Está en la página 1de 28
Caclaceas Y SUCULENTAS MEXICANAS ORGAN DE LA SOCIEOAD MEXICANA DE CACTOLOGIA, A. 6. TOMO XXI No.2 ABRIL-JUNIO DE 1976 CACTACEAS Y SUCULENTAS MEXICANAS—Organo de la Sociedad Mexies A. G. Director, doctor Jorge Meyrin, 2a. Juérez 42. Col. San Alvaro, Mexico Subdirector: doctor Femancdo Castanion N. Comité de Revision de ‘Trabajos: Maria Agustina Batalla, Graciela C. de Raedowski, Rafael Martin del Campo y Hernande Sincher Mejorada Esta publicacién tiene como finalidad promover el estudio ciemtifico y despertar el interés de esta rama de la botanica. Es publicada por la Sociedad Mexicana de Cactologia con las cuotas dle los socios, sin fines Iuerativos. [La cuota para pettenecer a la Sociedad es de $100.00 por afi. Para los socios suscriptores ex de $61.00 tn la Repiibliea Mexicana y de $6.00 Dils, en el extranjero. Los socios foraneos o del extranjero deberin mandar giro bancario 0 gito postal directamente al Sr. Dudley B. Gold, ‘Apartado. Postal 979, Cuernavaca, Mor.; los de la ciudad de México al Sr. Antonio. Barberena, Pemambuco 732, México 14, D. F. La revista sera enviada por correo ordinario; las personas que deseen recibisla por via aérea deberin cubrir el porte extra. Ta direccién del Sectetario, Dr. Carlos Beutelspacher es: Calle 23 nim. 44, Col, San Pedro de'los Pinos, México 18, D. F. a de Cactologia, Este niimero fue publicado con la ayuda del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologia. TOMO XXI Abril-Junio de 1976 Nam, 2 ee Contenido Observaciones sobre Mammillaria rhodantha Aspectos Quimicos de las Cacticeas .. iguex Ir. 3 Mi Introduccién a la Flora Mexicana. por G. Kalmbacher 8 Echinofossulocactus vaupetianus por J. Meyran 5 10 afios de Amigos Estirios de los Cactos por K. Zapf 35 ClO) ay tee ites fey) Raut jy pro a ba Domingu My personal introduction to Mexican Flora ......0+.. Ge Kalmbacher Eckinofossulocactus vaupelianus +--+. E J. Meyrin . Stirian Cactus Friends, X anniversary kK. Zopl Observations on Mammillaria rhodantha Chemical aspects of Cacti... ‘This number is published with the aid of the National Council of Science and Technology. Foreign Membership $6.00 U. S. Cy per year which includes four number of the journal. ‘Send it in international money order to M Mor., although a persenal check in U. S. Cy is acceptable. The j unless specifically require if extra cost is cover. Life member Actividades de la Sociedad durante el Primer Trimestre de 1976 En el mes de enero Ia sesién se efectud en a casa de los Sres. Sanchez Mejorada, en Ia cual fueron leidos el trabajo de George Kalmbacher sobre un Viaje a México y el de Lew Bremer sobre varias deseripeiones de Coryphantha, La reunién de febrero tuvo lugar en Ia casa de la familia Meyrin, en donde fue relatado tun viaje a la Sierra Madie Occidental por Hernando Sénche Mejorada y ademas el Dr. Megran preses de una nueva especie de Echeveria E fue celebrada en cl domicilio de Ta familia Bonilla, durante la cual fue leida la parte final de las Observaciones sobre Mammillaria rhodantha del Dr. David Hunt. Fig. 16. Mammillaria ferarubra, W 8500. Observaciones Sobre Mammillaria Rhodantha y Especies Aliadas IU Resumen En esta y iltima parte se analizan las caracteristi reas de distribucién de las especies aliadas a Mammillaria rhodantha como son: M. ferarubra, M. calacantha, mollendorifiana y M. pring ciones fbridas. Se " muestran relativas a la distribueién de to nentes del ‘onels Las de> primeras partes de este articu- lo versaban principalmente sobre Mammi- Varia rhedantha sensu stricto: sw tipifi- cacién y final relacionadas asi como de ciertas poblaciones de aparentes hibridos con M. polythele, trechamente M. fera-rubra Schmoll En la monografia de Craig, Mammilla- ria Handbook (1945), pagina 309 y fi- gura 281, se describe e ilustra una planta Cacr, Suc, Mex, XXI 1976 Por David R. HUNT* del grupo de Mammillaria rhodantha pro- cedente de “San Lazara” (;San Lazaro Querétaro, bajo el nombre de M. fera- rubra Schmol Lizaro, pero plantas cereanas a ay. una poblacién situada a 65 sur de San Tuan del Rio en la ear Palmillas-Toluea, me parecen identifiea~ les como la especie de Schmoll (Hunt 8506. fig. 16). Acambay se localiza en el Fstado de México, pero poca dude eabe de que 1a misma planta erece del otro la- do del limite con Querétaro, quizé en las montafias cercanas a Amealeo. Es posible qve el informe no documentado de Craig sobre la existencia de ¥. rhodantha cerca de San Juan del Rio pudiese referirse a esta forma cercanamente relacionada, No he podido localizar San Acam: Plan tamb Otero, en * Royal Botanic Gardens, Kew, Inglaterra, al 5 semejantes a las de Acambay han sido encontrads nF inmediaciones de Toluca, y mas al oeste, en Michoacan, cerea de Mo- relia, donde junto con H. Sanchez-Mejo- rada, examiné una poblacién el 30. de no- viembre de 1973 (Hunt 8644). Adm mais al oeste en Jalisco, Boutin y Brandt co- leetaron, cerea de Ciudad Guzmin y Tar palpa, ejemplares que pude observar bajo ‘0 en los Jardines Botanicos de Hunt- ton, en San Marino, California, Comparades con la Mammillaria rho~ dantha del lado oriental del Valle de Mé- xico, estas pantas occidentales presentan flores mas pequefias y una espinacién mas hien distinta, eon menor néimero de espi- nas radiales (Ver tabla No, 2). En tér- nines muy generales, Ia forma podria ser tatada como una subespecie 9 variedad ueografica de M. rhodantha, Otras aliadas ecrcanas a Mammillaria rhodantha de Querétar y zonas adyacen- tes de Hidalgo son M. calacantha Tiegel y M, mellenderffiana Shurly. Se descono- en las localidades tipo exactas de ambas especies, pero segin Craig (1945) Schmoll coleets M. calacantha cerca de Angostura de Charcos, M. mollenforffiana es abun- dante en la region de El Cardonal. al norte de Ixmiquilpan. Hidalgo, dende ha 9 encontrada por Glass y Foster (Cact. Journ. Am, 13: 74. 1971) ast co- mo por F. Otero, quien me condujo a nna de estas poblaciones el 2 de noviembre de 1973 (Hunt 8533). Los caracteres de VW. mollendorffiana y de M. feracrubra se comparan en la Tabla No. II. Suc VW. prinelei (Coulter) K, Brandegee Ahora pasenos a considerar a Mammi= Maria pringlei ya otros miembros con espinas amarillas del grupo de M. rho- dantha, M. pringlei se encuentra en for muy abundante en ta Barranca de Trltenange, en el beede oceidental del > de Mésiee, en ta cuenea del Rio a sea la locali- no la descripeién ori- ala a Sen Luis Potosi, ya que cl ejemplar Prirgle 3079, colectado en Teltenango en 1890, parece ser el tinico material en cl cual Coulter pudo haber hasado su especie, La poblacién de Tulte- nango es extremadamente uniforme (fig, 22), Mas al este, del otro lado del limite de vertientes y en la euenca del Rio Tula, crece, aunque en forma menos abundante, una planta muy semejante, La espinacién es similar, y si acaso, con las espinas centrales tendiendo a ser mas robustas. Se sabe que existen formas de espinas amarillas mucho mas hacia el noreste, en la Barranca de Metatithin (El Zoquital, Pefia del Aire) y cerca de Huayacocotla, Veracruz, Ambas se caracterizan por tener espinas centrales mis delgadas y_ menos nemeresas que las de las formas occiden- tales, asi como quiad por su habito un poco més columnar, Plantas por mi exa- minadas en El Zoquital el 31 de octubre de 1973 se comparan con aquellas de Tul- tenango y Jilotepec, asi como también con Mammillaria aureiceps en la Tabla No. Tl. No pude identificar la loc idad citada por Ehrenberg para Mammillaria rhodan- tha var. chrysacantha (Cerro del Puerto de la Palma, cerca de Zimapin), pero este registro sugiere cue formas de espi- nas amarillas se encuentran en otras Iu gares de Hidalgo. ligand> aquellas de la parte criental del Estado (y zonas adya- centes de Veracruz) con aquellas del Es- tado de México. Hasta ahora, las observa- cicnes realizadas son, quiza, muy escasas para deducir conclusiones firmes, pero es interesante notar en la Tabla II] que no hay 1 caracter que distinga adecua- damente M. pringlei de M. aureiceps que, ntemente, seria muy sostener aM. pringlei como una especie distinta, La presene’a de juso lechoso cn los talles de las plantas de tres de las cuatro polilacbones examinadas es: también interesante, ya que contrasta con el jugo acco en todas las siete poblaciones examinadas de M. rhodantha y M. fererubra. Se sabe sin em- Cact, Suc. Mex, XXI 1976 fasea rasiaa, deapo de | fo, deaputs nds pl any | ae teat hargo que en las plantas de este grupo bajo cultivo, la presencia de juzo lechoso es algo impredecible y que posiblemente dependa de factores edaficos 0 estaciona- les, asi es que no seria prudente darle aqui mucha importancia taxonémica a es- te aspecto, aun cuando originalmente esta fue la hase de la clasifieaeién seceional del_género en el sistema de Schumann y sigue ain siendo un caracter principal én la clasificacién tal como ha sido con- siderada por Backeherg o por mi, Hibridos Naturales En el curso de mis exeusiones de 1973, me impresioné la relativa uniformidad de la mayoria de las poblaciones estudiadas, reflejando, qi taza y de homorigotismo en estas pobla- ciones, Sin embargo, hubo dos ocasiones en que las poblaciones examinadas eral muy heterogéneas, y de ellas pienso un alto grado de retro- Cacr, Svc. Mex. XXI 1976 seria plausible creer que dos distintas es- pecies y sus hibridos naturales habitasen jwatos Tormando un “enjambre hibrido™ La primera poblacién hibrida ve, en compaiiia de F, Otero, « nranquilla cerca de Tepenene, sobre la ca- nivtera entre Pachuea y Actopan, el 2 de noviembre de 1973. En esta firea hay Mammitlaria polythele Maxt y vimos varios eyemplares robustes eon la espinacidn ea racteristica de 2 a 4 centrales, careciendo: en absoluto de espinas radiales (Hunt 8526, 8532). También habia ejemplares die espinas amarillas de una forma aliada a stammillaria rhodantha con 1G & 20 es pmas radiales, pero, a la sazon, sin sefia alguna de flores 0 fruto. (H/unt 8528 /9/ 30). Creciendo junto con estas dos espe- cies distintas haba toda una gama de formas intermedias con espinas radial dgpilmente desarrolladas (une 85 8531). De regreso en Inglaterra, he cul- tivado cerca de 150 plantas de sen 33 de los ejemplares H. 8529, 8530 y 8532, y éstas parecen muy heterogéneas, La segunda poblacién que pienso pueda ser un enjambre hibrido, fue observada por F. Otero y por mi en la Sierra de Juarez, al sureste de Zimapan, el 3 de no- viembre de 1973 (Munt 8: -D). Aqui 1as_ plantas eran patentemente variables eu el nimero, longitud y color de las espinas centrales que variaban de 4 hasta y de 6 a 20 mm de longitud, y desde amarillas hasta de un color de caié rojizo upscuro, Espinas radiales (hasta 20 y de hasta de 3 mm de longitud), existian en algunas plantas maduras, pero en otras 0, Mammillaria polythele y M. mollen- dorjfiana se juntan © zona, y la quiz pudiera ser de- entre ambas espe- variacién obs indo a la eres, Conelusiones Para concluir, regresemos a las pregun- tus planteadas al principio de la | Parte de este articulo, y consideremos hasta qué punto se pueden contestar con las obser- vaciones que he informado 1. ;Cual es la distribucién geografica. altitudinal y ecolégica de las especies? Los datos seogrificos confiables y do- cumentados son aiin ados, sin embargo, en forma condensada, se mues tran en el mapa (fig. 17). Los datos basi cos altitudinales y ecoldgicos son los si- guientes: : Mammillaria rhodantha: Confines orien- tal y septentrional del Valle de México, en altitudes entre 2,300 y 3.000 m, creciendo en rocas intemperizadas (principalmente rioliticas en el norte y lavas en el ese), zona de bosque pino-encino y matorral. Mammillaria fera-rubra: Eje volcanics, al oeste de Toluca hasta casi el Nevado de Colima, en_altitud 100. y 2.500 m, ereciendo en riscos de roca voleénica intemperizada, en la zona de bosque pino- muy Ii 34 Mammillaria mollendor}fiana: Parte cen- tral de Hidalgo: region de El Cardonal y Santuas rra de Juarez), en altitudes entre 2,100 y 2,500 m. creciendo en lade- ras pedrcgosas en la zona de matorral. Mammiliaria aureiceps: Al norte de la ciudad de México a una altitud cercana a 2.600 m. czeciendo en riscos de escoria vol- Ginica intemperizada, en la zona de pino- encino y de chaparral. Varsmillaria pringlei: Parte norocei- dental del Estado de México, Hidalgo y zona adyacente de Veracruz, en altitudes entre 1,900 y 2,500 m, creciendo en can- tiles vole‘nicos (hasaltieos) de las barran- caso la zona de mezquite-matorral, 2. 2Se extiende la zona de distribucién de una especie sobre las zonas de las demas? En general, Ja respuesta parece ser “no”. En algunos casos, v. gr. Mammilla- ria rhodantha y M. fera-rubra, claramente se sulstituyen una a la otra en zonas geo grificas adyacentes y puede decirse que son. vicariantes, Estas razas geograficas, en la actualidad, freeuentemente se suelen tratar como subespecies, este es el caso, zocurren real- mente juntas las especies 0 acaso se encuentran distribuidas en diferentes habitats 0 zonas altim 3. Cuan 5? eas? Cuando las zonas de distribucién de este srupo de especies parecen extenderse i tante una dentro de la otra, v. gr. Mami aria fera-rubra y M. pringlei, ambas es pecies no cohabitan las mismas localida- des, sino que ocurren en habitats y_zonas de vegetacin diferentes, En algunas Areas, los miembros del gru- po Mammillaria rhodantha se mezclan con miembros de complejos aliados, siendo és tos el grupo de. discolor y el grupo de M, polythele. En & primer caso, normal- mente una bien marcada diferencia de Cacr, Sue, Mex. XXI 1976 me! poi habitats separa a M. rhodantha (pefias y rocas) de M. discolor (laderas con pas- tes). Sin embargo ciertas formas de M. discolor también habitan sobre rocas, y cl asunto requiere de mayor estudio. La posi bilidad de hibridacién no puede ser re- chazada, Hidridacién entre los representantes de los grupos de Mammillaria rhodantha y de M. polythele, donde sus respectivas 26- nas de distribucién se mezclan, parece ser una explicacién plausible de las poblacio- nes mixtas observadas en el Estado de Hidalgo. En estas poblaciones, los miem- bros de distintos grupos se juntan en Tos mismos habitats y a las mismas altitudes, pero probablemente esto silo suceda en los limites de sus Areas de distribucién 1. :Cual es el grado y la intensidad de la variacién normal que se presenta dentro. de poblaciones individuales? Con excepeién de las poblaciones ai tas arriba mencionadas, interpretadas co- Cact, Suc. Mex, “XI 1976 mo “enjambres hibrides”. casi todas las poblaciones observadas, fueron notables por la ausencia de variacién entre plantas individuales, Una variacién de poca im= portaneia respecto a la longitud, color y niimero de espinas fue mas patente en al- gunas poblaciones *(por ejemplo, la de VW. rhedantha de’ Epazoyucan) que en otras, {Ocurren las formas -particulares, . zr, variacién en el color de las. esp nas, esporadicdmente 0 en un patron definide? Parece ser que existe un patron defi- nido, geogrifico y ecoligivo, en la distri- hueién de las variantes principales, v. gr aguellas con espinas amarillas, Sin em- hargo la informacién es’ atin muy incom pleta para indicar qué.varte del ‘patron depende directamente de factores e¢ol6gi- cos y hasta, qué limite se basa.en factores genéticos y evolutivos. ENGLISH VERSION Parts 1 and II of this article were mainly concerned with M. rhodantha sensu stricto, its typification and distribution. This final part contains observations on closely allied species ind cases of apparent hybridization with Mf. potythele, M. FERA-RUBRA Schmoll In Craig's Mammillaria H page 308, fig. 281, a deser . tion ave given of & plant of the Mf. rhodantha croup from “San Lazara’ (San Lazaro?), Que- retaro, under the name M. ferarubra Schmoll. T have not heen able to locate San Lazayo but plants near Acambay, a town on the Tolu Tighway 65 kin south of San Juan de seem to me identifiable as Sehmol’s species. (Hane 8906, fig. 16). Acambay is in the state Gf Mexico,” but T have little doubt ‘that the same plant occurs acress the border in Que: retaro, pethaps in the meuntains around Ameal- co. Tt is possible that Craig's unsupported. re- port of the occurrence of M. rhodantha near San Tuan del Rio referred to this closely ellied form. Plants similar to those at Acambay have vuko been found near Toluca, according to Sr. Otero, and further west in’ Michoacan, near Morelia, where I examined a population of plants with Sr. SancheMejorada on 30 Novem: her 1973 (Hune 8644). From still further west. in Jalisco, T have examined a number of living spe at Huntigton Botanical Gardens col ected by Boutin & Brandt near Ciudad Guz man and Tapalpa. Compared with M, rhodantha from the easter side of the valley of Mexico, these western plants aré smaller flowered and have a rather different spination with fewer radial (see Table TL), The form might, in the broad- est terms, be treated as a subspecies or geo: graphical variety of M. rhodantha, Other close allies of M. rhodantha from Que- retaro and adiacent Hidalgo are M. calacantha Tiegel and M. mollendorffiana Shurly. ‘The exact twpe lecalities of both are not known, ut te Craig (1945) Schmoll collected M. ea: Ireantha near Angostura de Chareos M. mo= Hendorffiana is abu the region of Car- “onal, north of Ixmiquilpan, where it has been found by Glass & Foster (Cact. Suce. J. Amer. 1971) and by St. Otero, who showed 36 ine one of the populations on 2 November 1973 (Hunt 9533). The characters of M. mollen: dorffiana and M. fera-rubra are compared in Table Th. M. PRINGLEL (Coulter) K. Brandegee now consider M. pringlei and other ied members of the rhodantha ro M. pringle’ occurs in great abundance at the barranea of Tultenango, on the western edge of the State of Mexico, in the drainage system of the Rio Lerma. This is assumed to be the type locality, although the original description says ‘San Luis Potosi’, since Pringle 3679, col. lected at Tultenango in 1890, seems to be the “nly material on which Coulter could have based the species. The population at Tulte: nango is extremely uniform (fig. 22). Further east, across the watershed and in the Rio Tula drainage system, a similar plant is found dance in the Barranca of Jilotepec is similar, with the centeals if anything tending to be stronger. Much further to the north-east, yellow-spined forms are known to occur near’ the Barranca ef Metaitlan (EI Zoquital) and near Huaya- cocetla (state of Veracruz). Both these characterized by fewer. more slender central spines than the western forms, and probably by @ more columnar habit, Plants were examin: ed by me at El Zoquital on 31 October 1973 and are compared with those from Tultenango and Hlotepec and with M, auriceps, in Table Twas not able to identify the locality. given by Ehrenberg for M. rhodantha var. chrysacan- tha (Cerro del Puerto de la Palma near Zi mapan) but this record. suggests that yellow spined forms oceur elsewhere in Hidalgo, link: ing those from the eastern part of the state (and adjacent Veracruz) with those in the State of Mexico. The observations so far made are perhaps too few to draw any firm con: clusions, but it is of interest to note from Table TIL that_no one character adequately distinguishes M. pringlei from M. aureicens, and that it would consequently be very dit ficult to defend M. pringlei as a distinet spr ‘The cccurrence of milky sap in the stems cf plants in three of the four populations examined is alto of interest, as it contrasts with the watery sap found in all the seven populations + -M. rhodantha and M. fera-rubra examined. ‘The cecurrence of milky sap in cultivated plants of this group is known to he somewhat un Cact, Suc, Mex, XXI 1976 Fig. 17-—Mapa de distribucién de predictable, however, and dependent on edaphic factors, so that it_ would be unwise to attach much taxonomic signific ance to the feature here, even though it. was originally the basis of Schumann's sectional classification of the genus and is still @ principal character inthe classification as modified by Backeberg and myself. possibly seasonal ot NATURAL HYBRIDS During the course of my excursions in. 197: T was impressed by the relative uniformity of most of the populations studied, reflecting, pethaps a high degree of inbreeding and homo: zygosity in these populations There were however, two occasions when populatio ied which were heterogeneous, and for these T think it is plausible to believe that two species and their natural hybrids were present together forming a hybrid swarm’, I observed the first hybrid population i small barranca near Tepenene, on the road tween Pachuea and Actopan on 2 November 1973, in company with Sr. Otero, In this area M. polvthele Mart is present several large individuals with the characterist spination of 24 centials, radials being entirely Mex, XXI 1976 and we saw Cact, Suc CG mtera-nre seMorinaiei yoeM.aureicens AAM.moe Mammillaria rhodantha y especies aliadas. absent (Hunt 8526, 8532) Also present individ: uals of a yellow-spined ally of M. rhodantha with 16-20 radials, but no sign of flower or fruit (Hune 8528/9/30). Growing with these two distinct species were a range of intermed- iates with poorly developed radials (Hunt 8527, 8531), Back in England, I have raised about 150 seedlings from H_ 8529, 8530 and 8532, and these are very heterogeneous. ‘The second population thought to be a hybrid swarm was cbserved high in the Sierra de Juarez, sentheast of Zimapan. by Sr. Otero vn myself on 3 November 1973. (Hunt 8537. AD). ‘The plants here were strikingly variable in the number. length and colour of the central snines, from 49, 6:20 mm. long and yellow to dark reddish brown, Radial spines (un to 20 and up to 3mm, long), were present in some mature rlants but absent in others. M. poly thele ond M. mollendorifiana meet in this area. snd the variation eneruntered may be due to intregression between them, CONCLU: N Jn conclusin, we may return to the questions pesed at the beginning of Part T of this article 37 and consider to what extent they are answered hy: the observations reported: 1 What is pecies, re native distribution of the gecgraphical, altitudinal and eco- Reliable and phical data is still Very_fiinited ized in the map (ig. 17). Basie altitudinal and “ecological data is a followst AM, ‘rhodantha: Eastern and northern of valley of Mexico. 2300-3000 m ed eck (chiefly rhyelitie), pin vene and M. ferasubra: Volcanic belt westward from Teluea almost, t0, the Nevado de Colima, alt 2 IMuis of weathered volean‘e rock. M. mollendorfjiana: Central Hidalgo, area of (Sierra de Juarez), rocky slopes and arroyos in Cardonal and S alt. 2100-2500 sa, matorral zone. M. aureicept: Nerth of Mexico City. alt. © 2600 in. bluffs of weathered voleanie rock, pine oak zone and matorral. pringlei: NW. State of Mexico, Hidalgo, and “adjacent Veracrnz alt. 1990-2500 m., on the voleanic cliffs (chiefly basaltic) af barran- eas in the zone of mezquital /matorral. 2. Dees the geographical distribution of one species everlap with that of others? In general, the answer seems to be ‘no’. Ta seme eases, «gM. rhodantha and M. fera- rubra, they clearly replace one another in adjacent - geographical areas and may be said to she ricariants, Such geographical rates are often nowadays treated as. sub- spe 3.—Where there appears to be overlap, do. the species really eccur together, or are they in different habitats er altitudinal zones? Where ranges scecies greup ¢ broadly overlay within the eM. ferarubra ond M. prin lei, the species do not oceur together, but in different habitats and vegetational zones. In some areas, members of the M. rhodantha ercup overlap with members of allied complexes, namely the M. discolor and M._ polythele coups. Tn the former case, there is a well: natked difference ef habitat normally separat- ing M. rhoduntha (on rocks) from M. discofor (open grassy slopes). Forms ef M. discolor also occur on rocks, however, and the matter res further study. The pesstbility of hy: ization cannot be ruled out. Hydribidation between representatives of the M, rhodantha and M. polythele sroups, where these everlap, seems a plausible explanation for the mixed populations that have heen te of Hidalgo. In these popula: f the different need in the tious, members foups meet at the same altitude and in the same habitats, but probably at the edge of their natural 4. How much natural variation occurs within populations? Wid the exception of the mixed popula. ticns, interpreted as ‘hybrid swarms’, which have just been mentioned nearly all the pop- ulaticns cbserved were remarkable for the Jack of “ariation between individual plants. Variation in minor respects of spine Tength and colour, and in spine number, was more neticieab!~ in some populations (that of M. rhedantha. for instance) than others. 5. Do particular forms, es spine colonr, occur spors Yeally definite pattern? re mppears to be a definite atten, g60- xraphical and ecological, to the distribution ef the main variants e.g. those with yellow spines, Infermaticn is still far too incomplete, however, to indicate how mucle ef the pattern depends directly on evclegival fe-tors and. to what extent it has a basis in genetics and evelution, Cacr, Suc. Mex, XXI 1976 Aspectos Quimicos 1. INTRODUCCION, Dentro del orden Centrospermae destaca Ta familia de las cacticeas, plantas nativas de las zonas lesérticas de América, aunque algu- nas especies erecen como epifitas en las regiones selviticas, Actualmente estan muy difundidas en casi todo el mundo, hab dose introducido accidentalmente 0 como plantas de ornate. Las cactéceas son plantas suculentas, xerofitas. Casi la mitad de las especies de cactéceas son originarias de México 13 Esta familia esti constituida por unos 125 éneros con unas 1,500-2,000 especies, agrupadas en tres tribus o subfamilias que son: Pereskioideae, Opuntioidene y Coren cideae. La tibu Pereskioideae con tallos eilin- dricos delgado: wsos y hojas bien ferenciadas, esti representada en Méxi- co por el género Pereskia. La tribu Opun- tioideae habitualmente con cladodios arti- ulados, de contorno circular, oval, dis: coide o en forma de raqueta: sus eéneros més. tipicos son Pereskiopsis, Opuntia y Nopalea, La tribu Cereoideae euyos tallos Hevan costillas 0 tubérculos, en los que apare- cen aréolas con espinas, Por su aspecto se les puede dividir en cuatro. grupos: columnares, caracterizadas por el género Pachycereus; las globosas, caracterizadas por los géneros Mammillaria y Echino- cactus; cilindrieas como el Cephalocereus senilis. y las candelab como la Carnegiea y el Lemaireocereus. Las eac: ticeas se hibridizan facilmente. lo cual ha introdueido una gran variabitidad mor folbgica, por lo que a menudo una misma especie ha recibido varios nombres. Asi Cacr, Sue. Mex, XX1 1976 de las Cactdceas * Yorge Alejandro Domingii y Norge S. Alejandro Dominguez S.. Ir. el peyote, Lophophora williamsii, le han dado otros tres nombres y la eina, Lophor cereus schottii, tiene ocho nombres si nimos, Las cacticeas han tenido un papel i portante en la vida cotidiana, religiosa y artistica de los diversos grupos étnicos de México, CARACTERISTICAS QUIMICAS DE. LA FAMILIA 21 nas, Hay estudios quimicos preliminares de unas 150 especies, en los que se han huseado saponinas, alealoides. flavonoides y taninos #7, Se han encontrado que el color de las flores, de los frutos y en oca- siones el del interior de los tallos de las cacticeas, se debe principalmente a la presencia de pigmentos nitrogenados del Compuestos nitrogenados, Betalai- upo Mamado betalainas, substancias.si- res a Jas presentes en los betabe- les 89, Las betalainas son caracteristicas de"las 10 familias que integran el orden Ci violaceo se les da el ninas (1), y si son am: betaxantinas (11). Por ejemplo en las flo- res de Opuntia fieus-indicall se aislaron Ja indicaxantina (III) y la betanina (IV), Py én XV, LABORATORIO DE. FITOQUIMICA LT.E.S.M sobre cacticeas, Monterrey, N. L. México 30 | BETACIANINAS 1 BETAXANTINAS En 35 especies de cactiveas, que corres ponden a 23. géneros, se han local do hetalainasl2 “La filocactina (Va) y la isofilocactina (Vb) se encontraron en el Phytiocactus hybridusl3, Como se ex plica en el inciso 3, también contribuye- ron al color de las flores algunos flavor noides del tipo de la quercitina, Ei Gl. JOR e 7 me wh, noe r, In mipicaxanTiNa hioquimica. En el grafico I se resumen las imterrrelaciones de los principales alea- loides de las cactaceas. eT, i oS guna cacticeas se han encontrado antoc oho "on ninasls, ene may vo! wo ie . go R ° op Ga WO te eo) N-~~COOH ZS 40 ey v0 fe eno! i oo, Ho 4 na COOH { Va FILOCACTINA =H eo on0) oo cn meno ae Oh Ri ‘cho 1s mee ome Vb R= 6!-0-(matonit)—B-D—glucosil: alee ieee 2,2 Alealoides. Los alealoides son bas- Fy, 1g Principalesslealaides. de las. cacté: tante frecuentes en la familia: de unas 150 especies, cerea de 100 han dado posi- s las pruebas para alealoides, los que se han identificado por téenicas de cro- matografia comparativa 0 de cromatogra- fia gascosa-espectrometria de masas 0 se les ha aisladol5-18, El que los alcaloides de esta familia sean derivados de la Beta feniletilamina o de la tetrahidroisoquino lina, es de gran importancia quimiotaxo- némical®, ademas de su trascendencia 40 les alealoides peyonina (VI), un Beta-fe- nil etilpirrol aislado del peyote? y la do- letupirrol aislado del peyote20 y la do- lichotelina (VII) aislado de Dolichothete sphacrion que tiene un niicleo de imida- zoi21, La macromerina (VIL) obtenida de Thetocacius macromeris y Corypantha imi~ dazel macromeris.2Mb difiere de otras tetra- Cacr, Sue. Mex. XX1 1976 hidroisoquinolinas en tener un oxhidrilo en la cadena lateral; de otras cactéceas se han obtenido otros cinco alcaloides paré~ cidos, on Ghee pute = “COOH “cy eno. a ony onryt Loud of cHye” ‘oy Vi PEYONINA Ml MACROMERINA "i DoLicHOTEUNA Los huicholes, yaquis, apaches, tara- piedades de psicofirmaco despertaron el otras tribus indigenas de Mé- U. han usado el “peyote”, también conocido como “jiculi”, “peyotl” 0 “mescal hoton” (Lophophora williamsii, sin6nines Anhalonium williamsii y Ane halonium lewinii) dentro de sus ritos re- igiosos, como un alucindgeno Estas pro- Lororonma (5%) ‘uaconnn (9) QO. anacauinn (08) peworma (178) nation (2%) interés de_numerosos viajeros y desde fi- nes del siglo pasado se inicié el estudio de esta planta, eventualmente, se jllado cuarenta y siete —alealoi des22, de los cuales la mezcalina 2-(3' ¥, S-trimetoxi - fenil)-etilamina produce, excitacién ineviosa y alucinaciones a todo Fens wezcauna (20%) OO. duuatomioine (148) wonoewna (85) Fig. 19.—Alealoides del peyote y sus _poreentajes aproximados, color28, Es interesante que en Perit se usen infusiones del Trichocereus pachanoi con propésitos adivinatorios24 ya que tam hién contiene mexcalina, Las otras Beta feniletilaminas, presentes en el peyote, tam- bién son excitantes nerviosos pero con efectos. menos _pronunciados. Actualmente hay estudios bioquimicos muy interesantes que sugieren que la esquizofrenia, resulta de trastornos metabilicos que se originan en la produccién de mexcalina y otzas Be- ta feniletilaminas?5, La mezealina y alu: Cacr, Sve, Mex. XXI 1976 nos de sus anilogos se han encontrado en unas 40 cacticeas, incluyendo especies de los géneros Opuntia, Trichocereus y Ariocarpus26, Se ha demostrado2? que tanto la mezealina como sus anilogos de a partir del amino, 1931 Wehmer informé de 28 cac- que contenian alcaloides28, En 1954 Reti hizo notar que la estructura de la mayoria de los alcaloides localizados en las cactéceas era desconocida2®, En téceas al 16, Willman .y Schubert. sefialaron que 55 eacticeas contenian alealoides,prin- cipalmente anhalamina 0 anhalidina3®. Del Pachycereus marginatus Roca 31, aislé en forma impura tres alcaloide: cereina, pachicereina y la ochoterenina, posteriormente Djerassi etal. aislaron la piloceridina (IX), un alealoide previa Ix PILOCEREIDINA XI PILOCEREINA, esteredmero al36 la eandicina Cortés. Garbarino et aistaron de Trichocereus chilensis. (XID. Los grupos Aureli37-41 en Suecia_y McLaugli en E.E. U.U. han encontrado en los géneros Coryphan= tha, Mammillaria, Obregonia, Eehinoce- reus, unos 13 alcaloides de los. presentes en el. peyote. 3. Flavonoides y otros compuesto jex nélieos, De algunas cacticeas se han ais ado varios flavonoides libres y como gli- de césides particularmente la quercetina (XID y- sus derivadost, estos flavor of Mo. 0- OW to, ° i Ono Xill QUERCETIN XIV ISORHAMNETINA mente encontrado’ en Lophocereus sehottr, Este cactus llamado sina, se em: plea en Sonora para aliviar dleeras. y cierto ipo de canceres, De L. schottii se han separado también la lofocerina (X) y la pilocereina (X1)34, La_pilocereina se ha aislado también de L. gatessi y de L. australis35, hows eens X LOFOCERINA xil CANDICINA noides se han separado prineipalmente de las flores, Asi en Opuntia vulgaris se en- contr un flavondsido, De las flores de O. ficus-indica se extrajo49 isorhamne- ina (XIV), de dillenii se aislaron4%, ides de la isorhamnetina y querce- Las flores de O. lindheimeri contie- hiperina silquercetina) (XV), narcisina (el 3-rutinosido de la orhamretina y el 3-rhamnogalactésido Je iscrhamnetina, De la parte aérea de Ariocarpus retusus se separé5! la retu- sina (XVI) ee * on Ho. on On 8 ee, XV HIPERINA, ee “ot, O ee, on XVI RETUSINA las flores de Cereus grandiflorus (rein de la noche) se extrajeron la cac: ticina (un 3-galactésido de la isorham tina) y Je nareisina La acetovainillona (oxi 2 fenona (XVII) y sus glucésidos androsina (XVIIla}y- neolloydosina (XVIIIb) se han aislado de Neolloydia texensiss: De Opuntia elatior se obtuyo53 el in- teresante opuntiol (XIX) Caer, Suc. Mex. XXI 1976 °. G-CHy 0 wN 8 Or; "0h Meg or OS CHs ocHs XIX OPUNTIOL XVlllb NEOLLOYDOSIDO Xvllla R= glicosil, androsina XVII R=H acetovainiliona XVlllb, R=4B-D-primverosido,neolloydosido 1. Triterpenos, Saponinas y Esteroi de Machaerocereus gummosus; el écido des, No se han encontrado mono, sesqui queretardieo (XXI), de Lemairecereus y diterpenoides en las cactéceas, pero si queretaroensis; la turberogenina (XXII) triterpenoides, como alcoholes y acidos y la turberina 8th (XXID, de L. thur- triterpénicos, también unidos a carbohi- beri; la estellatogenina (XXIV) de L dratos formando saponinas, Djerassi y su ct grupo al.54-56, investigaron en” los entas mas de 40 especies per- tenecientes a 12 géneros de la tribu Ce- reoideae, habiendo aisiado unos 13. tri- terpenoss7, entre ellos los Geidos: _ma- chaérico y macherinico (XX). aislados macherinico XX oice XX1 XXIV ESTELLATOGENINA yo" XXVI CHICHIPECENINA EL grupo de Djerassi observ que la presencia de saponinas excluia la de alea- loides y- viceversas9, Caer, Sue. Mex. XX1 1976 stellats; de L, dumortieri se aisls la sa- pogenina dumortierigenina (XXV) y de L, chichipe separaron la chichipegenina IXXVI} y en la porcién glicosidiea se aislo58 el ole ane n-12-triol 16, 22 (XXVID)y dos ésteres de la longispino- enina (XXVIII), ‘xxll TURBEROGENINA xxi TURBERINA on 50 XV DUMORTIERIGENINA On xxViIR=CHs R= OH CCH2OH:R'-H LONGISPINOGENINA XXIK R=COOH:R'=H deido cochalico awit En los “garambullos” del género Myrti- Uccactus, hay cinco especies que producen saponinas, las que por hidrélisis han dado 43 las siguientes agliconas: el acido cocha- Ioico (XXIX) en. dos especies, el deido oleanéico (XXX) en tres especies, la chi- chipegenina (XXVI) en cuatro especies, el fcido myrtillogénico en tres especies, la estellatogenina (XXIV) en una especie longispinogenina (XXVIIL) y_ eritrodiol (XXXT) en dos especiess9, ho XX ACI00 OLEANOLICO xe! ERFRODIOL han cneontrado saponinas cuya aglicona es Ja chichipezenina (XXVI). En la parte aérea del P, fosterianus6? se obtuva el peniocerol (XXXIV) (colesten-8-diol-3 Be- ta 6 alfa y posteriormente la macdougallina (XXXV)) un 14 alfa-metilesterol. Los dos compuestos se hallaron también en P. bn ‘on ouIV PENIOCEROL vee XXXVI! VIPERIDONA De las raices de Peniocereus gregaii se obtuvo el peniocerol (XXXIV), la vipe- ridina, la viperidinona y el Beta-sitosterol E] Beta-sitosterol cs ubicuo en las eactaceas, algunas de las cuales también tienen es- tigmasterol y estigmasten-ol, Estos compues- tos son_un eslabin hiogenéticn de trans- formacién de triterpenos a colesterol. Las cacticeas son los inicos vegetales que tie- nen derivados como el itesmol (XXXIX) (un 2-hidroxicolesterol) del _colesterol. que es caracteristico de los animales, an KX¥ MACDOUGALLINA {EXXVIVIPERIDINONA De Mammillaria runyoni se extrajost el mamillarol (XXX11)_ un triterpeno pax recido al ocotillol (XXXII). El ocoti- Hol, triterpeno tetraciclico, también se a 1s en Neolloydia texensis61, Este tipo de rpenos es raro en las cacticeas, En algunas especies de Peniocereus se fe, ‘on I 3 O%K, “ OOH MAMMILAROL xxx OCOTILLOL macdougalli. En Lophocereus schottii se cacontr66s el lofenol (XXXVI) (el dalfa mnetil-colesten-7-8heta ol.) De las raices de Wilecxia viperina se extrajeronot penioeerol, viperidona (XXXVID-y” viperidinona (XXXVHI). ox.V1 LOFENOL ye e-SITOSTEROL De Thelceactus bicolor y también de T. bicolor, variedad tricolor se aislé 65, 66 el triterpeno eisacol (XL) y el ya men- cionado itesmol. 5. Carbohidratos, gomas, dcidos orgie nicos y aceites, Los tejidos de las cactieeas son ricos en substancias mucilaginosas y en gomas. La lignina parece estar ausente en estas plantas aunque se ha encontradoS? que Cact. Sve, Mex, XXT 1976 Ho XXX1X ITESMOL el sagnaro (Carnegia gigantea) da posi- tiva la prueba del nitrobenceno para la lignina6é, Se ha estudiado la composicién de al- unas de las gomas de los actos, asi, la goma de cholla (Opuntia fulgida) da por hidrélisis arabinosa, vilosa, galactosa y Acido galacturénico, en proporcién 6: 2: 3: y En la hi- drélisis de la goma del nopal (Opuntia vulgaris) se obtuvieron arabinosa y ga- lactosa7 En la Nopalea coccinellijera se identificaron7! fructuosa, glucosa, saca- rosa, maltosa y trazas de rafinosa. De las tunas y semillas de algunas Opuntia sp. se obtuvo un disacarido, opun- iosa72, que ha sido identificado como maltosa73, Las cacticeas tienden a acumular oxa- lato de caleio, por métodos enzimiticos se ha encontrado7+ Acido citrico en es- pecies de Cereus, Echinocereus, Hatiora, Opuntia, Pereskia y Rhipsalis. También se ha localizadoi5 acido isocitrico, De las semillas de Ferocactus sp. Par chycereus pecten-aboriginum, y Opuntia ficus indica se ha extraido el aceite, con rendimiento de 17.2.%, We y 6.3%. respectivamente, 6. Usos, Las trazas de rhamnosa69, pencas tiernas de los no- pales (Opuntia ficus indica), se comen como legumbres en México, también se cmplean como forraje, previa destruceién de las espinas. Los frutos del xoconostle (0, joconostle) son muy cides y por esto Cacr. Suc, Mex. XXI 1976 XL EISACOL se usan en algunos guisos, Las tunas de algunos nopales, como la cardona Q. sirep- tacantha) son muy apreciadas por su jugo dulce, que concentrado forma el “queso de tuna” 0 fermentado produce el “eo lonche’ Los aztecas tefifan sus telas de rojo, eon un insecto, cochinilla de nopal (Dacty- lopius coccus) que vive en varias especies de nopales. El rojo de cochinilla consti- tuyé un articulo de exportacién durante la colonia y adn ahora tiene demanda co- mercial. De las cactéceas globulares _(hizna- gas), se cuece la pulpa con azticar para obtenerse un dulee muy apreciado, Los frutos “chilillos” de. algunas biznagas son comestibles, Los frutos de algunas cactéceas colum- lares conocides como pitayas, son comes- tiles. De los nopales y otras cacticeas se obtienen gomas, usadas como substitutos de la goma de tragacanto. El peyote (Lophophora williamsii), se izado con propésitos rel por su conten . Aunque se ha pro- puesto la explotacién intensiva de las eac- ti esto. debe estu “¢ antes de- hido a su lento crecimiento, nasi, REFERENCIAS 1. TH. Bravo, “Las cactéveas de México”, ULN.ALM., México (1937) 2. CG, Backeberg “Die Cactaceae. Handbuch 45, 10, u. 2 1B. 4 1s. 16. 18, 1. a ab, 2, 2b. 2. der Kackteenkunde”, VEB Gustav Fischer, Verlag, Jena, Vol.” 1-6, (1957-1962). N. L. Britton y J. N. Rose, “The Cac taceae”, 2a, Ed, Carnegie Ingitution, Washington, Vol. 1-4, (1937). X. AL Domi N. Armenta y G, de Li (Méx.), 13, 8A, (1969). X. A. Dominguez, S. Escarrin y C. Pérez E. Planta Médica, 18, 315 (1970). X. AL Domi y. Ledn, L. Krause, GA. Bravo y Je M les, Pinta Medien, J6, 458 (1968), X. A. Dominguez, P. Rojas, Y. Almaguer ¥ G, Hinojosa, Chem. & Ind. 795 (1965) TJ. Mabry 'y ng “Recent Aisances in Phytoc Century-Crofis, Ne Y. (1968), M, Piattell, L, Minale y 6, dren 20, 235 (1964). T. J. Mabry. “Comparative Eilitor T. Swain Acad 231 (1966). ell, L. Minale_y G. Prota, Phy ry 4, 593. (1965). 1. J. Mabry, L. Kimler y ¢ cent” Advances in Phytochen nic Press, N. Yo, Vol L. Minale_y G. Pr 2525. (1964). J.B. Harborne ‘ef the Flavoneid Y. (1967 Prota, Tetra: Phytoe Press, rmistry”, Academie Press, Agurell, Lloydia 32, 206 (1969). D. L. Braga y J 1. MeLaughlin, Planta Médiew 17, (87). (1969). S.D. Brown, J. E. Hodk 1, Massin ill y M. Chem. | Reinecke, J. O 1825. (1972) J. Landstrom, 1295 (1972). W. H. Watson, M. G. Reinecke y J.C. Hint, Res. Latinoam. Quim. 6, 1 (1975). G. J. Kapadia y Ro J. Highet J. Pharm. Sei. 57, 191 (1968). H, Rosenberg y A. Letters 1039" (1969). L. E. Below, A. Y. Young, J. LM Laughlin y A. G. Paul, J. Pharm. Sei 315. (1968) J. Lundstrom, 275 (971). G. J. Kapad:a y M. B. E. Fayes, J. Pharm. Sei. 59, 1699 (1970) RE. Schultes, Annual Rey. Plant Phy siclogy, 22, 571 (1970) Seand, 26, Acta Chen ‘Tetra Paul Acta Pharm. Sueciea 8 24. M. J. Poisson, Ann, Pharm. Franc. 18, 25. S. RK. Tonge y B. E. Leonard, Life Sei. 8 805. (1969), 36. W. J. Turner y J. J. Ory. a J . Agurell, Tetrahedron Letters, 3371 (1969). 28. C, Wehmer “Die Pflanzenstoffe” Verlag Gustay Fischer, Jena Vol. 2, pig. 811 931). 20, L, Reti, en “The Alkaloids, Chemistry and Physiclogy” editado por R. H. F. Manske y H. LH, Holmes, Academie Press, N.Y. Vol. 4. pig. 23 (1954). 30, J.J. Willman y B. G. Schubert “Techni ‘eal Bulletin”, 1234, U. S. Dept. Agricul ture, pig. 57. (1961). 31. de Roca, Anales Inst. Biol, UNAM, 1, 204 (1930) 82. J. Reea, Anales Inst, Biol, UNAM, 2, 19 931) 38a, C. Djerassi, He W. Brewer, C. Clarke y TL. J. Durham, J. Amer, Chem, Soe. 84, 3210 1962) 88h, Co Djerassi, S. K. Figdor, J. M. Bobbite y F.X. Markley, J. Amer. Chem. Soc. 3861, (1956). 34, C. Djerasi, T. Nakano y J. M. Bobbi Tetrahedren 2, 58 (1958 35. C. Djer R. P. Marfe, Re Ni MeDonald, A. J. Lemin, 8. K. Figder y selo, Phytochemistry 11, 849 (1972). 37. S. Agurell, Lloydia 32, 40 (1969) 36. M. Cortex, Garbari H. Estrada, J. Amer. Chem. (1954) 38, S. Agurell, J. Lundstrom y A. Masoud, J. 58, 1413 (1969). 39.8. 1. G. Bruhn, J. Lundstrom y U, Svenson, Lloydia 34, 183 (1971). 40. S. Agurell, Experientia, 25, 1132 (1969) 41. J. G. Bruhn y S. Agurell, J. Pharm. Sei. 63, 574 (1974), L. E. Below, A. Y. Leung, J. 1 Me Laughlin y A. G. Paul, J. Pharm, 7 (1967) W. J. Keller y J. 1 Pharm. Sei, 408 (1973) W. J. Keller y J. L, MeLaughlin, J. Pharm. Sei, 62, 408 (1973). PLT. Sate, J. M. Neal. 1. McLaughlin, MeLaugh R. Brady, Pharm. Sei. 62, 111 . Hormemann, J. Mf, Neal y J. L. MeLaughlin, J. Pharm. Sei, 61, 41 pharm. 62, 408 (1973) Caer, Sue. Mex. XXI 1976 a. 1. M. Neal. P. T, Sato. W. N. Howald y 1M. MeLaughlin, Science 176, 131 972). 3. F.C. Bate-Smith, J. Linn, Soc. (London) 58, 95 (1962). “9 NU Ateolece Me Ruccia v S. Cusmano, Ann, Chem. (Roma) 51 751 (1961). MAL GR. Nair y S.S, Subramanian 1. Se Md. Research (India). 208. 507 (1961) \ WL Resler, U, Roster, Te Te Mabe y J. Kagan, Phytochemistry 5, 189 (1966) SI. XA. Domingner, R. H. Ramirer. 1. Gar 38.6. Dierassi. LE, Géller wv AL I, Lem ‘a D. © R, Ketcham, Planta Médica 16, 182 (1968). 2 XA. Dor R. Carrere. R. Gonzi lez. P. Roias y R. Ketchan, Chem. & Tad. 247 (1967). 3. ALK. Ganguly. Te R. Gevindachari_ vB, ‘. Mchamed. ‘Tetrahedron 21, 93 (1965). ©. Dierassi. “Cactus Tritervenes” en Fest schrift Professor Dr. A. Stoll, Birkauser, Racilea, pie 330. (1957 I. Amer. Chem. Soc. 73. 2254 (1953), 56. C. Dierassi. E. Farkas. L, H. Lin v GH. 58. 6, Themas, J (1955). aC. Djerassi, v R. Hudges, J. Amer, Ch Soc. 78, 3534 (1956). 7. Kaspravk, J. Pyrek, D. S. Jolad v C Steelink, Phytochemistry 9. 2065 (1970). Djerassi, Re M. MeDenald, y A. J. Jemin, J. Amer. Chem. Soc. 75, 5940 Amer. Chem. Soc. 77, 5330 11953) 59. €. Dierassi, A. Bowers, S. Burstein. H. Fstrada, J. Grossman, A. J. Lemin y S.C. 60. X. A. Dominguez v C Pakrashi, J. Amer, Soc, 78. 2312 (1956). Pugliese C., Pla Média 15, 401 (1967). X. A. Dominguez, R. Gonzéler y R. Carre: ENGLISH Dr. Xorge A. Domingues, head of the Depart: int cf Chemistry of Institute Tecnologice y studios Supericres de Menterrey, and his \. Jorge Dominguez Jr., give us an excellent nt of the chemical aspects of cacti, ser, Suc. Mex, XXL 1976 re, Rev. Soe, (1969) Quim. (Méx.) 13, 266A 62a. €. Dierassi, RD. He Murray y R, Villotti, I. Chem, Soe. 1160 (1965). 62h. J.C. Knight, D. L Wilkinson_y C. Dies rassi J. Amer. Chem. Soc, 88. 7 (1960). 63a. C. Djerassi, J.-S. Milley R. Villotti, J. Amer. Chem. Soc. 80, 1005 (1958). 63b. C. Djerassi, G. W. Krakewer. A. J. Lemin, LH. Liu J. S. i Chem. 'Sce. 8, 6284 (1958). 64. C. Djerassi, J.C. Knicht- y H. Brock- mann, Chem, Ber. 97, 3118 (1964). 65. X. A. Domingue, V. A. Barragin, J. Li H. Watson, J. Morales, Rev. Latinoam, 2, 3 66a. XA. Dominguez, 0. P. Rojas Ma Reve (1972). 6b, K. Nakanishi_y X. A, Dominguez, Steroids 22, 896 (1973). 67. C. Steelink, Mo Yeune y Ry L. Caldwell, Phytochemistry 6, 1435 (1967). 68. XA. Dominguez, “Métodes de Investivw cién Fitoquimica”, Limusa, México. (1973). 69. F. Brown, E, I. Hirst. J. Ke N. Jones HL. Chem. Soc. 1761 (1949). 70. V. Harlay, J. Pharm. Chem, VI, 16, 193 (1902). TI. R.N, P. Master, Naturwissenschaften, 45, 574 (1958). P. A. Garcia, R. A. Soler y F. Barba, Anales Quim. 68, 651 (1972). A, Soler, G. Pérez y F. Barba, Anales Ouim, 77, 186 975). 74. G. AL Bergstrom. Kungl. Fysiograf Salle Lund Fethandl, 4, 235 (1934). Amer. J. Botany 49, 1972). SUMMARY the article is proffusely illustrated with the extructural formulas of the most important chemical cempounds. and since their names are se similar in English, the reader may easily follow the Spanish text, vw Mi Introduccién Personal a la l'lora Mexicana Primera Parte Resumen El autor, Director del Jardin Botanico de Brooklyn, Nueva York, E. U. A., relata sus im: presiones sobre su primer viaje a México. En cesta primera parte el autor narra los antec dentes de su viaje y sus impresiones de su vi sita a la casa de Dudley B. Gold, en C ea, y de los viajes hechos en su compan Una historia, para empezar en orden cronolégico. Hace cerca de 15 afios la sefiora Dorothy Harvey. en aquella época residente en los Estados Un dos y ahora radicada en San Miguel de Allende, Guanajuato, estaba suscrita a “Plants & Gardens”, una serie de publi- caciones del Jardin Botanico de Brooklyn centre las cuales, en aquel entonces, se en contraba un folleto sobre cactaceas y otras stculentas. Como yo estaba involuerado en esa_determinada publicacién, la sefiora Harbey desde entonces me conocid de nombre, ser A través de los afios ella habia estado fascinada por estas plantas y con tal mo- tivo habia hecho numerosos viajes de ex- ploracién partiendo de San Miguel de Allende, No tan sdlo es ella una capaz andariega del campo, si no que también es una maravillosa horticultora y tiene un excitante jardin que le permite la opor- tunidad de ejercitar su talento y arte, Como la Sra. Harvey no habia podido obtener informacién sobre los nombres bo- icos de sus cacticeas y suculentas, hace me envio unos ta alrededor de cuatro ai cactos pata ser identificados, De aq) originé una stbita y copiosa corresponden- cia, y en sus cartas siempre me instaba a se 48 Por George KALMBACHER Visitarla en México y pasar algtin tiempo con su esposo y ella, alli en San Miguel de Allende, para que de alli pudiese yo emprender algunos viajes de exploracién. En esa época ella también se carteaba frecuentemente con Dudley B. Goldy prento me encontré que también seria bien- venido en Cuernavaca para realizar otros Viajes al campo con él. Todo esto fue para gran golpe de buena suerte, Decidi visitar primero a Dudley y posteriormente a Dorothy. Puesto que ambos hablan inglés, lo que para mi era de vital importancia, pues lamentablemente no hablo ni jota de es: pafiol, aunque, desde Iuego, hablo otro idioma —cactaceas y suculentas, También me he especializade en bromeliaceas y asi que qué mejor fortuna puede espe- rar un hombre que realizar su proyectado viaje a México? Los aficionados a diversas clases de plantas son gente noble y hospitalaria: y asi es como yo caracterizo a Dorothy. a Dudley y a algunos otros que posterior mente mencionaré, Al dia siguiente de haberme instalado en In casa de Dudley, é se dio tiempo suficiente para Hevarme de paseo por la supercarretera de Cuernavaca a México. Hicimos una parada en un pedregal, y Dudley trep6 sobre unas rocas a la dere- cha del camino, Me comunicé que tenia para mostrarme unos ejemplares de Villa~ dia batesii. Me encaminé a ese lugar y tuve la excitante experiencia de_ver_por primera vez una suculenta creciendo en su habitat —una cosa pequenia engalana- da de flores. Esta especie la tenemos en cultivo en el Jardin Botanico de Brooklyn, Cact, Suc. Mex, XXI 1976 y por tanto me era familiar, pero nuestra planta no tiene el vigor, ni el color, ni la plenitud que desarrollan en las localida- des en donde son nativas, Fue un placer muy ¢ observar la pequefia planta con flores de cinco pétalos blancos y co- mo estrellas, cuyos botones de color ro- sado claro Henaban las puntas de sus del- gados y apretados tallos, Otro grupo de estas plantas con muchas flores crecia pintorescamente bordeada por una cama de musgo verde palido. Me interesé mucho aprender de Dudley que en una vasta zona de México central. Ia actividad florifera se desarrolla durante la estacién seca, y no en primavera, como zeneralmente sucede en la mayor parte del mundo.pues la sequia de primavera no permite el desarrollo de las flores sal- vo en contadas excepeiones All; Dudley me mostré echeverias que dijo eran Echeveria glau- ca, El sabia que la aplicacién de esta ter- minologia particular era dudosa, experiencia personal le hacia sent se era el nombre correeto, Nuestra tata no pudo ser identificada en la de las especies locales de Echeveria. Cre~ cian en comunidad sobre las negras rocas del pedregal y de vez en cuando se veian sus esbeltas inflorescence Conforme viajéhamos a lo largo de es tas rocas, Dudley me mostré algunas es pecies de Agave. Puesto que muchas de ellas por su volumen no son adaptables a colecciones privadas, para ser admiradas uno debe verlas creciendo en su lugar de origen. Por ejemplo, uno de los nauchos que Dudley me sefialé, A. franzosinii era como un bello cuadro del. mas hermoso verde grisiceo perlado —un atrevido y rajestuoso pedazo de gloria con muchas hojas grandes, rigidas y radiantes cuyo tercio superior se angostaba gradualmen- te. No necesitaba de sus flores para sa- tisfacer al ojo del artista, su. geométrica forma globosa de color gris perla era todo lo que se necesitaba para enriquecer Ja Cact, Suc. Mex, XXI 1976 mismo unas imaginacién. En otra localided vimos Agave horrida. En la coleceién de Dudley hay un ejemplar de Agave colimana que crece en las rocas del litoral: su atractivo estriba en sus muy largas hojas lineales que for- man una gran bola de muchas esbeltas lanzas. También habia un gigantesco ejem- plar, gris brillante, de A. euiengola, pro- eedente de Oaxaca, que dominaba: toda la coleceién. Otra especie, una de las plantas mas deccrativas, que crecia sobre un_monticn- lo, era un esplendoroso ejemplar de A. victoriae-reginae. una impresionante obra a de gloriosa geometria. Una ex pecie de Agave de la coleccién de Dudley ve mucho me intrigé era A, macrocan- hua. Sus hojas, de un subli ceo, son como lareos ejes céncavos, lineales. que resaltan rigidas en un aeru- pamiento nada apretado. El contraste de ales y su audaz stituye e color azul as espinas mar pia terminal, también negra,” co eran parte de su belleza. El corazon de la coleccién del jardin de Dudley. lo forma un evan monticulo en ef cual ha plantado, ademis de ma gueyes, un buen niimero de cactéceas me- en medio de alzunos arboles y natives, También tiene, va- Tas cacticeas incluyen un buen nimero de Ferocactus. Mammi= Marias vy otros #éneros, Entre los segun- dos habja grandes grupos de color blanco zrisiceo formados por Mammillaria nar Kinsonii y M. perbella, cada uno de ellos, un orgullo de Ia naturaleza, Alrededor del jardin, junto a las bar- das de abundancia Pereskia aculeata, a la saz cubierta de sus bayas enaraniadas. provie- tas de hricteas. fo Cuando . bien maduras son-muy agradables ‘al paladar pero queda después un efecto astringen- te, Un macizo de estas plantas cuands las frutas forman uni abundante cosecha, ofrece un especticulo que deleita a la vis- 49 jedra_ que lo rodean, crecia_en fceas. ta por su colorido, su forma y su natura: leza sin igual. En Io que a Tillandsia se refiere, Dud- ley cultiva especimenes de 7. albida, que crecian vigorosamente, de 1. atroviridipe- tala, wna de las especies enanas y 7. lepidophylla, gue formaba primorosos gru- pos. Fue excitante el pasear con Dudley cuando me Mevé a ver algunas zonas de flores silvestres que reconoci entre aque- as que se han vuelto. muy populares en cultivo alrededor del mundo, tales como Dahlia pinnata, Cosmos bipinnatus, Zin- nia, Sanvitalia, Ageratum houstonianum, cteétera, Un dia Dudley me Ievé a la Universi- dad Nacional en la ciudad de México pa- ra que yo conociera al profesor Eizi Ma- tuda, a Hernando ‘Sanchez Mejorada, al doctor Carlos Beutelspacher ya Victor Corona, horticultor del Jardin Botinico. Estos contactos me condujeron a nuev experiencias. (Continuard) ———000—— NGLISH SUMMARY A story, to be simple, should start at its ehrenolegical beginning. “shouldn't it? About teen years ago Mrs. Dorothy Harvey of San Miguel de Allende. then living in the States, was a subseriber of the Plants & Garden series of publication of at which time ene of the numbers was a boo! wus and other succulents, With which usly involved, aicd ly these plant, tnd not having been able to get jonas to the botanical names cf her cactus and succulents, about four years ago she sent me a few cacti for indemific tien, and a brisk correspondence developed. She urged ma to come to Mexico and spend time with her and her husband at San Miguel de Allende so that she and I vould do some exploring. At that time she had a dit of correspondence with Dudley Gold of Cuernava- ca, and before long T found out T would he wel- 50 come to spend some time with him, also to do. some exploring This was all remarkable good luck. 1 decided to visit Dudley first and Dorathy afterward. Since these two persons, formerly Americans, speak English, they were especially valuable since 1 peak no Spanish. Of course, we speak another common language it is eactus and suculents, T also specialize in bromeliads, and 0 what more xeod fortune could a man ask for that this to Mexico? he day after my settling down at Dudley Geli’s. he found a few hours available to drive me along the superhighway that runs. fr Cuernavaca to Mexico City. We made a stop at 4 rocky fermation and Dudley clambered over « Tittle patch along the right side of the road He anneunced that he had some Villadia ba . T found my way to it and had the exciting experience of seeing my first thing gay tesii_ to show native suceulent ef the trina Tittle with flewers. We had this svecies at the Brooklyn Botanic Garden. so that Twas ac- itv. but ovr olant did and fullness that ve hame. Te was a special Jnk buds and the quainted with it pre not have the visor and erlor it ean attain in its nat delight to observe fivespetaled flowers, white and stardike, at the ys of small clumped shoots. Another little patch of it with flowere was pictureequely sur. rounded in a setting of a light green hed of At the same stop Dudley showed me a few Echeverias he said were E. elauca. They were growing as a community on dark rocks-pedrigal and some slender inflorescences were to be seen. ‘As we drove along en this jaunt, Dudley pointed out a few Agave svecies. One pointed out to me by Dudley as A. franzosinii was a picture of the loveliest pearly green-grey a bold majestic bit of glory of many large rigid radiating Ieaves, the unper third tapering breadly. Tt did not need flowers to satisfy. the artist's eye, its geometrically formed globe of pearly grey was alll that was needed to entich one’s imagination. At another lceation we saw Agave horrida, In the Dudley collection was Agane coli: ‘mana, which rocks by the seashore, Its attractiveness resides in ite very long linear leaves making a grey ball of many slender spears Then there was a giant bright grey A. guiengola from Oaxaca that almost dominated the assemblage. Another, one of the most de- corative plants cn a large mound was @ gorgeous example of A. victoraereginae a mnt npres: sive masterpiece of geometric glory. One species Cact, Suc. Mex, XI 1976 Agave in Dudley's garden that intrigued me no end was A. macroacantha, ‘The leaves, of a rich lovely bluegrey, are long linear concave shafts that stand out rigidly in a loose cluster formaticn. Contrasting black edgind spines ida bold black terminal ene are no small part of its beauty. The heart of the Dudley collection in this garden is a large mound en which he has planted, besides the Agaves, a number of Mex: ican cacti and there are some native trees ant there are some Tillandsias, too. Juded a range of Ferocactus, cther genera, OF the Man arias were’ grand. grey-w af par kinsonii and perbella, each a pride of nature Around the walls" of the garden abundance of Pereskia aculeata. vines with the'r leaiy-appendaged erties in A cod clone makes for good fully ripe, but there effect. An expanse of orangey quantity. eating when astringent _after- lants with the fruit 0 ferming a heavy harvest, is a sight to d the ose with color and form of a unique nature, As to Tillandsia Dudley had specimens of T. albide which was thriving vigorously, T. atreviridipetala one of the midgets and T. Tepi- dophylla, which was clumping beautifully. It was thrilling to me, as Dudley drove me arcumd, to sec ateas of certain native wild flewers which I rece having popular garden subjects the werld aver, such as the Dahlia (Dahlia pinnate). Cosmos hipinnatus, Zinnia, Sanvitalia, Ageratum houstonianum. ‘One day Dudley tock me to the National University at Mexico City to meet Dr. Eizi Ma- ‘da, Hetnando SancherMejorada, Dr. Carlos Reutelpacher, and the Horticulturist cf the Conservatory and Botanical Garden, Vietor Co rena, These contacts led to further experience (Vo he continued), Echinofossulocactus Vaupelianus Resumen enconted, a unos 10 kim, al norte de Zi- in, Hidalgo, una poblacién de Echinofossu- actus que corresponde a E. vaupelianus, © in original carece de localidad. Se ws diferencias en sus caracte Ja més importante de ellas es que existe u porcentaje més menos reducido de plantas que presentan 3 y 4 espinas centrales, en tanto que la descripeién criginal sefiala Gnicamente 16 En septiembre de 1968, durante una excursién que hicimos por el camino que va de Zimapan a Encarnacién, en el E tado de Hidalgo, encontramos cjempla- res de una especie de Eehinofossulocactus. En esa ocasién ‘inicamente colecté y exa- miné dos plantas las cuales presentaban Cacr. Sue. Mex. XXI 1976 MEYRAN Por Jorge ciertas caracteristicas, entre ellas de te- ner 4 espinas centrales, que me hicieron determinarla como. ochoterenaus, esperando su floracién pa- ra confirmarla, Esta iltima especie esta citada en los Estados de Guanajuato y Querétaro, a unos 100 km en linea rec ta, distancia relativamente corta en la distribucién de muchas especies de Méxi- vo, En el Estado de Guanajuato hallamos dos localidades de plantas, que al florecer correspondieron por sus caracteres a E. ochoterenaus, pero las plantas colectadas cerea de Zinapan y cuitivadas en la ciu- dad de México fueron presentando algu- nas diferencias de importancia, como la reduceién del mimero de las espinas cen- tales, provisionaimente 51 Efectuamos una nueva excursién en liar hien dicha poblacién, situada a unos 10 km al norte de Zimapan, a cerea de 2,000 m de altitud. Las plantas crecen en ia te sur del cerro, en abundantes rocas y escasa vegetacidn, eo: mo Opuntia robusta, Q. sireptucantha, Fe= reeactus latispinus, Mammillaria magni= mamma y Sedum moranens marzo de 1975, con la idea de es suelo con Me llevé la sorpresa de que el prime ejemplar estudiado presentaba solamente Tespina central, en cambio la segunda y fan 4 centrales y rara las. En total se Aunque la época ya habia pasado, en los dias, en uno de los ejempla tercera plantas te vez 1a 3en alg estudiaron 10 plantas de flora colectados, abrieron dos flores: rillen- tas, Con los nuevos datos pude desechar la determinacién provisional de E. ocho= terenaus y Megara la conclusion de que trataba de F raupelianus zinal de Werdermann 0 earece de localidad. a deser 01 A. contin de dicha descripeion y después anotaré nena, Pp presentaré la traduccion las pri encontradas ipales diferene la poblacién estudiada, sezuido de un breve comentario. A.—Traduccién de la descripcién origi nal: Bchinceactus vaupelanus Werdermai Notizhl. Bot, Gart. u. Mus, Berlin-Dah- Jem 11: 273. 1931 Cuerpo s pice aplanado y litario, al mplares aqui cultivados ca. netro y ca. 6 de al Color del tallo verde mate, hacia abajo mas pilido. pice cubierto de lana blanca y con igloboso, con el zo deprimido, en los 7-9 em de sobre: acartonadas, y_ oscuras 30-10, plan das por a 8 mm d Costillas ca. dos, cer arqueadas. a uno y etre lado, Aréolas distantes entre si de 52 . ca, de 4-7 rea del pice con espesa lana blanca, mas tarde desnudas. Espinas radiales horizontales radiadas 0 algo extendidas hacia arriba, reetas o po- co encorvadas, ca, de 15-25, blancas, vi treas, rara vez con la punta mas oseur las supericres cominmente las mis cor- tas, las laterales ei 1-15 cm de longitud, I jeriores mas largas a. de base amarillentas y un poco ¢ Jas lateral aciculares, das tinas con otra 162 di uréolas nu puestas un: vas a la bas ca em de le le longitud, mo- subula- rojiz das, punza meni punta peco aplanadai rectas y oblicuas hecia adelante 6 atris del punto de insereién. Cacr, Sve Mex. XXI 1976 menos encorvadas hacia arriba. Cuando existen 2 espinas centrales se muestra la inferior por delante, la superior oblicua hacia artiha. En ia parte inferior. e} euer- po est pinas, completamente cubierto. dees Flores selitarias 0 varias en el pice, en total de unos 2 em de longitud o alzo mis. Ovario pequefic, verdeso, cubierto de escamas verdosas, con franja media morena, con horde membranoso y denta- do hacia el extremo superior y con una fina punta. El color de las escamas cam= hia poco a poco a moreno rojizo h arriba, Axilas desnudas. Sezmentos exte- riores del perianto oblongos. ca. de 1-1.2 em de longitud, color crema con franja media_mas dentados y con mu crén, Segmentos internos lanceolados, ca. tud. 24 mm de anchut ra, en ambos extremos angostados, entero mucrén, color translicido con franja dorsal algo. nas de 1.5 cm de lon oscura, Estamhres numerosos, filaments amarillentos hialinos, anteras amarillas. Pistilo ca. de 1.5 em de longitud. ama- rillento, cen unes 8 estivmas, igualmente colorides, extendides, ca. de 3-4 mm de Jongited, ane sobrepasan los estambres. Patria: México, localided proximada no conocida, R.—Poblacién estudiada, Freron estudiados 10 eiemplares de la noblacién de Echinofossulocactus cercan » Zimanin, Para evitar repeticiones, taré solamente aquellas caracteristicas que nrecentaron diferencias © que no estin anor I de Wer tadas en Ta descripei dermann. Plantas rara_vez cespitosas, se encontré n orig tm grupo con 10 cabezas y otro con dos Algunas plant hasta 11 em de metro mero de costillas: varia desde 27 (ejemplar adulio con fru- tes) hasta 42. la mayoria con 34 6 36. En algunos ejemplares las aréolas estan Cact, Suc. Mex, XXI 1976 s Megan a tener en separadas hasta 2.5 cm. El nimero de aréolas por costilias varia de 2 a 5, en la mayoria de 3a 4, Espinas radiales 13 2 19; espinas centrales 1a 4, de 1-2 em de longitud en lus aréolas jovenes, en las arcolas viejas aleanzan hasta 3.2 em de longitud, subuladas 0 ligeramente aplana~ das del lado superior; su-disposicién en Ja aréola varia segin el nimero: cuando es 1, éste aparece en el centro y es as cendente 0 encorvada hacia el pict cuando son 2 la superior es mas peque- fia, ascendente © casi cn el plano de las radiales y la inferior es mas robusta cendente 0 encorvada hacia el pice; cuando son 3 la inferior central similar a la anterior y dos laterales superiores, pero & veces existe una superior y dos late- rales; cuando son 4 la superior y Tas dos laterales son ascendentes ‘0 casi horizon- tales y la inferior central porrecta 0 li- zeramente ascendente. En la mayoria de plantas predominan 1 6 2 centrales, aunque en algunas aréolas de la misme planta pueden observarse 3 y rara vee 4 centrales, En una minoria de los ejempla- res existen 4 centrales. con algunas aréo- Jas con 3 y rara vez menos, Las espinas de las aréolas mas viejas. en la parte in- ferior de! tallo, son persistentes, dificiles de desprender. Las flores observadas :n de longitud, y los seement perianto eran amarillentos, lieron 2.5 em internos del C.—Comentario, La deseripeién lianus es bastante buena le puede criticar la falta de localidad ti- po y una carencia de amplited de las va- de alvunes < ampiitud que hubiera tenido si se hubie= ran estudiado mayor mimero de ejempla- res o si se hubiera estudiads en el campo. Existe la probebilidad, tanto en ésta 20 en otras especies, que cl colector haya cscogido Jas plantas que le parecieron “33 de E, vaupe- tinicamente se Finch de sus earacter Fig, 21—B. raupelianus, detalle de las espinas tipicas y haya desechado las varia- Le localidad situada a unos 10 km al norte de Zimapan, a un lado de la carre tera a Jacala, puede corresponder 0 no la Iocalidad de las plantas estudiadas por Werdermann, La poblacién estudiada pre- senta algunas teres, los cuale: La variacién més nero de espinas centrales. Originalmente fue descrita con 1 6 2. Nosotros encon: predomina on variaciones han sido anotad en sus carac- arriba jortante es en el ni- tramos que ese carieter Iz poblacién estudiada, pero habia pla que en algunas de sus aréolas habia 3. y rara vez 4 centrales. Mas todavia, hay ejemplares en los cuales predominan las 4 centrales, aunque en algunas aréolas tienen 3.0 menos, Probablemente este él- timo grupo no Il EI color de la flor es crema (creme) en Ia descripcién alemana, aunque la la- ja pilido amarillenta (palli Nosotros la encontramos ama- importancia tina sei wida). rillenta, Pienso cue no tiene esta pequeiia diferenei Por altimo, creo que debo insistir ea riportancia la observacién de mu- chos ejemplares, cscogiendo para su estu- dio plantas tipiccs y atfpicas y cuando s¢ conozcan varias poblaciones de una 54 misma especie compararlas entre si. En relacién con la especie presentada, esto evitard en el futuro que algin colector al hallar al de estas plantas con 3.6 4 espinas ra con flor amarillenta, pueda pensar que se trate de otra especie distinta, © peor todavia, que se trate de una ain no descrita y que la Hegase a publicar como nueva, cuando en realidad son simples variaciones de E. vaupelianus. ——000—— ENGLISH SUMMARY Terge Meyran, currently studying the genus ‘inofossulocactus, writes abcut E. vaupelianus, ly described by Wrerdermann from speck nt to him frem Mexico, without mention cf the type locality Tn Sentomber 1968, during a field trip te the ca of Zimapan, State of Hidalgo, the fond plants of an unidentified spe of Echinofossulocactus that grew along the f the read frem Zimanan to Encarnacion Toese planis had 4 central spines which some: what reembled these nf E. echoterenaus whi ‘ow in the states of Queretaro and Grenajuata about 100 km away as the ercw flies, However. then snecimens taken to Mexico City and eultivat anther showed several ith the importont E, ochoterenaus. prompting Dr. Zimapan o make a secend trip to the A pew field trin was mode aretul north of Zimanan. at an annroximate 000m, ‘The plant grows en the comhern side of the menntain. on very Ie clone with scant vevstation sich as Onvn- ste. 1. strentacantha. Feracartns latisn Mar vd Sedum mos in Morch, 1975. cervation af a enlony sraw nw 10 k altitude of abo arn marnimamme Some ef the eneeimens rollected Moomod somewhat Tere= in Mexion Cite. recv'dine the ans to ma positive identificacién of tes lant whieh nroved t9 he Echinofossulocec. eaunetianrs Wardermone ‘The reader may easily follow in the Snan'sh the full translation of Werderman deserintion in. German as well hers esevintion based on ten chosen “+ the Zimapan locality which, follows: sometimes up to 11_em in diam- 42 but mostly 3436; arcoles Cacr, Suz, Mex, XXI 1976 sometimes up to 25 mm appart, 25 in each rib hut mostly 34; radial spines 1319; central spines 14 but mostly 2, 12 em long. in young areoles, up to 32 mm long in the older ones, subutlated, sometimes somewhat flattened above: when sclitary ascending or incurved; when two the upper one shorter, ascending on incurved; ‘shen three 2 laterals “growing either on upper cor lower part of the areole with the third one growing en opposite side; when four 3 upper ‘ones ascending to almost horizontal, the lower almost porrect. Flower 25 em long: segments. yellowish. ‘The m n lies im the fact that while he mentions ‘only 1-2 central spines, about 207 has 3 or even 4, None of the plants observed at the mapan locality had a central spine half as Jong as the 7 cm mentioned in deserip 000 10 ANOS DE VIDA DE LA SOCIEDAD “AMIGOS ESTIRIOS DE LAS CACTEAS” El 2 de marzo de 1975 la asociacién je “Amigos Estirios de las Cacteas”, que tiene su domicilio social en la hermosa ciudad estiria de Knittelfeld, Austria, ce- lebré su X Aniversario. Allen el afio 1965 al tiempo de su fundacién por unos amigos de las cacté- ceas, estos aficionados fueron acogidos con sonrisa_ comp: y a la asociacion se le profetizaba solamente una corta vida, Pe- ro todo pasé de manera muy diferente. Vinieron’ y todavia siguen Iegando ins cripciones de nuevos miembros. En el mes de abril de 1965 se contaban sola~ mente 58 miembros y hoy se puede ha- hlar de un niimero notable de tres cifras. De un pequeiio circulo de amigos de las cactiveas procedentes solamente de la vecindad, results una sociedad intenacio- nal, que tiene miembros no slo en Aus tria, sino también en Alemania (Ocei dental y Oriental), Suiza, Dinamarca, Checoslovaquia, Hungria, Polonia, Italia, Malta, Israel, México, Nueva Zelandia, U.S.A. y Ghana, Este desarrollo tan favorable en el trans: curso de tan pocos afios se debe en parti- cular a la actividad y amabilidad del prohombre de la asociacién, el Sr. Josel Vostry, y a sus buenos ¢ intimos amigos EL Sr. Vostry también es editor de una simpitica revista, que se lama Cacr. Suc. Mex. XXI 1976 Por Karl Zép/* de los amigos estirios de cacteas” y que se publica mensualmente, con 12 paginas. Esta revista presenta si mpre_articulos especiales sobre cactaceas e informacio- nes de la asociacién, ademas también no- ticias del mundo internacional de los cac- tos; ademas tiene un tamafio practico con cubierta fuerte, El mismo Sr. Vostry casi por si solo hace todos los trabajos nece- sarios para su edicién y despacho. Por esta razén las condiciones de suscripeién y las cuotas de socto son muy modestas. A todos los amigos de las cactaceas, que ademés de su revista acostumbrada desean una segunda revista especial, re- vista buena y barata, se les puede reco- mandar las “Noticias de los amigos estitios de cacteas”. EL precio de suscripeién para amigos extranjeros, ineluyendo la cuota de s0- cio) es de 8S 58 (Shilings austriacos), seripcion hay que pagar una cuota 0, por una sola vez, de 8S 5. Las ipeiones y pagos (por medio de giro postal para el extranjero) deberin diri- sirse al Sr. Josef Vostry, Josef-Kohl- Gasse 3, A-8720 KNITTELFELD, Aus- tria, - ! © Apartado Postal 250, 1-72. TUTTLINGE, Repiiblica Federal de Alema 55 Fig. 22—Mammillaria pringlei, H. 8507. ENG.ISH SUMMARY On Mareh 2, 1 the Stirian Cactus Friends celebrated 10th anniversary. Although a short life was predicted for the organization when it was founded by a short group of cactus lovers, now, ten years later, it has grown and become international and has several hundred members. The amacing grow of the society in such a efforts is, Mr ils”, few years, has been mainly due to. th Mr. Jevef Vestry and 9 few close frie Veciry is also the editor of the atract nal “News of the Stirian Cactus Fri (Fot.. Hunt). 12 page monthry publication containing. interest news on cacti not only from Austria, but from over the world. To all those cactus lovers that besides their favorite cactus journal would like to receive a goo and inexpensive specialized publication, ghly recomend “News of the Stirian Cac "A one time SS 5.00 (Austrian ¥.) initial fee is required and the yearly sub- cription rate is 8S 58:00 (Austrian Cy.), pay able by postal order which should be mailed to Mr, Josef Vostry, JosefKoh-Gasse 3, A-8720 KNITTELFELD, Austria,

También podría gustarte