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FOCUSING GENDLIN EUGENE T. GENDLIN, PH.D. Proceso y técnica del enfoque corporal 1 Mensajero FLIGFNE T. GENDLIN, PH. D FOCUSING PROCESO Y TECNICA DEL ENFOQUE CORPORAL 42 edicién Mensajero INDICE PrOlogo del aUtOF os coe oe Ha Introduccién a la Edicion Espafiola por Carlos Alemany Foenasing Un inatrumanta para tiemnda da eambia. Por Ma: rilyn’ Fergurson Primera Parte DAR LIBRE ACCESO A LA’SABIDURIA DE SU CUERPO ap. Cap, Segunda Parte 2. 1 sete interne Cambio Cap. 3. Lo que el cuerpo sabe EL PROCESO DEL ENFOQUE CORPORAL Cop. eon Cap. ap. Cap. Can 4 EI Manual de ta Técnica del Enfoque Corporat Line Sale Movimiontos de le Téenica dab Enforus y lo que sigaifican Lo que la Técnica det Enfogue no es espejar un espacio para tt mismo Si no puedes dar con Ja sensaclén-sentida Si ne puedes Iagrar que earshie nada Page. 8 28 35 37 87 ot 109 vr Tercera Parte PENSONAS EN AYUDA AECIPNOCA Cap. 10. Hallar riqueza en otros Cap. 11, El manual de Ia técnica de! escuchar Cuarta Parte Pags. 135 143 EL PROCESO Y TECNICA DEL ENFOQUE CORPORAL Y LA SOCIEDAD Cop. 18. Nucvae rolacionce GCap. 13. Experimenta més allé de tus roles Arcnotece a » oT ¢) a 0 Nota filos6fica La técnica del enfoque corporal: Forma Breve ‘Sumario de investigacion y referencias viblluyralicas Publicaciones Directorio Ediciones Internacionales 169 m4 179 187 188 109 193 sot 197 PROLOGO DEL AUTOR Al dar la bienvenida a Ia traduccién espafola, pienso especiel- mente en la sensibilidad que nuestros visitantes y colaboradores de habla espafiola nos han mostrado aqui respecto a fa rolacién en- tre la psicologia y los problemas sociales. Vuestra literatura psico- I6gica es mucho més consciente y esté més preocupada con este relaci6n que la nuestra El proceso y la técnica del enfoque corporal (Focusing), por su- puesto, es una manera de der un nicleo de psicoterapia a la gente normal; déndoselo de forma que cualqulers lo pueda usar, sin auto- ridades, doctores, o la implicacién de que alguien esté «enfermo-. EI proceso del enfoque corporal no esté necesariamente relacionado @ Ie psicoterapia de forma unica de ahora en adelante. Esta es sola- mente una de fas muchas dress en las que &s usedo. La fuente interior, dentro de cada persona, tiene implicitamen- te el conocimiento linguistico de todo lo que esa persona ha apren- ido, oido 0 pensado alguna vez, pero también contiene una més ‘bésica organizaciOn del organismo humano y también la progresiva diferenciacién nica y el desarrollo del vivir de esa persona haste ‘olwra, Esta vs fe razin por fe que, cuando una persona presta aten- cién primeramente @ una sensacidn y sentimiento global no claros, es tanta fa sabiduria implicita en ella, que resulta impensable pare ‘ete persone © para cualquier otra, hosts cate momento. incluso personas de una educacién muy rudimenteria hablan una cierta cla- se de poesia en tales ocasiones, porque deben usar las palabras de una forma navedosa y fresea para dasignar nuovne acpectae 2s. 8 necificos. de forma muy parecida a lo que el poeta tiene que hacer con el lenguaje. Cualquier situacién, sea problemas grandes y complejos o las preocupaciones de cada dia, sea lo que esté implicado en un escri- bir creativo, alguna situacién personal 0 problemas teoricos 0 de 11 vestigacién, cualquier situaciin —decimos— la vivimos con nues- tros cuerpos y slempre tenemos —ademés de lo que podemos pen- sar vlgremente— una acneaoién do -méo-. Mgunac veces ov un inn Satistecho, I6brego, ambiguo 0 no claro sentimiento de disconfort, de que allt hay més de lo que habiamos, pensado. Estamos acos- tumbrados @ escaparnos de eso, como si fuera algo imposible de pensar. Pero de este sentido y sensacién no anunciada provienen més aspectos especificos y més conocimientos que los que pens bamos que teniamos. Una vez que la persona ha descublerto esta fuente interna, ef sujeto ya no puede ser sustituido (suplantado) por alguien o por algo distinto, porque percibe con gran claridad que ningin otro puede wunuver mejor le prople vide de uno eei como loc pacos do su posterior evolucién. Uno esté abierto a tode clase de eprendi- zajes, pero la evaluaci6n ultima siempre procede de dentro. 86 muy bion quo costo ects cmblanda ol valar hicien da la nars- pective de la psicologia, alejindola de! modelo médico, pero aqui hay unas Implicaciones mucho més grandes para una sociedad libre. Hemos visto alguna estructura institucional cambiada de tal me- nora que todos y cada uno de Jos individuos podrian contribuir y por lo tanto que ahi se daba tiempo, espacio y recepcién para ésto. Pero estamos solamente muy en los comienzos. Al trabajar con las personas en el proceso del enfoque corporal uno encuentra maneras para asegurar que realmente logren un re- fuerzo interior, en lugar de que se les hable y que se les pida que usen esa pequena reserva de energia que tenen. Tudus pueden der con este proceso de.enfoque corporal y encontrar por ello algo de tiempo para dedicdrselo: tan pocos minutos, y sin embargo les pue- don proporolonar of lograr mée onergia y volver a eu caen mic funr- tes. Esto parece ser verdad cualquiera que sea el trabajo que pue- de ser hecho con ellos. Lo misma ee vardad para nosotins Ins ate trabalamos con le gente. La atencién 2 nuestras sefiales amblguas molestas, y no de! todo claras, sentidas corporalmente, es importante. Cuando estas sefiales aparecen en ef foco, aportan nueva energia asi como nos guian mejor. Y si nosotros también logramos muchas veces auran- 10 te of dia subtewer alyy pars nusutres mtsmose, podemos entonces servir mucho més efectivamente. Esto también elimina la gran divisién entre los protesionales de Ja ayude y equelloe con lov quo trabejamos. Todoo eames of mismo ¥ un snosotros» planteado asi es mejor y més verdad. Las divisiones entre gente diferente y entre psicologia y cien- cias sociales desanarecen y se ahre iin campo nueva y mas ampli Pero @ mi me perece probable que las personas de habla hispa- na, con su ya més desarrollada comprensin de la unidad de estos campos, serén las que desarrollen més ampliamente los comienzos que hay en este libro. EUGENE GENDLIN, PH.D. Chicago, 28 julia 1929 4 INTRODUCCION A LA EDICION ESPANOLA No pretendo hacer. en esta primera presentacion de 1a obra de Gendlin al piblico de lengua espafiola, un resumen de en qué con- siste la técnica que permite percibir y desarrollar el proceso del ‘onfoque corporal. Para ello estén todos loc oapituloe quo iguon a continuacién. Mi intento es diferente: subrayar algunos aspectos que enmarcan mejor la aportacién de Gendlin y que resaltan at mis- mo tiempo la importancia de poder contar ya con la edicién espa- fiola de «Focusing, poco tiempo después de haberse publicado la segunda edicién —revisada y ampliada— del mismo en EE.UU. (New York, 1981), y casi al mismo tlempo que han visto o estén viendo fa tue tao ediviunes ulema, francesy, hulandesa y fapuresss, El proceso y técnica del enfogue corporal tiene una historia que abarca la década de los 60 y de los 70. Representa el fruto maduro de la linea do investigacién llevada a cabo desde ontoncoe por Gendlin y sus colaboradores, linea que se desarrollé en sus co- mienzos en una doble vertiente: la filoséfica («Experiencing and the creation of meaning») y la terapéutica {«Exoeriencina: A va- riable in the process of therapeutic changes). En el primer aspecto Preocupaba a Gendlin la fuente de origen y creacién del significe- do desde sus niveles més prelégicos hasta lograr una conceptua- ‘lon del proces. En el segurido aspecto, el objetivo de la invest- gacién se dirigié a tratar de responder a la pregunta de por qué las psicoterapias tienen éxito, y si hay un factor comdn que lo ex- plica cohorontomente. Gendlin, eituado on la linea do poleotorapla ‘existencial, colaborador de Carl Rogers en los 60 (con él partici- 6 entre otros al famoso estudio de los esquizofrénicos de Wis- consin), gran impulsor de lo que ha venido a llamarse la «Psicolo- gia experiencial, nos ofrece con «Focusing» el resultado maduro, integrador y preciso de una interesante linea de investigacién (Gendlin, 1962, 1967, 1973), 13 La técnica del proceso de enfoque corporal permitiré percibir, conceptualizar y desarrollar ese «acto crucial imemo» que explica ‘el cambio terapéutico y que se inserta en unas perspectivas mu- ‘cho més amplias que el estrecho marco de la terapia, para incidir docididamento on cualquier pracesa do crocimionta, croatividad @ integracién humanos. ‘A eso alude Gendlin en su prefacio a esta edicién espafola ‘cuando dice aue «el proceso de enfoque corporal no esta necesa- Fiamente relacionado con la psicoterapia de forma Unica por més tiem po». Es decir, que habiendo nacido de ahi, de tratar de explicar qué es lo que hacen los. clientes que mejoran y cudl es su aporta- Clon en e| cambio Terapeuticy, sin emburgy vl Iwclw es que se ha transferido y ampliado notablemente el campo de sus aplicaciones. ‘Asi vemos cémo en los tltimos afios se da un creciente inte- ré9 por inoorporar la téenioa do ecto process on distintoe campos: asi por ejemplo en la solucién de problemas (Zimring, 1974; Kan- tor, 1976); en el estudio y correlacién con las ondas cerebrales (Don. 1977. 1978): en la espiritualidad (Gendlin, 1979; McMahon y Campbell, 1977); en la dénza (Alperson, 1974); en la creatividad en la escritura (Bonime, 1977; Perl, 1978); en la seleccién de perso- nal (Iberg, 1978); en relacién con los suofios (Hendricks y Cartw- Fight, 19/6); en relacion con la meditavidn (Weiss, 1978, Andou, 1981); en la creacion de imagenes visuales (Gendlin, 1970, 1979: Olsen, 1978): en ol tratamiento de esquizofrénicos (Hinterkopf, 1975); y do pacientes on situacién limite (Prouity, 1977): en la educacién de nifios de escuela primaria o de estudiantes universitarios (Mu- ray, 1978), ete. Actualmente Gendlin investiga entre otros aspoc- tos on la relacién del proceso del enfoque corporal con el mundo de los suefios asi como su integracién con otras técnices y orien- taciones de psicoterapia, como las conductistas, Gestalt, ete. (cfr. The Politics of Giving Therapy Away, Larson Ed., 1983). EI que otrezca, en sma, tal variedad de comexts y de furmas de aplicacién hace especialmente atractiva interesante la apor- tacién de Gendiin. Es estimulante el comprobar las ventajes que cota tooria y técniea ofroce por igual al profesional de la nient rapia (y Gendlin a diferencia de otras personelidades conocidas, lo sigue siendo y ejerciendo, ya que alterna su Investigacion y. for- cién de Trainers con el diario tratamiento terapéutico tanto it idual como grupal), como también al laico en este campo que re sin embargo mejorar su integracién personal en la linea de ib autoeyuda (Seltholp) en la que se mueven algunas de las més Feciemes tenuenclas de huy. El puuer iwalizar vale proveso do for “ ma completamente individual, sin necesidad de ayuda de otra per- suv, 1! siqutera la del terapeuta que te ha ayudado a hacerlo, 0 las ventsjas de hacerlo en parejas o en grupos pequefios, todas ellas son modalidades diferentes que cubren diversos ambitos de necesi- dadas @ intereses. La creseién do loc grupo -CAMBIOG. (Changes) que el autor explica en el libro y cuya atmésfera creativa y realize. dora pudimos constatar personalmente no hace mucho en Nueva York y Chicago, no son sino la cumplida expresién de lo que la dind- mica implicada en esta teoria y en sus aplicaciones practicas Neva consigo. Y ello nos lleva a otro punto que queriamos también poner de relieve para enmarcar los contenidos que aqui se otrecen y es co- mo la filosofia de Focusing crea un clima y un estilo tal en los cola- boradores, terapeutas, personas que acuden a los cursos de forma- oién, ots. quo ol erosimionto humano ¥ porsonel 2c hace mury ooti- mulante. Y que eso lo he podido comprobar en diversas ocasiones a ambos lados del océano. La primera ocasin.fue en la universidad de Chicado, en un célido mes de Julio de 1980. Gendlin diriaia un curso intensivo de formacién y supervisién en su técnica del enfoque cor- poral. Habfa alli fundamentalmente psicdlogos y profesionales de la ayuda americanos, pero también de otras nactones: México, Sudafri- ca, Suvcla, Espana, etc. Conocer un poco mas de cerca la ‘persona- lidad de Gendlin fue para mi una experiencia importante para com prender mejor no solamente su teorfa, su técnica y sus implicaciones, sino también cima es la filosafia y el estilo que pretende croar la dindmica de Focusing. Un estilo no competitive, de ayuda real, donde ensefiar es aprender. donde terapeuta y cliente crecen al unisono, don- de es posible y hasta es un deber el apropiarse de la técnica hasta hacértela tuya y a partir de ahf mejorar su entrenamiento, su enso- fianza, el integrarla con otras técnicas, etc. En suma, donde habia una gran libertad, espontaneidad, creatividad y contribucién positi- ya entre unos y otras. Hay que subiaya: yue el eotlnuler a que la gente comparta las nuevos descubrimlentos al hacer suya la técnica © los elementos introducidos para la mejora de su ensefianza redun- da siemare en benaficia de todas. Fr ese sentidn, tanta Gandlin cama todos los que estamos interesados en esta linea agradecemos la co- municacién de cualquier dato o cualquier pequefio descubrimiento Por pequefio que parezca pero que facilita la aproptacién de la técnica © hace mas pedagogico su aprenaizaje. La segunda ocasién ha sido bien reciente: en Junio de 1982 acu- di_a Breda, Holanda, invitado a participar en un curso de forme- ci6n avanzada’ en la técnica del enfoque coipurel y ous aplicacio 18 nos. Alli noe dimes cita unas 28 psicélagns y psicoteraneutes fun- damentalmente de Holanda, alguno de Bélgica y el que esto escri be, procedente de Esparia. Volvi a tener la misma experiencia: esos nalesingns procedian de distintas orientaciones terapéuticas y tra- bajaban también en campos diversos. Pero una de las cosas que tenien en comin habia sido el estudio, y la aplicacion de la teoria y técnica del enfoque corporal. Pues bien e! clima que se habia Zreado, la integracion del crecimienty persunal cu le técnica de ayudar a otros, el espiritu constructive que estaba presente, la for- ma de escucharnos unos a otros, el deseo de mejorar el aprendi- Zale y te voponténce colaboraoién on cémo ampliar el campn de ‘su aplicacién asi como de su integracién con otras técnicas actual- mente existentes, todo ello me levo a la misma conclusién: que ‘al estilo, ol clima y los contenidos en toro a Focusing son real- mente estimulantes para poder encontrar cada uno su propio cami- zno hacia el crecimiento personal y que eso explica en parte su auge y difusi6n en los tltimos afios, gracias a la constante colaboracién de Quienes saben que estén insertos en un continuo proceso ae ense- fionza-aprendizaje, de dar y recibir. La reciente publicacién de la re- vista editada en Chicago, «FocusingFolio» (1981) con [a variedad y calidad de Sus contribuciunes y Yue colé abiorta a le colaboraoién do todos los interesados es también una muestra de que este estilo no solamente esté proporcionando unos frutos reales ahora mismo, sino ‘quo 09 la mojor promesa de un futuro tremendamente esperanze- dor para la’ psicologia y los psicélogos personalmente implicados en el mismo. ¥ una iiltima palabra para prevenir al lector de posibles dificul- tades on la comprensién y practica de los contenidos de este libro. ‘A veces podré parecerle que algunos planteamientos y descripcio- nes son muy sencillas y claras de entender, y otras veces en cam- bio se le haré sumamente dificil el comprenderlas. Ambas cosas son verdad. La teoria y técnica del enfoque corporal, aunque esté pedagégicamente explicada, sin embargo resulta compleje como lo és la misma realidad que enieja, que supune una integracién do planos filoséficos y psicolégicos. Por eso el autor trata de evitar que {a gento la reduzca sin més a otras técnicas ya conocidas, aunque bien eo vordad que pueda eonar quo tione cierta nararida can las mismas. En su conjunto Focusing es algo nuevo, distinto de lo que esta- mas acostumbrados. al poner el enfoaue en lo que al principio es algo eno realmente claro» y al mismo tiempo algo «que esta siendo experimentado sélo corporalmentes. Esta técnica puede ser usada @N COnjunLiION Gun Las habitwaics procisamente porquo fooilita ooo ‘algo que estas otras no logran ofrecer con claridad. Por todo ello Greemos que supone un cierto desafio al lector el arriesgarse a una ‘comprancifn avacta y sohra todo a una experimentacién directa de Jo que aqui se quiere expresar. Como al lector le puede suceder que previsiblemente no tenge la oportunidad de tener con prontitud dicha experiencia, es muy posible que trate de sustitila por otra més fa- miliar para él, y pensar que el entoque corporal es como estu... u como aquello... sin haber Hegedo a percibir experiencialmente su propia cualidad. En ese sentido le recomendarfamos que tenga. un puww de paciencia haste que loo inotruscionoe eepecificas recultan eficaces para él y asi comprobaré que sucede algo diferente de lo experimentado anteriormente, algo que se da en un nivel diferente de experiencia corooral. Corsini acaba de editar un interesante manual de técnicas y orientaciones terapéutices recientes © innovadoras (Handbook of Innovatives Therapies, 1981). En un voluminoso tomo aparecen més de 70 estilos y técnicas terapeuticas que nan tomado cuerpo tun- damentalmente desde los afios 60 para acd. El articulo referente a Focusing, el Iberg, me parece excelente y sin embargo tiene una ‘uriose introduccién del miomo editor para mostrar quo on ningtin articulo ha tenido mds interés que en este. En efecto, Corsini tie ne un particular aprecio por esta orientacién ya que habia podido tener las primicias del mismo Focusing cuando este movimiento em- pezaba en la Universidad de Chicago. ¥ como consecuencia de ese personal interés, su deseo de que estuviera particularmente bien escrito y pedagégicamente articulados los contenidos. Y en ningin articulo le ha costado mas idas y venidas @ su autor para que cla- rificara mas y més todo lo referente a Focusing y al final el mis- ‘mo Corsini no despeja del todo sus dudas si ha logrado su obje- live completemente 0 no. ¥ 29 quo 00 have dificil ov libro 0 en un articulo algo que s6lo entiende del todo aque! que Jo va experimentando y paralelamente va realizando una reflexién sobre este experienciar suvo. Finalmente quiero decir que precisamente por esa misma difi cultad intrinseca a la teoria y préctica del enfoque corporal, hemos tenido particular interés en hacer una traduccién to més clara y precisa posible, siendo fieles al texto original y al mismo tempo teniendo en cuenta cémo podria ser mejor entendido por el lector de lengua espafiola. Y ahi hemos tropezado con las dificultades reales que presentan por ojomple leo diferentes catogoriae afoo " tivas de los dos idiomas. Creemos que a este respecto el espaiiol tiene un vocabulario mas rico y preciso que el inglés en el uso nunnal Ue eapresiuues Luu las de cmovion, sentimiente, vivencia, sensaci6n, etc, En las notas a pie de pagina damos cuenta de la raz6n de algunas de estas traducciones, pero queremos dejar cons- fancla tant del interés y minuiciosidad empleada como de las mitaciones intrinsecas a esta aventura intelectual que el lector ten- dré que excusarnos de que no siempre se haya logrado la claridad deseada. No quiero terminar esta presentacién sin agradecer a Eugene Gendlin todas las facilidades dadas para esta edicién espafiola asi como su interés y particular confianza depositada en nosotros. De su Ueallvidad potounal apf vu las fnveotiyavives suyas y lao de sus colaboradores del Departamento de Ciencias de la Conduc- ta de la Universidad de Chicago, esperamos beneficiarnos todos. Y al misma tiemna confiamas también an ser contrihiyentas des. de nuestra realidad hispana al perfeccionamiento de la técnica, de su entrenamiento y de sus aplicaciones. Unos y otros somos real- mente deudores ante todo de lo que este proceso del enfoque cor- poral aporta: el liberarnos. un poco mas desde dentro, el abrir y en- sanchar el camino que proporciona una creciente energia en el ser humano. Algo que nadie ha inventado ahora pues el cuerpo humano deade sicmpre lo ha procesado ast, pero de lo que somos ahora un poco més conscientes al lograr identificar algunos pasos de dicho proceso y poder asi hacerlo mas facilmente ensefiable a otros. Igualmente quiern agradecer a .losefina Martiner y a Fsperaiza Briz su paciente trabajo y experta colaboracién para llevar a cabo esta edicién. Cuando ya habiamos preparado la traduccién a la pri mera edicién de Focusing de 1978 (de la que se han hecho 5 reedi- clones en poco mas de dos afos), aparecié la segunda edicion de 1981, notablemente aumentada y mejorada por su autor y asi tu- vimos que rehacer nuestro trabajo, incorporando todes estas no- vedades, pur ly que cota Uaduuuion otyue wun fiuelided esta te ciente edicién de 1981. Esperamos que en los paises de habla his- pana el contar con esta vorsin de Focusing represente un paso im- portante en esta linea de la psicalngia y redinda en heneficin ca tuna sociedad més sana y libre, de personas que sean «creadoras- demodelos», es decir, de moldes nuevos. CARLOS ALEMANY Universidad Comillas, Madrid Septiembre 1982. 18 FOCUSING: UN INSTRUMENTO PARA TIEMPOS DE CAMBIO El proceso del enfoque corporal (Focusing), la técnica descrita fon las paginas de este libro, es algo muy apropiedo para nues- tros tiempos turbulentos, cuando tantas vielas formas estén de- rrumbéndose y viejos roles estén desapareciendo. La mayoria de nosotros tenemos que inventar, descubrir, y crear los pasos si- guientes de nuestras vidas sin una luz, un mapa, 0 una tradicion Felevante, Estamos tratando de mantenemus al pasy ue una te nologia répidamente cambiante, tratando de entendernos a nosotros mismos y nuestras relaciones, buscando maneras de estar bien, buccando eignifieado en nuestro trabajo y un nueva centra de gran vedad dentro de nosotros mismos. En una serie clisica de ensayos, el antropélogo Anthony C. W. Wallace describié ol fandmeno del «despertar cultural». Tales mo- vimientos estén provocados por el stress, observ6. Los intrincados caminos de la cultura, las habituales secuencias del comportamien- to, estén bloqueados. La gente no puede moverse en los roles que anuiciparon; sus vidas nu se desdublan ei las furias que a ellos se les habia sugerido que esperasen. Por la coaccién de formas sociales desintegrantes, unos po- 08 individuoe croadores —Wallace Ins llamA Innes Nuevas— pro- ponen una salida: unos nuevos senderos a través del laberinto cul- tural. Al principio hay una resaca «de indole narrative» en la que los tradicionalistas urgen una vuelta atrés a las antiguas formas, pero a fin de cuentas, por necesidad histérica, las nuevas luces se mantienen. Sus ideas son adaptadas y la sociedad se mueve dentro de una nueva era. 19 Claramente nuestra cultura esté en los primeros estadios de la transicién descrita por Wallace. Todo aspecto de nuestra socie- dad. toda institucién. es desafiada. La estructura politica, los «es- tablishments» médicos y educativos, la economia, la familia, la religién, el lugar de trabajo, todos estén sometidos a cambio. No tenemos mapas colectivos. Eugene Gendlin escribe: «Hoy muchas personas estan luchando con un hecho asombroso. Los viejos patrones por medio de los que se espera que la vida dard resultado —y una vez asi fue— ya no airven. Por ejemplo, of cor pado hoy no roculta ni tratamoe do hacer como hicieron nuestros padres; sin embargo, ninguna otra forma se ha establecido para que la podamos seguir. Tenemos que discurrirla a medida que caminamos...». Los viejos patrones fueron utiles en algun tiempo, reconoce él. Excepto por unos pocos inconformistas, la mayor parte de las per- sonas se ajustaron histéricamente a sus roles. «Solo un pequerio fnimero de personas educadas y pensadoras crearon roles y pa- trones.» Pero hoy una gran multitud de personas son cultas y han recibi- do cducacién, x tienen una gran nooosided do oor oroadorae. 60 oion ten confinadas por roles y emociones de reserva. Tienen sense- ciones y sentimiontos «mucho més complejas que los aceptados roles exigan u ofrecens. ‘A causa de los cambios radicales que estamos sufriendo como una cultura, tenemos sentimientos, emociones y sensaciones nue- vas y «borrosas», para las cuales no existe un patron comin. Es- tamos tratando de crear nuevas tormas apropladas @ tempos nue- vos. Y tenemos una oportunidad excitante y sin procedentes. «Si nos aceptamos @ nosotros mismos y a fos demés como creadores- de-formas (form-makcra), ya no nocoviteromes forsar loo patronoe © modelos sobre nosotros y sobre los demas. Eugene Gendlin y sus co-exploradores del proceso y técnica de! enfoaue corporal son LUGES NUEVAS en este dospertar, ofrecien- do no sélo alternativas culturales sino un instrumento para enten- der nuestros sentimientos y sensaciones borrosas e inventar nue- vos patrones de vida. El proceso del enfoque es una llave a la si- iuacion y despliegue personales, un proceso dinamico que puede guiarnos a través de los trucos de los caminos intrincados de un nuevo mundo. Lo miomo quo cualquier podorosa idea nuova, ol pracaen dal enfoque no es descrito facilmente en viejos moides 0 términos. Nos lleva dentro de un territorio desconocido, el campo del poten- 20 cial creador. aue hemos considerado ordinariamenta Ia reoién de artistas e inventores, Nuestros corebros y cuerpos saben mucho més de to que nor- maimente esta a nuestra disposicion. Somos conscientes de solo un fragmento de lo que profundamente sabemos. El sistema ner- vioso central percibe y procesa un gran cimulo de informactén que oct almaconada fuera del Ambit del -dareo-cuenta~ cotidis: no. Alguna de esta informacién se manipula mejor en una base in- consciente. Pero el conflicto, el dolor y los problemas no resueltos pueden llegar a ser el origen de inquletud crénica, crecimiento blo- queado, y aun enfermedad. EI complejo cuerpo-mente puede proveer nuevos pasos. Nues- ‘tro més profundo conocimiento corporal puede ser bien recibido y despues Vivido mas alld. EI proceso de enfocar, cuyos pasos estan descritos con cuidado y claridad, profundiza y articula nuevo conot miento subliminar. Hace amigos de y escucha sal cuerpo», un téi mino quo Gondlin usa compronsivamente pora signifiear el am- biente tote! mente-cerebro, como lo percibimos nosotros. (Los cam- bios producidos por el proceso del enfoque, sentidos en el cuer- po, envuelven igualmente estructuras cerebrales més profundas). El proceso del enfoque corporal es a la vez ricamente comple- jo y sorprendentemente simple. Es mental y cinestésico, misterioso ‘en su capacidad de suscitar sabidurfa enterrada, completo en su respeto de la «sensuclimsentidas de un problem. Un métudo elec tivo en si mismo es también valioso cuando se usa conjuntamen- te con una variedad de psicoterapias, con biofeed-back, con medi- taclén, para dechloquear al procesn rrosdar y dafinir’problamas En una palabra, el proceso de! enfoque corporal da resultado con cualquier forma de en definitive una Integracion de componentes siol6aicos (sensacion real localtzada en olaune parte, del cucroo), afectivos (tona- fidadssertimiento) y filosofices (contiene el ‘significado implicit de. ruestras ‘acciones, pero sin desplegarse todavia). También es importante subrayar que necesita’ un breve espacio de tiempo para que se forme y para que, nosotros engamos consciencia de que osté ahi. Es una sensacién globel, voga, difusa, am Bigha, corporal y que nuestro «darse cuenta» (awareness) [a iri percibiendo con ‘raduol nitidez, aunque no tenga de momento un nombre para etiquetarla, Y es 35 Goneralmonte, una sensacién.eontida no asté simplemente alli sino que tiene que formarse. Tienes que saber c6mo dejarla formar atendiendo al interior de tu cuerpo. Cuando viene, al principio no esté clara, como cubiorta de pelusa. Mediante ciertos pasos, puede enfocarse y también cambiar. Una sensacion-sentida es el sentir del cuerpo de un problema o situacién particulars. Una sensacién-sentida no os una emocién. Nosotros reconoce- mos emoctones. Sabemus cudidy wstanus alradus, v tlstee, » wir tentos. Una sensacién-sentida es algo que no reconoces al princi pio —es vaga y ldbrega—; se percibe como llena de sentido, pero desconocida Fe una canearidn carnnral que lleva implicita un deter- minado sentido 0 significado. Cuando aprendas la técnica del enfo- que, descubrirés que el cuerpo, hallando su propio camino, propor- ‘cione sus propias respuestas a muchos problemas. El proceso aporta cambios. En el proceso y técnica del enfoque no se necesita un terapeuta. Por ti mismo 0 con un amigo que sabe ‘cémo y cudndo permanecer en silencio, puedes conseguir resulta- dos del enfoque corporal. La regla més importante que un terapeuta o amigo tiene que guardar, el ayudar a alguien a enfocar, es el mantenerse fuera del Wamiaw dol ojercitante del cafoque. La mayoria do leo torepoutoo gustan de creer que somos nosotros quienes producimos los resul- tados, més que un proceso en el paciente. Tenemos mucho que ofre- cer y pensamos que esto loara toda {a diferencia. Siempre existe una fuerte tentacién a analizar lo que dice el paciente, 0 a conje- turar acerca de la naturaleza del problema, a volver erreglar la situci6n de la persona. Pero solamente tu cuerpo sabe cémo se sienten tus problemas y donde estén sus puntos nucleares. Si yo fuera tu terapeuta, re- sistiria la fuerte tentacién de decirte cosas como si yo supiera mas acerca de ts problemas que 1. Pero tampoco te dejaria so- lamente hablar. Yo te ensefiaria a enfocar efectivamente y te acom- pafiaria mientras lo hacfas. También haria otras cosas de las que to oontaré méc adolante. Ahora déjame darte algunos ejemplos de las experiencias do algunas personas en el proceso del enfoque. uonte de. significados. Por eso a veces aludimos a esta sensacion-vivenciada co: mo «significade-corporals. El repasar con experiencia los dkversos capitulos en donde aparece deserita, es! como el detenerse en los ejemplos que pone Gendlin, Sseperomme eve hard man idantificahln In realidad que ‘om tetera, Wentifiear ren fate término de nuevo cufio. (N. det 38 Més adelante explicaré cuidadasamente cada uno da loa & mo vimientos en que consiste el proceso y técnica del enfoque. Cuan- do éstos dan resultado, hay un cambio fisico en el cuerpo, un cam- bio-sentido. Entonces el problema parece diferente. En los ejem- plos que siguen, todavia no estoy ensenando los movimientos de la técnica del enfoque. Solamente estoy ilustrands cémo son los cambios que vienen con cada camblo corporal. Fijote que le naturaloza del problema cambia a medida yue vi ne cada cambio. Sin penetrar en direccién hacia un nivel corporal més profundo, que al principio nunca esta claro, uno se quodarid hloqueado en los vensamientos v sensaciones de lo aue parece ser el problema en un principio. LA JUVEN UUE FENSABA WUE LA MUERTE SERIA PACIFICA Fay me llamé por teléfono a media tarde. Habia estado pasean- do por ontro ealloe on la eiudad toda la mariana, oon ponoamiontoo sobre el suicidio. «La vida es demasiado molesta+, dijo, y realmen- te sentia el colmo del hastio y la desesperacién. «,A qué seguir adelante con ella? ~A dénde me lleva?». Fay habia hablado antes conmigo y yo sabia algo de su vida. Es tuna mujer atrayente de unos veintiocho afios. Pocos afios antes, ha- bia refldo con un hombre del que habia estado muy enamorada —lémase Ted. Ningin otro hombre antes o después le hebia he- cho sentir amor. Desde que Ted se fue, habia pasado el tiempo con tuna sucesién de hombres, buscando otro Ted pero sin encontrarlo. — cen que te siemes tan mals te aye. «vate un minuto de paz y mira en qué te sientes tan mal. Mas pronto de lo que yo hubiera querido, pero después de al- ‘gin tiempo, por lo menos, de silencio, Jijv. — «No he tenido mi perfodo. Tengo miedo de estar embara- zadar. i Le Gltime vee que hebia heblado conmigo, me habia contado que habia estado con un hombre al que hallé aburrido, anticuado, insen- sible, desinteresado en ella como persona, y sélo interesado por ella ‘como una compafera en lo sexual Habia pasado un fin de semana con este hombre. — «iEcho tan de menos a Ted!» me gimié en el teléfono. «Y ahora mi periodo se retrasa. zY si estov embarazade? Oh Dios mio. dqué me sucederd?» at Yo me daba cuenta de que sus agitadas sensaciones se le os- capaban de nuevo. Encontraba dificil el mantenerse més tranquil con su atencién en lo profundo de su interior, segun exige [a to- nica del enfoque. Estaba obsesionada con emociones dolorosas en vez de tratar de encontrar aquél més profundo lugar, la sensacién- seutila. Le pedi que comenzara con lo que yo llamo el =primer movi- miento» del proceso del enfoque. Este es el acto de poner a un ada Ins problemas por un tiempo, de amontonarlos, de dar paso atrés y mirarlos. En cierto modo, esto es algo asi como ol entrar fen un cuarto abarrotado con muebles y cajones de empaquetar ba- ratijas, que no hay dénde sentarse. Por supuesto mueves algunas cosas como para hacerte sitio en uN rlucdn. Nu lias vaviade ol cuar to. Las cosas que te estorbaban antes, los problemas, todavia es- tén ahi. Pero ahora, por lo menos, hay un sitio para ti , dyv. ‘empezando a llorar de nuevo. «La soledad, el no tener alguien a quion volverme... no hay remedio...». Cumenzaba otra espiral omooional. agitada y autedestructiva y yo le interrumpi. (De manera parecida, cuando tu aprendas a enfo- ‘car, aprenderés también a interrumpirte a ti mismo). «Por qué no hhajas alli dentro? la dije. «v ves aué es lo peor? Estate simplemen- te callada por un ratito. Liégate al sentimiento de todo ello». Ella sabia lo que hacor, Yo antes habia utilizado el proceso de enfocar. Si preguntas por qué me necesitaba para algo en el telé- fono en aquel caso —por que No se habla simplemente sentado y utilizado la técnica del enfoque por si misma— la respuesta es ‘sencillamente que puede ayudar el tener otra persona presente, aun Guando ca poroona cca eélo una vor amiga an al taldfono. Esto es particularmente cierto sl, como en su caso, te encuentras cogi- do en una trampa de emociones y no pareces saber librarte. A mo- nuda. cuando esto sucede, lo nico que se necesita es una vor ai {92 diciendo: «Bien, vamos simplemente a sentarnos y ester en s- Tencio un rato...». Un amigo puede interrumpir una espiral, emocio-~ nal cuando te sientes incapaz de interrumpirla ti 38 Escuché el silencio en el teléfono mientras Fay entraba en el sogunde movimiento de la réenica del enfoaue. Estaba estableclen- do contacto con el sentimiento de «todo acerca de haberse_mar- chado Ted». Con ella, asi como con la mayoria de ejercitantes con practica del enfoque, éstos movimientos tienden a fluir unos de otros Y hacerse uno, 10 mismo que un jugador de golf con practica v wi saltador de altura reine muchos movimientos separados del cuer- po en una mocién fluida, Hablendo hallado la sensaciGn-sentida, sin- to 1a Cuallded Ue la misma, y le puoo un acidera: una palabra ane se ajustaba con exactitud a la cualidad (Tercer Movimiento). Fl- nalmente comprobé las palabras frente a su sensacién y las hallé corractae, El preguntar es el 5° movimiento del proceso y técnica del en- foque. Ella pregunté directamente a la sensacién-sentida el por qué de la ira. Yo la senti suspirar cuando esto sucedia. Me uf vucuta de que algo habla cambiado dentro. Para ol ejercitante un paso es una sensacién fisica determinada de algo cambiando 0 moviéndose in- terlunicitc, un lugar apretade quo se afloje wEs todo acerca de ira o cosa asi» dijo. «No 96... Es como si estuviera enfadada —-con— zPor qué debiera yo estar enfadada?». Eetaba pididndnen a si misma o a mi un andlisis intelectual. Yo se lo ofreci. La técnica del enfoque evita el analizar También pro- curé ayudarla a que no se fuera al andlisis. Le dije: «Vuelve @ la sensacidn-sentida, cotéjala y mira lo que perclbes como ira». Después de otro silencio, dijo: «Estoy enfadada commiyy mis- ma. Eso es lo que es. Por dormir con todos esos hombres que no amaba, por los que nada sentia». El andlisis no hubiera producido esta respuesta. Eu luyor de coloulorla, tonia que eer sentida Vuelta a los movimientos de la técnica del enfoque aguardando otro paso hacia la resolucién del problema. Es un paso cada vez que la eeneacién.centida ramhia, aunque este cambio sea minimo. Des- pués otro siloncio y otro paso: «Y parte de todo esto es que estoy enfadada conmigo misma por haberme acostado con Ralph, a lo me- jor metiéndome en un Ifo —un aborto. tal vez. ¥ también me llamo mala por acostarme con un hombre que no me Impurtas. Oly sus- piro hondo. ‘Algunas veces un cambio pareceré aclarar lo que surgié de un cambiy previ v vlaluer sobre él. Foto oc lo que eureriA shora mismo, cuando ella habia encontrado «...Y yo me llamo a sf misma mala...» lo cual continué de lo que vino antes. Pero después, su paso siguiente camhié la serie anterior. En el proceso del enfoque 39 ne que tomar lo que aparece. Con frecuencia, lo que sigue para ol cuerpn, nn ae In que légicamente deberia seauir. Esto su- cede frecuentemente durante el proceso del enfoque. Es imprevisi ble y fascinante. Ella dijo: «Hay una especio de sensacién pesada y descorazo- nadora...» Y después de un rato, esta sensacion pesada y desco- razonadora se abri6, y aparecieron los detalles. «Es acerca de to- dos esos hombres que no me interesan, No tengo sentimientos se- xuales con ellos... Estuvo callada un rato. Le of decirse esa palabra «desanimada» a si misma, como si la estuviera probando. Aparentemento, no en ‘Sajaba eon la coneacién para ver el suirgia da Ia misma una pala- bra més exacta. Estaba tratando de encajar la sensacién consigo misma més exactamente por medio de palabras 0 imagenes o una sensacién fisica especifica. Esta experiencia de Fay es comin en la técnica del enfoque. Consigues un paso que parece raramente, misteriosamente incom- pleto. Te da el comienzo de un cambio pero ti sabes (lo sabe tu Cuerpo} que es posible un cambio mas complet. Te manticHes eH sintonia con tu sonsacién corporal y esperas a que suceda, De repente dijo: «;Aburridal». E! alivio en su voz era claramen lc perceptible. Hable tenido lugar la oonoacién dol movimiento in terior completo. «Esto es lo que pasa. Estoy aburrida. Siento como que voy a pasar el resto de mi vida yendo de un hombre soso a otro. nunca sintiéndome sexual pero nunca dejando de probar ol sentirme. Puedo ver todos esos hombres en fila delante de mi, to- das esas caras en blanco, filas y filas de ellas, desde aqui hasta el fin de mi vida. Estoy condenada a no tener sentimientos sexua les, es0 es todo.» Esperé que dijera més. Evidentemente, ella sentia que esta se sion de enfoque habia conseguido lo que necesitaba de momento, pucs de roponte dijo: ~Ahora mo afento mojor. ;De qué poco me he librado!» ilibrado? Para un observador racional, no se habla librado de nada oe prohlemas que habian existido cuando me telefones. los problemas que le habfan acercedo al suicidio, ain existian. {Qué es lo que realmente habia conseguido con el proceso de enfoque? Ella habia cambiado por dentro! Habia parecido un problema de sotedad. Con el primer sentido total del movimiento, era su ira contra si misma, y con el siguien: 40 te, era el llamarse a si misma «malas. Entonces surgié el pasado desaliento y con una relajacién corporal resulté aparecer como una conviccion de que nunca mas Tendria sensaciones sexuaies. |odavia, segin sentia esto iltimo, aquello se cambio dentro de su cuerpo. En tales momentos uno no puede todavia saber exactamente ‘euanto cambio’ ha tonide lugar. Muchos mas pacoe dol prococo de enfocar serian necesarios més adelante. Pero un cambio tiene lu- gar en un sentido total del movimiento en el cuerpo. Algin cambio tiene lugar hasta en el mero alivio corporal de sentir v tocar el problema en un s6lo lugar profundo definido. Al principio, cuando me llamé por teléfono, sus sensaciones de malestar estaban esparcidas por todo el cuerpo. Todo su cuerpo porvibie of dulur tanly yus oe preguilabe a sf misma acerca de las ventajas de no seguir viviendo. Pero ahora, habia localizado el pro- blema en esos dos malos sentimientos de aburrimiento y de ira. Séla sos das ligaras dalian ahora Fl resto de ou cuerpo oetabs tiberado, La técnica del enfoque la habia ayudado en tiempo de desespe- racién. En los meses siguientes, continué el enfoque y siguid el ‘cambio Interior. Con el tiempo, su vida sexual y algunos otros as- pectos dolorosos de su vida se calmaron y gratificaron. Para en- tonces, habia entretejide el proceso y la técnica del enfoque en su modo de vide. Pera clla como pata la mayuifa Ue lus que LUULEN la técnica, vino a ser algo més que un instrumento terapéutico para ser usado en tlempos de crisis. Se hizo algo de uso diario, una par- te reconfortante y familiar de su existencia diaria EL HOMBRE QUE SE SENTIA INADECUADO Fred, segin le llamaré, casi constantemente tenfa un nudo en su estémago, una apretura que nunca le dejaba por completo. EI nude vol votdmayu unus dfas era peor que otros. Fue part cularmente malo el dia que Fred, por primera vez, us6 efectivamen- te la técnica del enfoque. Fl dia habia eamenzado de mala manor con su jefe. Fred era un hombre interesante, que tenia el puesto de director de ventas en una empresa industrial. La empresa no funcionaba tan bien como en otro tiempo. Fred creia que podia arreglar eso reor- ganizando les fuerzas de venta, y habla disefiado un plan detalla- do para realizarlo. Esto hacfa que Fred se sintiera més creador en Habia tonide dioousién a bastante dréstico en la filo- so hae su puesto. El plan requeria un cambi sulla youoral Je venta de la companio y oste cambio pro levado a Fred a la discusién con su jefe. El residuo emocional de la rina se fij6 en el estémago de Fred y, permanacié alll todo el dia. Aauella noche, después del trabajo, 1 probs todos esos medios familiares que no producen result Primero probé amonestarse a si mismo: «jContrélate a ti mis- mo! Tu pormites que cosas pequefias te turben demasiado. jSupera todo eso! {Mantente en calma, trio!» Guando la amonestacién a si mismo habia terminado, el esto- mago de Fred seguia siendo un nudo, Probo el vulver a vivir la diseuoién, dando méo y mée vusltas = la misma: «Cuando 6! dijo esto, yo debiera haber dicho aquellor. Por supuesto, esto sélo aumenté fa tensién emocional. Prob al trura de pretender que no existia el problema. «Nada pasé realmente, en absolutor, se decia a si mismo. «Mi jefe sabfa mis puntos de vista hace tiempo y yo sabia los suyos. La discu- sion no cambié nada. Solamente sacé a relucir las cosas y esto deberfa hacorme sentir bien, no mal. {For supuesto! jme stew bien! Poro su estérago no lo crefa. Todavia era un nudo. Prubo vl uidlivis. “Co un anticuade, eoté aooetumbrado a hacer las cosas a la antigua, con miedo de cambiar. Ese es su lio. El mio ‘es que fundamentalmente tengo miedo de personas mayores en au- toridad ‘Su estémago tampoco se relaj6 después de este acceso. El ané- fisis de un problema personal pudiera ser cierto. Pero es distinto a ir dentro para sentir directamente cémo es. ‘Cuando todos Ios intontos de Fred para nacerle senurse mejor fracasaron, se fue a un bar y tom6 unas copas. Pero esto sélo le hizo sentir una mejoria insignificante. Todavia podia sentir el mis- mo Huu ei su volGmege, aélo que el dolor ectaba ligeramente apagado por el alcohol en su sistema. Més tarde aquella noche, cuando la influencia del alcoho! ha- bia docaparecido, 4t-prahd la técnica del enfoaue. La habia apren dido de mi hacia pocas semanas pero, hasta entonces, habia sido incapaz de hacerla bien. Ahora, se sent6 al borde de la cama y fue capaz de hacerla bien. Esto es lo que me informo: «Me hice acallar por dentro, apagué (0 por lo menos dismi- nut) toda sermén. toda racionalizacién y otros ruidos que ha- 2 bian atronado en mi cabeza. Dejé que mi atencién disminu- yera, no sdlo en la rifia con mi jefe, sino para adquirir una Sensacion de todos los miles de detalles que la rodeaban, todas mis preocupaciones acerca de mi trabajo y mi futuro, y lo que estoy haciendo con mi vide.» Esta larga sensacién vaga es lo que yo llamo una sensaci6n- sentida. Resoués. bused el niicleo de esta sensacién-sentida, -Me pre- ‘gunté a mi mismo qué era lo peor de ésto. Dénde dolia mas. Una ‘sensacién surgié muy pronto pero era tan extrafia que no podia ha- cer que me hablara. Era una sensacién como de algo fuera de lugar. Era'la clase de sensacion que puedes tener viendo un cuadro col gado torcido en la pared, 0 un libro puesto de cabeza o bajo en un estante, algo no del todo correcto, Estuve esperando palabras y ob- tuve -fuora do lugar- y -fuers- poro cuando lac comparé para vor si eran correctas, no eran —del todo. Me senti muy cerca. tenia ‘esa sensacién como en la punta de la lengua, la sensacion que ten- ‘ao al mirar un proarama de adivinanzas, y veo que yo sé la con- testacién pero no sale. Anteriormente, nunca llegué hasta aqui en la técnica del enfo- que. Nunca tuve esa sensacién-sin-saberlo: La sensaciénsentida de que habla usted siempre. Esta vez supe que [0 tenia. Entonces la consegui, consegui mi palabra: jEra inadecuado! Esa era mi palabra, y si senti que mi nudo, mi sitio bloqueado dentro de mi, s¢ rebajaba. ¥ enseguida lo supe-. «Inadecuado»: ésa era la palabra —como la sentia su cuerpo— que describia todas sus acciones en el trabajo: sus planes elabo- radoe para veoyganizar lac fuerzae do venta, eit digenitle con sit jefe todo. Todo erd inadecuado porque este trabajo no era lo que real- mente querfa‘hacer en su vida. Hacia tiempo aue habia pensado que él estaba al cabo de la calle de sus suefios juveniles, pensaba que habia «crecido» y se habia hecho practico con la madurez. Pero ahora, en este movi- miento corporal, aquolla sensacién de un nudo aflojéndose dentro, supo algo que Venta con aquella palabra «Inadecuadu>. Lu supu wudle ello en un diluvio instanténeo. Esto es lo que percibid: «La raz6n por la que me perturbé tanto acerca del plan de reorganizaci6n era que yo confiaba en que el plan arreglarfa mi vida. Y por supuesto, es0 me hizo obrar estupidamente. 423 Lo que mi vida necesitaba es demasiado grande para que ese pian lo arregie. Yo no sabla eso y clertameme hizy de mi una persona de dificil convivencia en el trabajo. Es como ssi yo hubiera reaccionado con esta enorme intensidad emo- ional que no onoaja on ol plan. Mi Intonsidad ora inadocua. fa al plan, y yo estaba obrando de modo, inadecuado en el trabajo. Por supuesto, yo como que sabia que queria el plan por- que entonces podia sentirme creador acerca de mi trabajo, pero yo no sabla que estaba permitiendo que ese plan fue- ra toda mi vida, la parte de la misma que yo no acerté a Vivi. No es extranu que mu puulete 1 acerca de ello.» Fred nn sabia ln a invertida en el plan nero su cuerpo Jo sabia. Y lo Unico que tonia que hacer era «preguntarle». Fred nunca hubiera podido calcular esto analiticamente, en par- te porque pensaba que ya se sabfa sus propias respuestas. Si al guien le hubiera pedido que lo meditase, él podria haber conteste. do que el plan le hacia sentirse la persona creadora que él quer ser. Y con esta respuesta simple y verdadera, él habia evitado el puncise cn cuntacte directo con la prosentc masa de senoacionco dentro de si. Asi mismo, Fred no podia haber calculado esto ana liticamente porque su mente habia estado ocupada con pensamien- tos sobre los detalles y las personas en el trabai Fred cuenta este relato de la técnica del enfoque solamente en relacién con aquella noche cuando se relajé la tirantez de su esté- mago. Lo mismo que en e! caso de Fay, es necesario observar que Fred aiin no habia resuelto del todo su problema en terminos prac- ticos. Pero ahora se desprenderia do su trabajo no querido, se sentia relajado acerca del plan de reorganizacion. Ciertamente, continuaria defendiondo ou plon porque ora buono pore coria capaz de eccuchar las objeciones de otras personas y estarfa a sus anchas combinan- do las ideas de ellas con las suyas propias Esto alivié au tensién inmediata sobre su trabaio. El cambio cor poral habia producido otros cambios igualmente. Algo se habia Ii berado en él en cuanto a cambiar de vida. El lo expresa asi: *Yo oodia ver que el trabato nunca oodia satistacerme aun cuando mi plan o cualquier numero de planes fuese acep- tado, pero me sentia mejor. Debiera haber ostado desani- mado. Ciertamente, no puedo cambiar mi vida asf, sencilla mente. No es como st me io nubiera pensado antes. Fero, a“ do alguna manera, este elemento en mi que necesita alguna ‘otra cosa, también se liberd més. Alli mismo estaba dentro de mf, una especie de apetito de vivir. Ya no necesito for- Zarlo én una camisa de tuerza. No $6 por qué pero ahi esté dentro de mi, como si algo se excitara y dijera: «jVamos a cambiar!» Y todavia no tengo Idea cémo. Si fuera puramen- to objetivo, cotaré desanimade.- Por supuesto, of cambiar su vide necesité de pasos précticos; na silo Ia técnica dal anfomie V ca nacosits mae proceca del on. foque para enfrentarse con temores y otros obstdculos Internos, igual que con pasos précticos en el exterior. Al principio. Fred no sabia qué cambios internos y externos tendrfa que hacer. Pero des- de entonces, una vida nueva se le ha ablerto. Seguin ha resultado, ha sido capaz de compaginar sus propios intereses sin cambiar de trabajo. Peru vse fue vl resultado posterior de Fred. Tal vez, otra per- sona hubiera cambiado de trabajo. Y otra, atin hublera hallado li- vio simplemente en no necesitar que el plan de reorganizacién fun- clanara avartamanta enmo estaha eecrite. La téeniea del enfoque ordinariamente lleva a niveles més profundos, pero algunas veces estén en paz y no necesitan més cambio. En el caso de Fred, una nueva direcelén de vida dio comienzo. Anteriormente, si se le hubiese pedido que pusiera una etique- ta descriptiva al trabajo, é! lo hublera llamado seste desesperante importante trabajo, que ata mi estémago con’ nudos». Ahora podria Namarlo ceste trabajo que es solamente una pequefia parte de mi». El mismo trabajo. El mismo hombre, pero un hombre con una perspective enteramente nueva de su objetivo vital, y, mas espe ficamente, de ou tabajv. LA CHICA QUE TENIA MIEDO A LA UNIVERSIDAD Cuando conoci por primera vez a Evelyn, ella habia venido a nues- tro aruno «CAMBIOS». un oruno de gente an Chieagn qua daha la bienvenida 2 cualquiera. Practican la técnica del enfoque. Se escu- chan unos a otros, se syudan mutuamente de varias maneras. Evelyn no sentia que habia un fin en la vida ni tenia metas. Nada le interesaba. Tenia un empleo de tiempo parcial pero ninguna idea de un trabajo que le viniera bien. Se sentia sexualmente explotada, sin verdadera satistaccion se- xual en tantas relaciones COMO habt twinldv. Estaba Uemasiods, gruc- a, con mirada aburrida y triste. También era extremadamente ca- Nada. ‘Aigunes do loo porconas de lac ite tangn informes sobre la técnica del enfoque, 0 con las que yo la he practicado, pueden pa- recer casos bastante desesperados cuando primeramente las des- ribo. Pero el proceso del enfoque se va adentrando en el interior de la persona. Alli descubre una riqueza. La técnica del entoque te mostraré esto en ti y en los demas. Una vez que lo veas, nadie te pareceré desesperado. De hecho, tampoco nadie pareceré ser sun Tipo» POTgue ESLUS SUN sulonIcHIe aspectos superfioioloe y tom porales de las personas. La gente que viene a CAMBIOS me ensefia esto mas y mas. Alguno quo, al principio, eo ma figura tna-cierta clase de persona —“destruida, desesperada, indiferente, aburrida— mas adelente pue- de resultar distinta, rica, fascinadora, Y asi recuerdo mi primera impresién de Evelyn, Una mujer lle- mada Laura la habia escuchado de continuo cuando trataba de en- focar, pero era dificil escuchar a Evelyn. Ella nunca tenia sent miento alguno. Evelyn sélo podia hablar de cosas externas, situacio- nes, otras personas. Sv seiitia LUN ausicdad por no tener soneacio nes dentro de si misma. Varios terapeutas de la Universidad y do la comunidad habian trotado antes de ayudar a Fvelyn sin producir resultado alauno no. table. En efecto, sin expresarlo en tales palabras, la habfan dejado por imposible. Laura no iba a ceder en cusnto a Evelyn y buscé ayuda en otra mujer, Nancy. Entre las dos ayudaron a que Evelyn cayera en ta cuenta do que el sentir ansicdad de no tener sentimientos era en si une sensacién, Ellas y otros escucharon a Evelyn y la ayudaron 2 enfocar con bastante reyularidad durante algunos maces. En ra zn de este libro, pedi a la gente de CAMBIOS que grabaran algu nas de sus sesiones; fa de Evelyn fue una. Evelyn me dio pormiso pore reproducir sina particular sasién de la técnica del enfoque, que produjo una enorme diferencia. Para cuando esta sesién tuvo lugar. ya existia una Evelyn dis- tinta. Por ejemplo, result6 que era lista, que podia distinguir sus sensaciones con la precision de un pensador. Habla cantidad de w- sae en ella que eran fo opuesto de la mujer que parecia ser, a pri- ‘mera vista. En aquella sesién clave de la técnica del enfoque, es: Taba prevoupala avorva de ou cducacin. 46 «Supongo aue debiera seguir en la Universidads dijon «Tarlag me dicen que debo y supongo que es un buen consejo. Quiero decir, ya ‘86 que debo hacerlo si he de reslizar algtin trabajo interesante. Pero sencillamente, no quiero.» Una pausa, luego: «La cosa es que tendria que dejar todo lo de- més, conseguir un empleo de tiempo completo para pagar y —co- imo que nunca tendria tiempo para simplemente vivir, Todo estaria tense y- Se interrumpe a si misma. Ya sabe que esté solamente hablan- do alrededor del problema, repitiendo razones familiares que han estado on cu cabeza mucho tiempo. Ee hora do caller para onfooar, y esperar en silencio a ver qué viene Suspira, y se hace un silencio largo. Finalmente dice: «Bueno. todo eso de canarsa la vida y no tener tempo, na as raalmeanta la cuestién». Empieza a llorar. «Es que se necesita tanta fe, 0 algo, para decir la parte de pensar, ;sabe? La parte del cerebro, la crea- dora... Yo quiero estar con gente que piensa, y me encanta leer y discutir y preguntarme acerca de las cosas, pero el tomarme en serio esa parte de mi...» Habia conseguido su primer cambio interior. Dentro de ella, al- gin sity tery oe ha allviady y su flay es un sinoma wangtble de esa liberacién. Hay otra pausa y luego da el segundo paso. Gomo sucede con frocuencia on la técnica dol onfoquo, ol nuovo paso co una olabo racién de lo que pasé anteriormente —un cambio en la direccién, un aftadir una nueva dimensién. sRueno, na es exactamente esn: quien decir, al tamar an sarin esto del pensar. Yo podria hacerlo, pero la cosa es que la univer- sidad es justamente lo que esta estorbando el hacerlo. La univer- sidad me impediria el hacerlo. Por esto es por lo que la facultad ha resultado siempre tan dolorosa para mi. Como que no estoy nada segura de poder tomarme en serio. Yo necesito profesores que me digan que mis ideas estén bien. Necesito gente pensadora que me diya, <9, ti esté> bien, i pucdes pemars. Peru lus profesures nunca hacen eso. Nadie ha querido jamés esta parte de mi, en ab- soluto, Siempre me mandaban a: hacer recados y otras cosas que a allos so lee acirrian, na coca de penear. Asi que yo tenta que formarme a mi misma dentro de mi, 0 algo asi. Mi parte pensado- ra tenia que estar escondida porque nadie la queria. Era asi como no debia salir fuera. Eso es lo que siento en cuanto a volver a la Facultad. Es una sensacién de... sabe, no permitirme salir fuera.» a7 Entre cada ciclo y el siguiente hay un silencio en a cinta en el ‘ue enfoca. Cuando hay un sentido total del movimiento en la ma- era de tenor el cuerpo el problema, entonces napia de nuevo. Lo que dice ahora del problema es diferente. Otra vez se calla, enfo- cando. Pero no trabaja tan sélo sobre el problema, como acaba de ecirio, En luyur Ue Gotu, onfoca sobre la entora eoneacién de mal- estar el nuevo Idbrego sentir del cuerpo de lo que ain so siente sin resolver. De esta manera, no se siente prisionera dentro de los pentamientas y sensaciones del problema sequin se acaba de decir. Nétese que aquello que parece constituir el problema cambia con cada sentido total del movimiento del cuerpo. Por ésto, no es de mucha ayuda el tratar de resolver un problema trabajando solamen- te sobre los pensamientos y sensaciones del problema soyin oo afirrma. Esta llorando de nuevo, otro cambio interior ha tenido lugar. Lucyy, todavia da otro pao. -Fa realidad, na se trata de In que piensan los profesores. Es... bueno, esta falta de seguridad en mi, este no pormitirme salir fuera. Esa soy yo. Quiero decir, iré a la faculttad esperando mucho ¥ pasaré lo mismo que siempre, y me desilusionaré y doleré por completo otra vez. Siempre seré la mis- ma. Si, esa es ahora la sensacion de... eso no va a combiar.» Sus pira, Esté callada algin tiempo. Luego, otro paso tiene lugar. “). Y segundo, que la sensacién-sentida cambiard, se moverd si te acercas a ella en la forma debida, Cambiaré incluso al mismo tiem- po que estas estableciendo contacto con ella. Cuando la sensacién- sentida de una situacién cambia, td cambias y. por lo tanto, tam- bien -cambra tu vida, Vamos a estudiar més detalladamente estas dos curiosas propo. siciones. Primoro, quiore ootar soguro do quo ontiondes lo que os una sensacién-sentida. Una sensacién-sentida no es una experiencia mental, sino fis ca. Fisica. Una conciencia corporal de una situacién, persona 0 su- ces0. Un jaura psiquica interna que rodea todo lo’ que sientes y sabes acerca de una determinada cuestién en un momento dado! la rodea y te lo comunica a ti en su totalidad més que detalle por setalle. Si quieres, piensa que es algo como un sebur, v un yran acorde musical, que hace que sientas un poderoso impacto, una sensacién redonda. 87 Una sensacién-sentida no te viene en [a forma de pensamiento © palabras uw utras unidades suvlias, sine cumW una Sule CauMyuE a menudo perpleja y muy compleja), sensacién corporal. Puesto que una sensacién-sentida no se comunica @ si misma ‘20n palobras, no 09 Féoil doooubrirla on palabras. Eo un nivel doo conocido, profundo, de conciencia, que los psicoterapeutas (junto con casi todo el resto del mundo) por to general, no han encon- trado. Permiteme aclararlo con un ejemplo. Piensa en dos personas que juegan un gran papel en tu vida. Dos personas cualesquiera. Yo las llamaré Juan. y Elena en esta presentacién, pero ti sustitu- ye los nombres de tus personas. Deja que tu mente se vaya y venga una y otra vez entre esas dos personas. Fijate en el aura interna que parece tomar cuerpo cuando tu atencion se fia en Juan, la sensacion de «todu acerca de Juans, Fijate en el aura completamente distinta de Elena EI aura interna cuando piensas en cada persona, no esté hecha do pedazoa diseretos de dotos que té conscientemente pones jun tos en tu mente. Al pensar en Elena, no te tomas el trabajo de ha- cer una lista de todas sus cualidades fisicas y personales, una por tuna. Na piensas: «Oh af. Elana mide 1°75 ems. de altura. tiene pelo tublo y ojos castafios, y un pequefto lunar junto a la oreja, habla en voz chillona, se disgusta fécilmente, aspira a ser esoritora de obras teatrales, le gusta la comida china, necesita adelgazar. Ni tampoco haces una lista de cada detalle de tus relaciones con ‘ella. Sin duda, hay millones de pedacitos de datos semejentes que describen a'Elena, como 1 la conoces, pero esos millones nu te son transmitidos uno @ uno como pensamientos. En lugar de ésto, te son dados todos a la vez, como vivenciados. Te son transmiti- doe do algin eitio dietinto do tu monto conecionte. La eeneacién de «todo acerca de Elena» —incluyendo cada uno de esos miles de pedacitos de datos que ti has visto, sentido, vivenciado y guar- dado sl correr de los afios— te viene toda de repente, como una sola gran aura sentida en tu cuerpo. La sensacién de «todo acerca de Juan te viene en la misma forma. Es un inmenso archivo de datos: el aspecto fisico de Juan, ‘c6mo ‘habla, cmo os conocistels, lo que necesitas de el, 10 que dijo ayer y lo que td contestaste. La cantidad de informacién es aplastante y con todo, de alguna manera, cuando piensas en Juan, twdus lus hecho y sensactones relevantes te vienon de repente. zD6nde estén almacenados todos esos miles de dotalles de in- formacion? Nu wn tu iments, sino eu Ww cuepU. El cuBrpy es Un computador biolégico (1), engendrando esas enormes colecciones do datos y transmitiéndolas al instante, cuando los llamas 0 cuan- do con. llamadns par slorin siinagn avtarna Ti pansar nn as cana de contener todos esos detalles de conocimiento, ni de transmi- tirselos con tal repidez; te llevarfa todos los afios que te restan de vida el hacer una lista de todos los detalles que conoces de Ele- na y tus relaciones con ella, Sin embargo, tu cuerpo transmite stodo acerca de Elena» en una gran, rica, compleja experiencia de reconocimiento, en una sensacién-sentida Para aclarer mas ef purty, pleiss en tus proplas reavctunes wuetr do heblas con Elena y después, cuando hablas con Juan. Cambias interiormente, zverdad? Puedes sentir la diferencia dentro de ti. Si eetée hablanda an privadn con Flana y antonea tian entra ines: peradamente al cuarto, puedes sentir cémo te vas cambiando. Tu significado corporal de Juan también esté aqui ahore, lo mismo que tu significado corporal de Elena Estos cambios dentro de si no son ocasionados por el pensar. Ta no piensas: «Oh, si, ésta es Elena: con ella tengo que portarme con tal y. tal forma.» Poco pensar tiene lugar. Preglintate a ti mis- mo: «Por que soy de este manera con Elena y de aquella smavera con Juan?». Las respuestas no estén en tu mente. Sélo tu cuerpo lo sabe. Date cuenta que un significado corporat no ¢¢ tina emocién. Con- tiene elementos emocionales, junto con datos de la realidad. Pero es mas grande que ninguna sola emocién, mas compleja y mucho menos facil de describir con palabras. Por ejemplo, tu sensacién-sentida de Elena probablemente it cluye un gran niimero de emociones que ti has sentido en distin- tas ocasiones cuando estabas con ella. A lo mejor, alguna de eses tales emociones domina tus retaciones en esta misma hora. La emo- cién dominante ahora mismo, supongamos, es ira. Té y ella reffs- teis amargamente anoche, y ahora la primera palabra que viene a la monte cuando picnoas cn clla oo -ira-, -onfodo-. Sin ombargo, (1) Ward Helstaed, mi colega en la Universidad de Chicago, pas6 toda su vida trabsjando sobre «inteligencla biol6gleas. Invent6 muchos. tests para me- ir nudos curputetes de ulseerniy uiatinias woes, eine, sllmoo, arregles oo pacfales, impresiones Interporsonales, rostros. Cuando leyo mi trabejo sobre «sen sactén-sentidas lo aplicé su término «computador biolégico». £1 equivalento de lontos de miles de operaciones cognoseltivas se hacen en un santiamén por el uerpe. 59 ‘c2a emocién no 00 of cignitioade corporal, la eonescién total vi- venciada por ti, de Elena» Con frecuencia, una emocién se siente aguda y claramente, y a maniida viene can tina etiqueta en la mano por lo que nuedes des- cribirla: «ira», senfado», «miedo, etemors, amore, etc. Una sen- sacién-sentide real, al ser més grande y més complicada que una ‘emocién, aparece casi siempre falta de claridad —por lo menos hasta que lo enfocas— y casi nunca viene con su etiqueta corres- pondiente. Para aclarar, supongamos que hay alguna dificultad en tus re- laciones con Juan, St Se te pidiera el vesuribir vse dificultad, po drias decir: «Cuando estoy con él, estoy tensa. Cuando estoy con Elena, me siento como si mi ser ‘natural’ estuviera vivo y libre, poro cuando octoy con Juan, estoy molesta, tonea « Esta tensién en alguna parte trata de «todo acerca de Juan». Las personas que conocen la técnica y el proceso del enfoque segura: manta tienen canciencia sélo de la tensién. més v més. Nunca con: sultan el significado tal como es sentido de «todo acerca de Juans © tal vez, algo no tan amplio, «todo acerca de esta extrafia sensa- ‘cin que me viene con Juan». La palabra «tensa» puede ser que sea la mejor descripcién de la sensacién puesta en una sola palabra Pero «tensa» es tan sélo la punta del icoberg. «Tensa» puede sor la emocién dominante en un momento dado, pero debajo do ella y detrés de olla late algo mucho més grande y vago. Puedes sentir ese algo enorme y vago con tu cuerpo pero no lo puedes tocar con tu mente: tu mente protesta, «ino quiero vol- vorme muda cada vox qua estoy con Juani Quiero ectar relajada, brillante, natural. zPor qué no puedo? {Por qué?». Pero no hay res: puesta en tu mente. SI tu mente suplera las respuestas o tuviera control de la situacién. probablemente nodrias superar la_dificul- tal mediante procesos racionales y un esfuerzo de la voluntad. Po- drias «pensar» tu forma de dor una solucién al problema. Pero esto es manifiestamente imposible. No importa lo gue proteste tu men- te, no importa cuanto te estuerces en pensar, la misma tension se have sentir dentro de ti siempre que estés con Juan. Esta tensién €s originada por tu cuerpo reaccionando a la presencia de Juan. La roaosién paca por alto, casi por completo, tu mente penoadora, Poro cuando dejes que se forme la sensaciGn-sentida, entonces puedes trabajar con més elementos de lo que puedes comprender. Si atien- des al slanificedo corporal a través de ciertos vasos. que vo te ensefiaré, se moverd. 60 Eso es, precisamente, de lo que trata este libro. Es necesario acercerse a ellos por un'camino completamente distinto: esé cami. no especial a través del cuerpo que yo llamo proceso y técnica de! enfoque. Acercéndonos a ellos asf, podemos permitir que ellos campren. No hay ninguna otra manera de lograr que cambien. Esta es le razén por la que mucho de Io que en nuestro pasado se conside- 78 counseling y nsienterania emocional haya sido tan indtil. Los con- sejeros u orientadores procuraron el hacernos analizar nuestras sen- saciones racionalmente, «confrontarlas» una y otra vez 0 superar les por. el esfuerzo de voluntad mental. Naturalmente no dio re- sultado. Miremos de nuevo la dificultad hipotética en tus relaciones con Juan, y miremos algunos de los modos més comunes de enfrentar- ius ‘con Lal problema. (Todas’ las formas méo © menoo comunce de acercamiento son, por desgracia inttiles) a) Quitar importancia al problema Tratas de convencerte de que el problema no existe 0 es de- masiado trivial para preocuparte de él. «No importa, te dices, «no 2 nada. Vo no doblera permite qua cosillas tan fontas ma mo lesten.» iCambia esto algo? No. La siguiente vez que te encuentres con Juan, el problema «trivial» es exactamente tan grande como siem- pre lo fue. b) Analizar sTiene que ser que Juan me recuerda a mi padre, concluyes solemnemente. «Siempre me senti intimidado por mi padre. El es: taba seguro de si. Lo mismo pasa con Juan. Cierto, clerto, eso tle- me que ser. El andlisis puede 0 no ser correcto. Pero no hace nada para cam- biar la sensacidn. Puedes analizar furiosamente todo el tiempo que fectie ran tian, nero ei la eencaridn esta ahi on ts entrafias can sie inexplicables molestias y tensiones, las relaciones no serén més féciles que lo fueron la vez paseda. ) Despreciar ta sensacion «Me apretaré: los dientes, la miraré de frente y me adelantaré hacia ella», te dices a ti mismo esperanzado. «La ignoraré. No per- mitiré que'me fastidies. 8 Pero esto no ayuda, verdad? Si algo te fastidia, seguira fasti- diéndote hasta que ocurra algin cambio fundamental. d) Sermonearte a ti mismo Vamos a vers, te dices seriamente, «ya es hora que te com- portes y dejes todas esas sandeces. Se supone que eres adulto, iverdad? Pues jobra como tal! No hay ningtin motivo en el mun- do para que Juan te naga sentirte incomodo...» @) Ahogarte en la sensaci6n Te sumerges en la molestia esperando que ta encontraras me- nos dolorasa, pero sabiendo allé dentro que no serd asi. «Sf, ése fue un mal momento cuando empez6 a hablar de mi vida sexual \e scnté allt como una momia. Yo soy ootipide iCaramba! jeso es espantoso! Me siento como un insecto aplasta- do...» Siempre que te hundes en esa sensacién sin cambiar, te ha en sentirte tan mal como la iltima vez. Estas formas de afrontar el problema no pueden resultar porque no tocan y no cambian el lugar donde realmente existe la moles- tia, Existe en el cuerpo. Es fisica. Si la quieres cambiar, tienes que usar un proceso de cambio que tambien sea fisico. Ese proceso es la técnica del enfoque. La Parte It de este libro esta dedicada a ensefiarte cémo enfo- car. No voy a cmpozor a oncoiiértolo aqui. Por ahora, sdlo qulero terminar de describir las caracteristicas de una sensacién-sentida. De todas, la caracteristica més estupenda es el hecho de que tna sensacién-sentida. cuando la enfocas bien, tiene el poder de cambiar. De hecho, puedes sentir cémo tiene lugar ese cambio de tu cuer- po. Es una bien definida sensacién fisica de algo que se muevo 0 Se cambia, Es invariablemente una sensacion agradable: una sen- sacién de algo que se desbloquea o se desarruga. La manera mejor que conozco para describirtela es comenzando ‘con una experiencia humana oonovida: la rara conoacién do eaber que se te ha olvidado algo pero no sabes lo que es. Sin duda, te ha sucedido més de una vez. Supongamos, estés a punto de hacer un vuelo vara visitar a la familia 0 a amigos. Subes al avién con un pequefio ¢ insistente pensamiento sermoneandote: te has olvidado de algo. El avin despega. Miras por la ventanilla, repasando varias ‘cosas en tu mente, buscando aquella pequefa parte de conocimien- To. 20UC es lo que se me UlVIdOr {Qué era? 62 Te molesta la sensacién-sentida de alauna situacién na resunl. ta,.algo dejado por hacer, algo olvidado en casa, Fijate que no tie: nes datos reales. Tienes un aura interna, un sabor interno. ;Tu cuer- po sabe pero td, nol Tal ve tratas de desecharlo con razonamientos, de aplastario Intelectualmente 0 alzarte sobre ello: el método de quitarle impor- tancia. Te dices a ti mismo: no, no voy a dejar que esto me mo- losta y ache 9 parlor mi viaje. Por supuesto, es0 no da resultado. La sensacién esta all Suspiras y de nuevo revisas todo en tu mente. Hallas una po- sibilidad «jLa fiesta de Elena! {Se me olvid6 decir a Elena que no puedo ir a su fiestal-. Esta idea no satisface a la sensacién. Es del todo verdad que se te olvidé decir a Elena que perderias su fiesta pero tu cuerpo sabe quo no co colo fo yus te ha woladu vaudy la lata toda ta ier fiana... Todavia no sabes qué es lo que se te olvid6, y todavia sien- tes esa molostia sin palabras. Tu cuerpo sabe que has olvidado alouna cosa més y sabe Io que es esa cosa Asi as cama xahos qua no es Ia fiesta de Elena. En algunos momentos, la sensacién-sentida de lo que es, se ha- ce tan vaga que casi desaparece, pero en otros momentos vuelve con tanta fuerza que sientes como que casi 10 sabes. Luego, de re- pente, desde esta sensacién-sentida, salta algo a la superficie. «jLas fotos! Me olvidé de empaquetar las fotos que iba a ensefiar a Charli Has dado con ello, y el acto de haber dado con ello te produ- ce una sensacién de repentino alivio fisico. En alguna parte de tu cuerpo, alao se libera. alaunas cosas apretades se sueltan. Lo slen- tes por todo tu ser: \UFF Se siente uno a gusto. Puede ser que tengas pena por las fo- tos pero el paso que has dado te hace sentirte a gusto. Esta es una de las caractertsticas claves de un cambio en una sensacton- sentida: siempre aporta esa anchura de coraz6n y algunas veces, una muy bella sensacién de liberacién corporal. Es como el exha- lar deepude de haber contonida ta racpiractén Puadas contir la tensién fluyendo de tu cuerpo. No hay palabras en el lenguaje para describir esa sensacién- sentida y sus cambios fisicos. Por lo tanto, tengo que dar un nom. bre @ esa sonsacién de desbloquearse por dentro. Yo le llamo cam- bio interior corporal (1). (C2 FL rarminn inglés na ahedly ahifte Tanta Ia nalahes acamblon como ta twaducir la realidad a la que se refiere Gend No todo el mundo slente el cambio, el movimiento realizéndose especificamente jen el estémago! Puede parecer que sucede por todo ol cuerpo, 0 como un aflojarse en el pecho, o puede ser el relajarse de una garganta tensa. Yo le llamo «cambio corporal» prin- cipamente para sugenr que mo suceds mda en la monic. Do ok ‘guna manera, siempre es una sensacién fisica. Con frecuencia, lo puedes ver y oir cuando le sucede a otra persona. Puede haber un fargo ¥ conore suspira de alivia, da un renentinn aflnjarse de alauna apretada mueca facial, una répida, confortable relajacion en la pos- tura, Eso as lo que pasa al experimentar un cambio corporal en una sensacién-sentida. EI ejemplo que he usado —el olvidarse de algo fen un viajo— os trivial, desde luego. Pero indudablemente hay pro- blemas en tu vida que no consideras triviales. Sitios de bloqueo dentro det que estropean partes de tu vida; maneras en tus que te siontes atrapado @ impotente. En todos estos casos, exactamen- te igual que con eses fotos olvidadas, tu cuerpo sabe mucho que 40 no caboe, mucho quo t6 ne puedes posiblemente caleular de an- temano. Nadie puede calcula intelectualmente todos los detalles de un problema personal. Ninotin teraveuta lo puede. Td no fo ouedes: ‘il para nadie, ni_para tf mismo. Los detalles estén almacenados fen tu cuorpo. La forma Gnica de encontrarlos es mediante la técnt- ca del enfoque. Cuando descubres algin hecho hasta shora desconocido de es- ta manera, como hemos visto, tiene lugar un cambio corporal fisi camente sentido. ,Por qué ocurre? {De dénde viene esa extratia sosouién de liber auion? Viene de dos fuentes: Primera, el conocimiento antes escondido ahora esté a dis- posicién de tu mente consciente. Tal vez puedas usarlo en algtin plan racional de accién para resolver el problema. Esto puede ciertamente conducir a una sensacién de alivio: «Si, Iclarot Ahi eo donde eatd lo peculiar... (e0 os la dircosién que necesito segui movimiento interior. corporalments exoerienciado. Se_cerclbe como ambas, co: Scar qo 20 ha. produnido un movimento Inkomo corpora. lo que qaore.docr ue le sensocisneentida he cambiado, 0 que he camblado ia persona, porque se fa movido conforme 0 idan doscubriendo Tos contenidos implicitos. do In sensa sign sentida, En rosumen, sovia_es0 movimiento. del cambio intemamonte. ner cibido 0 experienciado. (N. del E.). eceraneneerran ta et 1a cognnda fuente da aca ceneacién ante eo libera de la presién» es més importante. Aun cuando no puedas hacer uso inmediato o directo del conocimiento antes escondido, el acto de sefialarlo con procisién hace que todo tu cuerpo 8¢ sienta mejor. En efecto, has empezado a localizar un dolor que antes se sentia por todo cl cuerpo. Considera lo de ¢o09 fotos otra ver. EI hecho antes oscure — -6e me olvidaron las fotos»— no era la clase de hecho que podia po: nerse en uso inmediato en un plan racional de accion. El hecho te vino en un avién. No habia nada auc ti pudieras hacer con ello. A peser de esto, el acto de extraerlo de tu sensacién-sentida hizo que te sintieras mejor. {Por qué? Porque ya no tenias la sensacién de algo dejado de hacer. Tu significado corporal de tu viaje ahora estaba cambiado. Y lo mismo pasa con problemas personales més importantes. Este libro ofrece 10 que yo considero un mensaje enormemente ougestivo: TG tlenoe of poder de cambiarte a ti miema y, do he. cho, sentir el cambio aconteciendo dentro de ti. 65 SEGUNDA PARTE EL PROCESO DEL ENFOQUE CORPORAL CAPITULO IV EL MANUAL DE LA TECNICA DEL ENFOQUE CORPORAL Ha llegado para ti ol momento de aprender la técnica y el pro- asa dal anfoat El acto interno de la técnica del enfoque puede dividirse en seis Principates sub-actos 0 movimientos. A medida que adquieras més préctica, no necesitarés pensar en éstos como seis partes separa das del proceso. El pensar en ello como movimientos separados hace que el proceso parezca més mecénico de lo que es, 0 seré para ti més adelante. Yo he subdividido el proceso asi porque, a través de los afios de experiencia, he aprendido que éste es un modo efectivo de ensefiar la técnica del enfoque a personas que nunca lo probaron anteriormente. Considera este capitulo como sélo el manual bésico. A medida que sigue adelante el libro, afiadiremos mas 2 estas instrucciones basicas, las aclararemos, las confrontaremos desde otros éngulos. Al final —tal vez my see le primera vez que [a practices, sino tt- nalmente— habrés adquirido la experiencia nueva de algo cambian- do por dentro. Comenzaré Yéndote las inotuvcunes subre ta (unica uel en foque en forma abreviada, estilo manual. En el segundo capitulo, asaremos por los seis movimientos en forma detallada, pardndo- fang para evplicarles y elaborarloe. 6 MANUAL DE LA TECNICA DEL PROCESO DEL ENFOQUE 1. Despejar un espacio Lo que te mando hacer sera en silencio, sélo para ti. Toma un momento, solo para relajarte... len. Anora, dentro de t quisiera que prestaras atencién hacia adentro, en tu cuerpo, tal vez en tu estémago 0 en tu pecho. ‘Ahora obsurva lv que te pasa wuando te proyuntes @ th mismo: «jCémo va mi vida? {Cuél es la principal cosa para mi ahora mis- mo? Siente cémo te sientes. Deja que las respuestas vengan len- tamente de asta sensaridn. Cuando venga algo. NO TE ADENTRES EN ELLO. Mantente a distancia; di «Si, eso est4 ahi. Puedo sentir- lo ahi». A Deja que haya un pequefio espacio entro ti y eso. Luego, pro- ‘gunta qué més cosas sientes. Espera de nuevo, y ten la sensacién. Generalmente hay varias cosas. 2, Formar ta sensacion-sentiaa De entre lo que vino, escoge un problema personal para en- focar. NO TE ADENTRES EN ELLO. Retirate de ello. Desde luego, esa cosa tinica en que estés pensando tiene mu- chas partes; demasiadas para pensar en cada una a solas. Pero, puedes sentir todss esas cosas juntas. Presta atencién alli donde normaimente sientes cosas. y alli puedes conseguir una sensacién de cémo se siente «todo /o del problemas. Permitete sentir todo 3. Lograr un asidera (1) 2Cuél es la cualidad de esta borrosa sensacién-sentida? Deja que una palabra, una frase, o una imagen provenga de la misma sensacién-sentida. Podria ser una palabra-cualidad como «apreta- dus, «peyajusun, «asustaulzu», «bluyueaduy, epesadue, soaltantes v (1) El término inglés es shandlex: egarradero, asidero, manillera. Seris une Identificacién provisional de la cualidad dal significado corporal de la sensacion Semuce, Ure especie Ue euyuela pruvishinl, peru quc vs furlunal puryee i permite Identificar la sensacién global y profundizar en ella, asi como hacerla volver cuando ésta desoparece. Esta palabra-cuaidad, frase © imagen seré final mente evalueda por of propio cuerpo, quion doterminers asidero 0 ati. Mucla se ejuola perfectamente ole experiencia o mor (N- dol C2. 70 una frase, o una imagen. Permanece con la cualidad de la sensa- ciénsentida hasta que aigo se le ajuste perfectamente, 4, Resonar (2) Se trata de ir y venir una y otra vez de la sensacidn-sentida a la palabra, y viceversa, a la frase o a la imagen. Examina cémo resuenan una con otra. Observa si hay una pequefia sefial corporal que te deja saber que aigo se ajusta. Para hacerlo, tienes que te- ner alli de nuevo la sensacién-sentida, lo mismo que la palabra. Deja que la sensacién-sentida cambie, si lo hace, y también la iwioma pelabia 0 imayen, hasta quo 9 sisnten peifectamente al captar la cualidad de la sensacién-sentida. 5, Proguntar Ahora pregunta: {Qué es lo que, en la totalidad de este proble- ma, hace esta cualidad (que acabas de nombrar o de representar)? Cereiérato de quo la cualided co sentide de nucve, con freacor, vivamente {no simplemente recordada de antes). Cuando se pre- senta de nuevo, fijale, técala, estate con ella, preguntando: «,Qué es lo aue hace el entero problema tan......?» © pregunta: «:0ué hay en esta sensacién?». Si recibes una respuesta répida sin un sentido total del movi- miento de la sensacién-sentida, simplemente deja pasar esa clase de respuesta. Vuelve tu atencion a tu cuerpo y encuentra de nue- vo con frescor la sensacién-sentida. Después pregtintale otra vez. Quédate con la sensacién-sentida, hasta que algo aparece jun- to eon ol cambio, un ligoro -dar- 0 rolajer. 6. Recibir Aecibe ce una manera amistosa, todo 10 que aparezca junto, con ese cambio. Permanece con ello un rato, aun cuando sélo sea un figero relajarse. Sea lo que venga, esto es sélo un cambio. Ha- brs mde. Probablomonte coguirée docpuse do un rato, pora’ quéda te aqui unos pocos momentos. SI DURANTE ESTAS INSTRUCCIONES EN ALGUN SITIO PA- SADO UN RATO IIAG CCTADO CXPENIMENTANDO LA SEN SACION Y TOCANDO UNA BORROSA COMPLETA SENSA- CION CORPORAL ACERCA DE ESTE PROBLEMA, ENTONCES 2) Uiros terminos vidas serian cotejar, comprabar, slustarse. (N. dal E). n HAS ESTADO REALMENTE ENFOCANDO haciendo el pro- ceso del entoque). No importa si se dio 0 no cambio-dentro-del-cuerpo. Ello viene Ue pur sf. Nusutrus my cunt ulamus eeu. LA HISTORIA DE UN «PRODLEMA TNIVIAL~ Veamos los movimientos de la técnica del enfoque en accién. La mujer que informs sobre cote experiencia tiene ecree do treinta afios. La lamaré Peggy. Ella y su esposo —llémalo John— viven en un suburbio. El trabaja en un banco donde tiene verdade- ra prohabilidad da llagar a ser tin mlamhra de Ia junta directiva, Peggy trabaja como profesora a tiempo parcial en el Instituto de segunda ensefianza. El puesto es de media dedicacién y lo hace asi porque tiene que cuidar de su hijo de cinco aios. Una terde volvié John a casa radiante. El presidente del banco |3t1a}Q, con bastante claridad que habia planes de expansion “A.que 2 él, John, se te consideraba un elemento cle s. En su entusiasmo mientras le contaba esto a tiréeun plato de la mesa de la cocina y lo rompié. Era porcegina de China, Peggy se enfurecié, corrié llorando se negé a hacer la cena, "2 se sorprendié y disgusté de su estallido. Escenas tormentosas no eran habituales para ella. Sontada a soles on ou cuaito, Waté de componeioe por dentro, empleando todos los medios de acceso que todos usamos y que rara vez dan resultado. Primero, traté de desechar el problema co- ma atrivials, cama esperanda que pndria hararln dejar de existe. quiténdole importancia. «Con que rompié un plato caro, se dijo enfadada. «Soy tan tonta que puedo disgustarme por eso? El mal- dito plato no tiene toda esa importancia en mi vida. Después de todo, se puede reemplazar...» Eso no dio resultado. La sensacién de disgusto se negé a darse por terminada. Luego, Peggy traté de especular sobre ello. «Bueno, yo he estado bajo mucha presién estos dias pasados+, se dijo. «De: Jé que el trabajo del Instituto se amontonara, tuve que desvelarme calificando todos esos trabajos. No he dormido bastante... Claro, eso tiene que set. Nu ee exttafiv yuy esle Irritablet. n Na huthn: rasultadas 10 qua Baggy se dijn a ef miema, pudio. ra ser verdad pero nada cambi6 por dentro. La sensacién de ira, de irritacién, se qued6 alli donde estaba. Al fin decidié probar la técnica del enfoaue corporal. La habie practicado durante varios afios y lo hacia muy bien; era, en cierto sentido, experta en ella, lo mismo que uno puede ser diestro en una lengua conocida. No pasé por los seis movimientos uno por uno, como tiene que hacerlo un principlante, sino que tue tluida- mente a través de ellos en un solo movimiento continuo. Sin em- bargo, al crear de nuevo su experiencia aqui, yo sefialaré muy es- pecificamente los distintos movimientos a fin de que pucdas ver ‘c6mo fue de un sitio 2 otro. Propararin Empez6 poniéndose tan cémoda como le era posible, quitando to- das las irritaciones fisicas innecesarias que pudieran ocultar lo que au cuerpe queria decirle. Do lavé la cara porque la sentia caliente y picante después de llorar. Se quité los zapatos, apoy6 una almo- hhada contra a cabecera de la cama y se recost6 sobre ella Primer Movimiento: Haciendo un sitio Amontoné todos sus problemas a un lado como si estuviera haciendo sitio para sf en un cuarty Ue almavenar revuelto, «ZPor qué no me siento formidable shora mismo? Bueno, ahi esté ese montén de trabajos de la clase con puntas dobladas, que atin ten- 0 quo torminar. V ahi oats ace problema do Joff, deepachade do la clase de pérvulos y mandado a casa. Y, claro, ahi esta esa pési- ma cosa nueva del plato roto...» Fmpiijé todos acne prahlemas sim poco Injos de si Sabla que no podia deshacerse de ellos. Pero también sabia, como resultado de haber practicado e! enfoque otras veces, que se podia permitir un rato de paz, alejada de ellos. Segundo Movimiento: La sensacién-sentida Ahnra deja que su ateneién ce vaya al prahlema que, en aquel momento, parecia el peor: la escena tempestuosa alrededor del plato roto. Deliberadamente evité el tratar de decidir cosa alguna sobre ello, procurando analizarlo, sopesarlo. Simplemente tanted en torno a la: sensacidn-sentida det mismo. ma Pregunté: «{Cémo se siente todo 6507+. Y luego dejé que la sensaidn Iv vinicra @ 24 mode: grendo, vage, primero cin forma, sin palabras para describirla, sin etiquetas 0 marcas para identifi carla de ninguna manera No ectaba impaciente con asta falta de forma. No nidié aue se identificara a si misma. Ni traté de forzar una Identificacién en ella: Oh si, claro, esta extraia sensacién tiene que ser...». Sencilla- mente a dejé existir a su manera durante un tiempo apreciable, tal vez medio minuto. Tercer Movimiento: Encontrando. un asidero ‘Ahora, muy suavemente, pregunté cual era la calidad de la sen- sacién-sentida. Traté de dejar a la sensacién-sentida que se diera tin nombre a ef miema a quia tina imagen viniera v se ajustara De nuevo evit6 el analisis, evité ol sermoncarse, evitd las su- posiciones y conclusiones. Querfa que la respuesta saliese a flote dela misma sensacién. no de un abigarrado y confuso material en su mente, En el tercer movimiento, una palabra, frase 0 imagen —si se ajus- ta con exactitud— sirve de asidero a la sensacién-sentida. Uno pue- dea menudo sentir entonces el primer cambio, la primera peque- fia indicacién de movimiento interno (algunas vecos simplemente tun principio de movimiento) que dice «esto es correcto, esto est bie ‘Como: sucede con frecuencia, casi simulténeamente. ella reco- rrié los movimientos del proceso de enfocar casi simulténeamen- to. Conciguié una palabra (tercer mavimiental. la examind {cuarto movimiento) y pregunté a Ja sensacidn-sentida qué era (quinto mo- vimiento). Fmpleando més palabras que las que ella empled, yo le diria asi. Ella habfa preguntado: «Qué es lo peor de ésto? El sentimien- to volvié: «Ira hacia Juan. Otra pregunta: «,A causa del plato ro- to?». La respuesta sin palabras: «No. El plato apenas tiene nada que ver con ello. La tra €s & causa Ue vu alte Uy jdbily, la forme de irradiar confianza acerca de su porverir>. Aqui es como cambié el problema, El cambio interno era indu- dable. Ella recibié esto aceptandolo plenamente y experimento la sen- sacién una y otra vez, sintiendo el cambio que se verificaba en su cuerpo. Cuende eu overpe torminé de eamhiar, alla cnntinud. ” Un cambia cama éste pueda venir an catalquiae momenta an al proceso del enfoque. Uno lo recibe y continiia otra serie del en- foque. Otra vez tuvo ia sensacién-sentida; ahora con el cambio el pro- blema entero estaba en su cuerpo en este momento. «Su jubila- cién...» ,Cual es ahora la sensacién-total de eso?-. Esper6. No trat6 de forzar las palabras en la sensacién-sentida. G0 cents paciontomonto y dojé a la concasién aontide hablar por ‘si misma. (Otra vez un segundo movimiento). Traté de sentir su cualidad, !a peluda molestia de «todo el asun- to» y de poner un «asidero= a esa cualidad. (Otra vez tercer movi- miento). Una palabra vino: =Celosa». Cuarto Movimiento: Resonando Ella tomé la palabra «celosa» y ta cotej6. «Celosa, es esa pa labra la correcta? Es eso lo que es esta sonsacién?+. La sense- cién-sentida y la palabra aparentemente se parectan mucho pero no perfectamente. Parecia que la sensacidn-sentida deci #8 exactamente celos. Hay celos en alguna parte, pero.. Probo sun tanto celosa* y le vino un pequeno movimiento y et aliento que le dio a entender que se aproximaba bastante, como un agarradero en la sensacién-sentida. Probé de nuevo y... si. Quinto Movimiento: Preguntando Ahora pregunt6 a la misma sonsacién-sentida: «{Qué es este on ante velosa® (Qué ve ty que en el problema produce esto de un tanto celosa»? Dejé que la pregunta llegara a la borrosa sensacién-sentida y ne maviera ligeramants «3018 9¢ 0°07 progunts casi cin palabroc. Y luego, de manera brusca, vino ef cambio: «A modo de celo- sa... oh... e$ més como... una sensacién dle serdejadasiras». siAh!s. Ese «jah!» vino con una sensacién arande. satisfactoria de movimiento interior. El cuerpo de Peggy le estaba diciendo que estaba triste por el hecho de que su propia carrera estaba detenida ‘Sexto Movimento: Hecibiendo Tratando de sentirse gratificada por el alivio de este cambio, te- ‘nla que protegerlo de voces que pronto la atacaron a ella. «No de- bieras sentirte asi-. «Tienes suerte en tener ese puesto de ense- 6 fianza». Y también «{c6mo vas @ poner tu carrera en movimiento?s. #78 subes que nu puedes Naver Hada @ este respeutu. Peggy eché a un lado todas esas voces. «Todo eso tiene que esperar, dijo. Y volvié a sentir un nuevo abrirse. «Quedéndome ateae jnueda afin contir nan? Oh al ahora esté otra vez es cierto... asi es como Io siento.» CONTINUANDO OTRA SERIE Pero esta cualidad la sensacién —de ser-dejada-atras— era tan 26lo lo punte del iccborg. Peggy quoria vor oi podia Hogar @ obtenor mas cambio y movimiento. Y asi volvié atrés de nuevo, a través del ciclo de movimientos del proceso del enfoaue. «:Qué es esta ‘sensacién de ser-dejada- atras? ZQué hay para mi realmente en ella? {Qué es lo peor de la misma?». Esta sesién del proceso de enfocar durd, tal vez, unos 20 mi- nutos. Guando habla pasado, Peggy se sitio enurmemente aliviada. La forma de su problema habia cambiado y por ello ella habla cam- biado. Ella y John hablaron luego con calma de sus vidas y futuro. El plato rote quedé olvidado. Aquolla cesidn nies del prnracn del enfoque no habia hecho desaparecer el problema de la carrera: contra-la-maternidad-de-Peggy, pero habian comenzado una serie de cambios beneficiosos dentro de ella. Posteriores sesiones le reve~ laron mas datos acerca de si misma y le ayudaron 2 moverse de donde estaba bloqueada. 6 CAPITULO V LOS SEIS MOVIMIENTOS DE LA TECNICA DEL ENFOQUE Y LO QUE SIGNIFICAN Ahora vamos a recorrer los movimientos més despacio. Des- pues que hayes: leido este capitulo, trata de entocar tu problema personal a ver si te da resultado. Ten el libro abierto en el Manual de la Técnica del Enfoque (Capitulo IV) y pasa sin prisa por los sels movimiontoo, prostando sopeciel atonotén a la manora do contir do tu cuerpo en cada etapa del proceso. Si no sientes cambio, movi- mientos, sigue adelante a los otros capitulos del libro y fuego vuel- ve atrés y prueba de nuevo més tarde. Al fin, vas a encontrarte realizando el acto interno de la técnica del enfoque 0, cuanto mas a menudo lo hagas, tanto més fécil y més natural te parecerd (més adelante, usa la Forma Breve al final del libro). PREPARACION Busca tiempo y lugar para sentarte silenciosamente un rato. Si quieres que se siente contigo algin amigo, bien, e incluso puede ser una ayuda. Pero el amigo tiene que contenterse simplemente con escuchar en silencio, sin esperar de ti que hables si no sien- tes ganas, y no tiene que ofrecer andlisis 0 evaluaciones si deci des contar lo que hay dentro de ti. Un silencio total esté bien, y Tambien esta blen gue el amily use palabras vam s9f, ya vige. entiendo, Pero en esta primera etapa el amigo no debe decir nada mas. 7”

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