muy poco quedara, mil lagrimas caeran y tal vez esta vez hoy siento que voy a perder, cimplice de matar la iluscion Mejor morir que con miedo vivir, sin intentar cambiar, disumular saber que algo va mal hipocrita seras y una vez y otra vez no lo puedo comprender que ni asi lo quieras entender que la tierra es tu hogar de los bosques al mar o inmensas nubes no te dejan ver ni el aire que respiras ni agua que beber Lo hubo ayer muy poco queda hoy (ayudame) a calmar este dolor, que tu silencio se haga voz que nuestro ruego llegue a Dios a no callarce hasta artarce todo esta en el corazon Y una vez y otra vez no lo puedo comprender que ni asi lo quieras entender que la tierra es tu hogar de los bosques al mar o inmensas nubes no te dejan ver ni el aire que respiras ni agua que beber Lo hubo ayer muy poco queda hoy (ayudame) a calmar este dolor, que tu silencio se haga voz que nuestro ruego llegue a Dios a no callarce hasta artarce todo esta en el corazon (3x) Lo hubo ayer muy poco queda hoy (muy poco queda hoy) a calmar este dolor (a calmar este dolor), que tu silencio se haga voz (se haga voz), que nuestro ruego llegue a Dios a no callarce hasta artarce todo esta en el corazon (todo esta en el corazoooon) De los bosques al mar........
El mar escupa un lamento tan tenue que nadie lo oy. Era un dolor de tan adentro que toda la costa muri. Llora lamentos la nube que enferm y escribe espantos en la arena el dolor. Arrulla el miedo a un delfn que bebi de un agua negra, su suerte emigr. Ven, quiero or tu voz, y, si an nos queda amor, impidamos que esto muera. Ven, pues en tu interior est la solucin, de salvar lo bello que queda. Donde se acomoda la usura nacen la ambicin y el poder, y este germina en la tierra, que agoniza por inters. Y una gaviota cuentan que decidi en acto suicida inmolarse en el sol. Re desprecios un barco que encall, y se desangra en su lecho: LA MAR! Hagamos una revolucin, que nuestro lder sea el sol, y nuestro ejrcito sean mariposas. Por bandera otro amanecer y por conquista comprender que hay que cambiar las espadas por rosas. Mientras te quede aliento ve a buscar con el viento ayuda, pues no queda tiempo. .