XX. LAS GEOMETRIAS NO EUCLIDIANAS
Y¥ SU SIGNIFICACION
No debe uno vielentar a la naturalesa, ni conformar
la al tenor de quimeras forjadas chegamente--
Janos Bonyar
XALL. Iscrromuecion
En esr mundo, Jas revoluciones mds importantes no son politicas, Las ro
Wluciones politicas apenas si cambian la vida cotidiana del hombre o,
cuando Ins modifican mayermente, cjercen un efecto a corte plazo qué
incluso puede ser invertido por otras revoluciones. Las revucltas trascem
dentes son causadas por las ideas nuevas. Lstas aiteran con mds eflcacia
mis pederosa y duraderamente las vidas de los humans ¢ivilizados, Por
sjemplo, las crecncias en la importancia del set humano y su derecho a la
vida, Ia Ubertad y la busqueda de Ia felicidad han cambiado radical y per
qanentermente la vida y lag mspiraciones de cientos de millones de hurd.
nos, Muchas revoluciones polfticas se inspiraron en el deseo de realizar
estas Ideas. Los dos conceptos que han revolucionade més profundamente
auestro desarrollo intelectual desde el siglo xm son Ia teoria de la evolm
sion y la geometria no cuclidiana. En general, se reconoce en Ja teoria de
eveluci¢n una influencia de primera magnitud: no ast en Ia geometria
no euclidiana, a pesar de haber tenido consecucncias fundamentales y de
largos alcances.
En este capitulo examinaremos Ia naturaleza de Ia geomeiria no cucti-
disna, su valor para la ciencia, sus repercusiones en Is naturnieza de las
matemGticas y, por Gltime, su influencia en nucstra cultura.
XX.2, Pensreeriva wrrstdaica
La gcometria cuctidiana, jqual que Ia aritmética, ot dlagbra y el cdlculo, se
Sintia om asiomas, Los griegos, que formuilaron’ los aiomal ae ia geome,
nia cuclidians, creyeron que Ins inteligencias humanas reconoctan Iniuediac
famente algunas verdades cabre ins propietiadcs geomnetsicas de los ubjews
Hsicos y det espacio. Por cso les parecio indudoble que dos puntos detec
quand ha 3 slo una resta, ¥ que seameaton. secillincos idusios agrees
dos 2 otro par de segmentos reciilinces Hfuales atrajaran sumas iguales:
Durante 2000 anos el'munde intelectual cf aa totaled eeeoee Is Gece
stiega dc que los axiomas de Ia geometria euclidians y de Ins matematees
fo general cran verdades sobre cl mundo fisico, verdades ean ‘classe yt
etidentes quo nadie vn su sano julcio se pondria ‘a discutir. Desde lneac,
como los ariomaz de la geomctria cram verindes, ¥ como los teoremas toon
consccuencias Iegicamente necesarias de los axiomnas, el cuerpo entere de
‘351452 LAS GEOMETRIAS NO EUCLIDIANAS ¥ SU SIGN
SIFICACION
la geometria euclidiana constitmia ung coleccién de verdades incontrover-
fibles sobre objetes idealizados y fendmenos del mundo fisico.
‘Solo una manchite pavecia contrariar la puleritud de los axioms. La
geomettia cuclidiana se ocupa de liness paralelas. Por definicién, dos rec:
Eis del mismo plano som pavaleias cwande mo se cortan, es decir, cuando
he conticnen ningan punt comun, Este enunciado expresa lo que quere-
fies decir con reetas paralelas ¥ por ello no es objetable, En sf no ascgura
que haya rectas paralclas. Pero la gcometria eusiidiann contieae un axio-
fha que implica la exisconcia de paralcins, y nuestra cxposicion se centrars
En la naturalesn de este axioma, Como lo formulé Euclides, el axioma
Gecmura que si dos rectas i yf (Figura XX.1) se encuentran con otra
facia, #, de modo que Ia suma de los angulos i ¥ 2 sea menor de 180-, en-
Sones fas Itmeas iy f se cneontraran en cl lado de la recta rr donde eaté:
Ios dngulos 1 y 2. Buclides denmicstra sesuidamente, por ejemplo, que si
ja surta de los Anguios 1 y 2 es 180", entonces mr y I son paralcias. Este
aaioma es algo confuso, y hay razones pata creer que hasta el propio
Tuclides no estaba muy contento con cl. Ni Buclides ni los matcmaticos
que lo sucedicron hasta el siglo xtx dudaron realmentc de la verdad de
Site axioma, es decir, no cucstionaron que fuera una idvalizacioa correcta
fel comportamiente de las rcctas reales o fisicas. Lo que habia molestado
S Enclides y sus sucesores cra que el axioma no fuera tan evidente por
Stintismo como ct de que, digames, cualerquiera dos aninuios restos som
guales.
Frouss XX, El axtowra de Frcues X22. Bi axtowes ete
ies paraletas, de Buctides. las garatelas, de Playfatr.
Desde Ia época de los grieges en adelante Jos matemitleos trataron de
sunttnir foe neoma con ote equivalente, Aviomia cavivelente cs aquel
RUE Witus con los ciros mucve de Enciaes, hace posible deducir cl mismo
SUELISS SSoremaas Inferides por Buclides. Se prepusicroa muchos axio-
ShasMadivalcntes. Uno de éstos, cl conecide como axioma de Playtair Lque
fue aubmade per cl matematice Tohn Playfair (17481819) 1, es el que acos:
Elnbral cascarnos cn in eseuela secundaria. El axioma de Playfair cs-
MES ue aade una recta I (Figura X32) yun punto P exterior a ella,
iy tnaly célo na recta m en el plano de Py! que pasa por P'y no so
balaohtre con Del axioma de las peralcias, de Playfair, y de 10s otros
Sueveaviomas de Euclides es posible deducir todor los toremas de ia
peometria euclidiana.
El axioma de Piaylair convence a Ja Intuicion. Parece, que las Vngas rec:
tar Aol epacio fisice poseen ekecuvaments la propiedad Indicada, Aun asi,
$3 SuLaiMatises no quedaron satisfechos ni com cl axioma de Playfair niLAS GEOMETRIAS NO EUCLIDIANAS ¥ SU SIGNIFICACIGN 453
gon otros cquivalentes propuestes del axioma de jas paralelas de Euctides,
Se dieron cuenta de que todo sustitute propuesto contena directa o indi
rectamente una afirmacién sobre lo que acura en io mas remote del os.
pacio, El axioma de Playfair asegura que la recta m que pasa por P na se
encontrara con ¢ ni siquicra on el espacio muy distarte Rasta el que pus:
den. prolongarse estas lineas. De hecho, of axioma de Euclides es fuperior
eM este respecto porque no asevera gue las rectas no se cortardn, site que
gsimblece las condiciones en Ins cules sf se eneontraran a cieria distancia
Bnia,
2Oué tienen de objetable los axiomas que hacen afirmaciones sobre lo
qué ocurre en cl espacio remoto? Que trascienden el Ambito de la cxpesicn
Sia. Se supone que los sxiomas de Ia geometria euclidiana son Gnunciados,
plenamente convincentes, sobre las propledades tel espacio. Pero geome Duct
de uno estar seguro de lo que ocurre a millones de kilémetros? Como
puede une estar seguro de que es posible prolongar lineas rectas indeli.
Didamente cn el espacio fisico, sin que en algtin momento dichas licens
Se vein obligndas a cortarse? Asi fuc como los vsfuerzos por encontrar un
snunciado més sencillo que el de Eucildes rindisron resuliados satisfac.
forios en Io tocante a Ia sencillez, pero sembraron dudas sebre la verdad
de todo aserto relative a Ia existencia de limeas paraicles
Hacia el siglo xvitr algunos matemdticos decidicron ensayar un nuevo
gaming, El eonjunto de Euclides contenia 10 axiomas. Quiva bastara con
eve! caso s¢ prediera demostrar una afirmacion sobre rectas paralelas
deduciéndola de los otros nueve axiomas, De ser posible esto, ya no habria
problema alguno, pues la afirmacion sobre paralelas seria congecucnela
mecesaria de los hucve axiomas perfectamente acepiables, Lo malo es que
fracasaron todos estas empenos.
Mercce especial atencidn 1o realizado por ol jesuita Girolamo Saccheri
967-1733), quicn decidi aplicar el métade indirests de de-nostracion. El
axioma de'las paralclas de Euclides asegura, en efecto, la existemcia de
una y sélo una recta que pasa por P y es paralela a J. Para establecst por
contFadiceion la verdad de este aserto, hay dos posibilidades, o ninguns
paralela af pasa por P, 0 pasa mas de una, Lo que Saccheri so proponis
era suponer que era cierta cada una de ambas posibilidades y, con los otros
nueve axiomas de Euclides, hacer ver que Ine deducciones Gesembocaban
8 una contradiccién. Luego proclamaria que el unico supuesto cussions
bie, Ia opeién al axioma de lat paralclas de Huclides, debia cet falsa, Des.
pugs de hacer esto can las dos posibilidades podria ascgurar que le wnice
festante, el axioma de Euclides, tendria que ser la verdadera, La opcion
consistente en que no hay paralclas af que pasen por P produjo unt com:
fradicciém. Pero de Ia segunda posibilidad (de que hay amas de una parm:
lela a 1 que pase por B) dedujo varios teoremas extrafos pere lores de
contradiccicm.
Lo insGlite de los teoremas que obtuvo basté para convencer a Saccheri
de que esta posibilidad no podia ser cierta y, por lo tanto, que el axioma ce
jas paralelas de Buclides debla ser clerto porque era la Gaica opeion pos
ble, ¥ asien 1773 publica su libro Buctides vindioado de tado defecto. Claro
esta que la rareca de los tcoremas y la contradiecion Logica son asuntos
muy diferentes, y Saccheri no tenfa derecho de sustitiir una por otea Pero
gra producto de su época y, al extracr la conelusién de que la afirmacion,
de,Euclides sobre las paralcias cra consecuencia necesaria de los otfos ite:458 LAS GEOMETRIAS NO EVCLIDIANAS ¥ SU SIGNIFICACION
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Gleneiticas. Aunque sus mayors Tenlintcieh es, Det tcrndtics: mus Droplo
Biomitiens 7 por pile syole nebtares Oe Siena has
‘To, naturaleza, eves mi disea: a tus leyes
nis servicios suburdine.
A él sc debe Ja famosa frase: “La matematica. reina de Tas clencias”
(Una de las creaciones mas grandes de Gauss, y clertamente la mas is
portunte desde cl punto de vista de sus consecucncias, es su geometria n
Poridiens, Gauss emperé a pensar en esta materia desde nine y, come oft os
Gia eupreceicron. comenz6 tratando de recmplazar el axioma dc las
Gualdlal de Euchdés por tre mas aceptable, quo no implicara asercién
Saree wobre Io que debe ocurrir cn el espacio remoto. Pero fracasd. Tam:
DEW aprecié a Ja edad de 15 aos. como Io coments con su amigo Schu-
een ee que no habia esperanza alguna de demostrar una afirmacion sobre
jee peraigias besandese en los otros nucve axiomas. Se dio cuenta, puss,
Bo Et“ Gros mucve axiomas no prescribian la forma del axioma de las
SGriiclas, Gauss era demasiado inteligente como para no percatarse de le
Becta hecho implicaba. Si hubiera libertad para clegir ef axtoma de las
Guraiias, podria ung escager un axioma diferente del de Euclides y clabo-
eee eet iova clase de geometria, Esto fuc precisamente lo que hizo Gauss-
Tar Une lo Iae implicaciones légicas de un sistema de axiomas que inclufaLAS GEOMETRIAS NO EUCLIDIANAS ¥ SU SIGNIFICACION 455
el supuesto de que, per un punto dado, podia pasar mds de uma paralela
a ving recta dada, ¥ asf ere Ia geometria mo euclidiana. (Gauss terming |
Por adoptar el termino de geomet no cucldiana después de haber Ma:
mado a su sistema geometria antieuclidiana y postercrmente poom=tria
astral.)
Aun sabiendo que tal geometria era aplicable al espacia fisico y, por lo
gaisme, muy importante, Gauss no publicd sus resultades. Estaba rny ade
Jantaco a su ¢poca al sacar en conclusi6n que la geomeiria cuclidiana no
era por fuerza la descripcién correcta del espacio Eisice, y que podria scr
jgualmente precisa para el efecto alguna geometin na cuclidiana. Tenta
micdo de que s¢ ricran de €l. Gn una carta que cscribio en 1829 a su amige
sl matematico Fricdrich Wilhcim Bessel, [e confesé que tenia miedo al
clamor de los beocios, aludiendo a la tribu griegs que, segum se cuenta,
Se caracterizaba por su ingenuidad y simptezs. La obra de Gauss sobre la
geometria no euclidiana fue encontrada mire sus papeles después de su
muerte, ovurrida en 1855.
Los hombres a los que se atribuye haber ereade Ia geometeia no eucliy
diana, pues ellos si publicaron sus resultados, son Nicolai T. Lobachevsky
1793-1855) y Janos Bolyal (1802-1860). Lobachetsky, nacido en el seme de
una familia pobre, desde temprana edad dio muestras de su talento, Mas
tarde asistid a la Universidad de Karin, en Rusia, Uno de sus protesores:
fus cl matematico aleman J. M. C. Bartels, amigo de Gauss, ¥ es may pro.
bable que éste haya desperiado el interés de Lobachevsky por el axioma
de las paralelas. Lobachevsky empezs a dar clases en ls Universidad de
Bazin a la edad de 23 anos y continuo trabajando cn el problema. Hacia
1823, se dio cuenta de que podria haber otras geometrias y que la cucli-
diana no tenfa que ser Ja unica descripeién correcta del espacio fisico. MAs
tarde dijo que 2000 anos de infructuoses intentes por dar una base inex:
pugnable al axioma de las paralelas lo habian hecho sospechar que eso er
algo que sencillamente nese podia hacer, Desde 1629 en adelante, Lobar
clevsky estuvo publicando libros y articulos em los que exponia los tecre.
tas de su geometria no euclidiana. A pesar de los valiosos servicios que
presté a lag matemuiticas, a su untversidad y al gobierno ruso, fue destiwuk
do en 1846. Sin embargo, continu trabajando on este carpe hasta su.
fallecimiento,
Bolyai, de macionalidad hingara, fue oficial del ejército austriaco. Apren-
dig matemsticas de su padre, Wolfeans Bolyal, quien lo puso a refiexionar
en cl axioma de las paralelas. En 1823, Tanos legé a la misma canchasion
aja que habian arribado Gauss y Lobachevsky, la de que no se podia de-
mostrar el axioma de las paralclas de Buclides y que, de hecha, mo. crn
mas que una posibilidad. Lueso procedié a desarrollar una geometria no
euclidiana y publics su trabajo come apéndice al Hbro de matematicas
de su padre, el cual fue publicado en 1833, Conacienda ef interes de Gauss
en el tema de la geometria no cuclidiana, Wolfgang envid un ejemplar del
abajo de su hijo a Gauss. Este fe contesta:
Si_comenzars diciendo que soy tncapar de clogiar este trabajo, usted se cuando el drea tende o
Gero. En ia gedmetria de Riemann Is suma de los angulos de un triangle
Ge siempre mayer de 180, pero también Ia suma tiende a 180° a medida que
disminuye cl area del tridmeulo. Por consiguiente, para triingulos pegecfios,
las tres peometrias requicren de que las sumas de los dngulos de los tr
gules esien Geren de 180°. Si hubiorn side cxacia la medicién que
Gauss de los dngulos formades por las cimas de lag montafias, habria po-
dido afirmar que su resultado era menor de 180°, igual a esta cifra o mayor
que 1a misma, y cntonecs su prucba sf babria sido decisiva, Toda medicicn,
Sin cmbarge, es fuente de error porque ni cl ojo ni la mane sen precisos,
Podemos suponer, con seguridad, que el error de la medicion de Gauss fue
mayor de 2” Bn consecueneia, on vista de su restiltado, la verdadera suma
de los 4ngulos pude haber sido un poco menor oun poco mayor que 10°.
El resultado fue, pues, compatible con tadas y cada una de das tes geo
metrias.
Pare un tridngulo grande, la suma de sus angules debe ser significativa-
mente menor de 180" cn la geometria de Gauss y mayor en prado signifi-
eauve cf ja de Rismann. Por consiguiente, empleande un triangulo grande,
digamos cf formade por tres cuerpos celestes en un momento dado, se
podria obtener un resultado quc concordara con s6lo una de las tres geo
Ierrias, stempre y cuande cl error de medicién se mantuvicra pequen
Asi, un Tesultade de 173, con error de medicion de menos de Se, establece:
fia'sin duda la correceién fisiea de la geometria de Gauss. Pero en el sie
glo sax no se obtuve tal resultado. Gauss, Lobachevsky y Bulyal se dicron
Suenta de que, por lo menos en su época y con jos instrumentos con que
Somtaban, cl asunte ne se decidiria pur rmediciones.
“Ya que una prueba basada en la suma de los Angulos de un tringulo ne
ve para ustableccr que qeamotria so sdapta al espacio fisico, podria Bus-
earse otro teorema wtilizable para tal propOsito. Fete podria ser el teore-
ia que es valido en las dos geometrias mo cuclidianas, el de que dos trian
gulos semejantes deben ser ademas comgrocntes. Aut parece ser probable
tna prucba decisive, pucs se antoja bvio que ex dable construire un tridn-
gillo peauena y ctre grande quy sean seméjantes. Sclo Mene uno que, acc:
urarse que Ise angules del tridngulo pequeno. sean Iguales a fos del gran-
Ge obterido lo cual semi conscenencin necesaria la semejanza de ambos
(riangulos. Solo Ia geometria euclidiana se adapta a esta situaciém fisica.
Pero cl argumente tiene una falla, toda vez que mo puede uno estar sesuro,
de gue los dngulos correspondientes de lus dos triéngulos son en verdad
iguales. Despucs de todo, la medicion es aproximada, y por lo menos un
angulo de un tekingule podria diferir del angulo correspondiente del otro.
Si'sucedicra esto, los trangulos no setian semejantes.
Ta sustaneia de Ios razonamientos anteriores cs que no existe prucba
sencilla que favorezca a una geometria en detrimento de otra. Pero si se
pudicra trabajar con um tridngule verdaderamente grande, Come OcUrrS on