ABSURDOS

Fredric Brown
Mr. Weatherwax untaba cuidadosamente de mantequilla su tostada. Su voz era firme:
- Querida, quiero que esto quede bien claro: a partir de ahora no habr ms lecturas
embrutecedoras de esas en nuestro apartamento.
- !ero "asson, #o no lo sab$a.
- %omprendido. !ero es de su responsabilidad saber lo que lee tu hi&o.
- 'o vi(ilar) ms, "asson. *o le vi traer esta revista. *o sab$a que estaba ah$.
- +ampoco #o lo sabr$a si a#er noche no moviera por casualidad un co&$n del sof. 'a
revista estaba disimulada deba&o # por supuesto le ech) una o&eada.
'as puntas del bi(ote de Mr. Weatherwax se estremecieron de indi(naci,n.
- *ociones rid$culas, ideas imposibles. %iencia ficci,n -.h/ -Que bonita es su ciencia/
.pur, un tra(o de caf) para calmarse.
- -0id$culas vanidades/ -Que cosas ms absurdas/ -1ia&es a otras (alaxias (racias a la
cuarta dimensi,n/ -Mquinas para via&ar en el tiempo, teleportaci,n, tele2inesia.../
-3obadas, nada ms que bobadas/
- Querido "asson - di&o su mu&er esta vez con un poco de dureza - 4o te (arantizo que a
partir de ahora vi(ilar) las lecturas de 5erard. +ienes toda la raz,n.
- 5racias, querida - contest, Mr. Weatherwax calmado - 'a &uventud no deber$a verse
envenenada por esas ideas contaminantes.
Mir, su relo&, se levant, con prisa, bes, a su mu&er # sali,.
6n la puerta del apartamento se de&, deslizar lentamente por el pozo anti(ravitaci,n #
flot, hacia el ba&o de los 788 pisos, hasta la calle donde tuvo la suerte de detener
inmediatamente un taxi at,mico. 9io al chofer-robot los datos del astropuerto lunar. 'ue(o
descans, # cerr, los o&os para captar el bolet$n teleptico. 6speraba o$r las noticias de la
cuarta (uerra marciana, pero no era ms que un informe del %entro de inmortalidad:
entonces )l sprult,.
FIN
6nviado por !aul .treides
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1olver al $ndice