La mayor parte de los tratados sobre la teora del valor y de la produccin se
refieren, en primer trmino, a la distribucin de un volumen dado de recursos empleados en diferentes usos, y a las condiciones que, supuesta la ocupacin de esta cantidad de recursos, determinen su remuneracin relativa y el relativo valor de sus productos. Los autores de esa escuela no parecen haberse dado cuenta de que su curva de oferta de mano de obra se desplazar con cada movimiento de los precios, a menos que tal oferta sea funcin dependiente solo del salario real. Cuando los salarios nominales se elevan, los salarios reales bajan; y cuando aqullos descienden, stos suben. Parece ser, sin embargo, que los clsicos se han desviado de este punto de vista, en parte a causa de su arraigada conviccin de que los obreros estn en posibilidad de fijar su propio salario, y en parte, quiz, por la preocupacin de que los precios dependen de la cantidad de dinero. En otras palabras, la lucha en torno a los salarios nominales afecta primordialmente a la distribucin del monto total de salarios reales entre los diferentes grupos de trabajadores y no a su promedio por unidad de ocupacin, que depende de un conjunto de otras fuerzas del sistema econmico. Con una determinada organizacin, equipo y tcnica, los salarios reales y el volumen de produccin (y por consiguiente de empleo) estn relacionados de tal manera que, en trminos generales, un aumento de la ocupacin solo puede ocurrir acompaada de un descenso en la tasa de salarios reales. Y cuando la produccin ha aumentado y los precios han subido, el efecto de esto sobre la preferencia por la liquidez ser aumentar la cantidad necesaria de dinero para mantener una tasa dada de inters.