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NIPPUR_DE_LAGASH JI 10 ZY de qUE olra manera pueden narchar os derrolados? Ta veraben= 2a apasta los hombros con el peso de una montana y duelen las sauertes indtiles que s6le han hecho florecer el racaso... | Sabir Sema ner oy pa SA SSE | A=, No han podido detener a Tos hilitas. _2¥ c6mo hubleran podido? Soldados de barrigas pesadas que han pasado demasiado tiempo en los cuarteles. Armas enmohecidas. Carros mal cuidados. No es un ejércita. Es una caricatura.) - St Los hititas lievan siempre {la ventaja en este eterno |contlicto de |{ronteras. ellos son los hijos de la guerra y desde la cuna hasta la tumba s6lo saben pe- leer-£s su cien- {cia TY son maes= trosenello._} ‘Shebaneta es guerrereegjpcioe insolent en ese orden. Se u-_] (ES QUE Sey Un anclano Temerowo de Tos : 16 os sumeris porque los despreia un poco menos que alos | _J6venesvaientes como t 2a hittasy porque fundementalmente ama le guerra no importa ba Joaud standart la = Vete al diablo Esto es serio. 2Sa~ bes que los hititas nos han pul- Shebaneda, es acca bueno verte, Lo suponta. Esta tropa hele a derroty, Sul J iDerreia? Tal Hie tea excrementos,a cobaria y a estupi- ez. £1 combate du- 6 loque dura un estornudo. orrie- | ron tan répido que ni fos hititas en sus carros ios pudieron Debertas burlarte un poco me ros, Shebanebe. Td también formas carte de este ejército abia ofGo hablar de Artamas, el gene= ral, pero era la primera vez que lo veTa. Me gust6. Parecfa duro como el granita, quemado hasta los huesos Dor el fuego de la guerra y leal a su maltrecha tropa de derrotados. TG eres Nippur, el de La~ gash, deh? Bienvenigo 2 Imi campamento. Si Dejaré descansar a la tro ae intentaré detener 2 los hititas junto al rfo para dar tiempo a que Hleguen los re- fuerzos de Akad y lagesh. ja! iClaro que ls oe Hendrés! i! tiempo ne cesario para que dejen de refrse cuando vean a tus soldados y el se- gundo que les llevar apartaris de un sali- azo! a ja, jal aDetenerios? ia, 2, ] f j iVejete,presumido!iNa pega a Shebaneda si ‘Arlamas no se con Su. caballo y de un pechazo lo hizo rodar por | tierra Sheba, Guarda & wspale y com> Taga Gon un glpe de Taones pizagrar su troia.un poco mis tu lengua. Dentro de poco na- caballo ya trte voli6hacla Su trope rd batalla y necesitaré individuos como té. Viejo cretine... Qué opi NoTue un campamento alegre. Los Tamenta- bles soldados sumerios comieron en silenci Junto a sus hogueras con las cabezas bajas ¥ evitando mirarse. Los caballos arrastraban el hocico en el polvo y ellos también pare- clan derrotacos. Bueno, es indudable que el viejo Artamas sabe c6rmo tratara un chariatén de tu laya, eh? Thira quien habe de charlatanerta ‘rees en Ta legada de los re-] [20 sea que es fuerzos sumerios Artamas? | | peres que Ser- Z| | vn, el soldat, | se alfe con Lug ane Coca razén para que yo peleara aqui. No puedo ganar. Sélo puedo demorarios esa demora se paga con vidas |coiia en ningu- De PAE | 0 ce alos, Ur-EL.que sito cree en ddlender se solo? Suena ditt, QUE cra cose queda? dAceplar fo que QUE posta decirTe? No soy un sabioy carezco de pats; Ta querra ipBrece ineviteble, desbander a mi tro- hha sido para mi siempre un accidente, nunca una costumbre. pay dejar los valles sumerios abiertos Y 116 dormir. Te veré con el So, Nippur. 104 El sol. Pobre Ariames... Hasta el Gitimo aguatero del eército ) [No oyes rumores etvaios? los soldados huyen durante posra dcirle fo que el sol traers noche. Los he visto. Dejan sus armasparacorrer con més faciliad. Manana tenéemos dez lanzas para cada soldado Nip- 7 Shabana two raz. Solo un purado de veteranos amanecié en el campamen: a. del otro lado del rf, los hititas en negrecian le tierra como una nube de IV yo odio ser derrotadoliNo me gusta la derron ta ila he probado mil veces! iAhora quiero vencer! iQuiero ser un vencedor y no siem= adie 08 cbligado a quedar-\ | [ome quedG nadie me pregunt® | [ se conmigo. AGn solo pelea) | | por qué. Soy viejo y cinicay pa- | rani los hombres son atin mis importantes que el sentido comén Con sélo diez tle cchas cada uno, Qué ister ZSiques dispuesto 2 (fra un espectdeuToespléndida. Los carros avonzando con el agua hasta }los ejes, en pertecta formacién, {a caballerfa distribuide en cadres y Jlos arqueros alineados en ta orilalistos para cubrirlos con una Mavis [Shebaneba suspiré, Eso es un e[érclta.¥jcomo de costume yo estoy en el que no debiera y Tos carros Brtaron corn rayos Tagua y con un solo grito terrible atacaron. Tas estacas fueron muy ddiles, se hundieron en el sue~ Tofangoso y los hi- ttas estuvieron so- bre nosotros. En un eldmpago vi sus duros perfiles de Pobres querreros sumerios ablanda= \dos por fa paz, el buen comer y be- lber de nuestra tierra opulenta. Fue- ron despedazedos, muertos, lancea- ios, pisoteados. Ni siquiera tuvieron 'Y 6508 CarT0s, 8505 Carros Rifas gue] Retrocedi mos peleando hasta una colina” parecen inyuinerables a todo. |cercados por la hor nigas carniceras, Icbriéndonos unos a otros, mientras et [aire nerva como el caldo dela muerte acclén. Era como un leopardo evitando KX golpes y acuchillando enemigos, matan” dou propa furia de derroa et preciode su muerte mé ya el que ni tenfa razon de estar al excepto la de amar a los derrotacos Hay una humanided angustiose en la etry hay ale ware avi . , oo '¥ Artamas el viejo lebo,sabio e Impetuosa cabrindose humilla~ |elén con muerte su Gina gel, vy Peroya era alti Un) | [0 even yo seieetavon hitita con insignias de | aficial gritée | iPerros...1 iMatadme al menos! SOS tres... ilos | quiero vivos!~ No nos maltrataron. Eran demasiado buenos soldados para perder tiempo en tonterras de £256 tipo Nos ataron, nos colocaron un centi- rela a la vista nos obviaron, [Shebaneba simplemente dej6 caer su espada y son- iz ch yi We Y ya lerming nuestra guerra, eneralitia si 0 corta y muy gloriosa... pero estamos vivos, ‘Me quer8is’ vivo? No discutiré la Intelgencl de esa decisién. Soy un mercenarlo y peleo po precio. ¥ ahora ya no hay nadie que me pague. Noes mucho consuelo es0, la muer= Una voz profunda y satisfecha nos te borrarfa la verguenza, hizo alzar la cabeza, 07 Mis HOMDreS me han trafto un verdadero teso- rohugano! Bans Los vivos pelean otra ver, Debe= TNiFiamil es el mejor guerrero de Tos nits. Un carro egip= [cio con cuchillas en los ej se lle sus piernas pero 1 es0 ha anulado su talento, Las batallas se declden en su cerebroyy su lucidez y atucia valen més que mil carros. [Pero su jowalidad murié al volverse fa mf-Es demasiada la sangre entre el pas de Hat y yo. Aaa ginery ue ene. sheen ner [canara un buen mec iQué haré con voso- tros? dMataros? Seria desperdiciar una exce- lente carne de guerra. Estdis derrotados y yo sé lo que duele eso. No. No puedes hacerlo. Puedo leer en tu men- te, Miriamil. 2Qué ejército-su merio con ser- varfa su moral si yo me pasara a tus filas? ZY tG, egipcio? Tienes la misma eleccién. Pue- do darte el mando de cien. Habrd oro y muje- res para ti. Qué respondes? | Yo soy de tu raza, no ellos. Yo soy un guerrero como ti. Hay mds en comin entre nosotros que entre tG y tus ciu- dadanos de barrigas y miedos pequefios 107 éSugleres que pelee contra mi propia gente? Yo tengo un cuerpo de merce- narios, hombres de muchos paises que gustan ganar las éTu gente? ZQuiénes son? Los que te enviaron con ese ejército lamentable a hacerte matar? Pobre Artamas, iQué ma nerad gUerras... y no me vendrian mal dos oficiales de experiencia para quiarlos. En efecto y no dudaré en que- Si hubiera sido un soldado de tropa, Artamas brarte si es necesario, Te doy hubiera escupido. Siendo general ni siquie- una oportunidad mas. Gloria ra honré al hitita con ese gesto. Simplemen- to? te lo ignoré. Soy un hombre que se compra. Acepto. Te conazea TU eres un zorro astuio] --.pero antes nos ocuparemos y,site dlera una oportunidad, me en gafiarfas. Té eres escurridizo,sutil eimprevisible. No puedo adivinar lo {que harés y eso me molest, Prefiero de Artamas, iguiente el ejército ite forms una gran , sentados en el suela, comiendo y bebiendo, Bh como sifueran a asistir a un especticuia.. en BT cierto moro ast era ' ‘SHiebaneba resplandecta en su nuewo i Trajeron tenavas y braseros clavos y acelte Luniforme de escamas de bronce, insolen~ hirvenda, todo el ceremonial de! horror, Ary tey gallardo como nunca, de pie ala de~ tamas ni los miré pero su rostro palideci6, ‘echa del hitite. No perdié la sonrisa cuando nos vio aparg TMiriamil esperé un momento or la respuesta que nunca TlegS y por fin, esperando el grito, Yel olor de ia carne quemada, el s13e0 det beonce humeando y el aire denso de mil respiraciones alertas,acechando el dolor, ‘No hubo grito as enazas y Tos arlon Los itt no comen ni be- ben. Séo miran eae cuer po stb el cua secban los insectos negros. Tal vez jahora brote el alarido mor~ Idi No hubo alarida — os y Ps RE ye - dq, se oculta tras las nudes, {al ver ahora el sumerio = x UE [Ya ronda Infame recomienza. Un Ni- {Que acurre, indtiles? 2Es que tendré (que usar todo ese cacharrerfo con voso- tros? iQue grt! | “tte se pone de pie. Luego otro y otra EI Wento ha cesadoy los estandartes | cuelgan camo ples de cassveres. Lt Victoria de Niriamil se esté desmora- | nando. 110 Es mejor que detencas esta se Basta. Continvaremos manana for. FI eecta que estés consi- * iTendré que rendirse! gulenc> es netasto Ese perro... {Cémo pue~ de resistir? {No es hu~ mano! Toda Ta noche velé junto ese cuerpo martirizada cu’ ando las heridas que podta y relrescando su restr. Descansa, Artamas. Descan- 3, hermano, ‘De pronto sent? una presencia y acé la vista. Shebaneba estaba de pie bajo la luna y miraba 2 Artamas sin decir pa labra, Parecta un hombre muy confusa la nache. A lo lejos se ban las consignas gri- tadas de los centinelas hititas, Tiriaril wird er mar de rostros a su alrededor y lo vitranspirar. Recién ahora com- prendra que cada rmigaja de esa tor- ura fo habfa apar~ tago de sus hom= bres y que el pri- sionero los nabia hechizado con su sangre y su silen~ La almdtera era diferente. Los hit ‘tas aparectan sombrios y molestos y no exist clima festive del 4 anterior. Miriam estaba nervio~ lil Un momento, shor. ‘TG n0s conoces. So- mos tus soldados. Te hemos seguido en mil batallas y te se- guiremos. en atras mil... pero no wel vasa tocer 2 este hombre. €l es sagra~ 0 ‘Soy un guerrero. No soy una hniena. ¥ s6io es sagrado el hom bre que no teme a la muerte y ‘que guarda su honor. El sume rio lo es, Todas nosotros la sen~ SS _ Shane apenas se navi Fu co- mmo un suena oF Tin comenzaron @ apartarse. ReTuTan como Tas aguas de un = jercto.E ‘mar en bajante. Algufo sefial6a Shebaneba pero los demés se | [iff solos. I hitita muerto. El lea traidor. £1 ~encogleron de hobros. @P vacebundo...y Artamas. Pregunté: Far W iibea neqarse a tanta grandera Ese Glas ofdaAramas? Vas vencide, sumer me he encadenado a él por vide, Te Sin ejérclte, sin lanzas, has ven ie wee S2y un mercenaria, Tengo un preci cdo td sole."Tu nombre ser cantado Y Be pani, en. Sumer y todos los nifios que naz~ can esta primavera llevarén tu nom Tos ojos Tienos de cielo. Ajenoa su victoria. A Jeno a toda La gloria de Sumer. FIN

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