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La conclusin de una de las mejores sagas de la historia del cine

no poda sino tener el mismo tinte pico y oscuro que Francis Ford
Coppola le entreg a las dos primeras entregas. Ahora con un Michael
Corleone a la cabeza de la familia, encarnando la imagen de un
patriarca omnipotente, pero a la vez cansado, y que intenta mantener
en pie el imperio de influencias que l y su familia lograron forjar sobre
sangre, dinero, y favores deshonestos.
En los primeros minutos, vemos a Michael (Al Pacino) siendo
investido por el mismsimo papa, y que sirve para seguir fortaleciendo
su imagen de hombre respetable y honesto, adems de ser un intento
de redencin por los pecados que alguna vez cometi.
Coppola se vio obligado a realizar la ltima parte de la triloga, no
por motivos artsticos ni por el afn de otorgarle un cierre a una historia
que ya pareca haber concluida, sino por motivos econmicos. l estaba
en la ruina y la idea de exprimir la gallina de los huevos de oro ahora no
sonaba tan mal. Paramount Pictures le dio la autorizacin, pero no tuvo
el mismo xito econmico ni el apoyo absoluto de la crtica que la
calific como forzada e innecesaria, sobre todo tomando en cuenta que
la entrega anterior haba sido concebida casi hace 15 aos.
Al Pacino logra interpretar con maestra, una vez ms, al ahora
mandams de la principal familia mafiosa de

Michael se mantiene en una bsqueda incesante por exorcizar sus


demonios, los que lo acosan debido a sus

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