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los jovenes trabajadores que, si no se encauza a través de la politi- ca de clase, puede degenerar en violencia individualizada, * Lo que muestra claramente nuestro estudio es que la mayorfa de Jos trabajadores de ambas generaciones se sienten victimas pasivas mais que protagonistas de los cambios alos que se enfrentan. No hay conexidn entre su descontento privado y lo Publico, excepto en el ni- vel de la politica local. Esto es comprensible, dada Ia estructura de @ecisién politica concentrada en un Ejecutivo centralizado, que ha impuesto las politicas de libre mercado. Los trabajadores reaccionan a sus circunstancias en vez de sentirse consultados por los decisores politicos. Los trabajadores mayores recuerdan el “perfodo de la ‘Transicién”, en que se consultaba a los sindicatos en la formulacién de la politica. Los trabajadores jévenes sélo experimentan las politi. ens concentradas en el Ejecutivo, que legalizan contratos de traba: jo temporales por debajo del salario minimo. A falta de un marco de referencia de comparacién histérica, dan Por sentado que todos los politicos y partidos actian siempre contra sus intereses, de ahi que rechacen el activismo politico La joven generacién de trabajadores llega a la edad adulta en un momento en que la cultura civica se ha eclipsado. La politica cliente- lar, la corrupeién politica generalizada, la implicacién del gobierno en escuadrones de la muerte forman parte de los comentarios cotidianos en los medios de masas. El declive de la ética desempefia un impor- tante papel en el desgaste del interés por la actividad politica entre Jos jévenes, y refuerza su imagen de que “los polfticos sélo se ayudan a si mismos". La falta de medios de comunicacién alternativos y la dominacién de los media por los regimenes "socialista” y nacionalis- tas limita el lujo de las fuentes de informacién alternativas y criticas Confrontados con las “noticias” de los medios de masas que adulan a Jas poderosas celebridades politicas (esas figuras que, en la mente de los jévenes trabajadores, exacerban sus inseguridades socio-econémi- cas), se “desconectan” y acaban por. “ignorar” la actualidad. En Espaia, la cultura cfvica emergente de finales de los 70 y prin- cipios dle los 80 ha sido transformada en una cultura politica autori- taria donde una reducida clase politica ha marginado al grueso de la clase trabajadora de lo pitblico y de la consulta politica. El resultado es una generacién mayor de trabajadores frustrada y ansiosa y una generacién joven marginada y apolftica. El “libre mercado”, como el mecanismo elegido para lo que se suponia iba a ser la modernizacién de Espafa, ha debilitado los lazos entre la clase trabajadora y la cla- se politica y ha fortalecido las estructuras estatistas-autoritarias a expensas de la sociedad civil y de la consulta piblica, ORIGINAL FOTOCOPIA IMAL eee penn one o Buy La declinante _ relevancia del trabajo, y el auge de los valores posreconomicos André Gorz respecto.del tra: mos veinticineo afios las actitudes respec smbiand a ‘ada vez mayor en todo el mun- s—y, en ol de tra- rant ems vein fas jo han ido cambiando a un ritmo a i pase Mewtsinlizado, Para la aren mayoria de as prema én, para una minoria en rapido crecu pues Ae apn Pavvrera o su profesign han dejado,de ser la di sion ms ee. erevye su vide, Ya no se identifican con su ezapacin pe j slonaloc : tionan si tiene algun signilica con su rol de trabajo, se cues! i . | Slenan eu tiempo disponible que al trabajo que les pesmi ganar naa nas dispuestos a trabajar menos horas q\ 4y OF vege Ta vida, y estarfan earl de yalores —que no debe confundirse con una fal- | | Hl ta de interés por el trabajo— ha sido descrito y comentado por un. i 5 i : ' gran némero de autores, No abstante, son més escasos los que han niimert ied por Io zovsta ar aa eae sie 1002 be trata de uno ponent presntaga 3 ae cane El Futuro del Trabaj raliznda en Sevilla los dion 14 15 area ede 1098 qe fe cordinada pro proc André Gort For ese Slyutr (presidente del Conejo de Direcin de Genes Soraten en Vien intentado considerarlo con perspectiva. Por tanto, trataré de concentrarme en los motivos que subyacen a este cambio cultural, relaciondndolo con los cambios que se estén produciendo en la naturaleza y significade social del trabajo y de las relaciones de trabajo. 1. El declive del trabajo de produccién La clase trabajadora industrial ha venido experimentando una r pida reduecién durante més de veinte afios. En la actualidad repre. senta menos del 17 por 100 de la fuerza laboral en los Estados Uni- dos, el 20 por 100 en Gran Bretafa (frente al 30 por 100 de hace diez afios), entre una cuarta y una tercera parte en los otros principales paises de Europa Occidental. Ademés, las modernas industrias ma- nufactureras emplean un niimero mucho mayor de Lrabajadores de cuello blanco que de trabajadores de produccién. En Frankfurt/Ma- nin, por ejemplo, sobre un total de 130.000 personas empleadas en la industria, hay apenas 35.000 trabajadores de produccién frente a 95.000 trabajadores de cuello blanco. Las industrias del sector ser- vicios, por otra parte, emplean a 120.000 trabajadores de cuello azul en el transporte, la limpieza, los servicios técnicos, las labores de re- paracién 0 de mantenimiento. La mayorfa de ellos son personal no cualificadg 0 semicualificado. El cambio de trabajos de produccién por puestos de trabajo en el sector servicios para trabajadores de cuello azul tiene profundas re- percusiones tanto sobre el significado del trabajo como sobre la con- ciencia social y la cohesién de los trabajadores. 2. La naturaleza modificada del trabajo A la clase trabajadora tradicional, el trabajo que realizaba le daba una sensacién de poder. Los trabajadores dominaban las fuerzas de Ja naturaleza y transformaban el mundo material mediante el hé- bil uso de sus capacidades manuales y mentales. En cierta medida, controlaban los instrumentos que usaban y podian ver él resultado material de su trabajo como materializacién de su poder individwal y colectivo, La identificacién con su trabajo y con su oficio era una manera de proclamar la dignidad de su trabajo y el poder social que —como mineros, caldereros, carpinteros, ingenicros, trabajadores de ferrocarriles, ete— les conferia su mimero, su solidaridad y su importancia vital para la economia. Bota sensacién de poder se esté desvaneciendo, lo mismo que la cohosién de la clase trabajadora. Hay varias razones para este cam- Ho. La elace trabajadora industrial no solo esté disminuyendo ré- pidamente como resultado de la automatizacién; sus habilidades anuales tradicionales y sus oficios estan desaparcciendo. La auto- smatizacién no solo destrliye puestos de trabajo industriales no cua~ Iicados, sino también capacidades artesanales tales como las de los herramentistas, fresadores, ajustadores, carpinteros, escayolistas, \ete..La mayoria de los productos ya no son la materializacién de Tat “fiiiided manual y mental de los trabajadores, sino el resultado do svamienta de eomplejas maquinarias y de sistemas de fabrica- vnatizados, Los trabajadores ya no dan forma al mundo terial por sf mismes, sino que controlan, atienden, alimentan Y mmantioncn sistemas a los cuales han sido transferidas previamente “capacidades himanas., — aE craterilieacion del trabajo ha hecho cada vez mas es ue log trabajadores considerasen el producto como un resultado = i ronio poder humanoi Esta dificultad se ve inerementada por © echo de quelas unidades de produccién se estén volviendo més pe- quefias y més especializadas. Los enormes complejos industriales que fabrican productos complejos completes de la Aa la Z estén Sendo reemplazados por unidades de montaje automatizadas en 6 tnayor parte, a las cuales les son entregadas los diversos clemen'o® ¢ componentes del producto final justo a tiempo- por numero Subcontratistas 0 fabricas satélite especializadas situadas en V0" tas partes del pais 0 del continente,La organizacién es una de ine principales fuerzas dela producei6n,.Bl mero tamano y complet Val sistema productivo, cuyas diversas unidades técnicas estin com dlinadas como para producir un producto final complejo, requiere 0 personal de organizadores y coordinadores que no son Jos prod tte ane directos. La informatizacién ha favorecido enormemente el ira, bajo de organizacién y ha dado lugar a una complejidad y espetit zacién funcional atin mayores de los subsistemas, del sistema roductivo. productive. ssccuoncia, los sistemas productivos ya no pueden ser entendidos por los subgrupas funcionalmente especializados 9° trabajo se esta coordinando, Su racionslidad queda ajens ¥ 068% woctada de la autocomprensién de los subgrupos.,La especializacién fonelonal significa que los trabajadores no seespecializan por lo ave ect a un producto que pueden identificar como ol resultade Ae ‘zu Lrahajo, sino que son especializados para servir a las on es ‘sistema cuya complejidad ests mas alld de la capacidad de Gomprensién de cualquier Taco esto no impide el control obrero en la tienda o en Pero st significa que el objetivo global, la a an ae cin de slstoma preductivo no pueden ser entendios y evestiona- dos dead lntrior de ning subgrpo y de ningin rl labor So to pued gniendidos y puestos en cuestisn euando Tor rabajadores, en lugar de identifiarse con ou ol labora se dstan- Gian de ly lo consderan con perspective Esto reuisre gue licatos no se centren exclusivamente en la defensa de la gente en fuanto trabajadores ‘én los lugares de trabajo. Resuleneeneionae a a ae én cuenta las necesidades, aspiraciones e intereses de las trabajndores en cuanto personas, cludadanos, habitantes, pa: res, consumidores, ete., fuera de sus lugares de trabajo, 3. Cambio del significado del trabajo En el pasado, la gente podta aprender una profesién, un oficioo una hhabilidad con perspectivas de practicarlas durante el resto de su vir da. Serfan los «dues» o propietarios de su habilidad que irfan per- feccfonando a medida que ganasen experiencia, podrian cambiar de Patrén continuamente, y no trabajar de forma continuada durante todo el af afirmando asf su independencia respecto de cualquier patrén particular y de la relacién trabajo-salario. La préctica de un oficio implicaria una forma de vida, una posicidn en la sociedad una identidad de grupo definida, de la cual daba pruebas la perte- nena dal rabaador a un singicats La dentifiacén con al propio abajo equivalia a proclam: : ‘6 trabajo equiva a proclamar una cultura definia yuna psiién La automatizacién no solo ha reemplaz: mayor parte tee Gia eons" ar maa’ au Vas esong ee gar, se quedan obsoletas a vn ritmo cada vex mayor. Casi todos los Aficios o competencias profesionales son provisionales. Las personas doben adaptarse a cambios teenolégicos continues, deben estar dis- puestas a un reciclaje que les permita mantener su puesto de traba- jooaaceptar uno diferenite, menos eualificads. Ala gran mayoria de los trabajadores se les considerar prescindibles al sobrepasar los cincuenta afios. Los puestos de trabajo y la posieién social tienen un cardcter precario, Excepcionalmente confieren una sensacién de pertenecer a un grupo definido, de tener un lugar y una identidad seguros dentro de la sociedad. Ya ni el nacimiento, nila educacién, ni el trabajo, pueden garantizarlo, Las individuos se ven obligados a definir su identidad por sus propios medios... cuando pueden. 3 tn sentenciados a una autodeterminacién de por vida por un con- texto social incoherente, en permanente cambio. En lugar de prote- rere aaittociedad es una Rents de resgos y de inseguridad. Obl] ga a las personas a ser mAs auténomas, a preocuparse mas por sf 1 inismas y a ser més individualizadas que antes, y a buscar 6u iden- | tidad en actividades y relaciones sociales al margen de su trabajo. ‘La desintegracién de los vinculos sociales y solidaridades tradi- cionales debe ser reemplazada en este contexto. No se trata simple- mente de un cambio cultural, sino del reflejo de cambios objetivos ten el entramado material dela sociedad. Lo mismo puede decirse de la actitud de las personas hacia el trabajo, Para la mayoria resulta précticamente imposible identificarse con él, dada la escasez, la pre: cariedad y In inseguridad de los puestos de trabajo, los répidos eam- bios en las destrezas y conocimientos que se requieren y el panora~ ma limitado de unas competencias profesionales cada vez mas especializadas. ‘Bstas observaciones no quedan invalidadas por las carreras que las empresas industriales o de servicios avanzadas ofrecen al mticleo estable de su personal, La “especializacién flexible” que exigen sig- nifiea que la seguridad en el puesto de trabajo depende de la volun- tad de los empleados y de su capacidad para poner sus conocimien- tos y sus capacidades técnicas al dia, periédicamente y para adquirir una versatilidad multicualificada. Los puestos de trabajo implican cierto desafio, responsabilidad y compromiso por parte de los trabajadores. Sin embargo, no Jes ofrecen la posibilidad de iden- tificarse con el trabajo que hacen, con el producto final del mismo. Estos estan predeterminados por el sistema de produecién, Bl ts ajador versatil, multicualificado, flexible, est funcionalmente es: ‘ecializado para servir a un complejo sistema de fabricacién de ser- Ficio que requiere su iniciativa; sin embargo, no tiene control alguno como lo tendrfan los artesanos— sobre la naturaleza y el valor de ‘uso del producto final, casos su capacidad solo tiene va- lor para la empresa donde trabajas 1 La identidad que las empresas avanzadas ofrecen a sus emplea: dseiio implica identificacién con lo que hacen, sino con una fancién Gentro del sistema que lo determina y le da su significado, siendo : propia empresa este sistema,A cada uno dé los que de-ella.depen- | den se le o! entificacién corporativa (corporate identy), 28" _Becit, a Tugar y una posicién definides dentro dela compania. Se_j Tes hace sentir que “pertenecen’ a In empresa, que deben entender- Ta como una comunidad, que se les retribviré mediante una promo: regular y mediante una seguridad en el puesto de trabajo por | Fi leallad y su dedicacién a servir a la compaaia de la mejor mane Fa posible, La “identificacién corporativa”'es, evidentemente, un_ El mundo del trabojo sustituto de la identidad social’ que ya no les ofrece la sociedad, La, enipresa se ofrece como una sociedad siustituitiva en tn medio so | inseguro, Pero la seguridad que ofrece a sus miembros es condici 4 nal: depende de la voluntad de los trabajadores para dar preferen- a los intereses de In empresa sobre los intereses de la sociedas || emgeneral, y también para dar preferencia a los intereses grupales de los que dependen de la empresa sobre el interés general de,la po- || blacién o de la clase trabajadora.y Esta condicién puede reflejarse en la poca disposicién de la empre- | sa para negociar con los sindicatos nacionales, prefiriendo los sindi- catos de empresayEn otras palabras, los empleados de Ja compass deben escoger ontre su identificacién corporativa o su identificacion_ de clase, Solo pueden conseguir la primera si estan dispuestos_a con- siderarse como una élite privilegiada cuyos vinculos de solidaridad con la clase trabajadora deben cortarse de ratz, La “identificacién corporativa” implica, pues, lo que los francéses denominan adecua- damente “patriotisme de empresa’ (patriotisme d'entreprise), que.en. _Sapén se relleja en los uniformes de empresa y en los himnos de em: presa qiié deben cantarse al comienzo de cada turno. En un contexto én el que no existen puestos de trabajo suficien- tes como para garantizar un pleno empleo, Ia identificacién con el propio puesto de trabajo, con la propia carrera, significa, pues, exa‘ tamente lo contrario de lo que significaba para la clase trabajadora tradicional.Ya no se trata de una forma de afirmar el poder auténo- mo de los trabajadores como clase, es mas bien una forma de exigir la pertenencia a la élite de los “ganadores” quienes deben su po cidn privilegiada a su capacidad y ambicién superiores... los “perde; dores” no pueden culpar a nadie mas que a sf mismos.. Glorificar el trabajo y la dedicacién al propio puesto de trabajo, cuando no hay puestos de trabajo suficientes entre los cuales elegir, es una manera de facilitar el egofsmo corporalivo de un estrato de Urabajadores de élite. Esto es lo que los empleadores y los politicos néoliberales han estado haciendo en todas partes. La tarea de los sindicatos es de una naturaleza bastante diferente; tienen que de- mostrar que el trabajo de los trabajadores de élite conduce a que ha- ya cada vez menos trabajo que hacer, y que los privilegios de una minoria se deben precisamente a ese hecho. Bs absurdo hacer un trabajo que conduce a Ja eliminacién del trabajo y al mismo tiempo exallar el trabajo como fuente esencial de la identidad de todos: Identificarse con la propia ocupacién significa entenderla como una capacidad social que debe ejercerse responsablemente. Significa coneebir la funeién que uno realiza dentro de wna perspectiva m: amnlia v examina los fines sociales. econdmiens vy cullurales a los —— que sirve. Bn el actual contexto, significa considerar la redistriba= on del trabajo y Ja reduccidn de las horas de trabajo como cuestior snes esenciales de la méxima prioridad. Precisamente considerando Br trabajo dentro de la perspectiva adecuada, en lugar de identify curse eon él, pueden sentarse las bases para el poder y la unida sindicales. 4, La biisqueda constante de la identidad Bn Japén, donde la “identificacién corporativa” es una antigua tre dicidn, solo al 30 por 100 de las fuerzas de trabajo tiene garantizado “in empleo y unas perspectivas de carrera. Bl resto esta empleado so bre todo en trabajos menos cualificados, en trabajos temporales peor vee abuides,o.en trabajo a tiempo parcial u oeasional, La fuerza de| trabajo esté dividida en un niiclea de empleados eslables y cualifca dos en torno al cual gravita una gran masa de trabajadores periféri- tos, la mayorfa de los cuales estén empleados en empresas industria- te'o de servicio que actian como subcontratistas, La especializacion Maxible del personal con empleos permanentes marcha codo code con la flexibilidad numérica de la fuerza de trabajo periférics. cus? seimero quieren ajustar los empresarios contratando y despiciende ton la mayor libertad y rapider posibles, de acuerdo eon les cambios gral volumen de la demanda, De acuerdo con las previsiones slemay fas ampliamente aceptadas, las mismas pautas se estén reprodu- endo on Europa y NorteaméricasBxisten pocas perspectivas para {que los jévenes encuentren un empleo estable en el cual pucdan Po- wer en préetiea la educacién ola formacién que hayan recibide. (OR Francia, por ejemplo, las dos terceras partes de 1a poblacién en edo- dee eomprendidas entre dieciocho y veinticuatro afios solo encuentxan empleos ocasionales.) ' cgin un importante programa de investigacién internaciona| Pe aan areha en Ja Universidad de Bremen por Rainer Zell, los Meyenes quieren encontrar un “puesto de trabajo significaliv, socio monte Glil, que les ofrezca una oportunidad de autorrealizacién y de desarrollo personal", pero consideran que esto es un ideal que no co td a gu aleance, Bl desempleo hace que resulte dificil encontrar cual quiet tipo de trabajo y obliga a las personas a aceplar una formarlén diue realmente no responde a lo que les gustaria hacer en su vidlu 9 df aceptar un puesto de trabajo que ne guarda casi relacién con eM po de formaeién que han clegido, En la mayoria de los casos, el pues; to de trahajo que aceptan se considera una transaccién provision’ hhasta que aparezca algo mejor. El hecho es que la gran mayoria de 1. Rainer 2s Niel te wie Eben, Wo Valo, Oe Ontchle, Hering ners Fle raen vy Soke Form Once “Fos de trabajo de lo més flexibles y que su tiempo dispo los puestos de trabajo creados durante los tiltimos doce afios son puestos no cualificados, inseguros y mal retribuidos para secreta- ios, personal de limpieza, camareros, asistentes de hogar, asisten- tes de enfermeria, dependientes, empaquetadores y otros por el es- tilo, "Ninguno de los roles laborales ofrecidos tiene consistencia suficiente como para justificar el apego al mismo"? Por lo que res- pecta a las especializaciones sobre las que existe demanda, son de- masiado especializadas 0 demasiado técnicas como para permitir que se invierta toda la vida de una persona en ellas. Resumiendo: puesto que la saciedad es incapaz de dar a los indi- viduos una posicién estable y una identidad social basada en su rol laboral, estos se ven obligados a definir su identidad por sus propios, miedios, mediante actividades que eligen realizar en el iempode ‘qi disporien. Se ven “obligados a Ser auténomos".® De ahf su ‘saci6n de’que lo que hacen fuera de sus horas de trabaj portante, tiené més significado y es més representative ¢ ellos “realmente” son que sus propios roles laborales., ‘Las investigaciones realizadas en Alemania y Francia han de- mostrado que esto es asf incluso para una mayorfa importante (aproximadamente las dos terceras partes) de los empleados direc- tivos de rango superior, incluidos los altos directivos mas jévenes formados en los centros de administracién de empresas, 0 en las es- cuelas de ingenieria o de leyes. Resulta interesante destacar que Ja- pén no es inmune a esta dinémica, Al igual que Buropa, Japén esté aumentando répidamente la proporcién de Ios llamados freeters — ‘en su mayor parte jévenes con titulos universitarios— que prefieren hacer tareas ocasionales en vez de iniciar una carrera regular que implique un horario fijo de trabajo, una rutina, unos jefes y una dis- ciplina. Al igual que sus colegas europeos, no quieren aferrarse du- rante el resto de su vida a alguna carrera profesional que implique una traba a su deseo de “desarrollo continuo de su personalidad, apertura y disposicién a amplias sus perspectives”. { Su busqueda de una identidad nunca est4 completa, las caracteristicas dela adoles- Généia Persisten en sus vidas adultas y les hacen, desear unos hora- esealo inds amplio posible, “Resumiéndolo todonla mayoria de las personas no puede ide ficarse con su trabajo porque la economfa no tiene tanta necesidad, de trabajo remunerado como para proporcionar un empleo estable ya jornada completa para todos. Esto obliga a una proporcién ca: da vez mayor de la poblacién a tratar de autodefinirse, mediante unas actividades no remuneradas fuera de la esfera econémica Junto a la imposibilidad fActica de identificarse con un puesto de trabajo, surge una renuencia cada ver, mayor a identificarse con “Gua tarea que fo fayorezca el desarrollo dela propia personalidad la i ssultado de ello, el trabajo est F de la propia autonomia, Como resultado de ello, el trabajo Fendo sometido a un cuestionamiento critica, fundamentalmente tn los das aspectos siguientes: 1, {Es el trabajo que estoy realizan- snte, itil? 2. {Bs realmente necesario que yo haga mi tra- bajo dela manera que se me pide que lo haga’, J wa Bote enfoque cada vez més erftico podria abrir nuevas vias para 1a accién y la politica sindical si los sindicatos fuesen capaces de plantearse objetivos més amplios y visionarios. 5. Trabajar menos, hacer mAs Seria completamente irreal y contraproducente para los sindicatos y para los socialistas adoptar la linea opuesta y aferrarse a una agenda de empleo a jornada completa y para toda la vida para toda ‘Goblacién, a fin de mantener la perspectiva de devolyer al traba- ‘salariado su importancia central-en las vidas de las personas, Estofho}gucederd por Rumerdsas razones: 41,Bn primer lugar, tal como hemos visto, la especializacién fun- " cional y la ereciente desmaterializacién del trabajo son incom- patibles con el tipo de cualificaciones cuasi-artesanales que per- hniten a los trabajadores considerar su trabajo como su propio ‘quehacer y su propio logeo. La evolucién del trabajo hacia lo que Marx denominé “autoactividad" (Selbstbetatigung), permi- tiendo que cada trabajador despliegue “una totalidad de capa~ ‘idades’, es incompatible precisamente con aquellos cambios teenolégicos que estan "reduciendo el iempo de trabajo al mi- imo” y (sigo citando a Marx) liberando asf un tiempo para las actividades superiores” que merecen ser “fines en si mismos 2:8] empleo a jornada completa y para toda la vida se ha conver- tido en una propuesta completamente inconcebible, Hace mas de veinte afios ya el sindlicalista canadiense Charles Levinson, jefe dela Federacién Quimica Internacional (ICF), sostuvo que ‘la cuestién no es ya la del pleno empleo, sino la de la renta ple- na. El erecimiento econémico no da lugar a empleos adiciona- los. Durante més de veinticinco anos, la inversién ha ahorrado rns trabajo del que ha demandado. El PNB de la Europa Oc tidental se ha multiplicado por easi tres desde 1960, mientras que la eantidad anus! do trabajo correspondiente a puestos de trabijo de jarnada completa se redujo a una cuarta parte (des- ‘ore, Gand Vero, Bo, sah 59250 de 2.100 nsenos de 1.600 horas) y el volumen global de horas rabajadas en la economia se redujo casi en un 30 por 100. Un trabajador asalariado de veinte afios dedicara menos de un: quinta parte de su vida laboral al trabajo en las presentes = diciones, frente a la tercera part de parte que le dedicaba hace cuaren- entre el volumen de trabajo y el volumen de riquen

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