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COMPARENDOS AMBIENTALES PARA ROBA MANGOS EN VALLEDUPAR

Robar mangos tiene sus implicaciones, entre esas pagar el comparendo ambiental.
Recoger los frutos de un rbol cuando estn biches equivale a un comparendo ambiental. Los
jvenes que realizan esta actividad, entran sin permiso a las terrazas de las casas invaden la
propiedad privada y en ocasiones agreden verbalmente a los dueos de las viviendas.
La comunidad se ha quejado porque las personas entran a las terrazas sin importar que estas
se encuentren con rejas, lo que ha ocasionado molestia entre ciertos habitantes de distintos
sectores de la ciudad.
Los comparendos que realiza la Polica Ambiental, consisten en obras sociales.
Cuando se les sorprende por primera vez, se cita a una charla; cuando reincide, se
le impone que haga actividades de limpieza en los parques de la ciudad.
La Intendente Jefe de la Polica, Adolfina Gmez Oate, afirm que en un futuro eso se puede
convertir en una problemtica de tipo social y que en algunos casos podra ser el detonante
para que haya una discusin fuerte entre los mangueros y los dueos de las casas.
Como los mangueros agarran las frutas sin permiso, los dueos del rbol les reclaman a lo
que ellos contestan con groseras y palabras soeces; entonces dado el caso que uno de los que
est bajando los mangos, insulte a una mujer y salga el esposo o el hijo a defenderla, puede
presentarse un problema grave, explic Gmez.
La polica ha incautado las varas de quienes se dedican a esta actividad, en barrios como La
Esperanza, San Martn, Los Mayales entre otros.
Las horas donde ms hay robo de mangos, son entre las 5:00 y 8:00 de la maana y de 12:00
del da a 2:00 de la tarde.
Luisa Mara Arvalo, habitante del barrio La Esperanza, asegur que ha sido vctima de insultos
de los mangueros, me dicen de todo, yo les digo de buena manera que no cojan los mangos
sin permiso, pero ellos lo nico que hacen es insultarme, cuando es as me toca llamar a la
polica.
Gmez Oate afirm que si bien es cierto que reconocemos el derecho al trabajo y
reconocemos que ellos en lugar de estar consumiendo droga o delinquiendo, ellos pueden
negociar con los dueos de las casas para que les regalen los mangos o se los vendan.
Por Freddy Oate Acevedo

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