Nuestra visin del arte se basa en la expresin de uno mismo, de
nuestra propia identidad.
El arte no debe ser valorado nicamente por su componente esttico, sino que es importante tambin que transmita algo ms all de la mera apariencia, bien sea un concepto o nuestra identidad, remitindonos al prrafo anterior. En base a ello, en nuestro arte no hay limitaciones ni en la forma ni en la tcnica, pues esta importa en la medida en que nos permita alcanzar la total expresin. El arte no se entiende como algo meramente algo plstico o visual, sino que tambin involucra al resto de los sentidos. Incorporamos lo tctil, lo sonoro... etc. Nos replanteamos la relacin entre obra, espectador y creador. La obra no es slo el objeto fsico final, sino las relaciones que se establecen entre los espectadores y ella; lo que sucede delante de ella. Por ello, optamos por llevar el arte a su pblico, por sacarlo a la calle, por no limitarlo por el entorno. En esta lnea, consideramos vital la existencia un arte relacionado con la naturaleza, y la existencia de un arte relacionado con lo social y la crtica. El Arte es en realidad lo que uno cree que es Arte, lo que la sociedad cree que es Arte. En concordancia a ello, no tiene sentido limitarse o ceirse a conceptos o definiciones: volvemos de nuevo a la libertad ya menciona, y con ello, a la capacidad de experimentacin del artista, al inconformismo. Queremos hacer del arte nuestra vida, y por ello buscamos arte en la misma: llevando el arte a lo cotidiano, a los objetos que nos rodean. Nuestra produccin no es o ser influenciada ni condicionada por las demandas del mercado del arte. Nuestro arte no estar vinculado exclusivamente al provecho econmico, puesto que proviene de una necesidad interna que necesita ser expresada y manifestada, pero no vendida o comprada.