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LA HECATOMBE EI 6 de agosto de 1945, un artefacto de potencia descomunal fue arrojado sobre la ciudad japonesa de Hiroshima, causando la muerte de aproximadamente 200 000 personas. Tes dias después, una accién similar en Nagasaki habria de cobrar muchas miles de victimas mas. Los grandes hongos generados por las bombas até- micas representan el cenit de la destructividad y, parad6jicamente, ala ver simbolizan el mayor adelanto cientifico + tecnolégico de la humanidad. Elestalidode la tomba atémica str ia cudad ce Hiroshima transforms radealmerte el modo de | hacer ia gua e inauguré (aora nuclear, | | e- 2 | | _ Re-hmyeube conan opus steue-paer ented | 287 288 astontA MINIMA DEJAPON Setecientos afios atrds, el encrespado oleaje del Mar de China y los vientos divinos kamikaze (##)R\) salvaron a las islas japone- sas de las invasiones mongolas provenientes de territorio chino. Ningtin otro enemigo extranjero se acercé al archipiélago hasta la llegada de los europeos en el siglo XV1. El encuentro con Europa y, mds tarde, un aislamiento casi total, durante més de cien afios, de- jarfan testimonio de la excepcional habilidad japonesa para resistir la penetracién politica occidental y, al mismo ticmpo, asimilar su tecnologia militar al punto de obtener, en 1905, una victoria sin- gular contra el hombre europeo en la guerra ruso-japonesa. Desde entonces, y por la fuerza de las armas, en unas cuantas décadas, el imperio nipén consolidé su dominio sobre buena parte de Asia. Del aislamiento, Japén pas6 a la invasién regional que conllev6 odio y resentimiento en numerosas poblaciones afectadas. Sin embargo, a mediados del siglo Xx, Japén era un pais arrui- nado con un pueblo exhausto. Tan sélo en la guerra contra China habjan muerto tres millones de japoneses, de los cuales casi un millén eran civiles. Los bombardeos incendiarios destrayeron més de 40% de las zonas urbanas, entre ellas, 120 de las principales ciudades, por lo que uno de cada tres japoneses perdié su hogar. El pais quedé virtualmente sin concxiones maritimas y la red de comunicaciones terrestres fixe pulverizada. A la inmensa reduccién del producto agricola hay que agregar la completa suspensién del comercio exterior y una terrible escasez de alimentos que provocs severas hambrunas. La produccién industrial rambign se derrumbé, reduciéndose a menos de una quinta parte del nivel alcanzado al inicio de la Se- gunda Guerra Mundial, y la total paralizacién de la industria béli- ca tuvo como consecuencia inmediata una inflacién que devalué el yen hasta 120 veces por debajo de su cotizacién antes del conflicto. Sia lo anterior se afiade la repatriacién de mas de seis millones de japoneses desde los tersitorios ocupados en Asia, sumados a dos millones de soldados desmovilizados en el momento de la ren- dicién, se puede dar idea del gran problema que representaba la masa de individuos demandante de alimentos, vestido, vivienda y trabajo en una economia sin capacidad de respuesta JAPON CONTEMPORANED 289 En el plano psicoldgico, el panorama no era menos desolador El pueblo japonés estaba desconcertados la conrrocién de la derro- ta fue brutal. Tras haber sido educados y movilizados en un am- biente de propaganda ultranacionalista que valoraba la muerte con hhonor sobre la deshonra de la rendicién, para los japoneses resul- taba inverosimil que el propio emperador Hiroaito los exhortara 4 colaborar con los vencedores. Existia el temora una despiadada venganza por parte de los aliados, enfurecidos como estaban por el ataque a Pearl Harbor, la terrible Marcha de Bataan y el geno- cidio de Nanking, entre muchas barbaridades documentadas. Sin embargo, y contra lo esperado, la presencia aliada ~predominan- femente estadounidense~ dio pie a una de las mds sorprendentes reingenierias sociales de la historia contempordnea. LA OCUPACION EL 15 de agosto de 1945, por la tarde, el emgerador Hirohito, también conocido como Shéwa send (RAFI), se dirigié a su pueblo a través de la radio: Después de considerar profunda y detenidamente la stuacién mun- dial y la condicién del Imperio, con cl deseo de aprovechar la co- yuntura actual y tomando una medida de emergencia, delaro por este medio a todos vosotros mis files sibditos que: (...] la stuacién belica no es favorable, nila coyuntura mundial nos resulta provechose (1 lo que me ha levado a ordenar al Gobierno Imperial que acceda a las demandas del comunicado conjunto [y que] siguiendo la marcha de los acontecimientos, aceptts lo insoportable ysoporeis lo insufti- ble, hasta lograrinaugurar una gran paz para toda: ls edades, La declaracién era contundente: Japén se rendia ante las fuer- 2as aliadas conformadas por Estados Unidos, Gran Bretafa, Unién Soviética, China y Francia. No obstante, los oficiales de la base aérea de Atsugi, cerca de Tokio, se rehusaron a admitir la derrota yasesinaron al comandante de la Guardia Imperial en un vano in- tento por evitar que el mensaje de la rendicién fuese transmitido, 290. HISTORIA MINIMA DE JAPON La mayorfa acaté la orden del monarca con resignacién y una fuer- ce sensacin de alivio. Dos semanas después, el 2 de septiembre, se firmaron los documentos de la rendicién japonesa a bordo del acorazado estadounidense Missouri, anclado en la Bahia de Tokio. ‘A partir de ese momento, el general estadounidense Douglas MacArthur tomé el mando de Ia ocupacién aliada y comenzé a emprender su misién principal: asegurar que Japén no volviera a convertirse en amenaza para la paz y la seguridad mundial. Japén seria desarmado y desmilitarizado completamente, Las institucio- nes que habjan expresado el espirivu del milirarismo y la agresién habrian de verse vigorosamente suprimidas. Se alentarian el es- piritu de libertad individual, la democracia y el respeto por los derechos humanos. El pueblo japonés tendria la oportunidad de establecer una economia basada en el mercado. Aunque se ejerciera en nombre de los poderesaliados, lo cierto es que la reconstruccién de Japén fue predominantemente una empresa estadounidense, producto de la impulsividad de MacAr- thur, quien dirigié los destinos de Japén con autoridad absoluta. Para ello se valid de un habil sistema de administracién indirecta que hizo buen uso de los medios politicos locales; sus asesores ad- virtieron el inmenso vacio que los japoneses sentian y, presurosos, se abocaron a llenatlo. 5 emperator Hroito yet general Douglas Macirthur en la histrca fotografia, simboio de a humilacén japonesa ents el oder de Estados Unicos, JAPON CONTEMPORANEO 291 El 28 de septiembre de 1945, el piblico japonés quedé estu- pefacto al ver, en los diarios, la fotografia del emperador Hirohito vvestido de etiqueta al lado de MacArthus, quien aparecia con las ‘manos en la cintura, eri uniforme de trabajo y sin corbata. Al zom- per con todo precedente, el emperador se comprometié entonces a cooperar con el esfuerzo de reconstruccién. Hirohito se convirtié de golpe en un monarca mis de carne y hueso; ya no seria jams una divinidad viviente. La cuestién de qué hacer con la institucién imperial fue moti- vo de fuerte debate entre las autoridades de la Ocupacién. Algunos opinaban que cuanto mds se difundiera el sistema democtatico occidental, mayor seria la estabilidad mundial; ello suponta elimi- nar de manera automatica la figura del monarca japonés.' Otros, como el ex embajador estadounidense en Japén, Joseph C. Grew, insistian en conservarla para mantener la estabilidad social y evitar asi una revuelta. Finalmente, MacArthur determiné que la monaz- quia serfa preservada; es probable que este acto de hondo signifi- cado propiciara la aceptacién generalizada de los valores democri- ticos en Japén. Otro problema que tuvieron que resolve: las fuerzas de Ocu- pacidn fue la desmilitarizacién y el castigo a los responsables de la guerra. A la eliminacién de la marina y el ejército con sus respec tivos ministerios, siguié el desmantclamicnto de las bases navales, arsenales e industrias bélicas; alrededor de ocho millones de efecti- vos militares fueron movilizados y se enjuicié como criminales de guerra a cerca de 4 200 individuos; de ellos, 700 militares fueron. cjecutados. Por seguir el modelo de Nuremberg, entre mayo de 1946 y diciembre de 1948, una corte militer internacional hizo compatecer en Tokio a la mayor parte de los dignatarios del régi- men, Siete altos dirigentes fueron sentenciado: a morit en la horca, centre ellos los ex primeros ministros T5j6 Hideki y Hirota Koki; 16 recibieron condena de prisién perpetua y dos se suicidaron du- rante el juicio. sea, Vt line chap hem yunbecom/rceRDWPUM Ame eatest 292 HISTORIA MINIMA DE JAPON La depuracién se extendié al terreno econémico, hacia los hombres de negocios, particularmente a los vinculados con los grandes consorcios denominados zaibatsy, cuyas estruccuras mo- nopélicas habian respaldado las acciones bélicas. Como parce de las medidas destinadas 2 democratizar la organizacién econémica japonesa se ordend la disolucién de los zaibatsu. Asi, entre 1946 y 1947 desaparecieron mas de 30 grandes consorcios, entre ellos, los cuatro més importantes del pais: Mitsui, Mitsubishi, Sumitomo y Yasuda. A todo ello hay que agregar las reparaciones de guerra que imponfan la transferencia de 30% de su planta e instalacio- nes industriales a Japén, a los paises asiéticos ocupados durante la aventura imperialista. El pueblo hizo frente a las consecuencias de la derrota equipa- randola con los desastres naturales que regularmente azoran al pais insular. Incluso los sobrevivientes de los bombardeos atémicos de Hiroshima y Nagasaki afrontaron la hecatombe con estoicismo. La situacién era sombria, con las ciudades convertidas en gigantescos basureros, escasez de alimentos y soldados repatriados deambu- lando por las calles, cuando afios atrés habian sido considerados superhombres EI 21 de octubre de 1946, las autoridades de Ocupacién levaron a cabo la reforma agearia. Toda extensién de tierra ma- yor de una hectarea cuyos propietarios estuvieran ausentes seria entregada a los campesinos. Los propietarios que directamente explotaran sus tierras podian conservar hasta tres hectéreas con posibilidad de vender el excedente. Mis de 4 748 000 campesinos se beneficiaron de estas medidas, de modo tal, que 90% de la tierra cultivable quedé en manos de quienes la trabajaban. Se dio paso asia tuna floreciente agriculrura basada en la iniciativa de los pequefios productores. De igual manera se én mediante la derogacion de 7 fandamencales de los individuos. Los presos politicos Abertay ¢testabecivon las libertaes de pensamento, 8 reunibn, organizaciin y expresion, Los poderes imines ‘policia politica y del Ministerio del Interior dectetd una movilizacién espiritual de Ja- eyes que testringian los derechos quedaron en religid, JAPON CONTEMPORANED 293 partidos politicos revornaron al escenario nacional, incluido el Par- tido Comunista Japonés, Se pretendta no sélo liguidar el antiguo digo moral, sino crear tuno nuevo fincado en las libertades pi- blicas de las democracias occidentales. Con este Sin se impulsaron ‘medidas como la reforma educativa, la emancipacién de la mujer y el desarrollo del sindicalismo. Japén se constituia as{ en un gran laboratorio social del liberalismo democrético. La reforma educativa eliminé muchos de los controles csta- tales y puso las escuelas bajo vigilancia de la sociedad civil. Con base en el modelo escadounidense, el sistema se descencraliz6, y se introdujo la educacién mixta y la secundaria; también se redisefié Ja educacién superior con nuevas universidades locales. Se adop- taron libros de rexto en los que la historia de Japén era presentada con la 6ptica occidental. En suma, la implantacién de un civismo distinto al Bushidé 0 cédigo militar de los samurai, la individua- lizacién de los métodos educativos y la climinacién de cualquier sesgo totalitario o disctiminatorio en las escuelas y universidades fueron algunos de los nuevos objetivos de la educacién, ‘A la mujer se le concedié el derecho al voto y, al menos en. xérminos formales, su estatus de igualdad en la nueva legislacién Jaboral significé un golpe al sistema confuciano tradicional que Ja subordinaba al hombre. Las reformas al cédigo civil reconocie~ ron la igualdad de todos los hijos en el nticleo familiar, norable diferencia con la organizacién familiar cradicional que otorgaba privilegios exclusives al primogénico. Otro cambio fundamental tuvo lugar en materia labora al es- timularse el movimiento sindical. Se eliminaron restricciones a las actividades politicas de los obreros y se abolié el control policial sobre las organizaciones de wrabajadores. En buena medida, la re- forma laboral determiné que el sindicalismo cobrara una dimen- sid nunca antes vista en la historia de Jap6n al reconocerse los derechos a la negociacién colectiva y Ia huelga. Si bien en 1936 habia 420 000 trabajadores sindicalizados, que representaban cl 7% del total de obreros en el pats a finales de 1946, ef mimero de indicaros ascendia a 17 226 con casi cinco millones de afliados, be correspondia a 47% del total dela Fuerza labora, 294 wisTORIA MINIMA DE JAPON Liquidado el militarismo, restauradas las libertades piblicas, guebrantadas las estructuras totaitarias y emprendidas las refor- mas demoeriticas, restaba dotar a Japén de un nuevo régimen po- litico que consolidara el orden social. Con base en un precipitado borrador claborado por MacArthur y su equipo, se promulge la Constitucién el 3 de noviembre de 1946, dia dela fiesta nacional que conmemora el natalicio del emperador Meiji, promotor de la modernizacién japonesa en el siglo XIX. En la nucva Constitucién, el emperador quedaba definido como un mero simbolo de la unidad nacional sin poderes efecti- vos; se establecia asimismo la soberania del pueblo y se garantizaban los derechos fundamentales del hombre, entre otros, los derechos a la educacién y al bienestar social; se consagraba, ademds, que la Dieta 0 Parlamento constitufa el “érgano supremo del poder del Escado”, En el articulo 9 del capitulo 1! se establecié el desarme total de Japon y la privacién de su derecho a la beligerancia. Este famoso texto, atribuido a a inspiracién del propio general MacAr- chu, expresa: El pueblo japonés, aspirando sinceramente a una paz internacional basada en la justicia y en el orden, renuncia para siempre a la guerra como derecho soberano de la nacién y a la amenaza o al uso de la fuerza como medio para resolver las dispiiac internacinnales. Con cl fin de cumplir tal propésiro, no se mantendrén fuerzas de tierra, ‘mar o aire ni otro potencial de guerra. No se reconoceri el derecho de beligerancia del Estado. A partir de entonces, este articulo constitucional ha dado lugar a airosas controversias en la opinion publica japonesa. Si bien era cexplicita la negativa a rearmarse aun frente al asomo de amenazas externas, cl texto dejaba asequible el proceso de reatme a través de instancias policiales. La renuncia a las armas fue, en todo caso, un acclerador de la reconstruccién econdmica y la ulterior prosper \a dsfensa nacional. JAPON CONTEMPORANEO 295, ELNUEVO ALIADO. Desde el inicio de la posguerra hubo voces en Estados Unidos que consideraban imprescindible reforzar a Japén para servic a los f- nes de la guerra fra. El subsecretario de Defensa, general Kenneth Raya, creia preciso echar marcha atrés en a politica de disolucién de los zaibaisu para acelerar la recuperacién econémica del pafs, El subsecretario de Estado, Dean Acheson, abogaba por transformar a Japén en “el taller industrial del Lejano Oriente”. Japén pasé fentonces a ocupar un nuevo lugar en el pensamiento estratégi- co estadounidense, que estaba dominado por uns irreconciliable confrontacién con la Unién Soviética. Esta politica se definié més claramente tras la victoria, en 1949, de la revolucién comunista de Mao Zedong en China y el estallido de la gue:ta de Corea un afio después. Yoshi Shigeru tue of primer mist de a transcin democrtica de Jay su excep sonal ‘hbidedpoltica eve Undrimerente reconoci, E122 de mayo de 1946, Yoshida Shigeru (#41 78) se convir- ti6 en primer ministro. Yoshida habia destacado como embajad lo como embajador | ara Japén, Kishi se dio a la tarea de reajustar la relacién de Japén con Estados Unidos Greener SoS ee ie] a partir de un nuevo tratado bilateral de seguridad. Su mayor reto cconsistié en satisfacer el creciente nacionalismo interno sin me- noscabo de la alianza estratégica con los norteamericanos. Para ello propuso un instrumento juridico que permitiria mayores matge- nes de accién 2 Japén, bajo un marco de recip:ocidad més amplia, ala ver que intensificaba el compromiso con la defensa del “Mun- do libre”. La propuesta de Kishi caus6 revuelo en un importante sector de la opinién piiblica, tanto de derecha como de izquierda, que consideraba al tratado inaceptable. Todo ese complejo proceso rememoraba aquella dolorosa ex- pericncia del siglo XIX, cuando el gobierno del emperador Meiji debio luchar para que se revocaran sendos tratados injustos, segiin los cuales Japén fue obligado a otorgar a las potencias occidentales concesiones sin reciprocidad. Es de destacar que, en aquel enton- ces, México fire el primer pafs que en noviembre de 1888 semnbré tun precedente diplomatico esencial al reconocer a Japén en térmi- nos de total igualdad.? La renegociacidn del Tratado con Estados Unidos produjo uno de los debates més acalorados que jamés se hayan dado entre el partido gobernante y la oposicién. Ademés, en las calles ocustie~ zon nuttidas concentraciones de protesta y miles de manifestantes Sano introdujo el método de los geniales maestros rusos Konstantin Stanislavsky y Vsevolod Meyerhold en México, conformando un grupo de excelentes actores que revitalizé la trayectoria del teatro nacional, En este periodo, la industria electrodoméstica que volvié célebre a Japén se expandié por el mundo. La venta de televisores se multi- plic6 por 20 en sélo tres afios, pasando de 165 000 a 3.290 000 uni- dades entre 1956 y 1959. Las revistas semanales se populatizaron, algunas de ellas con tirajes de hasta 12 millones de ejemplares. La era del consumo habia llcgado y cl desarrollo del mercado interno se convirtié en el catalizador de la economia. Kishi debuté como primer ministro en medio de esta transfor- macién social. Durante la guerra habia sido funcionario del Mi- nisterio de Comercio en el gobierno de Toj6 Hideki; al triunfo de los aliados fue apresado como criminal Clase A; después hizo todo lo posible por diluir sus antecedentes y ganar la confianza de la opinién pablica. Para ello, intenté valerse del nuevo instrumento de comunicacién que adquiria un papel protagénico en los pro- esos politicos japoneses: la television. Su donaire intelectual, sin embargo, no agradaba a muchos televidentes que con frecuencia lo encontraban antipatico, te La impopularidad de Kishi se agravd tras cl episodio del Fukuryit Mar, un barco pesquero afectado por cenizas radioacti > se Maia Elena Ota Mishima, Meske y opin en el sige XK: La police ete ti de Mie ts comtlidecin de ia ioberanteaponcin Calccin del Archivo Heico __iplomitico Mexicano, Serie Documental, nim. 1, Mexico, Secrears de Relaciones Ex Eton, 1976. 304 usTORIA MINIMA DE JAPON rodearon la Dieta. El presidente Dwight D. Eisenhower tuvo que suspender una visita oficial a Japén. Pese a todo, el nuevo tratado bilateral comenzé a ser efectivo a partir del 19 de junio de 1960 ‘as una apresurada ratificacién por el parlamento. Un dia antes, Kishi hizo publica su renuncia y lo sucedié Ikeda Hayato (jth [B BBA), entonces ministro de Finanzas, La economia iba viento en popa. Las inversiones se diversificaron hacia nuevas ramas en respuesta ala demanda creciente del mercado interno. Al modernizarse la planta productiva se amplié el compo- nente industrial y aument6 la competitividad. Aunque las importa- ciones de tecnologia y maquinaria plantearon desajustes tempori- les en la balanza de pagos, lo cierco es que la expansién econémica redundé en un crecimiento de los ingresos netos de la poblacién, Los japoneses dispusieron asi de mayor capacidad de compra, lo que fortalecié a las industria basicas productoras de bicnes de consumo. En 1953, Japén ingresé al Fondo Monetario Internacional (P04); en 1955, al Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT, y, més adelante, en 1964, a la Organizacién de Coopera- cién y Desarrollo Econémicos (OCDE). La incorporacién de Ja- pén a esos mecanismos multilaterales significé también el acceso expedito 2 los mercados de materias primas en tiempos de gran dinamismo de la economia mundial. En 1955, Japén logré, por primera ver, una balaza woinercial equilibrada con un crecimien- to de 9%, El informe gubernamental de 1956 sobre la economia nacional certificaba de manera contundente: “jEl periodo de la posguerra ha quedado atris!”. EL MILAGRO El éxito de la economia habria de ser verdaderamente espectacular, con tasas de crecimiento, promedio anual, de 8.5% entre 1955- 1960, y de 10% entre 1960-1965. En el periodo 1966-1970 se alcanz6 la cifra sin precedente de 12%; si se compara ese ritmo de expansién con el de Estados Unidos y de algunos paises de Europa para cl mismo periodo, la relacién es la siguiente: JAPON CONTEMPORANEO 305 ‘Tasas de crecimiento del PNB En paises seleccionados, A precios constanses entre 1950 y 1970 {96} Peis 1950 1950-1955 | tese-1990 | -sev-s068 | sa66-970 sta 70 | s2 | 44 | sa Frais aot: Soda ge awe ae FepibcaFeiedceaenna | 90 | 62 | 49 | 48 wala go | sa fet a9 suecia ar | a3 | se | 39 Gren Bie size | eae laraae| S20 Eatin } 43 | 23 | 49 | 33 Jain } aa es | 10 | tas ‘uence: Martin Bronfenbrennery Yaukichi Yasubs, “Economic Wel, en Kozo Yams ‘ura y Yauch Yauba, The Folitcs! Economy of Japan, Plo Ale, Stanford Universiy Dress, 1987, ol p. 96. Entre 1956 y 1961, como hemos dicho, s produjo una ver- dadera revolucién en el consumo. Por un lado, la reforma agraria determiné el aumento notable en los ingresos de los campesinos: por el otro, la expansién y las nuevas condiciones del sector indus- tial dicton lugar a un crecimiento elevado et: los salarios de los trabajadores urbanos, Se registré asimismo una revolucién tecno- legica sin precedentes. Al restaurarse los contactos con el mundo occidental, el avance en las imporraciones de tecnologia se aceler6 para industrias como la del acero, la automotria y la de hidrocar- buros. También se introdujeron nuevas tecnolegfas en dreas como las de los textiles, resinas sintéticas, petroquimica ¢ industrias elec~ ténicas. Todo esto provocé el aumento y la diversificacién de la produccién en proporciones jamés vistas. Junto con el acelerado crecimiento interno de Ia economia se dio una extraordinaria expansién del comercio exterior. En. 1960, el producto exportable consticuia 3.2% del volumen de comercio mundial; en 1970 llegé a casi 7%. En ese periodo, el volumen del comercio mundial se triplicé; las importaciones japonesas crecie- ron en mas de 30 veces y las exportaciones lo hicieron en 50. La tasa de inversién bruta promedié 30% entre 1953 y 1956 como 306 HISTORIA Maka DE JAPON porcentaje del producto, proporcién mayor a la de cualquier otro pals, pero lo més significativo fue que dichas inversiones se hicie- ron casi exclusivamente con capital japonés. Se impuso asi la necesidad de una planeacién estricta y cuie dadosa. Para lograr la autonomia econémica y el pleno empleo, en 1955 se establecié un primer Plan Quinquenal bajo la admi- nistracién de Hatoyama; dicho Plan fue reformulado por Kishi, en 1957, con el propésito de dar impulso sostenido al crecimien- to con altas tasas. En 1960, Ikeda se propuso duplicar el ingreso nacional para la década siguiente mediante la aplicacién de una politica de austeridad deflacionaria y de conformidad con las reco- mendaciones del Plan Dodge. E Plan Ikeda tuvo éxito. Los niveles de crecimiento econémi- co anual raras veces bajaron de 10%. Los japoneses jamés habjan experimentado un ambiente tal de enriquecimiento material. Las cimaras forogréficas, las radios de transistores y los automéviles dejaron de ser bienes suntuarios para colocarse al aleance de cual- ‘quiera; las disparidades en bienestar entre el campo y las ciudades précticamente desaparecieron. Con el mejoramiento de la tecno- logfa agricola, la produccién en el campo crecié y aparatos clec- trodomésticos como lavadoras y televisores se introdujeron en los hogares campesinos. Exporcar se convirtié en un objetivo nacional primordial. El conjunto de la sociedad funcioné entonces como empresa guiada por el lema de Exportemas para sobrevivir. En el terteno diplomati- co hay que destacar el mejoramiento significativo de las relaciones con la Repiblica Popular China gracias a un acuerdo comercial firmado en 1961; Ikeda serfa el artifice de una estrategia conocida como “politica de las dos Chinas’, segém la cual se mantenian relaciones diplométicas con el gobierno de Taiwan, ala vez que se establecian vinculos comerciales con Beijing. El acontecimiento mis destacado de la Epoca fue la realizacién de la Olimpiada de Tokio en 1964, ocasion en la que resplandecerta el trabajo arqui- rectonico de Tange Kenzd (Fr FHS), ademis de que se presus = ‘micron ante el mundo os logos del Exito econbmicos el Festival de Cine de Cannes premio asimismo la balla pelicula de Teshiga JAPON CoNTEMPORANED 307 hara Hiroshi, La mujer em las dunas, basada en una novela de Abe Kobo (RE6AF). ElPrimer Minisiro Sato Esaku condujo el gobiernajaponés durante un extensa periado de expansién econémnica, Su Innovadora pita etrior le hizo soteedor en 1974 al Premio Nobet de laPaz A diferencia de sus predecesores, Ikeda casi ro tuvo rivales que Je disputaran el liderazgo, sin embargo, una penosa enfermedad lo obligé a renunciar, en octubre de 1964, a un dia dela clausura de Ja Olimpiada. Lo sustituyé Saté Eisaku, primer ministro (EARS 8), quien asumié la conduccién del gobierno el 9 de noviembre y la mantuvo por mds de siete afos. El primer ministro, Sato, se anotatfs logros importantes, entre otros, consiguié revertr la ba lanza de pagos con Estados Unidos hasta volvetla adversa para los estadounidenses. Saté orienté la politica exterior de su gobierno hacia la no proliferacién de armas nucleares pese a su manifesta colaboracién con Occidente, ademés de haber notmalizado las relaciones con Corea del Sut. Can el régimen de Set existian tres pendientes: las teparaciones por dafios de guerra, los derechos de pesca en aguas limitrofes y lo relacionado com el estatus de los coreanos residen- __ sen Jap6n, La peninsula coreana habia sido desde siempre una | ha geoestratégica para la seguridad japonesa; mediante el tratado | tipo-surcoreano del 20 de enero de 1965 se superaron diferencias, Statgue se abrié una brecha mas profunda con el réginen de Coreg 308 HISTORIA MtvIMA DE JAPON Las empresas japonesas comenzaron entonces a extender sus Ambitos de accién hacia las econom{as de Corea del Sur y el su- reste asidtico. La cooperacién econémica que Japén brindaba a los paises en vias de desarrollo de Asia se canalizé a través de contri- buciones significativas al Banco Asidtico de Desarrollo (BAD) con sede en Manila. La reaccién de Beijing no se hizo esperar, con de- ‘nuncias furiosas acerca de supuestas pretensiones imperialistas que se escondian detris de la asistencia japonesa a los paises asiticos. Se produjo asf un enftiamiento de las relaciones sino-japonesas, hhasta el grado de perderse la comunicaci6n entre ambos gobiernos. Con el estallido de la Revolucién Cultural china, el vinculo entre las dos naciones pricticamente se desvanecié. EI crecimiento econémico estimulé la urbanizacién. Si, en 1955, la poblacién que habitaba en las ciudades constituéa 45% del toral japonés, una década después, la cuora poblacional en las urbes se elevé a 58%. Con la migracién rural-urbana y el creci- miento natural de las ciudades se formaron megal6polis como la que unié a Tokio con Yokohama y a Osaka con Kobe. La secuela fue el abandono de las zonas rurales. La poblacién rural, que en 1955 constitu‘a 54% de la poblacién total, disminuyé 2 42% en 1965. ‘Al incrementarse 1a masa urbana se presentaron problemas nunca antes vistos, tales como hacinamientos, excesivo tréfico de ‘autos, congestionamientos y accidentes. El problema mayor, sin embargo, fue la contaminacién del agua y el aire. En el periodo de Satd se registraron las més altas concentraciones de material con- caminante en ciudades industriles como Tokio, Osaka, Kawasaki, “Amagasaki y Yokkaichi. Asimismo, en 1956, se presenté el espe luznante envenenamiento por metilmercurio en Minamata, en la isla de Kishi que al cobrar decenas de vidas dej6 al descubierto Ja otra cara del milagro econdmico: cl deterioro ambiental y de calidad de vida. Satd se abood entonces a promover el desarrollo lage Mico, EL Calegio de Misco en la tercera fuerea politica de la cémara alta, mientras que en la ciara baja obtenia 25 escafos; su éxito se debié, en parte, a que loge ejercer ascendente sobre los inmigrantes utbanos. Simpati- zance de los precepros espirtuaes del Budismo, un alto nimero de wabajadores, artesanos, burdcratas y pequeios empresaris, de- cepcionado por el excesivo materialismo en el que habia caido la sociedad japonesa, empezé a votar en favor del Korneith, Dehecho, inclinados a favor de los postulados marxista-leninistas, JAPON CONTEMPORANED 309 protestron contra la empresa patroquiica Cisso, cujos veridas ena cudad de Minamata costaroa aida | 45 persoras en 1956 tas la ngastén de pescado y | matisoes ocntainados. ‘Los familiares de as victimas itp: youtube convatA=hFgPet dotarfa al pueblo japonés con un nuevo sistema de valores. Las principales ciudades adquirieron fisonomias audaces con la cons- truccién de rascacielos, trenes subterrineos y amplios ejes viales. Bocinas insistentes, anuncios luminosos, jets que cruzaban el cielo y gente acosada por el tiempo, rodo formaba parte de la lamante Cotidiancidad del Japén de los afios sesenta. La superestructura politica surgié como subproducto de la economia. Aparecieron nuevas cortientes politicas como el Partido Kéueits, inegrado bisicamene por miembros del Sokagakhai, divisién de la secta budista Nichiren. Bl partido surgié en 1956, conquisté tres curules en la cémara alta, nueve en 1959, 11 en las clecciones de 1965 y 20 en las de 1967, con lo cual se convirtié A partir de 1960, el P5) atravesé por serios cuestionamientos, cl Partido cays en el divisionismo con algunos adheren- y otros 310 1usTORIA MENIVADEJAPON ‘més deseosos de llevar a cabo reformas sociales menos radicales, Sur- 46 entonces el Partido Socialista Democrético (PSD), seguidor de una linea en ocasiones cercana al PLD gobernante y con su base de apoyo en la Confederacién Japonesa del Trabajo (Démei). Con la igquierda fracturada, Satd vio la oportunidad de enarbolar la recupe- racién de Okinawa como bandera para ganarse a la opinién piiblica. Localizada en la parte mas meridional del archipiélago japo- nés, la isla de Okinawa continuaba bajo contol estadounidense y despertaba al fervor nacionalisca. En noviembre de 1967, duran- te su encuentro con el presidente de Estados Unidos, Lyndon B. Johnson, Sat6 recibié la promesa expresa de que Okinawa seria devuclta. A sélo tres afios para la renovacién del polémico Tratado de Cooperacién y Seguridad de 1960, el primer ministro jugé con Jas expectativas; el problema de Okinawa quedé6 asi intimamente ligado a la cuestién de cémo se definira la seguridad de Japén a partir de 1970. Cuando el candidato republicano Richard Nixon resulté ser el triunfador de las elecciones presidenciales estadounidenses de 1968, las expectativas sobre Okinawa quedaron en vilo. $i Nixon consideraba a Okinawa como bastidn indispensable para su estra- tegia en la guerra de Vietnam, serfa més dificil le devolucién. EL encuentro Nixon-Satd, en la Casa Blanca al aio siguiente fue de- terminante: el presidente estadounidense expuso los lineamientos de la llamada Doctrina Nixon que demandaba, de los paises alia- dos, mayores responsabilidades en la defensa del “Mundo libre”. Sato expres6 que, sin Okinawa, Japén seria una nacién incompleta incapaz de cumplir con esas responsabilidades. En respuesta, Ni- ‘xon prometié que la isla seria devuelta en 1972, cuando no hubie- ra mds tropas estadounidenses en Vietnam, y pidié a cambio que Japon recortara de manera voluntatia sus exportaciones de pro- uctos textiles a fin de nivelar ba balanza comercial desfavorable para Estados Unidos. ‘Bn Japon se festej6 cl acuerdo. En la camara baja, el PLD volvi6 a obtener una mayoria aplastante, producto del entusiasmo por la presunta devolucién de Okinawa. Empero, sélo Sat sabia que asunto se hallaba vinculado al otro gran tema de contenido oo: JAPON cONTEMPORANEO 311 mercial; sobra decir que a los productores y exportadores de telas y productos textiles no les gust enterarse de la politica autorrestric- tiva que desde ese momento se aplicatia. En 1968, Kawabata Yasunari (J!| 4 HEB) se convertiria en el primer escritor japonés que recibié el Premio Nobel de Literaeura por obras tan significativas como El pats dela nieve y Belleza y siste- 222, Kawabata fue mentor de uno de los escritores contemporiineos de Japdn mas complejos: Yukio Mishima, quien desde muy joven salté a la fama con la novela Gonfésiones de wna mascara. Mas ade- Iante, libros como El pabellén dorado, Elsonido de las olas y Después del banguete \o convirtieron en autor de fama internacional. En marzo de 1970 se llevé a cabo la Exposicién Universal de Senti, cerca de Osaka, suceso que sirvié para que Japén impresio- nara al mundo con sus avances tecnolégicos y su potencial eco- némico. El ambiente festivo opacé las tensiones ocasionadas por los limites a las cuotas de productos textiles destinados al mercado ‘estadounidense. En todo caso, comenzé a gestarse, en el dnimo de los consumidores estadounidenses, un nacionalismo ancijaponés que rememoraba los peores afios de la época de pregucrra: poste- riormente, algunos paises europeos también impusieron barreras a a importacién de los textiles japoneses. En ese contexto, Mishima anzarfa una proclama contra quienes presuntamente habjan do- hlegaco el espiritu de Japén frente a Occidente y en noviembre se suicidé a la manera samurdi, cometiendo sepputw en cl cuartel de las Fuerzas de Autodefensa En julio de 1971, Nixon, sorpresivamente, anuncié que vi- sitarfa la Reptiblica Popular China. El viaje habia sido cuidado- samente preparado por Henry Kissinger en su calidad de asesor presidencial para asuntos internacionales. Sar5 recibié la noticia como cubetazo de agua helada; si Japén era el principal aliado en Ja defensa de Asia Pacifico, zpor qué el Gobierno en Washington habia tomado una decisi6n tan importante sin consultatlo? La opi- nién piblica japonesa ~més pro china que pro estadounidense~ lo percibié y apunté sus criticas contra Sato. Por si fuera poco, el Departamento del Tesoro de Estados Uni- dos dio a conocer que suspenderfa la convertibilidad fija del délar 312 HsTORIA MINIMA DE JAPON JAPON CONTEMFORANEO 313, En su ensayo Burka bovicn(En cetensa de la cultura), el destecado escrtory dramaturgo ‘Mishima Yukio recur a figura del | emperador como la magna seal ce dentcad de su pueblo. También organiza Tatonokel (Gociedad del Escudo} con un fastuoso ‘unforme que é mismo diseAé en el que pretend resncarar io valores racionales del Japdn traccionl, La mafana de 25 de noviembre de 1970, Mishima se drig, unto con los miembros, desu grup, al cute miter en Toko, tras un dscurso a a topa, 6 y su companero Morita Masckatsu se suicidaron on presencia el general Masta Kanstosh, tit: yeutude corer =NCe UBoy SE hi, héroe del siglo XVI nacido en el seno de una familia campesina aque logsé escalar los peldaiios de la sociedad has'a convertirse en amo y sefior de Japon. ‘Tanaka se lanzé a la conquista de dos objetivos: la reanuda- cién de relaciones diplométicas con China y la remodelacién del archipiélago japonés. Consiguié lo primero a los pocos meses de iniciada su administracién, cuando, en septiembre de 1972, el fla- ‘ante primer ministro decidié volar a Beijing acompatiado de su fiel colaborador Ohira Masayoshi, ministro de Asuntos Exceriores. Durante las conversaciones sostenidas con los lideres chinos, Mao Zedong y Zhou Enlai, Tanaka reconocié el grave error cometido por Japén en 1939 con la invasién de Manchuria que condujo a Ja guerra con China. E] acercamiento con Beijing acrecenté la popularidad de Ta- naka, sobre todo entre los empresatios japoneses dvidos de ingresar al muy codiciado mercado chino. La secucla logica fue el deterio- 10 vertiginoso de las relaciones con Taiwan, aunque también se generaron recelos en Washington al mostratse el primer ministro nip6n como un hombre capaz de conducirse con autonomia. Mis sorprendente ain fue la rigides de eraro que empend a manifestarse hacia la misién diplomstica japonesa en Mosci en vireud del con- Alicto sino-soviético. En todo caso, Tanaka habiz movido las piezas del ajedrez politico en Asia Pacifico y eso genero ansiedad. Las elecciones de diciembre de 1972 no reflejaron gran recep- tividad hacia las politicas de Tanaka; su partido, el PLD, apenas consiguié 271 curules en la cimara baja, mientras que el Parti do Comunista aseguré 38. El PS] recuperé casi la totalidad de las curules que ocupaba en 1969; el Komeit6 y el PSD perdieron fuer- za. 2A qué se debian los resultados? Sobre todo a que el pueblo japonés no estaba satsfecho con el programa de remodelacién del auchipiélago trazado por el gobierno. Los rumores de especulacién con bienes raices y con materiales de construccién eran fuertes, en tanto que los precios se disparaban de manera sospechos2. con el oro, lo cual implicaba un encarecimiento siibito de las im- portaciones japonesas determinadas en délares. Bs ficil imaginar cl efecto de la medida sobre Ia economia japonesa. Satd se vio ridi- culizado, més atin cuando su gobierno vors a favor de que Taiwan retuviera la membresfa en Naciones Unidas en tanto que la Asam- blea General, por abrumadora mayoria, resolvia a favor del ingreso de China a esa organizacién. En un intento por sacar fuerza de la debilidad, Sat demandé la restitucién inmediata de Okinawa, lo que al fin consiguié el 15 de mayo de 1972. En julio de ese afio, el titular del Ministerio de Industria y ‘Comercio Internacional, Tanaka Kakuci (F478), asumié el gobierno en sustitucién de Sar6. Tanaka contaba con una biogra- fia extraordinaria entre los primeros ministros de Japén, ya que, a diferencia de sus antecesores, graduados todos de las universidades imperiales de la preguerra, era autodidacta, con tinicamente ocho afios de escolaridad. Su personalidad dinamica y notable intuicién politica le llevaron a ocupar puestos de alto nivel a los 30 afios de ‘edad; su vida se equiparaba a la del legendatio Tayoromi Hideyos- * Vease cammuyourube comnatchv~BowsI7eMV., 314 nsTORIA MaNiba DE JAPON Tanaka se vio obligado a reestructurar su gabinete. La cartera de finanzas le fue confiada a Aichi Kiichi, reputado como honesto en el PLD; el primer ministro realizé entonces una gira cricontinen- tal que abarcé México, Estados Unidos, la Unién Soviética, China, Ja comunidad europea y el sudeste asidtico. Se entrevisté con el presidente Luis Echeverria y con el presidente Nixon por segunda ‘ocasion; sostuvo pliticas con el premier briténico Edward Heath, con el presidente francés Georges Pompidou y con el canciller ale- man Willy Brandt. En octubre de 1973 visité Mosc, siendo esa la primera vez en 17 afios que un primer ministro japonés viajaba a Ja URSS. Tanaka buscaba demostrar que Japén queria concluir un acuerdo de paz, amén de participar en la explotacién conjunta de Jos yacimientos petroliferos de Siberia: para tal efecto tuvo cuidado de no referirse al cema de las Islas Kuriles. La espiral inflacionaria iba en aumento. Peor atin, el fenéme- no se aceleré con la dréstica disminucién del suministro petrolero procedente de los paises miembros de la OPEP, cuando la guerra que estallé el 6 de octubre de 1973 entre Israel y las naciones dra bes significé un duro golpe para la economia japonesa, dependien- te en muy alto grado del petréleo proveniente de Medio Oriente. La explotacién potencial junto con la URSS de los yacimientos si- berianos adquirié una mayor importancia en la estratcgia del go- bictno de Tanaka. LA CRISIS La llamada “crisis del petleo” fue tema dominante en los me- dios de comunicacién a partir de 1973. En ese marco, Japén advirtié a Israel que, si no respetaba los acuerdos de cese al fuego suscritos en 1967, se revisaria la relacién bilateral. El gesto sig- nificaba un cambio en la politica exterior japonesa, generalmen- te apegada a las posiciones estadounidenses, y en buena medida obedecia a la imperiosa necesidad de no perder la confianza de os paises arabes productores de crudo. La nueva manifestacién de realpolitik indigné al secrerario de Estado, Henry Kissinger, JAPON CONTEMPORANEO 315 quien demanidé la inmediata rectificacién de la activud japonesa en un sentido mis solidario con Estados Unidos. El afamado periédico Asahi, que diariamente alcanza tirajes superiores a los once millones de ejemplares, publicé entonces tuna encuesta sobre la popularidad de Tanaka. Apenas una quin- ta parte de los cuestionados apoyaba al primer ministro, quien de nueva cuenta reorganizé su Gabinete. Para colmo, fallecié el ministto Aichi Kiichi y la cartera de finansas fue a parar a un archirrival de Tanaka, Fukuda Takeo, quien ya antes habla ocu- pado tanto ese ministerio como el de Asuntos Exteriores durante el gobierno de Sav. Si, en las estadisticas mundiales, Japén ocupaba el tercer lugar entre los paises més ricos, para numerosos japoneses, la nnacién parecia sumirse en un caos civilizatorio. Las condiciones de vivienda, el ruido ocasionado por el trénsito incesante de ve- hhiculos y la contaminacién ambiental, contribuian a que el estrés se apoderara de la sociedad. Los precios de los articulos basicos iban en aumento y, con ellos, el desprestigio del primer ministro ‘Tanaka, quien en noviembre de 1974 fue ecusado por la revista Bungei Shunjii de manejo doloso de fondos. La crisis econémica y la corrupcién politica dieron lugar a brotes de inestabilidad social. En marzo de 1974, 2 500 000 trabajadores pertenerientes a 63 sindicatos industriales se decla- raron en huelga; un mes después se sumaron otros seis millones. ‘Ante el temor de una escasez generalizada en los establecimientos comerciales, el pinico se apoderé de los compradores. En agosto y septiembre se registcaron estallidas de bembas en los edificios corporatives de Mitsubishi y Mitsui, “Tanaka viajé précticamente a todos los paises proveedores de recursos encrgéticos. Estuvo en el sudeste asiético, América Lati- nna, Canada, Europa, Estados Unidos, URSS y China; esta ilkima pronto se convirtié en uno de los principales socios comerciales de Japén, El acceso al petréleo chino trajo como consecuencia la reduccién de la dependencia del crudo drabe y la cancelacién del plan japonés para explotar los hidrocarbures siberianos con el consecuente y grave enojo del gobierno soviético. En diciembre 316 saisTORIA MiNIMA DE JAPON de 1974, Tanaka renuncié. Sus politicas habian suscitado una fuerte divisi6n en el seno del PLD; lo sucedié Miki Takeo ( ER) ubicado en el ala izquierda del Parcido. a caida de Tanaka coincidié con la interrupcién de la era del ripido crecimiento, El producto nacional, que se habia man- tenido sobre tasas anudlizadas de 109% durante casi dos décadas, se estacioné de manera abrupta. En 1974, la tasa de crecimiento descendié a menos 0.5%. La crisis inflacionaria mundial golpea- ba duro. Los precios del crudo se cuadruplicaron en tan sélo un. afio, afectando a paises importadores como Japén, con 74% de sus necesidades primarias de energia cubiertas con suministros provenientes del exterior. Seria, no obstante, tna simplificacién atribuir a la erisis petrolera la razén tltima del deterioro econé- mico del pais. Hay que recordar que, en 1971, el presidente Nixon con- cluyé de manera unilateral la libre convertibilidad del délar en oro, establecida después de la Segunda Guerra Mundial por los acuerdos de Bretton Woods. Ello alter6 el curso de las finanzas que por un cuarto de siglo habfa mantenido fijas las casas de cambio bajo el control del Fondo Monetario Internacional. La ‘medida tuvo un profundo efecto sobre la economia japonesa. No sélo fe necesario revaluar el yen, sino que hubo que declarar la floracién de la moneda a principios de 1973. Mientras se produ- cfan esas medidas correctivas, sobrevino una nueva crisis petro- lera que aceler6 el alza de los precios en los productos bésicos y provocé una inusitada especulacién en bienes raices, acciones y valores bursétiles, Los bienes de consumo interno se encarecieron, al igual que las importaciones. Para hacer frente a la severa inflacién se toma- ron drésticas medidas de ahorro y austeridad en el gasto puiblico, que se prolongaron hasta 1975 cuando la inflacién cedié. Sin embargo, como efecto de la crisis petrolera, Japén se vio ante una peligrosa encrucijada después de que los sélidos cimientos de su estructura econdmica fueron vulnerados y enfrentaban graves © iméditas amenaaas. i JAPON CONTEMPORANEO 317 EL GRAN VIRAJE ‘Tanto los shocks de Nixon como la notable elevacién de los precios del petréleo revelaron la vulnerabilidad de Japén. Las autorida- des se dieron entonces a la tarea no sélo de recuperar los niveles de productividad, sino de redefinir el modelo econémico. Habia que corregir los desequilibrios internos provocados por el répido ctecimiento, pero también iniciar una profunda revisién de la es- tructura industrial. Uno de los desafios consistia en reconvertt las plantas industriales para dar paso a tecnologias més avanzadas que permitieran mantener la compecitividad. ara tal efecto, el gobierno de Miki trazé un plan nacional des- tinado a transferir capitales ala produccién interna de articulos de mayor valor agregado, como maquinaria y equipos, electrénica y microelectrénica, instrumentos de precisién v productos quimicos tefinados. También se consideré necesario disminuir las inversi nes en las industrias de aluminio, astillers, petroquimica y texti- les, todas ellas grandes consumidoras de energia y materias primas importadas, asi como alramente demandantes de mano de obra. Bajo un nuevo concepto de desarrollo, el Estado se mostraria més preocupado por garantizar mejores condiciones de vida a la poblacién. Ta administracién de Miki se abocé por ende y dio rioridad a la construccién de vivienda, la infraestructura urba- nna, las industrias de servicios, asi como otras de beneficio social y comunitario, Adicionalmente, se redisefié el aparato productivo para asegurar un ritmo de crecimiento més bajo pero més estable, y también se proveyé de nuevos y més avanzades servicios sociales. As{ se dio inicio a un complejo periodo de transicién que in- volucré al conjunto de la sociedad. El sistema educativo, bajo la conduccién del connotado intelectual Nagai Michio, buses docar a los trabajadores de nuevas capacidades técnicas para adecuarlos 2 Jas cambiances condiciones de produccién. Fl esfuerzo nacional su- puso también Ia solucién de colosales problemas, como el hacina- ‘micnto urbano, la contaminacién ambiental y la destruccin eco. légica. La reorientacién del comercio exterior y la promocién de las inversiones en el extranjero se convirticron también en prioridades, 318 HISTORIA MINIMA DEJAPON oer ‘Nagai Michi ni6 una brillant camera como ‘educador on a Universidad d Kot, que prcsigui eel Instuto Tecnoléicn de Toki, Fue profesor wistanta en las uniersidades ce Columba, Hong Kong, Stanford y El Colegio de Mévico. En 1974 fue desgnaco minito do Educacin, Ciencia y Cutura de Japon para ‘encargarse de una formidalerecientacin del sistema ecucatv, En 1975 recié la orden el Aguila Azteca, la mama condecoracién del gobierno mexicano. ‘A mediados de la década, la economia daba ya muestras de avance con un crecimiento de 6% en 1975 y 5.7% en 1976; las exportaciones también se incrementaron en 17%, mientras que las importaciones crecian 9%. En Washington y las capitales de la co- munidad europea, el éxito japonés volvié a generar resquemores, pucs ningtin otro pais desarrollado habia podido sostener las bajas tasas de desempleo e inflacién que arrojaba Japén, ni tampoco sus altas tasas de producci6n industrial con elevados niveles de compe- titividad y saldos positivos en la balanza comercial ‘Ante presiones en el interior de su Partido, Miki recompuso cl Gabinete con reconocidos liberales, como Ohita Masayoshi, y conservadores del corte de Fukuda Takeo, Nakasone Yasuhiro y el ex primer ministro Sat Eisaku. Mientras en el PLD luchaban las facciones, los opositores vivian procesos no menos contictives. En el PS} se sostenia tuna dlgida controversia en'rorne de la estrategia aque debfa seguitse tas el acercamiento con China; en el Komeitd, ‘un grupo de militantes criticaba con severidad a sus dirigentes por suscribir un “armisticio” por 10 afios con el PC. E15 de febrero de 1976, los diarios nipones dieron cuenta de tun suceso escandaloso, que se inieié con una revelacién del Senado: estadounidense en el sentido de que la corporacién Lockheed habia JATON CONTEMPORENED 319 sobornado a altos funcionatios publicos y privades japoneses para promover la venta de un nuevo modelo de aeronave. De acuer- do con las investigaciones, cl dinero se habia filerado a través de tres canales: la compafifa Marubeni, la empresa representante de la Lockheed.en Japén y un oscuro personaje del submundo japonés llamado Kodama Yoshio. El caso alcanzé dimensiones insospechadas cuando se confirmé que el ex primer ministro Ta- naka recibié parte del soborno; la carrera politica de Tanaka se vino a pique con tintes dramiticos cuando Miki ordené su en- carcelamiento. Durante las elecciones de 1976, y por primera vezen dos déca- das, el PLD perdié la mayoria simple en el pariamento, por lo que se vio precisado a integrar una frégil coalicién con algunos de los partidos menores. El desastte electoral fue consecuencia directa del escindalo de Lockheed. Miki renunci6, contaba entonces con 69 afios y habia resuelto terminar su mandato jubilando a los miem- bros més viejos del partido. La medida tenfa destinatario: el ultra- conservador Fukuda Takeo (#2 EH #195), quien tenia 71 aftos. Sin embargo, no dio resultado al ser Fukuda quien se convertiera en primer ministto el 24 de diciembre de 1976. ‘Los partidos de oposicién aprovecharon la fragilidad del PLD para emprender una ofensiva en demanda de reducciones al im- puesto sobre Ia renta, Una tras atta, las iniciarivas del gobierno comenzaron a suftir modificaciones; para Fukuda, el resultado de las elecciones equivaliaa lo que en sumé se denomina itamiwake, cs decir, la desventaja de un luchador cuando es lastimado por un contrincante, Eran tantas las reformas parlamentarias, que habia quienes crefan que el pais se hallaba en la ancesala del socialismo. En septiembre de 1977, de nueva cuenta, la opinién piiblica se conmocioné cuando un grupo de radicales del llamado Ejézcito Rojo se apoderé de una aeronave de Japan Airlines que volaba de Paris a Tokio.* Para asombro de todos, el “halcén del conser- __6 Blepiogo del Eira Rojo fe lerado al cine en 2007 porel discos Wekamats 8G con ba pelicula fama eng seb: Asam tne no mihi (Une Red Arm), oc de premios en el Facial de Cine de Belin, 320 HISTORIA MINIMA DE JAPON vadurismo”, como se conocia a Fukuda, cedié sin negociar a las demandas de los secuestradores; las criticas por su mansedumbre se precipicaron canto dentro como fuera de Japén. Al tiempo que Fukuda asumfa su mandato en Tokio, James Carter sucedia a Gerald Ford en la Casa Blanca, trayendo consigo algunas sorpresas més para los japoneses. Por un lado, el presidente Carter hizo explicita su intencién de reducir el mimero de topas estadounidemses en Asia Pacifico; parecia que Estados Unidos tu- viera la intencién de dejar en manos de los propios japoneses el asunto de su seguridad nacional. En segundo término, decreté un embargo total de combustible nuclear a Japén, precisamente cuan- do los japoneses se disponian a desarrollar su propio programa nuclear con fines pacificos. Hubo también problemas con la Unidn Soviética. No sabfan los gobernantes en Tokio lo mucho que se habjan irritado en el Kremlin por el retiro unilateral de la participacién japonesa en el proyecto de exploracién conjunta de energéticos en Siberia, Aceso habfa que sumar el incidente del Mig-25, sucedido en sep- tiembre de 1976, cuando un avién supersénico de combate, pro- piedad de la URSS, se desvié de su ruta normal, viéndose obligado a aterrizar en suelo japonés; las autoridades niponas se rehusaron a devolver el aparato. Los soviéticos reaccionaron decretando la extensién de su zona maritima exclusiva a 200 millas, ateceando con ello a los barcos pesqueros japoneses que solfan operar en torno dela peninsula de Kamchatka, y, de paso, la decisién podia interpretarse como maniobra para asegurar el dominio soviktico sobre las Islas Kuriles. El tema de la seguridad volvié a ser materia de controversia Fukuda anuncié su intencin de incrementar las fuerzas de auto- defensa y de modificar el articulo noveno de la Constitucién. Bl ‘Libro Blanco dela Defensa, publicado en julio de 1978, sefalé a {os soviéticos como la. principal amenaza para la seguridad japo- ‘pesa. En Being, donde por lo general se advertia sobre el peiggs de la remilitarizacién japonesa, esta ver se hizo pitblica la complae cencia del gobierno chino frente al eventual fortalecimiento de! defensas niponas contra wna presunta amenaza soviética. JAPON CONTEMPORANED 321 Pese a que la economfa habia superado los obstaculos inter- ‘nos, persistian indicios de estancamiento, como insuficiencias en Ia produccién, subutilizacién de las capacidades y cierto grado de desempleo. A eso hubo que afiadir las presicnes de Washington y la comunidad europea para que Japén redujera sus saldos ex- cedentes en comercio. En las elecciones de noviembre de 1978, el haledn cayé, lo sucedié Ohira Masayoshi (A TEI), viejo zorr0 de la politica, discipulo de Ikeda y miembro de una familia cristiana. Ohita era liberal e impuso su estilo de manera gradual canto en el gobierno como en el PLD. En contraste con sus predeceso- ses, acentuaba el contenido y no la forma. Fue en la diplomacia donde imprimié mayormente su sello. En junio de 1979 recibié a los mandatarios de las naciones més industrializadas en Tokio, una cumbre irénicamente planeada por Fukada pero que Ohira aproveché para cultivar su perfil de estadista. En julio concurrié a la reunién de la UNCTAD, celebrada en Manila, para presen- tar la imagen de un Japén renovado y més comprometido con el desarrollo de los paises pobres. A raiz de la invasién soviética a Afganistén, en diciembre del mismo afio, se sumé a las condenas occidentales y posteriormente al boicot de la Olimpiada de Mos- ci de 1980. La muerte sorprendié a Ohira el 12 de junio de 1980, a su regreso de una gira por México y Canad. Su enemigo politico, Fukuda Takeo, habia promovido, en la Diet, un voto desapro- batorio de su gobierno, y ello le provocé un ataque fulminante al corazén, Por cierto, ese mismo afio, el connotado escritor catélico Endo Shusaku publicé la novela Samurai, que relaca la misién di- plomatica de Hasekura Tsunenaga a México, Espafia y el Vaticano en el siglo XVI. E117 de julio de 1980, Suzuki Zenko (BAS #5), reputado ‘como mediador entre las fuerzas politicas, sucedié a Ohira como primer ministro de Japén. Sin embargo, al cabo de un afio, su gobierno ya era objeto de duras criticas a rafz de un incidente en aguas territoriales japonesas, cuando la fragata Nisshé Maru fue embestida por un submarino nuclear estadounidense a 100 Kilé- 322 HISTORIA MINIMA DE JAPON, metros del puerto de Kagoshima. Las protestas se multiplicaron. Los esfuerzos de Suzuki por demostrar que el incidente no debia ser motivo de alarma se vinieron abajo, dado que el diatio Maini- chi publicé unas declaraciones del ex embajador de Estados Unidos en Japén, Edwin Reischauer, donde informaba que, desde 1960, buques de su pafs con armas nucleares realizaban visitas periédicas 2 puertos japoneses con la complacencia de las autoridades. Asi se supo la flagrante violacién de un esencial principio antinuclear adoptado por Japén, que es el de no permitir el trénsito de armas anucleares por su territorio. ‘Mientras tanto, en Washington, un grupo de congresistas pre- sionaba para que Japén aumentara su participacin en la defensa de los intereses de Occidente en Asia. Més atin, los reclamos en favor de medidas proteccionistas contra los productos japoneses se intensificaron con el estancamiento econdmico y el stibito incre- ‘mento del desempleo en Estados Unidos, En Detroit, capital dela industria automotriz y sede de una planta de la compafia Toyota, se produjeron manifestaciones de obreros desempleados que culpa- ban de su infortunio jal imperialismo japonés! ara colmo, en el continente asidtico se multiplicaron las protestas antijaponesas, a rafz de que el ministerio de Educacién reformé los libros de texto bésicos, suavizando el tono de la in- tervencién japonesa en Asia durance los afins treinta. Tanto en las dos Coreas como en China se exigié la transcripcién veraz de las atrocidades japonesas. En Singapur y Malasia, la opinién publica cxitied que dettés de las reformas a los textos se ocultaban inten- jones de remilitarizacins Suzulk se limid a ofrecer que los libros se enmendarian, cosa que no sucedié hasta 1985. ELHEDONISMO En 1982 empezaron a surgi problemas sociales tales como el cremento en la delincuencia juventl y asaltos bancatios a tra {os sistemas computarizados. Las presiones llevaron a que Si decidiera no reelegirse para un segundo periodo como presidente | tvidad en el empleo vitalicio a cambio de lealad, era de suponer JAPON CONTEMPORANED 323 del PLD, se abrié asi el espacio para que arribara al poder Nakasone Yasuhiro (5424 E20), un ultraconservador que habia prometi- do convert a Japén en punta de lanza de la defensa de Occidente en Asia Pacifico, as actus deel soil do os vee lapoeseson a décata debs afosochonta se ral enaumaneraeeraazarie de vesten | ‘dente conraste con la may formal veimerta. | eles empleaces, uiconatos yes que | ‘habia caracterizado un pais esencialmente consort, pe ee En los afios ochenta, a la generacién ubicada entre los 15 y 30 afios se le denominaba shinjinrui, liveralmente “nueva especie humana”, ya que poco tenia que ver con la nacién austera y traba- jadora de la época anterior. Se trataba de jévenes hedonistas que ‘consumfan, bebian y disfrutaban las relacicnes eréticas hasta el paroxismo, La prensa dio cuenta de casos inslitos de adolescentes ue asesinaban a sus padres, agredian a los maestros y ultrajaban @ compatieros hasta orillalos al suicidio. La delincuencia juvenil llegé a significar 44% del total de crimenes registrados en el pals. Con el aumento en las expectativas de vida, el niimero de an- cianos se elevé. Un estudio de la Universidad de Nihon ha es- timado, que para el aiio 2021, una cuarta parte de la poblacién seri mayor de 65 afios. El fendmeno llevard a mayores demandas cn los sistemas de salud y a estrechez en el empleo, Dado que las compaffas japonesas tradicionalmence habjan fincado su produc- que el pago de las pensiones se convertirla proto en un grave reto Ad, por motivos opuestos,jovenes y ancianos compelian a efectuar "cambios radicales. 324 HISTORIA MINIMA DE JAPON El primer ministro Nakasone, ex cadete de la Armada Imperial y partidario abierto de una politica de rearme y seguridad indepen- diente, fue investido gracias al apoyo de la faccién partidista con- trolada por Tanaka Kakuei, quien seguia enfrentando las secuelas del escdndalo de la Lockheed. El 12 de octubre de 1983, la corte distrital de Tokio fallé en contra de Tanaka acusindolo de aceprar sobornos por dos millones de délares; el ex primer ministro apelé y se negé a abandonar su curul. Ante esto, la oposicién decidié boicotear las sesiones parlamentarias; Nakasone procedié a disol- ver la Dieta y convocé a una eleccién general en la cdmara baja que significé la pérdida de 22 posiciones para el PLD, aunque en 1984 se compensé en las elecciones de la cémara alta. Nakasone solfa guiarse por el objetivo sengo no sdkessan, es decir, lograr una revisién general del balance de la posguerra que incluyera la inversién de la mentalidad del pueblo japonés acerca de su propia seguridad y la absolucién de culpas por las acciones del pasado. La primera prueba a su determinacién ocurrié cuan- do la fuerza aérea soviética derribé un avién comercial de Korean Airlines, cerca de Sajalin, en septiembre de 1983. Los radares ja- poneses en Hokkaidd detectaron el ataque y lo comunicaron a su gobierno, el cual revel6 detalles a la Casa Blanca. Sobrevinieron la condena y sanciones a la URSS, aunque esta insistfa en que se ‘rataba de un avidn cspia, El incidente revel6, por un lado, la gran capacidad de monito- 10 defensivo desarrollado por Japén, pero, por otz0, hizo ver que se seguia una politica concomitante con las estrategias de seguri- dad de Washington. Desde su primera entrevista con el presidente Ronald Reagan, Nakasone impresioné al mandatario estadouni- dense con su estilo directo para abordar temas que otros lideres japoneses generalmente eludfan. Los medios de comunicacién em- pezaron entonces a hablar de la “relacién Ron-Yasu’, aludiendo la supuesta camaraderia que existia entre los dos dirigentes. A partir de entonces, Japén cubriria, con inversiones y asis- tencia econémica, espacios que el Pentégono consideraba estraté- gicos para la defensa de los incereses de Occidente. Seguro de si, Nakasone procedié a impulsar una reforma educativa tendiente a ini ttc Nii abil wil JAPON CONTEMPORANEO 325 ep rinso Nore ae ‘cercana amistad politica con é! Pree de Ee rs Fora sn eta one pba dering es ib Gj “oases imma youtube comic =yeD5miSFZAs revisar la historia de Japén; también emprendié una innovadora politica de privatizacién de los ferrocarriles nacionales. Cuando Tanaka, el “shigun en la sombra” y lider de la faccién mas numerosa del PLD ~aun después de ser expulsado suftié una embolia, en 1985, se gener6 una recomposicién de fuerzas parti- én: uno comanda- distas. Surgieron entonces dos grupos en su fac: do por Takeshita Noboru y otro por Nikaidd Susumu, Nakasone entonces no dejé pasar la oportunidad para demostrar que podia convertirse en el hombre de mayor estatura politica dentro de la mecénica partidista, y elev su niimero de adhsrences con algunos ex tanakistas y con miembros del llamado Nuevo Club Liberal Fukuda, a su vez, pasé el mando de su faccién a Abe Shintatd, ‘mientras Suzuki hizo lo propio con Miyazawa Kiichi. Como resultado de estos espectaculares reacomodos, el PLD salié fortalecido y recuperé el control de la c4mara baja, En cam- bio, el PS) perdié fuerza, hecho que obligé a la renuncia en pleno de su comité ejecutivo; emergié entonces, al frente de ese impor- tante partido, la sefiorita Doi Takako (3 72°F), primera mujer en encabezar un partido politico japonés. En el Komeitd, Yano Junya sustituy6 a Takeiri Yoshikatsu, quien habfa ocupado la presidencia del mismo por casi dos décadas En tiempos de Nakasone, Japén alcanaé el cenit de su poder econdmico, los excedentes comerciales eran impresionantes. En. 326 HISTORIA MINIMA DE JAPON septiembre de 1985, los ministros de Finanzas y gobernadores de los bancos centrales de Japén, Estados Unidos, Francia, Alemania Federal y Gran Bretafa se reunieron en Nueva York para ajustar las tasas de cambio ¢ intervenir conjuntamente en los mercados cambiarios. El resultado inmediato fue la depreciacién de la mo- neda japonesa; para abatir costos, varios consorcios resolvieron incrementar sus inversiones en Estados Unidos y la comunidad europea. Sobrevino entonces una afluencia de dinero sin precedentes. La gente dispuso de recursos para viajar por el mundo y satisfacer sus excentricidades, y la bolsa de valores de Tokio comenzé un ascenso vertiginoso. Japén era una sociedad opulenta y sus habi- antes no escatimaban en compras de edificios, hoteles, campos de ‘golf, empresas y obras de arte. El valor de la tierra en Tokio, Osaka yorras ciudades principales se disparé. El yen adquitié su maximo valor en enero de 1988 cuando alcanzé la cifta de 120 unidades por délar; la demanda de productos importados, en efecto, au- ‘ment6, aunque nunca en las proporciones que los competidores extranjeros deseaban. El auge econémico japonés causé escozor, ya no s6lo entre em- presatios y trabajadores de la industria automotriz estadounidense, que veian cémo se despeiaban sus ventas frente al éxito de los au- tos japoncscs, sino también en efrculos intelectualer, periodieticos y académicos estadounidenses. Aparecieron, asi, articulos y libros que denunciaban presuntas conspiraciones en las mds altas esferas de la burocracia, la politica y el empresariado japonés, tendientes a vengar a Japon por la derrota en el Segunda Guerra Mundial. En Estados Unidos volvié a percibirse un ambiente de xenofobia antijaponesa que no se sentia desde el ataque 2 la bahta de Pearl “Harbor en 1941. La exitica més iracunda se enfocab hacia un su- ‘puesto proteccionismo escondido que impedia la introduccién de ‘productos occidentales en el mercado nipon. Con al Animo de tranqyilizar alos lamados Japan bashers (de- sractores de Japén), un consejo asesor del primer ministro emit ‘un documento que recomendaba efectuar reformas intetnas para clevar cl consumo de productos importados. El Informe Niaekat ws JAPON CONTEMPORKNE 327 El extarinaro lo de fa evonarfa Japonesay le cansetverte incursion en Jos metoados esacounicenses durante Ja dévada do ios afcs ochenta, eneré severas reacsones aileponesas en ciersoscreulos dala opinion publica se Estados Unidos. asi conocido por ser el gobernador del Banco Central quien lo encabezaba, se presenté en otofio de 1985 como un proyecto de singular valor para el futuro. Sin embargo, las eriticas en Washing. ton y los paises europeos lo consideraron un mero texto lleno de buenos deseos y poco efectivo. En medio de ese fragor se seleccioné al sucesor de Nakaso- ne Yasuhiro, cuando los Iideres de todas las facciones del PLD se reunieron en privado, Tras una prolongadisima sesién celebrada entre Abe, Miyazawa, Takeshita, Nakasone y los viejos jerarcas del partido, Fukuda y Suzuki, en noviembre de 1987, se anuncié que ‘Takeshita Nohoru (fF %) seria el nuevo primer ministro. En su discurso inaugural, Takeshita asumié que el furusao o “cerru- ‘io serla la piedra angular de su politica, significando con ello un retorno a la humildad del Japén tradicional. Para entonces, el yen ya se habfa convertido en un Fuerte ins trumento de poder. En ocasién de la cumbre de paises industriali- zados efectuada en Toronto en junio de 1988, el flamante primer miniscro, Takeshita, robé cémara a personalidades como la pre- mier btivinica, Margaret Thatcher, el presidente de Estados Uni- dos, Ronald Reagan, y el presidente francés, Francois Mitterrand, al anunciar que Japén destinaria 50 000 millones de délares, en _ ayuda oficial, al desarrollo durante los cuatro aiios siguientes, con “lo cual se situaba en el primer lugar mundial como donante de = asistencia, 328 HISTORIA MINIMA DE JAPON JAPONCONTEMPORANEO 329° El 17 de enero de 1989 terminé la era Showa al fallecer el emperador Hirohito tras un reinado largo y tortuoso que incluyé afios de guerra, ocupacién, recuperacién y bonanza. El 12 de no- viembre de 1990 ascendié al trono su hijo Akihito para comenzar la era Heisei (32) o de la de paz prolongada. Nacido en 1933 y casado con una dama plebeya, Michiko, el emperador Akihito se convirtié en el monarca niimero 125 de la dinastia Yamato, hoy por hoy la més antigua del mundo. enn Para la opinién pablica, la forma de enriquecimiento realiza- da por Recruic result éricamente muy inadecuada, dado que mu- chos corredores de bolsa eran modestas amas de casa que querian rmaximizar sus ingresos sin, desde luego, tener acceso a informacion confidencial. Todo mundo se preguntaba si habia alguien en el PLD con las manos limpias. En mayo de 1989 Takeshita admirié publi- camente Ja injerencia de su secretario particular en los negocios de Recruit y el 3 de junio renuncié a la presidencia del partido. Bajo circunstancias semejantes, solamente It Masayoshi, ex ministro de Relaciones Exteriores en la administracién de Suzuki, parecta tener estatura politica para encabezar el nuevo gobierno, fempero, It se rehus6 a asumir el cargo; lleg6 al poder, entonces, la figura gris de Uno Sosuke (FPF 544), miembro de la faccién Nakasone, aunque con muy poco arraigo, incluso dentro de la misma. Al cabo de dos meses, el 25 de julio, Uno sucumbié tras otro escéndalo, cuando una joven ~equivocidamente presentada ‘como geisha en la prensa occidental~ declaré a los medios de co- municacién que el primer ministro no le oftecia una indemniza- cién adecuada por sus servicios como dama de compaaia. Surgié asi Kaifu Toshili (#685 (£4), un personaje de sem- blante agradable, pricticamente desconocide en los medios politi- cos y proveniente de la faccién Kémoto, la més pequetia del PLD. Kaifu fue nombrado primer ministro el 10 de agosto de 1989 y concedi6, por primera vez, dos ministerios 2 elementos fereni- nos del PLD, a fin de sosegar el “fenémeno Madonna’, como se designaba a la itrupcién sibita de las mujeres en Ia politica. En septiembre realizé la visita ritual a Estados Unidos, extendiéndola hacia Canada y México, pero no hubo mayores avances en sus conversaciones con el presidente George Bush para la solucién del - desequilibrio comercial. Por aquellos dias, el polémico diputado Ishihara Shintaro, jun- “0 con el presidente de Sony, Akio Morita, publicé un libro que ‘aus6 revuelo inusual: N6 to Teru Nibon (Japén puede decir no), “un llamado nacionalista a la rebelién en respuesta a la corriente © antijaponesa surgida en Occidente, Cambios mayores sucedian en ‘scenario mundial y, con la caida del muto de Berlin, se dio por sarcastic Elemperedor Akhito, ‘scompariado on la foto porta ‘emperatz Michiko, representa | la case renante més antigua | del mundo, razén porta cual | sel Cnioa monarca al que se ‘concede trato de Emperador. ELDECLIVE B) asunto mis grave para el primer ministro Takeshita fue el es- candalo de la compaiia Recruit en julio de 1988, cuando el diario “Asahi revel que los secreratios particulares de varios \ideres del ‘PLD -inchuido l del primer ministro— se habian enriquecido me- diante la compraventa de acciones en la bolsa, valiéndose de lists reservalas que tna subsidiaria de esa corporacién les diera a cono= cer fuera del mercado bursitil. El ministro de Finanzas, Miyazawa Kiichi, dejé el gobierno al saberse que también su sectetario se haallaba entre los implicadoss asimismo, fueron afectados el pre sidente de la compaffa de telecomunicaciones NTT y miem pleno de Takeshita debié renunciar 330 HISTORIA MINIMA DE JAPON a Ni FE) comin ncts rs aL 4 . Sut ee Ishtar Shitaréconmecioné a ia cpiién % plea japonesa con la publcacién en +1990 de suibro NO era Nihon ene ‘que denunai os inulos que la presencia | atamente compettiva de fs productos | nipones estaba generando en Estados Unidos. | a toon youre. cova PVesONEVACO terminada la guerra fra, Jo cual dejé a Washington précticamence futfno de nave wble; Jpn coral no de cone vertitse en el siguiente. Paralelamente, la nueva generacién inte- ectual encontré, en el escritor Murakami Haruki (ff #4), a un nuevo simbolo de a rebelde contra el orden esablecido y las tipicas formalidades japonesas, al publicarse, en 1987, su novela Norwegian Wood (sraducido al espaiiol como Tokio Blues), la cual vendié millones de copias de manera instancinea. El sostén del poderfo japonés era la economia con crecimien- tos continuos y saldos excedentes en el comerciv y la cuenta co- rriente. Empero, algo dejé de funcionar en el repunte de los aiios, noventa cuando los precios accionarios en el indice Nike se pre- cipitaron ala baa, La sobreofera de bienes races los préstamos fi nancieros ilimitados, la especulacién y la corrupcién llevaron a que la burbuja econémica reventara. Para colmo, un escéndalo més implicé a funcionatios piblicos, empresarios y hasta a miembros de la mafia, cuando se revelé que la compaita Sagawa Kyubin, reparidora de paqueteria,distibuyé sobornos hasta por 80 000 millones de yenes entre 100 funcionarios de todos los niveles. Fue demasiado para Kaifu, quien renuncié en noviembre de 1991; lo sucedié Miyazawa Kiicki. ‘ Se esperaba que Miyazawa, experto en finanzas, fuera capaz de colocar de nuevo a la economia sobre el riel del crecimiento. Habia sarON CONTEMPORANEO 331 la certeza de que se atravesaba por tun momento superable, nunce una depres. Sin embargo, el yen siguié ganando valor fence alas divisas internacionales, mientras las exportaciones perdian competitividad, la demanda interna empezs a decaery el descr leo aumenté cas la quiebra de muchas empress, Nisiquicra con ‘una tasa de interés cercana a cero, el consumo se reactivo. En Norteamérica y Europa ocurrian procesos que en Tokio se incerpretaron como hosies. De un lado, Canad, Estados Unidos 4 Mexico negociaban un tratado de libre comercio que probsle- 7 jente colocaria en aprietos alos productores exteznos ala regions deloxt, los europeos cerraban filas en corno de una Unibn Buro- pea que se formalizé con el Tratado de Maastiche de febreo d= £502, Japén habla impulsado la denominada Conferencia para la Cooperacién Econémica en el Pacifico (PEC), pero los propios tetitoos la elipsaron con Ia ereacién del foro para la Cooperacién Economica en Asia Paclfico (APEC), al considerar que PECC evoca- be al imperialism japonés dela Segunda Guer-a Mundial ‘La situacidn al inicio de fa década parecia desoladora, con tana economia endeble, un gobierno cuestionsdo y un ambiente mundial adverso. Washington aument6 las presiones para quc s© redujeran las barteras a la entrada de products occidentles, y {que Tokio contaibuyera con las fuerzas mulcnacionales ena Su SM gue, en enero de 1991, habia estallado en el Golfo Pésico. El gobierno japonés sostenia que su economia ‘estaba abierta para los Productos que cumplieran con los extndaes de calidad y que 6a Constitucién prohibla la existencia del ejrcito, no habia maner2 ide unitse a las fuerzas que combatian en Medio Oriente. En eneto de 1992, el presidente George Bush efecrud una vie sita a Japon? La dedaracién conjunta de los ideres dererminaba (que se mantendsia [a alianza estipulada en el Traado de Seguridad de 1960 y que las economias se apegarian al espiritu de apertura comercial contenido en el GATT. ‘Aquela vista oficial fu tobidable, sobre cdo pong operas Bu se deraneien la cena de Exado al lado de Miya. Hees no pass dearest BU sac pasos comeduts cede, Ve rmostecon vwatchveXnOnDargiNo>, 332 HISTORIA MINIMA DE JAPON, Pero las tensiones entre los dos paises iban en aumento. Se produjeron, pese a todo, cambios significativos, como el despacho sorpresivo, por la via maritima, de un contingente de las fuerzas de autodefensa japonesa a Cambodia para formar parte de los cuer- pos de paz de Naciones Unidas, con lo que se senté el precedente que facilité la promulgacién, en agosto de 1992, de una ley para al despliegue de fuerzas armadas en los esfuerzos de pacificacién encabezados por la ONU. De igual modo, fue importante el apoyo que se le brinds al presidente peruano Alberto Fujimori, para la e- rradicacién de la guerrilla y la estabilizacién econémica de su pais. Las criticas a Miyazawa se intensificaron ya no solo por par- te de los opositores tradicionales, sino entre sus propios coparti- datios. A las sospechas de involucramiento en algunos casos de corrupcién se afiadfan criticas a su incapacidad para sacar adelan- te al pais de la recesién, razén por la cual, prominentes miem- bros del PLD como Hata Tsutomu ¢ Ozawa Ichirs por un lado, y Hosokawa Morihiro por otro, abandonaron el partido para creat nuevas co-rtientes politicas. Hata y Ozawa fundaron el Partido de Ja Renovacién (Shinseité), mientras que Hosokawa creé el Nuevo Partido de Japén. Kaifir establecié el Partido Nueva Frontera, y Takemura Masayoshi el Nuevo Partido Sakigake. Alas clecciones del verano de 1993 se presenté una insélita coa- licion de ocho partidos, que incluia a aquellos de creacién reciente ‘mis los tradicionales ~a excepcién del Comunista-, con el propésico de derrotar al PLD. Después de cuatro décadas en el pode, los libe- tales democréticos perdieron el control de la cémara baja y el 9 de agosto entregaron el poder a Hosokawa Morihiro (#1)! #8), un noble de ascendencia samurdi egresado de la prestigiosa Universidad de Sophia. En su discurso inaugural, Hosokawa prometié reformas profundas, aunque mis extraordinario fue su juicio sobre el papel de Japénen la segunda conflagracién mundial: “fue una guerra equivo- cada y de agresién’, dijo. Consecuente con su postura, viajé a Set y Beijing para ofrecer condolencias a nombre del pueblo japonés. ‘La nomenclatuta del PLD no le perdoné a Hosokawa su deser- cidn y Bleed informacién a los medios de comunicacion acerea de ‘una presunta malversacién de fondos cometida en los aiios ochen- i JAPON CONTEMPORANEO 333 ee ta, con lo que la carrera politica del 79° primer ministro de Japon. egé a su fin después de ocho meses de gestién. Hosokawa opté por dedicarse ala produccién de cerimica en Kumamoto, tierra de sus antepasados; el 28 de abril de 1994 fue sucedide por el presi- dente del Shinsisd, Hata Tsutomu (31% #4), ex miembro de las facciones Tanaka y Takeshita en el PLD. Poco le duré el gusto al flamante primer ministro, ya que alas pocas seménas debié renun- ciar ante el debilitamiento de la coalicién partidista con la salida de los socialistas, a quienes les parecié que aquello no era més que un juego de sillas entre renegados del PLD. Para mediados de los afius uchemta, los sudalistas japoneses hhabjan realizado una transformacién importante de su fisonomia, principios y estrategias. El antiguo Ps}, de Katayama Tetsu, se con- virtié en Partido Socialdemécrata, desprendiéndose con ello de su legado marxista y asumiendo programas como la proteccién del ‘medio ambiente, la creacién de un Estado de bienestar para una sociedad que envejecia y la incorporacién de los :emas de género. 1 30 de junio de 1994, los socialistas ~ahora socialdemécratas— volvieron al poder con Murayama Tomiichi (Fil! 7H), hijo de un pescador de la prefectura de Oita, quien encabez6 el nuevo gobierno de coalicién con el PLD. Las expecrativas cran grandes, se esperaba que los socialistas tuvieran mejores recursos para sacar avance la economia que en 1993 decrecié con una tasa del producto intemno bruto de menos 334 USTORIA MINIMA DE JAPON 0.396. Se demandaban cambios significativos en el aparato pro- ductivo y un combate frontal a la corrupcién. Murayama, no obs- tante, s¢ encontré con una burocracia anguilosada y una inercia social dificil de eliminar; el consumo interno no repuntaba y las tiendas minoristas iban a la quiebra, aunque los distribuidores de mercancias chinas de muy bajo precio comenzaron a tener éxito. En ese dificil afio de 1994, Oe Kenzaburé obtuvo el Premio Nobel de Literatura con obras como EI loco arcotris, Un asunto personal y Un grito silencioso, en las que describe la angustia cxistencial de la nacién japonesa, tinica que ha sido victima del brutal ataque de la bomba atémica y que tas una extraordinaria bonanza se encontra- bba de nuevo desorientada y confundida. LO INSOLITO ‘Ante la crisis, el primer ministro Murayama aplicé formulas key- nesianas: redujo impuestos e increment6 el gasto en obra piblica, con lo que consiguié la reanudacién del crecimiento econdmico. Pero las pruebas més duras para su gobierno estaban por venir. En Ja madrugada del 19 de enero de 1995, la tierra se sacudié en la regién cercana a la ciudad de Kobe, con un sismo de siete grados ‘La popular novela de Sakyd Komatsu Japan dé 2 Rave, publica en 4973, fuelloaa al cine es el gran ‘erargta curio an Ke e177 enero de 1985, sic JAPEN CONTEMPORANEO 335 cen Ia escala de Richter® Los efectos fueron desastrosos, el saldo de muertos superd las 6 000 personas, mientras que las pérdidas materiales se calcularon en 3 000 millones de yenes, equivalentes a 2.5% del producto interno bruto del pais. Afloraron entonces las vulnerabilidades de una naci6n que se presumfa modelo en la prevencidn de desastres naturales. La novela de ficcién Nihon Chinbotsu (EL Japén que se hunde, 1973), de Sakyé Komatsu (/) 8 EER), regresé a las listas de popularidad e incluso se llevé al cine. Los reportes de dasios del rerremoto revelaban ertores de ingenie- ria en la construccién de puentes, edificios, vias férreas, autopistas y tineles. Las autoridades de proteccién civil aribaron, a la zona afectada, tes dias después del sismo, y el primer ministro lo hizo ‘una semana més tarde. En matzo, otra catéstrofe fue provocada por la secta religiosa Aum Shinvikyé (49 Js XSBB) (Suprema Verdad), cuando, a fin de acelerar el Apocalipsis vaticinado por su lider Asahara Shék6 (BRR #252), algunos de sus miembros soltaron gas sarin, alta- mente t6xico, en varias estaciones del metro de Tokio. El ataque provocd una docena de muertos y cientos de enfermos. Asahara fue aprehendido y condenado a muerte; su reprobable conducta revelé las frustraciones de la gente joven enfrentada al imperso- nal vertigo de una sociedad hiperindustrializada y con graves pro- blemas sociales. El precio de la crisis se manifesté con hechos antes impensables en la sociedad japonesa, tales como deserciones escolares, aumen- to exponencial en ef indice de divorcios, mujeres rotundamente copucstas al matrimonio, muertes por exceso de trabajo (karishi), adolescentes agresivos con las autoridades, suicidios colectivos ocasionados por el rechazo social y consumo de droges. Prosiguié también el envejecimiento demogrifico debido a la baja natal dad y a la prolongacién de las expectativas de vida, lo que redujo de manera alarmante, la disponibilidad de mano de obra. A fin de * Views Kerber Palma, cosuror de exe cet, sbrevié al eemoto de Henshin undo viv en ons de Ati, ca de Ke. or apy lias prefer de Hydgo Je ororgé un reconocimiento piblico, i cet 336 sTORIA MINIMA DE JAPON ‘Asaara Shokd era venerado coma uni dela secta eligiosa Aum ‘Shinn, que en marzo de 1995, provocd un ataque cn gas sarin ‘en as etaciones metra de Toki, disminuir el efecto laboral de este complejo fenémeno, se facilieé la inmigracién proveniente de Asia Pacifico, Medio Oriente y los paises latinoamericanos con poblaciones de origen japonés, como Brasil y Pera. Parad6jicamente, las tensiones sociales provocaron que mis jévenes japoneses emigraran a Australia, Nueva Zelandia y Canada, En este conflictivo escenario, la nacién en pleno se uni en solemne silencio a las 8:15 horas del 6 de agosto de 1995 para conmemorar los 50 afios de la detonacién de la bomba arémica de Hiroshima. ‘Al inicio de 1996, el primer ministro Murayama renuncid, dejando abierta la coyuntura para otro hecho imprevisto: el re- (a pirdmige demogtsica rmuestia ol acusedo ‘evelecimiento de sociedad japones i i j j JAPON CONTEMPORANEO 337 rorno del PLD al poder, el 11 de enero, con Hashimoro Rytitard (§82 BEKAD) al frente, Cercano a Tanaka Kakuei yTakeshta No- boru, cuando encabezaban la faccién més grande del PLD, Hashi- moto haba cultivado una imagen de firmeza, Le gustaba retratarse con el atuendo de kend5 y en posicién meditativa; ademés, se con- sideraba adepro al cédigo samursi Bushidd. El pais se encontraba hhundido en otra recesién, se esperaba que un ex ministro de Finan- zas con la determinacién y el sentido nacionalista de Hashimoto hi- icra algo, pero la situacién no s6lo no mejord, sino que viré hacia peores rendimientos econémicos con el estallido, en julio de.1997, de una crisis financiera mundial originada en Tailandia. EL17 de diciembre de 1996 se conmemoraba el cumpleatios del emperador Akihito en la embajada japonesa de Lima, Peri, cuan- do un comando armado del Movimiento Revolucionario Tupac ‘Amaru se apoderé de la misién diplomatica. El blanco del ataque no era fortuito, pues en Ja mansién habia alrededor de 400 perso- nas pertenecientes a la élite politica y econdmica peruana, ademas de representantes diplomiticos de diversos paises El golpe tuvo re percusiones mediéticas habida cuenta de que involucraba a Japén, la tierra ancestral del presidente Alberto Fujimori. Después de 16 semanas, el incidence tavo un final trigico tras el rescate de la em- bajada por un comando militar que maté a todos los guerrilleros. ‘Si los funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores no descansaron durante las celebraciones de aiio nuevo de 1997 debi- La herenciajaponeca dl presidente de Pord Alberta Fuji, le grenjod of afecto dela opin pica rjpona. | ‘Sin embarg, fs problemas poticos | suscitados ain desu gobierno provocaron referencias antjaponesas los madi internacionales. } 338 HISTORIA MINIMA DE JAPON do a la crisis en Pert, tampoco lo hicieron al enterarse de que un fuerte temporal habia hundido al buque petrolero ruso Najodka, ocasionando un derrame de 19 000 toneladas de crudo a 100 kilo- metros de la costa noroccidental de Japén. Fue una colosal catis- tuofe ecolégica, con densas manchas de aceite cubtiendo litorales que dafiaron las reservas naturales, las playas y la pesca. El mayor temor era que las manchas afecraran a las centrales nucleares situa- das sobre la costa y que utilizaban agua de mar en sus procesos de enftiamiento. A las protestas de los ambientalistas se sumaron las demandas de devolucién de las Islas Kutiles, todavia en posesién de Rusia. Para complicar més el panorama, a mediados de 1997, toda la regién de Asia Pacifico se vio afectada por recurrentes sacudi- das en los mercados bursétiles a consecuencia de variaciones en el tipo de cambio de algunas monedas. El indice Nikkei se desplomé ante la bancarrota de empresas japonesas, de por si presionadas pot la competencia de los productos chinos y coreanos. La tasa de crecimiento del producto interno bruto cayé de 5% a 1.6% entre 1996 y 1997, y el Ministerio de Finanzas tuvo que intervenir en el rescate de la banca afectada por la cartera vencida. Durante la reunién cumbre de lideres de APEC, en noviem- bre de 1997, celebrada en Vancouver, Canadé, el otrora orgu- oso primer ministro Hashimoto permanecié mudo: Japén ya no era la locomotora econémica que 10 afos atrés se vishumbraba como impulsora de la era de Asia Pacifico, E130 de julio de 1998, “Fiashimoto fue reemplazado por Obuchi Keind (/INHIE =). Mis ‘adelante se retitd de la politica, al aparecer involucrado en un s0- ‘borne millonatio por parte de la Asociacion Dental de Japon; mn wi6 de un infarto en 2006, A Obuchi le agradaba publicitarse’como kokusaijin, 0 mopolita, tras su experiencia como trotamundos en su juvent lia telatar aventurasFantésticas en las peligrosas calles de Nuey y cbmo se las artepl6 para sobrevivir sin un centavo en las i europeas. Un dia de 1963, segtin él, decidié entrar a la ofici procurador general de Estados Unidos y fue as{ como conoci6 bert Kennedy, quien lo convencié de hacer carrera politica. Ci | | DON CONTEMPORANEO 339 falso, el caso es que Obuchi se convirtié en el legislador més joven de Japén a la edad de 26 afios, cuando atin no terminaba sus estudios cn la Universidad de Waseda. Dados sus presuntos conocimientos cempiricos sobte el dmbito internacional, Hashimoto lo designé mi- nistro de Asuntos Exteriores, posicién desde la cual emprendié una diplomacia dirigida a concretar un acuerdo de paz con Rusia, ademas de promover el acuerdo entre las das Coreas. hota, como primer ministro, la prodividad de Obuchi a la notoriedad lo levé a construir el puente colgante mis largo del mundo, de casi 4 kilémetros, entre la ciudad de Kobe y la isla de Awaji, epicentro esta tltima del cerremoto de Hanshin ocurrido cuatto afos atris. La Olimpiada del invierno de 1998, en Nagano, fue una oportunidad dorada para ostentarse como Iider de una nnacién abocada a la paz, pese a que persist la recesién de la eco- nomia japonesa, Obuchi dio un buen golpe propagandistico al repartir cupones de compra entre 35 millenes de ciudadanos a fin de reactivar el consumo. Los medios de comunicacién se referian a gakepuchi Obuchi (Obuchi al borde del precipicio), ya que el mandatario parecta dis- frutar el alto riesgo de gastar en una economia que no se expandia. Durante su administracién, el Banco Central de Japon determiné el régimen de tasa cero, medida extrema para reactivar la economia. Con todo, en junin de 1999 quebraron das bancos regionales de importancia: el Kokumin Bank y el Namihaya Bank. En abril de 2000, el primer ministro suftié un sibito derrame cerebral que le provocé la muerte. ELNUEVO MILI 10 Japén ingresé al nuevo milenio, el que algunos vaticinaron como “el siglo de Japén”, en condiciones no imaginables 20 afios atris. Sehablaba de la década perdida y de una némess frente al derro- che consumista; el hedonismo social en 2000 permitié a 10 mi- llones de japoneses viajar al extranjero. A poca distancia se hallaba China, que crecfa a ritmos acelerados y se constituia en la nueva 340 HISTORIA MINIMA DE JAPON gran potencia del Pacifico asiético, mientras Corea del Sur parecia empefada en cubrir todos los espacios que las empresas japonesas dejaran vacantes. E] escenario no era fécil para el nuevo Iider de Japén, Mori Yoshirs (2% HBB), repucado como hombre con “corazén de mos- cay cerebro de tiburén”, En el efimero lapso de un afo al frente del gobierno, Mori fue capaz de cometer toda clase de equivoca- ciones. En ocasién de la reunién cumbre de las ocho economias ‘mis grandes del mundo (G8) celebrada en Okinawa, Mori rec al presidente de Estados Unidos, William Clinton, preguncindole: Who are you? (Quin es usted?), cuando su intencién era decir How are you? (,Cémo esté usted?). Con buen humor, Clinton res- pondid: “Soy el esposo de Hillary, gy usted2”. A lo que Mori res- pondid: “Yo también’, En abril de 2001, lo sucedié Koizumi Junichird (-)4R ffi —H3) proveniente de una familia de politicos de la prefectura de Kanagawa. Su porte desgarbado, de cabello largo y actitud desenfadada, gusté a la opinién publica. Parecia un intelectual liberal, aunque su carrera la habia forjado a la sombra del ul- traconservador Fukuda Takeo. Koizumi fue directo al mando y, desde su arranque, pidié tolerancia mientras emprendia reformas de fondo para revitalizar la moribunda economia y limpiar el sistema politico. Figura clave en su gobierno fue Takenaka Heiz6 (f1 $ii), economista neoliberal de la Universidad de Hitotsubashi, con posgrados en Harvard y Osaka, que destacé como critica im- placable en los medios televisivos. Takenaka fue investido como ministro de Estado para la Politica Econémica y Fiscal, puesto desde el cual emprendié la privatizacién, entre otras entidades pablicas, del sistema postal que operaba como banca de primer piso; intenté también desincorporar a Ia televisora estatal NHK. En ninguno de los dos casos tuvo éxito, como tampoco logré cambiar el régimen de pensiones que debia ser el sostén de una reforma fiscal. Su dinamismo chocé con la vieja guardia de la burocracia estatal que lo obligé 2 reticarse del gobierno en sep- tiembre de 2005 “= JAPON CONTEMPORANEO 341 Takenaka He, economist Bika y colzborador cercano del primer minis olzumi Junichiro, tent entre 2002 ¥ 2008 implantar meas muy audaces a fi de revaliar a eocomia jones, entre clas la falda privaizaciin del corey la teloision estat NHK. el Koizumi habia dejado los asuntos financicros en manos de ‘Takenaka para concentrarse en la reestructuracién del PLD. El pri- mer ministro logré fortalecer la base urbana del partido, tradicio- nalmente respaldado por agricultores, y hasta expulsé a algunos miembros indeseables con el apoyo de Yemasaki Taku y Koichi ‘Katd, con quienes Koizumi formé la alianza conocida como YKK. La nomenclatura partidista reaccioné haciendo piiblica la otra cara de Kato, recordando ala opinién piblica su asociacidn, en los afios cochenta con los escandalos de la compafila Recruit, ademas de que evadia impuestos ¢, incluso, utilizaba fondos pablivus paca pagar la renta de su departamento en Tokio, La popularidad de Koizumi lleg6 a no tener equivalente en la historia reciente de Japén, obteniendo indices de hasta 85% de apoyo en las encuestas de 2001. Pero las simpatias se desvaneci ron con los intentos de privatizacién del sistema postal y el escéi dalo de Kat5, Su imagen internacional también se vio afectada tras el despacho de un contingente de fuergas ce autodefensa Irak en apoyo a la causa del presidente George W. Bush. En otto orden, en China y Corea se produjeron protestas airadas concra la obs nacién del primer ministro japonés por henrar la memoria de los criminales de guerra en el santuario de Yasukuni. En septiembre de 2006, Koizumi tuvo que abandonar el man- do sin apuntalar a un posible sucesor. Es de reconocer que por 342 HISTORIA MINIMADE JAPON En ol Santuaro da Yasukuni se honra la memoria de los lideresy vcimas de fa Segunda Guerra Mundial voluntad de Koizumi se concluyé un Acuerdo de Asociacién Eco- némica con México, dinico en su género al permitir la entrada li- bre de productos agricolas mexicanos en los mercados japaneses? y obvia decir que le acarreé criticas por parte de los agricultores japoneses de por sf resentidos tras haber quedado relegados a un segundo término en el PLD como parte de las miieiples reestruc- turaciones del Partido. Entré entonces a escena Abe Shinzé (2(% =), nicto del ex primer ministro Nobusuke Kishi y primer baby boomer en alcancat Ja jefatura del gobierno japonés. Abe era reputado como naciona- lista a ulcranza, partidario del rearme del pals y enemigo del régi- men de Corea del Norte, De este demandaba la repatriacién inme- diata de varios ciudadanos japoneses secuestrados y trasladados a Pyongyang, amén de exigic el desmantclamiento de los complejos rmucleares norcoreanos que amenazatpan la seguridad de Japén. Sus postaras fuston controvetgas al pugnar por la resticeién de by “excesiva eduucacién sexual” de los niftos y"por'la supresin de a cducacién fisica mixta, En menos de un aio, Abe perdié el apo- yo de sus copartidatios; pero a sélo un par de dias de presentar su Sobre las entcclas de las negociaciones del Acuerdo de Avociacién Econdimica México Japén, vias Vitor Kerber Palma, “Elsa nciene de Vicente For. México y Japa 2000-2008", Foro Internacional, vol 48, nim. 1-2, enerojunio, 2008, pp. 352-374, JAPON SONTEMPORANEO 343 programa politico, el 26 de septiembre de 2007, tuvo que ceder el poder a una figura presuntamente mas moderada, Fukuda Yasuo ( 481 ER). En su despedida, Abe exclamé: “Me gustaria pedir perdén a la gente por haberle causado tantos problemas!” i Hijo del.cx primer ministto Fukuda Takeo, Fukuda Yasuo, se mostraba proclive al rearme del pais, aunque sorprendié a la opi- | nign publica al pronunciarse en contra del “imperialismo japonés” en tanto que visicaba el santuario Yasukuni, Entre orras cosas se manifesté como abierto partidario del acercamiento estratégico con China, de reanudar el didlogo con Pyongyang y de cooperar més con el entorno de Asia Pacifico. De acuerdo con una encuesta del periddico Yorniuri, la popularidad del primer ministro ascen- dié tras deshacerse, en agosto de 2008, de los miembros més con- servadores de su Gabinete, varios de ellos diseipulos de su propio padre, Estos, empero, no tardaron en reaccionar y a finales de ese mismo mes, Fukuda tuvo que renunciar. La situacién econémica tampoco fue promisoria para Asé Tard (RAE ABB), sucesor de Fukuda, quien condujo el gobierno japonés por espacio de un afio a partir de septiembre de 2008. Catélico y prototipo de la oligarquia dominante desde los tiem- pos de Meiji, Aso era, por linez materna, tataranieto del legenda- rio fundador del Japén moderno, Okubo Toshimichi, y nieto del premier Hatoyama Ichiré. Su madre era hija del primer ministro Yoshida Shigeru, y su padre, propietario de una enorme corpo- racién cementera. Fue colaborador cercano del primer ministro ‘Tanaka Kakueis su esposa era hija del primer ministro Suzuki Zenké, y su hermana estaba casada con el principe Tomohito, primo hermano del emperador, La desaceleracién econémica en Estados Unidos redujo, de nueva cuenta, la capacidad exportadora de Japén, y el inctemento en los precios internacionales del petrdleo y las materias primas in- cidié sobre la inflacién. En 2009, el pats estaba de nuevo al borde de otra situacién complicada, con bajos niveles de consumo inte: no y una disminucién del crecimiento en términos reales. En las tlecciones del 30 de agosto, el PLD suffi el mayor descalabro de su historia al perder 191 escafios en la cémara baja de los 303 que | | i | 344 HISTORIA MINDMADEJAPON costentaba; se traté de una verdadera debacle electoral que exigié la renuncia de Asd a la jefacura del gobierno. En septiembre de 2009, la Dieta eligié como primer ministro a Haroyama Yukio (MILF 4225), lider del Partido Demécrata y duro crftico del PLD. Perteneciente a la cerrada élite que mancu- vo el poder a lo largo de la segunda mitad del siglo XX, fisico de profesién con doctorado en ingenieria industrial por la Universi- dad de Scanford —también alma mater de Taro Asé~ Hatoyama se cas6 con una peculiar ex actriz. que ha escrito libros de cocina macrobiética y afirma que un ovni la abdujo y la llevé a visitar el planeta Venus. En su discurso inaugural, Hatoyama advirtié que “la batalla comienza ahora’, refirigndose a que Japén tiene ante sf una lucha por la supervivencia. Hatoyama se enfrenté asi a la tarea quijoresca de romper el trkingulo burocracia-oligarqufa-ma- crocorporaciones, tarea dificil cuando se es heredero de la empresa lantera Bridgestone y se cuenta con familiares enquistados en la disfuncional estructura del PLD. En octubre de 2009, el ex primer ministro Hacoyama dio un paso altamente significativo en materia de politica exterior al tras- ladarse a Beijing junto con el presidente de Corea del Sur, Lee Myung-bak. Reunidos con el presidente chino, Wen Jiabao, los lideres anunciaron el inicio de una nueva era de cooperacién entre las ues unis alluentes nationes de Asta Pacifico, Ante los medios de GiEiners Hatoyama Yuki, se conven rier ministo de Japon el 16 de septiembre de 2009, JAPONCONTEMPORANEO 345, comunicacién, Hatoyama hizo hincapié en su propésito de apoyar Ia conformacién de una comunidad del este asiético. Se trata tal ver del surgimiento de una formidable alianza regional, en la que tanto Japén como Corea aportarin sus adelartos cientificos y tec- nol6gicos, mientras China avanza hacia su consolidacién como la nueva superpotencia del mundo con una masa humana de 1 300 millones de sexes. Como en los cuatro casos anteriores, el aparato de poder pudo ‘més que le voluntad del primer ministro y Hacoyama dimitié al cabo de ocho meses, pretextando no haber podido remover a las tropas estadounidenses de Okinawa como habia prometido du- rante su campaa. Dejé tras de sia un pais con el mayor déficie fis- cal del mundo, 200% en relacién con el producto interno bruto, y un descontento manifiesto en la clase empresarial encabezada por Yonekura Hiromasa, presidente de la confederacién empresarial Keidanren. El 4 de junio de 2010 fue elegido al cargo el tempera- mental Kan Naoto (# ELA), egresado del Instituto Tecnol6gi- co de Tokio y miembro de un pequefio partido coaligado con el Partido Demécrata de Hatoyama, e! Dankai o Partido de los baby boomers, cuyo propésito explicito es ofrecer empleo a los 2.7 mi- llones de japoneses nacidos en la posguerra y proximos a retirarse. Aliinicio de la segunda década del siglo 304, a economia japo- nesa seguia siendo una de las mds ricas y avanzadas del mundo. La Los atisisfaponeses han conformato un emporio metktico ‘olucionando, de manera gudaz, una tryectoa decomics y | lbues animades, cus orgenes seremontin alos grabados tracconales que caracterzan ala tia y mieneia cultura de su pals. 346 usTORIA MINIMA DE JAPON diversidad y el refinamiento de su produccién ha sido formidable, de abi que la fractura del sistema financiero incernacional le haya sido especialmente dafiina con la consecuente desorientacién so- cial en cuanto al rumbo quc debe scguirse. Prosigue, cn Japon, la innovacién tecnol6gica y los paradigmas cientficos novedosos. En medio de todo esto, los mecanismos politicos tradicionales han mostrado ser inadecuados para redefinir las metas sociales y en- cauzar el cambio. La crisis econémica ha generado desempleo y, por ende, inse- guridad, asi como pérdida de los valores cradicionales. En 2010, 22% de la poblacién contaba con 65 afios de edad o mds. Por otra parte, Japon es la nacién en la que los videojuegos de la compatifa ‘Nincendé mantienen un mercado mundial de 100 000 millones dde délares,y as ventas de su marca Pokémon, creadora de persona- jes tan populares como Pikachil, han rebasado los 200 millones de copias. Japén es tambign el pais en el que surgié el géncro conoci- do como manga, que consiste en historietas tipo cémic creadas por disefiadores connotados como Tezuka Osamu, y los dibujos ani- mados anime de Ofuji Noburd, Mochinaga Tadahito 0 Tomioka Satoshi. ‘Mientras la estrafalaria moda inspirada en el concepto rackero de Emo se mezcla con el look anifiado de adolescentes supuestamen- te ingenuas en las metrépolis de Tokio y Osaka, Murakami Takashi, prolifico artista de fama mundial, que pas6 del Pop Arr aun estilo propio y multimedidtico," y la escritora Yoshimoto Banana en sus best sellers (Cocina, Adids Tiugumi, Amrita o Argentina Flag) descxi- ben aquel mundo hiperurbano y desquiciado, Al mismo tiempo, Ja poesia en sus formas milenarias de haiku, tana y senryii provee desahogo a la sensibilidad individual en las 2 000 revistas de poesia «que se publican en el pais, y el cineasca Takiea Yoji, consi im- pecable realizacién Partidas, conquista el Oscar de la Academia de Hollywood para la mejor pelicula extranjera de 2009. © Creador de un mundo anlmado sperfl (superplane), 2 Takashi Murari ele «compara con Andy Warhol. cw youtube com/varchveL3i2nyHXO_g8teatureacelaed> | | JAPON coNTEMPORANEO 347 ena auspiciado por ol presidente de China, Wer Jiabao (centro), con | de Japén (derecha) y Lee grandes prtencias esitcas. El 11 de marzo de 2011, los fondos marinas del Océano Paci- fico empezaron a trepidar frente a las costas de Honshi, 130 ki smaetros al este de la ciudad de Sendai, en la regién conocida como ‘Tohoku. Nadie en aquel momento pudo imaginar que se avecina- ba otra gran catéstrofe para la nacién japonesa. Un potencisimo sismo de nueve grados fue seguido de un tsunami con olas de hasta 10 metros. Las costas fueron atrasadas tierra adentro, provocando destruccién y muerte El teégico suceso podria significar un punto crucial dela histo- ria contemporinea. Los fenémenos naturales ateraron las cadenas de produccién de la economia global, asi como las aspiraciones depositadas en el empleo de la energia nuclear para fines pacificos, severamente cuestionado al registrarse explosiones en los reactores nucleases de Fukushima. Algunos podrian interpretar los sucesos como parte de la crisis de un modelo de socieded, la sociedad pos- ‘industrial y consumista

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