RE CHARLES DARWIN, angen canoERAE. ¥ coNCLDRIEN ‘Bastard on muy breve eamazio pera evcear en Ja memoria ‘de! lestor lea puntos ms ealentss de esta obra. Meshes de lau ides ‘xpuastas timan marcado sabor eqpeculativo, y de algunes, cer! tameato, se probaré quo son erxGnots: siempre, empero, me «s- foreé en presentar Tas razones que me impulssbin a une opinibheeu ORNERAL ¥ cONCLUSICN vale que a tres, Enel intern, ho paroeldome Gti investigar hasta ‘gu6 panto el principio de ls avolaciin puede aerojar alguna lax sabre algunos de los ms complejos problemas de ls historia natu ‘al del hombre, Loa heshos inexact gon en extremo parjudleiles, fal progreso de lz clencis, pues tardan largo tiempo en desvane- corse; pero Ins opiniones inezactay si estin fondades en elgunas [prucbes, no oauaun grandes porturbaciones, pues todos hallan es pecial delete en patentisar au falsedad; y coando esto sueade, Al par que Ia iaeosign cerra el camino al erear, no pocas veces bre el de la verde. ‘La principal eouelasion & que aguf hemos Iqgado, y que hoy ‘As Ia mantieaen muchos naturalists muy euterizades, que el hombre descende de un tipo de organizaciéa inferior. Las bases fobre que eats conclusia dessansa ron inguebrantsbles, pues la tetrecha semejensa entre ol hombre y lee animales inferiore, d0- ‘ante el peredo embrionsrie, asi como lor iznumerables puntos e su estructare y constitucién, una veoes de suma importanca, ‘otras de menor euantia —loe rudimentes que el hombre couserra 4 les anormalesregresione a que so ella sujeto —bedhes son 50- ‘bre Toe que no a2 posible disouti. Pueren ltaa convcides desde hace mucho tempo; pero hasta thera poco 0 nada nos babian ex- presado respecto al origen del Lombre, Vistos hoy a Ja luz de ‘muestros concelmientas del mundo orgénteo, sus Indieaciones vou {nfalibles. Bl gran principio de la evolucin se yergue claro y pre- ciao al considerar todos esics grapes de hechos en matun cone ifn, tales como laa respectivas afindades do los miambree do un ‘mimo grupo, su distribacién geogréfien en el tiempo paredo y el ‘presente y su seasién geoligise. Ke inndmisible que juntos todos tos hechos hablaran a un tiempo erréneaments. Aquel que no se satisfac, cual el salvaje, do vor a todos les fenémenes de la No- turalesa como ai eauvieran dislosedoe « inconezoe, no pusde por sausho tiempo seguir reyendo que el hombre es frato de un acto teparado de In ereei6n. Hallarise forzaco @ acmitir que Ja estr= ha temejanza del embrién humano al del perro, por ejemplo — que la estructura de su erdneo, metros y armastn, sobre el mis ‘mo plan trazado en los mamiferes, indapendientomente del uso a 14 —————EeE_ El que ests partes se destinan;—que la reapiariei6n accidental de ‘iveraas estricthras, camo, por ejemplo, Ia de ciertos misculos fave ondinariamente no pose e} hombre, pero que se encuentran en ‘stalo normal en los euadrumanos, y que uns maltitud de hechos ftniloges, todo a um Jo leva del modo més manifiesto-a Ia con tlusién que el hombre es eadeseendienta, con otros mamfferes, de ‘un progenitor comin, ‘Hemos visto que el hombre:ineesantemente manifiste dite renviag indiriduales en todas las partes de sa euerpo ¥ en sa avuleades mentales, Exes diferencias o variaciones parecen pro voetdas por lag. minmas ceusas generales y obsiecer a idéntieas Teyes que lo snimales inferiores. Bn ambos casos dominan seme: antes leyes de hereneia, Tiende el hombre a multiplicerse en pro- Doreiin mayor que sut medios de subsisteneia, y por lo tanto, hillase expussto en ocasiones @'ana dura lucha por la existence, con lo que Ja selecciém naturel abré cbrado gobre cuanto xe ‘bajo au férule, No os menettor para esto una sucesién de varia- clones muy exagerades de la misma naturalesa: bastan algunas ligeras fluetaseiones diferentes en el individuo para la obra de la ssleseién nataral, ¥ tampoco tenemos rezones para suponer que ‘en 1a misma expecis todas las parte del orgenismo tiendan a va- iar en idéstivo grado. Podemow-considerarnos siartoe de que los cfortos herediteri dal uso o.desuso repetides obraron poderose- mente en Ia misma dineesién que Ia seleeciin natural. Moditio cones que antes foeron muy importantes, pero que ya hoy n0 tienen eplicsei, se siguen heredando durante largo tempo: Cuss= do una parte ne modifies, las partes eambian también en virtud {el principio de correasién, cosa de la que tenemos numeroses ‘hamiplos de casos muy curioeos de monstrocridedes cortelatiyas. ‘Algo también hay que coneeder a la aveiéa directa y definida ‘de las condiciones amblentes de le vide, tales como el alimento fbundente, el calor y Ia hunedad; finaluente, pudiesen asimisno fadquirirs por eeleccin sexuel muchos caracteres de eseasa im: portancia Siioligies, af come otros que la tienen muy considerable, ‘No hay dasa que el hombre, asf com todo otvo animal, presen ‘0 estructuras que a nests limitades eonosimientos no paresen nsserles e ningund atilidad, ni aore ni antes, 9 pra os teminos ‘ordinarios de la vids, ya en wus relasiones sexuales. Semejantes ‘structuras no pueden ser explicadas por ninguna clase de slee- cin i por ls efetos herediterion del so desizo de las partes Sabemos, sin embargo, que gran wiimero de peculnridedes extra Sas y may seGaledas de estructura se preseutan ascidentalmente en nuestros animales domistices, y que si sus caucus iguotas obra an con mayor uniformidad, probablemente habrian legado a ser ‘comunes a todes los individuos de la especie. De agut que poda- soe eaperer llegar a entender algo do las caueas de somojanter sodificacines accidentaler, sabre todo por el estudio de las mons ‘ruasidades: por eso las trabajos de los expevimentadores, come 10g de 3, Camille Darecte, estén Henos de promesas para el por- venir. Ex general, slo podemes desir que la etna de toda ligere varlacin y de toda monntrwesiad redica mucho ms en la cous titneién del crgenismo que en la natoralera de law condiciones ambientes, bien que condiciones nuevas y dstintas tmgan clerta: rente pare muy principal en toda ease de earabios engine Por los medias que se aesban de cotsignsr, y ayudado tal vex por otras ain por deseubri, s¢ elevé el hombre a su presenta po- icin. Mas asf que alcanz6 el rango humane, se separé en razas Gistniasy 0 como més conviene llamarlas, en subespecis. Algu: ras de Gees, como el negro y el europeo, son tan distintas, que si se mostraran repentinamentey sin preparselin de ninguna cla. se ojemplares respctivos aun natarslista, habia de carsiderarles ‘or especies verdaderas, Sin embargo, conforman todas ls r4zas fen puntos tan eseueiales de estructura y en tantse partoularida es mentale, que silo puclen hallar explictoiin prorrdiende to: das de un progenitor eomtn, el qu, al poseer esos carscters, hay ‘ate cousiderarle dentro del range Lamune, No debe suponerte que Ie divergencis de cada raza de todas Jas otras, y la de todas juntas del troneo comin, pueda bacerse re- ‘montar hasta una sola pareja de progenitores. Al conrari, a eada cstado del proceso de modifeacia, todos les indivduoe que #8 ‘neontrahan por cuslguier cireanstancia mejor acomodados a S06 vondicionte do vila, aangue en difereates grader, cebieron de so- us brevivir a los que no disfrataban de Tas misshas ventaja. BI pro: eso veritcado habré do semejante al que sigue el hombre euan- {do tin inteneién eacoge les individuos partielares, guardando los {e easta superice y desechendo los inferiores. De esta maners poco ‘poes, pero seguramente, modifice 1b casta de sus animales, -y fin darse euents forma otra nueva. Asf en To qu toca a las mo Aificaciones adquiridas independientemento de Ia eleven, y de- Didas a es variaciones promovidas por la naturaleca del organis- ‘mo y scciin de Ina condiciones ambientes 0 del cambio de hibites e vida, no existié ninguna pareja especial que fuera mucho més rmodifieada que las otras que se hallsban en Ta mlsms eomrce, pues e388 modifiasiones, en semejante caso, tendrfan que irse borrando por efecto del litre cruzamiento-entre Tas parejas. Considertndo la eatructare embriolégica del hombre—les Ihomologias que presenta con los animales inferiores —Ios rad ‘mentes qu atin conserva, y las regresiones a que ee propens, TPodriamos en parte recoastrair en la Smaginasiin ol estado p ritivo de nuestros antecesores, poniéadoles spreximagameate en fl Tuger que le corresponds en ln serie sooldgica. Vemcs est que fl hombre desciende de wn mamiforo vellude, con rabo y orejas ‘untiagudas,arbéreo probeblemento en sus hébitosy habitante del ‘mundo ntigue, Si un astaralite hubiera examinado toda la es tractara de esto se, le habia elasfioado entre loa euedramanos lo mismo que el progenitor aun més antiguo de los monos del viejo ¥ nuevo eontinente. ‘Los euadrumanos todos los mam{fsros superiores dessien- den probublemente de un antiguo mareupial, el que venia a ma ‘yes, por wna larga Lina’ de formas diversas, de algin ser medio tnfibio, ¥ Gate nuevamente do otro snimal comejante al per, En Ja epena onsuridad del pasodo adivinemoe que al progenitor pri- sitivo de todos los vertebrados debi6 or un animal acustico pro- ‘viato de branguis, con los dot sexos reonidos on el mista indivi- ‘2ao y con lee Grgance ‘ads importants del cucrpo (como, el ‘cetebro y cornzGn),'o imperfectemente desarrolledos y aun sin desarvolias. Hee animal debié parcoer oon veataje w las larvas Ge Tae action asidias marinas sobre toda otra forma conocida. a7