Las calles que rodeaban a la cafetera Uajizi eran estrechas y poco transitadas

por los automovilistas, pues a pesar que las calles Santa Paula y San Antonio
eran muy llamativas, las dos desembocaban y terminaban en la misma avenida
principal de San Pafnuncio. Uajizi se encontraba en la esquina donde ambas
calles nacan. Por las maanas los primeros rayos del sol entraban
perfectamente por la nica ventana del la cafetera, que le daba un aspecto
clido a la mitad del establecimiento que poda mantenerse hasta el medio da;
y la tarde no se converta en noche completamente sino hasta que el sol se
haba ocultado y la ventana no poda tragar ms rayos de sol. La mujer del
vestido azul llevaba sentada en la mesa ms favorecida por la luz ms de una
hora, cuando por la puerta giratoria entr un hombre delgado y plido, vestido
con un impecable traje negro. Se detuvo en la entrada por unos segundos,
indeciso si sentarse a lado de la mujer o llamarla para moverse a una zona
menos luminosa. Se ri para sus adentros ante la irona y camin hacia la
mujer.

Como siempre has llegado tarde

Creo que exageras un poco. No siempre he llegado tarde, hoy es una
excepcin
Puedo saber por qu el traje? parece que vienes a un funeral
No pude decidirme si era una ocasin triste o una feliz. En todo caso, el traje
jams falla. Tengo algo de sed, pedir algo. T gustas?
Ya somos dos, pero tienes razn en cuanto al traje. Estoy bien gracias, pide lo
que quieras va por mi cuenta como en todas las ocasiones
Si insistes... le hizo una sea a la camarera Pedir uno de estos enormes
capuchinos repletos de chocolate y crema, si no es mucha molestia
La camarera pas al otro lado de la barra y despus de unos pocos minutos
trajo el capuchino al hombre de traje. Se relami los labios y tom una cuchara
pequea para empezar a comerse la dulce cubierta.
Sabes lo que me encanta de esta bebida? le pregunt a la mujer, mientras
deshaca el chocolate en la boca Es un punto medio entre un postre y un caf;
ambos y ninguno. Lo que tomara un nio que quiere crecer o un adulto que se
rehsa a madurar. Como una mala decisin tomada a medias
Ah s? pregunt la mujer mientras miraba la crema derramarse en la copa de
su acompaante Yo pensaba que tu gusto resida en el dulce sabor de la crema
y el chocolate unidos al caf, un sabor tan placentero y fcil de encontrar en

cada cafetera que podras provarlo cada vez que te surgiera un antojo sin
sentir culpa alguna