A la medianoche dos copas estarn llenas y esperando,
en la distancia te pensar tanto que tal vez, entre las risas y los abrazos, logres recibir el tenue sonido de mi llamado. Si as fuere solo te pido que tomes una de ellas, y recordando lo bueno que entre nosotros ha pasado, acerques tu copa a la ma dicindole con ello a mi corazn que contigo nuevamente he brindado.