En el Arte Marcial, como ya lo he explicado en otras ocasiones la lealtad, es
uno de los pilares en la relacin Maestro-Estudiante, y al igual que cualquier otra cosa es necesario cuidarla, fortalecerla, y seguir estrechando los lazos mgicos que unen esta relacin. Analicemos los valores que lleva implcita la lealtad, en esta hermosa historia, que en alguna ocasin ya les cont!. EL BOSQUE Erase una vez un "osque muy grande y muy "onito, donde vivan felices muchos animales. En primavera se llena"a de flores y en el invierno, la nieve mo#a"a hasta muy hondo la tierra, que era f!rtil y generosa. $omo todo "osque que se respete, tena un ro que produca un agrada"le sonido al correr el agua, que serva de fondo musical para los #uegos de los cachorros, que se divertan a la vista de su madre. %ero un da en tiempos de seca, se desato un incendio terri"le, cuyas proporciones avisa"an a sus moradores que el "osque i"a ha ser consumido. &, en masa, comenzaron a huir despavoridos. 'lo hu"o uno que no trata"a de escapar. Era un animalito muy d!"il y peque(o. Era un pa#arillo) este vola"a hasta el ro y se mo#a"a y, rpido como poda, sacuda sus alas so"re el fuego, para que all cayera el agua que se le ha"a adherido. %ero eran slo unas cuantas gotas. En ese momento paso un elefante #unto a !l y lo cuestion por lo a"surdo de la empresa. %ero, que haces, si ni yo que tengo una trompa tan grande y que puedo almacenar mucho agua, no tengo posi"ilidad de parar esto) menos t* insensato. +o que de"es hacer es huir antes de que el fuego encienda tus plumas. %ero, para su sorpresa, el pa#arillo se neg y le respondi con claridad, yo aqu nac y este "osque me ha dado todo) casa, co"i#a y sustento. -o, yo, no voy a huir, voy a "atallar con todas mis fuerzas para salvar mi "osque y, si en ello pierdo la vida, no me importa. &o no podra vivir sin un r"ol donde hacer mi nido para que nazcan mis gorrioncillos, y sin el aroma de las flores de mi "osque. +os dioses, conmovidos ante seme#ante respuesta, enviaron un torrencial aguacero, que termin con la grave circunstancia. Rodolfo Velzquez Cano