50 0.38 to | 30 | 60 | 0.50 30 063 | 5 50 us | 0.53 0.073] 0.29 45 oy |g 45 50 0.47 ho ose es 35 50 out TABLA 5.8 RIGIDECES EXPERIMENTALES Y TEORICAS DE LOS ESPECIMENES ENSAYADOS Experimental Teérico € Por carga ver Por carga Espé tical lateral ic ce fe cimen ; et Tea eeereae |e (aa ‘ . : ® ; ®@|O|%|O|© cia | 158 000 | 196.98] 1245 | 13.00|5.36] 790 490 | 965 | 0.63 | 0.84 £2 Yoh ooo | 210.11] 1280 | 15.72]2.89) 920 | 2460 | 855 | 965 | 0.72 1.50 £3 176 000 | 236,38)1340 | 18,111.56 | 985 | 2460 965 [0.74 | 0,94 eh 166 000 | 259.0411 560 | 17.87)5.28 |1 030 | 2750 1280 | 0.66 | 0.84 ES 402.35] 2470 1 630 E médulo de elasticidad del concreto, en kg/cm? 1° momento de inercia de seccién bruta fuera del capite}, en em* 1 1° momento de inercia de seccién agrietada fuera del capitel, en cm” 2 1 momento de inercia de seccién bruta fuera del capitel, con ancho c + 3h, en cm* El en kg cm? x 10% K,+Ko en kg-cm/rad x 10° 60 Seccion critica a) Esfuerzos por carga vertical Va \ Flexion \cortente b) Esfuerzos por momento de desbolenceo ane, v AB ae aC ve “co = T ee a = Esfuerzo cortonte c) €sfuerzos cortantes resultantes Fig 1.1 Es{uerzos cortantes on La uni6n Losa plana-cotumna Seccién critica Y eee vertical tdi tiry a 1 a) Folla por cortante debide a carga vertical b) Falla por cortante debida a momento de desbalanceo dos de fabla por cortante on La conexibn Losa plana-coLuma Lineas de fiuencia de momento f J [ a pete Columna Lines de fiuencia de momento negative Linee de fi momento pi b) Modo de falla local por flexidn (ref 5) 1.3 Mecansmos de fatla por slexi6n en Losas planas sujetas a cargas Latenates momento resistente positivo del tablero de losa My, momento resistente negativo del tablero de losa Fig 1.4 Esfuerzos contantes actuantes en fa conexion cuando se alcanza la capacidad de fa Lesa os sLexién ANTAL PLANTA SECCION a) Cruceta de ocero a £ c) Pioca de acero Ly {AS + e) Canasta de f refuerzo 1 1.5 Modatétades de resuer coda ST It SECCION b) Vigo embebido d) Collar de + cero HL I po f) Borres dobladas | ~~ por contante de conextones 2osa peana- V, ao § V 5 Ng ) a V3 \ Ve 4/2 ) £ wy ‘ Mi Vie Civy Esfuerzo cortante en cada nervadurav; = a M Momento equilibrado por fas fuerzos en code nervadura OM, EA; vj C; v aM, C, M 2 DWM SM sac? © sea v= 2M Cy ti Mace v = aM i es D BA\C; ae Li AIaMo Fuerza cortante en cada nervadura = VAT 2 debida al momento de desbalanceo EAC; in C.A.aM Fuerza cortante debida a Ia corga v= -WAi, “II 2 vertical fuera de Io zona critica, ‘roT EA, zac? W, y al momento de desbalanceo Fég 1.6 Revisé6n de fas nervaduras por cortante D A ronan --=4 Ti 1 \ T z| +-— — eg ho | = i i me 1 ie \ [Danaea emees| Cc. ,8 ae oat c) Fuerzas externas e internas actuantes ¢) Seccion critica en !a conexicn Excentricidad de lo fuerza cortante b) Esfuerzos cortontes actuantes en la d) conexion debidos a carga vertical y momento de desbalanceo Fig 2.1 Fuerzas y esguerzos actuantes en La conexién Lesa plana-colunna x Fég 2.2 RefaoiGn Yu/vo con Mp/M = at Mu Fég 2.3 Déagnama de interaceibn M, vs V,, ot enone — 7 ese ee BRSR BISLBLZL28LBl8LS BRB gs o ee ee eee « Fall can afer rirtey rir ee eee Pere ese ueeen eee ee] edited Led bod Lo 3 . 4 a a iJ tjbo Fe Ly 3 ° 3 8] 8 ie aia) ro Ld ae ea ud m4 sa pea aes ia 1 ae a) aJtj ted itd pa “Tey eal rca Fara mt if 4 all ied Leg beg Lo be Ld ia Pury pied id Lotus Low ia my ry bed Ley Lobb rma ay ope my iTS ata Led —JL-d bed Led Led rm maa psa pena a mira ry Wy Ld a mp ee ee cee : rm Mint] mim - J otis lu at Oy tad ta to beta td Lob tL, : Mon ce rt B Lota Ld Lk ® é 2 my BT 8 Ld 1 td ° 8 2 : my & Ld t f - 1 i mie ot ud td 12a mr ri’s ted tod -' 9 an 310 70 Seccidn de la viga equivalente ablenro tipico de Losa atigerada y seceién de 2a viga equivakente seg ek ROF 76 T 1S 602060 30 6020 60 15 Corte B-B Fig 2.5 qs Rae yy Fig 2.4 ConexéSn Losa plana-cokuma con estrébos Fig 2.7 Modeto anatttico + Andtisis con Ia teorfa eldstica de placas F deigadas; losa mocize (ref 19) @ Andlisis por elementos finitos;losa alige- 10 rade (ref 20) O6 04 Ancho equivotente, segin RDF 76 og L—_1 ° os 10 2.8 Comparacién de critertos para determinar rigideces de Losas planas ante cargas Latenates Carga loleral, ° a 330 Forma de ensaye 2 3 4 grados Acotaciones,en cm SHE +E#S = = “| ee BS#4+4+6#3 Ensaye de una Losa ante cargas alternadas (neg 10) Seccin critica por cortonte alrededor de Ia columna /——— Seccioh critica por cortonte t fuera de Ic zona. de estribos Fig 2.10 Secetones erttions por cortante Ejedelacolumna— oy = i--Seccion ! critica i T-Centroide de lo seccion critica Fég 2.11 Geometrta de una conextén de borde t oy Se. pe Eje de Loe | Nicentroige de qT | | seccidn critica L-Seccion critica Fig 2.12 Geometrta de una conextén de esquina TY ae | 75°75 75 75 75 Conexion estudicda Acotaciones, en m Fig 3.1 Geometria def edigicic ~ ~ ~ ns 2 5 23.89 3.89 NG | f+ 7.96 f+ 1593 j— 15.93 24.9 24.9 12.85 2591 25.91 198 23.89 23.89 ze N2 2497 243 8.64 Wer 17.27 28.69 28.69 15:73 31.46 3146 ma 12.95 2591 25.91 ‘ ' 28.69 28.69 / — 8.99 fist —f-1797 15.73. 31.46 31.46 Fig 3.2 Déagnana de momentos, en ton-m, y cortantes, en ton, Sésmécos ALtinos para vigas y columas | P= 244 ton | Mg) | My= 30.7 ton-m My) itt Ms= 24.9 ton-m ee I >, = 293 ton My momento por cargos verticales Mg momento por sismo Fig 3.3 Fuerzas de disoiio en £a conextén prc ebegida Ut U 16 60 15 60 20 60 30 60 20 60 15 60 10 ep 480 Acoteciones,en em Fég 3.4 Zona de conextén remroducida en Los espectmenes 127 [ Ey Columna postensada para 39.9) 4 Corge ———— simular carga axial 4 Bi lateral : Co 319 T - al Br 1 I ¥ Cargo lateral 39.9 cargo Cora } gravitacioncl - ravitacional 43 ch 9 Lo Articutacién OS x Acotaciones, en cm rune. de ensaye 800 Pyen kg 600 Ss 400 F 200 a ! i 1, 11 i» ° 2 4 10 2 ex10° Fég 3.6 Cunva carga-defonmacién tipéca para ef acoro de nefuerzo por kLexiGn. dédmetno de 5/32 putg) Pyen kg ——_—— 100 50 ° t | 1 i i 1 i = ° 5 10 18 20 40 45 ex10° Fég 5.7 Curva carga-defonmact6n tipica para ef acero utéitézado en eatnibos 329 — Conexion en estudio Fig 3.8 Estructura sufeta a movimiento stsmico Estado real de conexién Losa-coumna 4o 2osa-cotwnna g 4.10 Estado de cangas apticade ab mode Ngonsmetros cokecade: Acoteciones,en cm Lado sur sen e modezo Fig 4.1 Desplazanientos en ef modelo rior) “sho i gadas {leche jos {leche inf Acetaciones,en em Anregto de£ reguerzo _) para Las tot! mientos (A, a2 ca -t00.0 5.0 lk 3.0. 2.0 ROTACION tReD E-03) “50.0 Fég 4.4 EspEoimen EIA. Cunvas histenéticas Hy - 8.5 t 75.0 i eal SL p oF ! ole | ol V t e2_Defermesion uriteria de fluencia © oh 7 raf MY N/ M V Ne abs xe lefonmaciones unitarias registra ettos pare Las onrgas méxinas de cada cicto a5 c} Copecidad de absorcidn de energfa en eic histerético Curva esqueleto Coeficiente de amo: equivaiente 1 Ey 7 We b) Definicidn del coeficiente de amortiguamiento equivalente Fig 4.6 Pardmetros de Las curvas histeréticas ° 30000 2 = WW 20 000 000 pp os ° 5 10 15 20 No. del ciclo c 5 10 15 No.del cicio b) Energfa disipada por deformacion en cede ciclo Fig 4.7 Espéetmen ETA, Energta disipada por deformacign vin vu S vint Escalas {1 230 horizontel scalas 11:1 vertical Fig 4.8 Espécémen ETA, Pergiles de La Losa para fas cargas méximas det ciclo iniciat de cada nivel de despkazanéentos 138 b) Carga No. 205 Fig 4.9 Espécdnen EIA. Congiguraciones det agnietamiento y mo do de {alla “e om - d) Corga No. 243 Fég 4.9 (Contéinuacéén) 3 8 80 60 8,en porcentaje,para M,mdximo 40 20 100 80 60 40 38, en porcentaje, para cada carga mdxima 20 Fig 4.10 ° 20 40 60 80 100 Poreentaje de Mymdxim cento Ipmdximo ie ——— I | | Attex | L aS a Seon bE | | | N. | | NN 6 23 46 74 106142 No. de carga Espfcimen EIA, Partictpacién de cada fuente en ek des plazaniento ado sun iat [0 Acctaciones,en cm uerze Arregko det 2 150, 200, HONENTO OF DESBALAICEY IRGC En g MODELO E2 “ine Jae ea we we 70 Tm0.0 25.0 0.0 ROTACION (890 E08) Fig 4.12 Espéciner Cukvas histefeticas My -9 aed Stor & c_de fluencic x10" ° ey. MAAN cin unitesia de fluencia cancaneiee 174 we 9S 208 aie 22° m0 Ye O85 ree RENE 6 2 ig er « 2 B sess we Bu ww Ye ye rr 88 88 OF ne MS ye BF Fég 4,13 Espéeimen E2. fiistoria de degonmaciones unttarias regisiradas en Los degonnbmetios para Las cargas whines de cada cicte = < eae | e eS oo 7 \ o é a —t___ ele ene Os NenEO REO MEEC SO ty ct ow)rou wy 010d g ap aloueased S Fiex © 8 |2 © o nt 6 o + 48 © / fe aL te oo Oo 0 % 6 S tt 1 0B309 oppo o10d g ap afpyuvai0d sarge No. de Panticivaci&n de cada fuente en e2 desplaza miento 6, Lado sur Fig 4.14 Espéesmen EZ. 145 b) Modo de falla 4g 4.15 Espécémen 2. fable Configuraciones det agrietaniento y modo de 146 18 0 3/16 pulgades (iecho superior) 18 g 5/32 pulgadas (lecho inferior) E616 mm@ 38cm « =Hi=t | =F -4 x a F i 189 3/16 pulgadas(iecho superior) 18 6 5/32 pulgados(lecho inferior) [ | | | ote | | A [ ay, atl an Os Acotaciones, en em Fag 4.16 Espécimen ES. Arregto def resuerzo Fég 4.17 Espfoimen £3. Cunvas histenéticas Ny 2, ot 148 Deformocion unitaric de fluencia EARGAN®255 355 298 yan 348 ey 45058 7% Se fh Ye Me ver 202 8 SG 2 *e YY NN oo ee hohe sco 3 ee “| Deformacion uniteria de fluencia a |e ah AA * L cARCA NO? 24 pas 28? om ‘308 33: \ VV my A 7 \\ MA IV \ nome we age | \ [ Sete a! eres | y A OT He YO a ETE Ty s6 4 Fig 4.18 Espécimen £3. Historia de degonmactones unitarias registradas en Los degormbnetros pana tas cargas mixinas de cada cielo oxime S 8 Porcentaje de 8 para cada carga m: © ° s 2 3 3 8 ° E “8 0 2 © 60 « 8 20 2 16 50 102 171 2 256 298 344 No. de carga Particivacién de cada fuente en ef des, fado sur 150 ) Agrietamiento antes de la falla.Carga No.210 b) Modo de falla. Carga No. 394 Fig 4.20 Esp6ctmen £3. Congiguraciones det aghietamionto y modo de fata 28.8 3/16 pulgadas(iecho superior} P 284 5/32 pulgadas(lecho inferior) 1 24 83/16 pulgadas(lecho superior) 244 5/32 pulgadas(iecho inferior} Eglemm@ Bem \ r75t i, 375 375 28,32 foe pa r Acotaciones jen cm Fég 4.21 Espécémon E4, Anrreglo dek refuerzo MODELO EW 52.0, 2.0 30.0 100.0 150.0 200.9 RSTACION (RAD E03) 100.8 7150.0 "200.0 tor enéticas My -® Cunvas hist Esp6canen E4. Fég 4.22 €xlo €x10 €x10 & TI. _____deformecidn uniterie oe fivencie ve 1.0 CaRGA Ne 35 46 : 6 = 8 ats 2 AR A AKAN 9.35 ~ vor of 5 1 2s = 35 3 a ae om al soi BO Deformecion unitaric de fluencia | Fea es aera areca ESI NN gnE SCEINEETR EIREEEET 1d ad Hhan pues y kof s62 4 Ola Deformacicn unitoria de fluencia 15 ie a ~ OE cawcanries 2, zs ass BX 303 yay EL sso C5 Te bas 386 co ae 3 Ye ye ° -— > 4 2.0 Deformacicn unitoria de fluensio a rob eee eo Ae Ne ©. 5 re 3 oe Bo x Ta W v -w = ses Fig 4.23 Esnéoumen iistoria de degormaciones unitarias registra das en £08 degonmémetnros para Las cargas miximas de cada cicto 4 , Deformacicn unitarie de f ay 18 ~~ = oF x Ob © al 05h CSS 2 ae ‘Sr 62 7 a TTT TT tT Ry ee ee ee S64 4 Deformacién unitoric de fluencia SF _ cansnneeso eee Fég 4.23 {Continuacédn} 100 makimo © o ° » & 8 Porcentaje de 8 para M x 8 ° 20 40 60 80 100 Porcentoje de Mp m&ximo méxima Porcentaje de 8 para cade carga 2 @ 3 8 3 T T T / 7 < > n 8 T op Ltt Loi y= 4 18 38 56 84 116 154 198 235 No. de cargo Fig 4.24 Esp6cémen E4, Particcpacédn de cada fuente en ob desplazamiento 6, Lado sur 156 a) Estado final Fig 4.25 Espéctmon £4, Congiguraciones deL agrietaniento y modo de faele 2403/16 pulgedosilecho superior) 4.05/32 pulgedasitecho inferior) - Edlemm@ 24cm E61.6mm@ 81em mt 5 375 375 i 2s. 25, 375 375, 25 a 28.0 3/16 pulgadus(lecho superior) 28 0 8/32 wulgadas(lecho Acotaciones, en cm Fég 4.26 Espécémen ES. Antegle def refuerzo HomiTO De Desa mcED 6c EH) %, ° povacson fea €-031 Fig 4.27 Espbotmen E5. Cunvas histersticas "0 tot is 159 de flvencio €x10 S6 4 oneal Deformacidn uniterie de fluencia TSE a SiGe) "ce 7 Be ei : wv 1.0 301 0.5 $5 167 ete zee 269. a he 3° 863 "o sol Deformacicn unitaria de fluencia x Sh * 1.0} sor BE ser 482 46! O05 F er tae 178 198 227 ps3 272 5a i aw es oot te SO Gerso 35: ors SSP a we sr a? 00 T# G7 10) 8 TSE wo 167 218 244 aco 288 31P so4 Fig 4.28 Espoimen ES. Historia de desormaciones unitarias registradas en Los defor inémetnos para Las cangas mixinas on cada cico 3 maximo nije de Mp Por att 2 ° 8 2 pul)xow 06109 No. de orga Particépacién de cada fuente en e& despla zamiento &, Lado sur Esp6cémen E5. Fig 4.29 161 162 =~ 4 Ciclo inicial ——--— Ciclo sostenido € LS 5 163 4 / 108 205 fe VY a Z10f Fluencia. Refuerzo nervadura o os central ,lecho superior cae o 1 1 4 1 1 i 1 oO 10 20 30 40 50 60 70 80 390 @tot,en rod X 10° a) Cargas mdximas B £ 15> § ais a = 10 13s aN os Fluencia . Refuerzo nervadura central, lecho inferior 4, 1 1 1 i 1 aL oO 10 20 30 40 50 60 TO 80 30 Fig 4.31 @ tot ,en rad x 103 b) Corgas mdximas 0 Espécinen EIA, Envolvente de rotaciones experinentates, Lado sur clo inicial ——- Ciclo sostenide € Fluencia del refuerzo en é la nervadura extrema, £ is iecho superior - 5 16. 1.0 “ye __ Fluencia del refuerzo i “a en la nervadura cen - 1 os Ls tral,lecho superior I Vase A 1 1 i ! . L ! . ow 2 30 4 50 60 70 80. 90 @tot, en rad X10> a) Corgas mdximes B £ 71s 5 8 WN, Fluencia del refuer zo en lo nervadura cen- tra!,techo inferior os L 1. 1 1 1 \ ; oO 10 20 30 40 50 60 70 80 30 @tot,en rad X 10° b) Corgas méximas 0 Fig 4-32 Espécimen E2. Envolvente de rotaciones experimentates, Lado sur My yen ton-m 4 —— Ciclo inicial 18 - Ciclo sostenido 7 256 ag 10 —-—~ <8 320 ~~ Os a 334 a ! L 1 an 60 80 100 120 @ tot en rad x 10% a) Cargas méximas 8 Ve 267 244 = 1.0 \tuencio refuerzo nervadura 40 “OS central lecho inferior L L L 1 L = ° 20 40 60 80 100 120 - Btot,en rad x 10° b) Cargas maximas 0 EspEcimen €3. Envolvente de retacéones experinentates, cade sur in ton=m My yen ton= m 1S 5 4 —— Ciclo inicial —-—=- Ciclo sostenido entral,iecho superior fo ruenee del refuerzo en la nervadura c 98235 gr = 360 2S 335 > a) hg Sn 4 Lot ! emus ar eet ce 20 40 60 80 100 120 140, 160 3 @ tot,en rad X10 0) Cargas meximes 8 fence del refuerzo en la nervadura central, lecho i : [163209 2s 290 370 i \ i 1 i pati jiu, 20 40 60 80 100 120 140 160 @tot,en rad X10~ b) Corgas moximas D Fég 4.34 Espécimen E4. Envofvente de rctaciones expertmentates, Lado sur 166 Fluencia del refuerzo en ia nervadura central, 20 Vac superior / eat 269 My yen ton - m 0.5 his —— Ciclo inicial — Cicio sostenido ° ° 20. «440.~««GOCBS:C«<‘CSC‘KSCMO ven rad X 10° a) Cargas moximes B - 4 v6 _—Fluencia del refuerzo i BD en la nervadura cen- < tral,lecho inferior an = 3 5 Tas 253 NN = 10 os Oo 20 40 60 80 100 120 140 @ tot en rad x 10° b) Cargos moximas D Fig 4.35 Espécimen E5. Envelvente de rofaciones experimentates, Lado sur Envolvente de ciclos iniciales -orn- Envolvente de ciclos sostenidos Factor de ductilided, b) Fig 4.36 Descripeién de 20s pardmetros empbeados para deginir ductividad

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