Está en la página 1de 1

Tcame, desprndeme

Entre beso y beso, haces erizar


todo mi cuerpo, s que no soy
la mujer con curvas perfectas,
pero cuando tus labios ruedan
por mi cuerpo, cualquier pensamiento
de vanidad queda por fuera de esto.
Acaricias mis senos, me besas
desaforada y dulcemente, parezco
estar en la zona ms candente
de esta tierra; siento tus labios
bajando por mi cuello, por mi
pecho, por mi vientre.
Mi humedad baja por mis muslos,
mientras que tu intentas retenerla
con tu lengua.
Mis cabellos se hacen una selva
de maraa entre tus dedos; mi
silueta en la pared, refleja mi
cuerpo arqueado por la magia
de tus dedos.
Mis pupilas estn dilatadas,
mis piernas cada vez ms
separadas una de la otra; pierdo
tu cabeza de mi vista, est all,
anclada en aquel mar donde mi
jardn florece.
Quiero salir volando, mis manos
empuan las sbanas, siento que
estoy flotando, mi respiracin
se entrecorta, me hablas al odo y
haces que mi respiracin se acelere,
estoy gimiendo.
Siento que mi alma se desprende, me
arrancas algo de mi interior; mi cabeza
est inclinada hacia atrs, mis ojos estn
cerrados y mi boca est abierta, grito!
Un suspiro, estoy agitada, estoy
jadeando, abro mis ojos, no s
donde estoy, escucho un te amo y
siento que me abraza un cuerpo, un
cuerpo caliente y hmedo.
Suspiro nuevamente, yo, una
mujer, he renacido con aquel
hombre.
Por: ngel Herrera Daz

También podría gustarte