Ciegos y sordos" Cinco sabios ciegos queran saber cmo era un elefante. Uno toc su pierna y expres: "Es como un rbol, grueso y firme". Otro toc una de sus orejas y dijo: "Es como un lirio acutico, plano y suave. El tercero puso sus manos en su cola y exclam: "No, ms bien es frgil y delgado, cual rama de arbusto". El no menos ciego tent su costado y enfatiz: "No, es fuerte y duro como una gran roca". "Todos estn equivocados", grit el sabio que palp su trompa. "Es como una serpiente, larga y extensa". Siguieron discutiendo apoyados en su propia sabidura, sin ponerse de acuerdo ni constatar que si bien ninguno tena la razn, todos tenan parte de verdad. Eran ciegos en su propio entendimiento y no pudieron ver con los ojos de su alma la verdadera esencia del elefante. Tampoco escucharon razones. Lo mismo sucedi hace dos mil aos cuando JESUCRISTO, DIOS manifestado en carne, se present ante su pueblo que lo rechaz sin reconocer su divinidad. Eran ms ciegos y sordos que los que fueron sanados por El. Ante ellos estaba el Mesas Redentor que tanto esperaban y siguen esperando. No lo vieron!... Eran ciegos. No lo escucharon!... Eran sordos.