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‘como sefala Xavier Rupert de Vent6s en su obra Teoria dela sensibilidad, pars conelur gue a fora a fuera de querer asimilare alo que significa, acaba convirtiéndose en signo de sf misma. 2. En torno a lo sublime -aso se deba a Longuin el primer abordaje detenido del concepto de iaine a ve como al grado superlativo de la belleza, algo leva el alma a todos y en todas partes. oe su Grtiee det juicio, Kane sefiala que existen dos grandes categorias de juicios estéticos: aquellos relativos a la belleza, que son los juicios del gusto, y los que se reficten a lo sublime, lo que viene a ratificar el cardcter medular de esca categoria para la concep occidental. La belles, dice Kant reside en la formas cspacials y temporales de los objet, mientras que lo sublime reside en Jo ilimitado, ya sea en dimensién (lo sublime matemético) 0 en poder lo sublit lindmico). : ine a que reviste el tema, poco espacio le ha destinado hasta ahora a literatura antropolégica. Para algunos surores, Jo sublime serfa la primera categoria estética eparenen ‘el hom! rs imbricada con la belleza, como actiud de deslumbramiento ante lo ‘que sc presenta como superlativo, sobrenatural o superior alo humano: os dioses, la naturaleza creada por ellos, las hazafias de tos héroes legendatios. Claro que para el hombre primitivo sc tratatia tan s6lo del reconocimiento del valor supremo de un ser 0 fenémeno, le conciencia de que hay sees y cosas comunes que pertenecen al mune cotidiano, y seres y cosas que por su mayor densidad simbélica pertenecen a otra esfera, Ia de lo numinoso o sagrado, Hay | que relacionan la belleza con la claridad y la luz, mientras que lo sublime abordart el dmbito dea eras oeurs, que inspire femor por at inmensiad y su potenca,principalmenterepresentadas por Ja naturaleza. Pero en realidad son escasas Jas culturas que aa enla naturaleza el dmbito privilegiado de lo tencbroso, pues si bien se cspiritualiza a menudo en ella sus fuerzas oscuras, draméticas y malignas, también sc la potencia con los recursos de la luz, como cocurre en la Tierra Sin Mal de los guaranties. Por ‘otra parte, la: Laren! auc se atcirfa pronto al concept de lo sublime, no cede, como romanticismo, ala tentacién de lo tenebroso, sino que busca tan sélo alcanzar la luz. H eee El vocablo “sublime” viene del latin subleva, que quicre decir Jevantas ala dl suelo. Lo que tendsla que haber sido slo un acto de poner en valor las cosas que estin relegadas 0 no diferenciadas Pars que puedan participar mejor en a actividad simbélica, fue convertido por Ar seética occidental en ‘algo asi como el pasaporte a una zona tan 224 exquisita como exclusiva, a un tertitorio donde el hombre no se encuentra con su comunidad, sino que se separa de ella, ya sea solo o con un pequefio grupo narcisista. Quien ingresa en esta via aspira no sélo a levantar un aber del suelo, sino Wemepiane d nino alas altas esferas, mediante una ideologla que hace de la dimension verti- cal una escala jerérquica de tipo espirivual, la que no deja de tenes, por el imaginario y las actitudes que suscita, una proyeccién social ‘negativa. Elevarse, para esta rligiGn del arte, cs acercarse ala morada de los dioses, a compartir la gloria de los grandes genios. En los méviles de este ascenso estd la idea de salvacién individual; de alejamiento de Ja base comunitaria, o sea, de la dimensién horizontal, lo que mis que tristeza o temor produce placer. al ideologta artistica abreva en la mistica religiosa més de lo que cesxd dispuesta a admitir. Roger Bastide, en Ler problemes de la vie ‘mystique, acuta ol coricepto de éxtasis laco, que bien podria splicarce al objetivo que persigue esta manifestacin del idealismo extético, Para el ef sMO €s un perpetuo movimiento de negacién de la {ida del cuerpo (através de uno, lasbatinencia sexual ls eastigos gue se le inflige), de lo sensual, y también la forma més alta del individualismo religioso, que no escatima ningtin medio con tal de alcanzar el éxtasis. En efecto, el mistico rechaza toda mediacién sacer- dota y casi nunca se lo verd orar junto a los otros fcles, sino que rechazando lo comunitario asume el ascenso a las. cumbresdelo agra como una empresa personal y solitatia, con lo que se estd postulando de hecho, lo entienda o no asi, como un héroe moral, Para lograr sa ambicioso objetivo tiende a aislarse en la sola compafia de Dios y 2 medida que va cortando lazos con el mundo rompe los vineulos con sus semejantes. Y a tal extremo, que la psicologla ha legado a considerarlo un mentiroso consciente o un mitémano inconsciente. El flésofo francés André Comte-Sponville coincide en que el éxtasis ¢ salirse del mundo, y sefiala que su experiencia personal pasa mas bien por lo contratio, por algo que llama éntais'y define como la fusién con el mundo, Ia re-unién con él, En el dmbito de las teligiones, lo sublime suele ser lo sagrado y lo que viene tefiido por él, 0 sea que dicho concepto pertenecerta 2 lo que llamamos zona sagrada de la cultura. En el pensamiento laico, lo sublime es visto como un acto de clevacién exttaordinaria en el plano moral, intelectual o sensible, dimensiones que se relacionan con el concepto de arte. Pero como desacralizar la expresién artistica del modo en que lo hizo la concepcién renacentista impide aleanzar la universalidad en el estudio de las pricticas simbélicas, por inscribirse la mayor parte de étas en Jo sagrado, el andlisis debe realizarse en ambos campos, 0 acaso en ese punto de conjuncidn entre ellos que es el ritual, tanto religioso como artistico. Desde una mirada antropolégica, la verticalidad de una 225

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