Una intuicién de las cosas La dura pepita de la belleza De las pasiones a las cosas El cuerpo de la arquitectura Ensefiar arquitectura, aprender arquitectura {Tiene la belleza una forma? La magia de lo real La luz en el paisaje 29 J 53 65 7I 83 89\desgastado.Eiergen sentinientos, Algo nos connie, Mas alld de tos signos "Todo es posible” se oye decir enol mundo delosespeculadores "Ma- seats abmost alright, dice Robert Venturi ol arqutect, “Nada fan= ‘ona ya afrman aquellos que suifon con ls ihaspalidad de nuesoa epoca. Estas expresiones representan opiniones que se contradican entres.cvando no hechos conradictorios Parece que nos mas cos tumbrado a vivir con contradiciones,¢ induso podemos mencionar igunas razones para elo hs tradiciones ee dcusven y ha deado de haber identidedes culturales cerradas. La economda yl politica ponen ‘en marcha una dinémica que nadie parece entander y coatrolir real. mente, edo se mezca con todo, la comuniacion de masas produce ‘un mundo arial do sinos, Arbieraredad (Quiz podriamos describiral a vida posmoderra:tode aquello que vs més ali de nuestros dazos blogrficos personales parece ago, boero= 50 .d2 alin modo, veal. E mundo est leno de sgncse nformacio= res que representa cosas que ya nadie endlencle del todo, pues estas alfin yal cabo,no se muestran mis que como signos de otras corse La verdadera cosa permanece ocuitaya nadie consique vers, Con todo, estoy conwencide de que sguen existence cosas verdide= +a, aunque estén amenazadas. Hay terra y agua ha del so, pase y vegoracién, y hay objetos ereados por el hombre —como mécuinas, Ltensios Instrumentos musiales— que sor lo que Son, que no son. poresdores de login mensaje ati y cays presencia os obvi Cuando concemplamos objetos o eifiios que parecen descanenr en sl mismos, eustra pereepeldn se hace también, de una forms singular, sosegads y sin arietas, El objoto ax peribido no nos impone singin cnunciado: simplemente est ai Nuestra percepelan devine tranqui- la, sin prejlcos, sn 49 de pores: trasciende lo sgnosy la sn thos sd biota y vas ubique eel contro de ls concienca, Ahoraen ese vac dela percep ‘on, puede emerger en a espectador un recuerdo que parece proce: [er de lo hondo det tempo, Ver el objeto signex ahora también brruncar ef mundo on su roca, pues al ne hay nada que no pue- dh emenderse [Eis coms corrientes def vidn cotidana reside una fuerza especial, pavecen deci los cuadros de Edward Hopper: Slo hay que mirar= 1 tiempo sufciente para vers Flies complatador [epresenc de dtermindo fico ene praia sees Pare Bar spent ara. es dap ningr wan expec [bs tocorcarina gional idan [cae screen nid eel ma pe me ves, pertenezco DDespiorta toda mi pasién poder proyecsaredilelos que, con el correr (ol tiempo, ueden soldacos de esea manera natural con la forma y hvstoria del ugar donde se ubsean Con cada nuevo edfio se neervene en una determina stuacign is. ori. Para la ealidad de esta intervene, lo decsvo es si se logra © ‘no dar lo nuevo de propiedades que entren en una relacibn de ten sion con lo que ya est ally que esta relacion cree sere. Para que lo ‘ouevo pueda encontrar 8 gar nos tere primero que estimular aver do una forma nueva lo preexstente, Uno soja una piedra al agua avena Se arremolinay vuelve 2 arentarse. La perturbacion fue nacess- ray pledra a encontrado sso, Sin embargo el esianque ya noes liso que ances Creo que los edificios que, poco a poco son acepeados en su entorna, Leben poseer Ia re temp, muy bien que todo es nuevoycatntay que ninguna cia firecta de una arqutectura antigua revel el secrero de ese estado de snime prefade de recuerdos. Construide de materia Las obras de Joseph Bouys y algunos artistas del grupo del arte porera encierran bajo mi punto de visa algo instructo, Lo que me impresio ras el empiao preciso y sensorial del material que hay en esas obras de ree. Ese empleo del material parece enrizado en el saber ancestral dal hombre, liberal mismo temp, aqullo que constuye propiaePara Steve ead es a meta buscada, Se aduce ana cit sya don- Sisiapiges ah smo vo fue capa de vpresiorarte, porqe lnvonea sin deseubrrs"Hacer que un molisce toque el acordesn sini fia irventarno dascubn ice Stovens.Agul soma una vee ms aquel pensamiento fundamental que creo conacer de bios do Wiliams y Handle y que me figure poder rastrar tamblén en los exscros de ward Hopper s6lo ere la realidad dels cosas y la imaginacion se tnciende fa chispa de la obra de ares. ‘Sieraduzeo aun enguaje arquiecténic la frase que cabo de ctr me digo que inicamente entre la realidad de at cosas de ns que tra un c2difcoy a inagimacin se enciende est chispa de un eifciologrado. Para ila frase no es inguns revelacién sino ls confrmaciin de wna ‘experienca que sempre vuelo a hacer en ml rabajoy a confirma de una oluntadcuyes rales parecen hundrse en mi mis. ‘Una vez mis la pregunta: Dende encuentro fa realidad af que dene. «que apunar mi fantasia cuundo Intento proyecar un edo para un ‘ugar y un fn dterminados? [Una cove para la respuesta» esa cusstién se encuentr, creo, fs propia palabras agar’ yt En su ensayo "Construiehabtar pensar”, Martin Heidegger dee: “Un rasgo exencial del ser humano es la extancla junta abs cosas” Esco Jo ‘entero yo en el sonido de que incluso cuando pensumes anes nes ‘encontramos en un mb abstract, sin siempre denere de un mum to de cosasYsigo lyendo en Heidegper“La relacién del hombre con los lugares ya wards de ellos, com los espacos oe his eel habit Elconcepto de habitarertendide tan ampliamente como lohace He ‘deggerun vivir yun pensar on lugares yespacos, encerra una indica- in precisa de equal que para micome srquiteco, significa [a rei ida. La realidad de las tworias desprendidas dels count no es fa que me Ineoresa,sino que esl realidad de a tare constructvaconereta ca (aida es ese habia hacia Ia que quit dg fanaa Es fa rea lv de los materiales de consiuccén — pled, pai, acero,cuero, te. fa realidad de ls formas constructivas que utlizo para lvan- tar el edfcio, en cuyas propiedadesintento penetra con mi agin cn, preccupado por su santido y su sensualdad, fin de que asl se peed encender,quzs, es chispa del edfco logrado capar de alojar ser humane. La realidad de la arqutactura es lo conerec, lo conversdo en forma, rasa y espacio, su cuerpo. No hay alguna iden fuera de las coms. 1 Citi. al, Lerineaneran pepe pr froin mies, Mondor 93 (esn estas opus pred priano rs Seve, Mai 2002p), 2 El oral beige verbo compuesto apart de Dg eas [NT 3 lator je con pla Sache com los trragos compuesto dria elem como Seder sce (No. 4° quo es un oso ferro era amas rosy, acos nara dorsi ox pra ser ota com bf l 0 eta canea/ Densinos prague oe ca ve una metorad dense verde cons qu se ree! heen que magia lesser cor menor” Stevens lee Rane ders i oe a uae icky cs pas ei be) Vir, a 193, pigs O11nes a las cosas Para mi es importante reflexionar sobre la arquitectura, tomar distan- cia del trabajo cotidiano, dar un paso atras y contemplar qué estoy haciendo y por qué lo hago. Esto es lo que me gusta y, probablemente, también lo que necesito, pues no sey un arquitecto que provenga de la teoria, un arquitecto que, por asi decirlo, haya surgido de un lugar teé- ricamente delimitado y se haya puesto a proyectar en el marco de la historia de la arquitectura. Mas bien, soy una persona que ha sucumbi- do ante la tentacién del hacer arquitectnico, del construir, del dar un acabado perfecto a la cosa, de la misma manera que, ya en mi juventud, hacia cosas que debian conformarse a mi representacién interior, cosas que tenfan que ser necesariamente asi y no de otra manera, por razo- nes que, para decir verdad, desconozco. Siempre habla en mi ese senti- miento, sumamente personal, tanto respecto a los ebjetos que produ- cla para mi mismo como a los que producian otras personas. Ese sentimiento no me ha llamado nunca la atencién como si se trata ra de algo especial; sencillamente, siempre estaba ahi, Hoy sé que, en el fondo, en mi trabajo como arquitecto, sigo el rastro de aquellas prime- ras pasiones, quizis incluso obsesiones, intentando entenderlas mejor y refinarlas.Y cuando actualmente me pongo a recapacitar sobre si des- de mi juventud se han afiadido nuevas imagenes y pasiones a las anti- guas, tiendo a pensar que, de algun modo, he conocido ya desde siem- pre el niicleo emocional de mis nuevos descubrimientos. Lugares Trabajo redeado de montafias en una aldea del canton de Graubiinden; trabajo desde ese lugar, vivo alli. Muchas veces me pregunto si esto influ- ye en mi trabajo, y no me disgusta imaginarme que pudiera ser asi. 39{Tener mis casas un aspecto cstinto sino hubler erabjado mis uit ‘mos 25 afos en Graubinden, slo en cl plsje de mi juventud alos ples def verente norte del ura, con sus colinas ondeadas, us hye dor en famine cercann on fs urbaniésd del luda de Basa? Tan pronto como cominzo a reflexionar sobre esta cussion me apercibo 08m trabao leva ha de muchos gares, Cuando me concentra en un determinade lug, par el eval debo hacer un proyectos inanto sondearto,comprender su estructura. su historia y us earactr(sticas sensorales.ya desde muy pronto empie- ana confiuir en este proceso de vsulizacién precita de Imgenes de otros lugrrer lugares que conozco y que alguna vez'me han impresio- rade, Imigenes de lugares cotdanos, o especiales, cuya forma levo dentro de mi come un simbolo de decerminados estados de anima y cualidades, ¢ imgenes de lugares, 0 siuaclones arquitecténicas que provienen dal imbito de las artes plistcas, del cine, de a leeracura, del rex. Sin querer, caen sobre rl codas esas otras imagenes, que a primera ‘sta a menudo son precedente 0 se rferen a hires extras de | mis varied procedenca. Olen yo mismo ls urjo2 venir Las nece sit. Slo cand dao queen el lugarconcreta iraio on expiry aque lo semejance 3 ¢ ext emparentado on do le sex ajenoen principio, surgeon masa imagen estracfiaday honda de lo local que revela coda uns aria derelaciones, hace reconocer determina lines de fuerza consruyetensiones. Surge el fonda sobre el que se hace pinta apare- cared de las dversae vies de acercamiento al lugar lo que me posi= bila a tama de decsiones en mis proyectos. Asi es como me sumer- Ie anal lugar de mi proyecto. lo rasteo yal mismo tiempo, miro hac ‘era, al mundo de mis otros hgaes Eedificios que desplcgin ara presencia especll en un determinada hgar me praducen 2 menudo Is impresién de estar sujetos a una tension Inearma que apunea meal de ese lugar Fundan su lugar concreto eandl ut extn se de undo fel mundo Ei ellos aque Shun prayecto bobo nicamente doo existontey de tradcion sire te lo que su lugar le seal de antemanoyen mi opinion, est ako de a confrontacién con el mundo I irradacon de lo contemporsneo.Y. 5 tuna obra de arquitectra no nos cuenta sine del curso del mundo 0 de lo visionari, sin hacer oxclar con ella al ugar conereto donde se lovan- ‘ayentonces echo de menos e anche sensorial de laconstruccién a su lugar el peso espectico de lo loca, Fragmentos 1 Estamos alrededor dela mesa de due y hablames sobre un pro- yeew de un arquitecto que todos nosotresestimamos. Lo encuantro Inceresance en dtintas facets, coss que menciona en el turno de = ‘asiones que tiene lugar acerca de detarminadas culdades del mismo ¥ afado, de pasada, que lo habla visto ya hala algin momento —sin ol Prejucic poskva de mi actual yloracign del autor dal proyecto habia constatdo que en conjunto, no me gustaba nada. Al escuerisar las posites razones de aquellsImpresién mia, las enconramas en a cexplcaclon de sus particularidades pero sn lagar aun jlo de con junto, hasta que, de promo une de los jovenes arquicectos que toma parte en a eruilaclce: "Desde a prspectva de las razones taérias, constructs y otras de dstito sgn este edfiio es interesante: problema es que no tne aia” Semanas mis tarde tomando un café alate libre hablba con A. sobre las casts que denen un alms Pasamas revista a muchos ediclos que conocemos, nor los deszribimos el uno al otro. Si topamos con edi. clos que corresponden con a cualdad buscaday nos hacen evocar lo peculiar que tienen, nor damos cuenta de que hay determinadas cans ‘que amamos, Muchas de elas no son las que nos wenen ala mente si bien sabemes répidamente cusles pervenecen a f categoria busca ‘cas que determinan algo asi Nuestra ten va de generalzg de abs traer, parece priaF a los edificios Individusles de su brill, de su vivacidad ‘Dado que este tema no me dea en psz.me propongo intentar algunas aproximaciones fragmentarias al mismo basindomeen vivencas perso rales 7 as que ve una relacién cea mi trabajo, ovdndome,al hacer lo.en el marea de un conjunto de eategorias con las que trabajo can do me ocupo del contenido de un edi 2 Lashabieaiones principals del pequefio hotel de montaia se scian en el ancho ala del extenso cuerpo del edict y miran al valle. En Pare baja se encuentran contiguas, ds sls revestidas de madera 8 las que se accede desde el corredor y que estin comunicadas entre st por una pucraa La mis pequeda nos parece ivkar a sentarnos cémo= «én ndusrl en hormiga ampoco su magraniniad ot ausencla dees sria de embellcimlentos pecapopcamente persion que conoe-