SEŇORAS Y SEŇORES

Ing. Walter Solís Valarezo

Presidente del Directorio del BEV

Ing. Omar Unda Izurieta

Vocal representante del IESS

Sra. Haidee Alexandra Granda Arias

Delegada del Ministerio de Finanzas

Sr. Gonzalo Eduardo Monsalve Bustamante

Representante de los Trabajadores del BEV

Sr. Alberto De Guzmán Garcés

Gerente General del BEV

MIEMBROS DEL DIRECTORIO DEL BANCO ECUATORIANO DE LA VIVIENDA,

PROPIETARIOS DE LA ISLA SANTAY

Saludos de parte del Colectivo Amigos de Santay (AdeS), un grupo de personas en

el exterior y en Ecuador cercanas a la población de la Isla Santay. AdeS viene
trabajando activamente en un acompañamiento a la gente de la isla, en su proceso
de fortalecimiento organizacional. Venimos trabajando con Santay y su gente desde
mucho antes que el lugar sea declarado oficialmente Humedal, y antes de que la
fundación privada Malecón 2000 se haga entregar la isla.

Al hablar de proceso nos referimos al trabajo compartido luego de intercambio y

maduración de ideas y proyectos. Ellos ponen su conocimiento del medio en que
viven en práctica para dar mejoras a su realidad y nosotros apoyamos con la
adquisición de los materiales.

Fruto de este acompañamiento son: la donación de costos en repetidas ocasiones

para el mantenimiento del techo y estructura de la Escuela Jaime Roldó, la entrega
de materiales escolares, la puesta en marcha de una piscina experimental para la
cría de peces, la construcción de 7 casas para igual número de nuevas parejas las
cuales por una prohibición, no son sujetos de compra de casas de Hogar de Cristo,
entre otros.

Adjuntamos a ustedes un histórico de documentos oficiales del BEV donde consta

que: El Banco se ha comprometido con los pobladores, llamados en sus títulos bajo
el término de campesinos, pescadores, o colonos, a facilitarles el libre tránsito y uso
del suelo además de estar autorizados para ejercer el control total en la isla. La
finalidad de vuestra institución, al asentar por escrito el adjuntado Acuerdo de
Voluntades, queda explicada en tanto que un acto de conveniencia institucional. Así
El Banco menciona que, analizando el costo que significaría contratar guardianía
para dicho sector y a fin de economizarse costos de guardianía, la población firma el
acuerdo de no recibir costo alguno de parte del BEV y de aceptar ser nombrados por
ésta institución Guardianes Ad Honoren de la Isla.
El acompañamiento que AdeS ha realizado en estos últimos años nos ha permitido
comprender que la población de Santay, con sus 56 familias, ha vivido en años
anteriores y con un incremento actual, bajo el temor continuo de una orden de
desalojo, tal como ocurre en el caso de las invasiones.

Con la documentación adjunta queremos recordarles, señores miembros del BEV,

unas línea de su propia trayectoria institucional en el país y aclarar concretamente,
una imagen de la población de la isla Santay que ustedes deberían ayudar a aclarar,
dado que la historia de vuestra institución dejó sentada por escrito parte de la
realidad pasada en las últimas décadas en la isla. La situación es que la población
de la Isla Santay no es una población invasora.

Nos preguntamos y les preguntamos, creen Uds que en la historia de la institución

de la cual son hoy parte del Directorio, se habría firmado contratos, circulares y
acuerdos de voluntades, con invasores?.

El BEV mantuvo hasta los años 90 una suerte de censo de la población en Santay.
Revisen estos documentos y miren cuántos invasores ha tenido la isla.

Esperamos que la revisión de los documentos anexos cambie esa postura de

ilegalidad que actualmente los funcionarios pocos conocedores de la documentación
del BEV indilgan a los habitantes de Santay.

La población de la isla Santay ha sido olvidada por ustedes en dos importantes

ocasiones:
- la primera, el 12 de febrero de 1980, fecha en la que el presidente Jaime
Roldos declaró la re-expropiación de la Isla Santay del Ministerio de Obras
Publicas al Banco Ecuatoriano de la Vivienda. Entonces la población –cuya
legitimidad en tanto que nativos fue confirmada por los peones y trabajadores
de las haciendas expropiadas por el Estado- decidió quedarse con sus
familias en la isla, y agruparse en la ribera oeste, justo frente al Mercado
Caraguay de Guayaquil, asegurándose así la cercanía a un centro de
aprovisionamiento de alimentos. Prohibida la ganadería y la agricultura, la
población tuvo que adaptarse a las condiciones existentes para su
supervivencia, la única opción fue dedicarse a la pesca, pero la mas dura
prueba y que dura hasta ahora ha sido el no tener agua potable.
- el segundo abandono fue cuando en 2001 ustedes entregaron en Fideicomiso
la isla a la Fundación de derecho privado Malecón 2000, para un proyecto
que lamentablemente por falta de interés en ese ecosistema y en sus
habitantes no han dado seguimiento, contentándose con recibir informes de
la entidad en mención sin comprobar ni auditar los mismos y sin considerar
que al tenor de una serie de documentos existe una filiación moral entre el
BEV y la población de la isla.

Dados estos antecedentes y de lo comunicado en la prensa de estos últimos días,

se prepara el tercer y definitivo abandono y es la venta en paquete de la isla Santay
al Ministerio del Ambiente, en una transacción que podrá dar cierta liquidez al Banco
por un lado y propiciar la declaratoria de Área Protegida por el otro. Esa transacción
sin embargo no arreglará esa deuda moral del BEV frente a una población que
durante 30 años ha sido, como ustedes mismo lo apuntan en su acuerdo de
voluntades, Guardianes Ad Honoris de la Isla Santay.

Honrar esa deuda consistiría al menos en el reconocimiento legal del terreno donde
tienen sus casas, una zona recreativa comunitaria, una zona de cultivo para
garantizar su seguridad alimentaria, su cementerio, para que dejen de abandonar
sus muertos en Durán o Guayaquil.

La zona poblada esta definida ya por la presencia de las viviendas, la escuela nueva
elaborada por financiamiento gubernamental en el 2009, por el Centro Comunitario y
por su área de acceso.

Ustedes como Directorio del BEV tienen la palabra pero sobre todo la oportunidad
histórica y moral de entregar a estas familias de Ecuatorianos lo que tienen como
derecho de ocupación permanente desde 1979, e histórica desde 1946, fecha de
referencia del más anciano de los trabajadores de la isla y tronco del cual
descendieron los actuales habitantes.

Muchas gracias.

Jose Delgado M.
Colectivo Amigos de Santay

Ginebra – Guayaquil 14 enero 2010