Conclusin

Finalmente, la resiliencia desafa e impulsa la Teologa para asumir conscientemente la

necesidad
de situarse en una perspectiva de esperanza y cuestiona las visiones deterministas y pesimistas
de
algunos grupos cristianos. En un marco social de dolor exacerbado por la creciente exclusin
social, la promocin de la resiliencia se torna una necesidad y un deber. Concientes del
sufrimiento de tantas personas, el paradigma de la resiliencia desafa la observacin, el estudio
y
la creatividad de los cristianos y cristianas, de los telogos y telogas, de los agentes de
pastoral y
de los investigadores para descubrir como promoverla en los ms diverso contextos y,
sobretodo,
en el campo de la reflexin y de la Prctica Pastoral.
El camino est ya trazado, pues la resiliencia es la experiencia natural de tantas personas que
lograron, a lo largo de la historia, crecer, superarse, rehacerse, an cuando pareca que no haba
ms salida. Como dice Vanistendael, quizs la resiliencia sea la prefiguracin ms natural de
la
dinmica de la cruz y de la resurreccin (Vanistendael, 1995, p. 26).
Del punto de vista de la Teologa Prctica, el enfoque de la Resiliencia viene al encuentro del
desafo de buscar mejores perspectivas de comprensin y de accin para auxiliar a las personas
que padecen sufrimientos. El estudio de la resiliencia contribuye en la superacin de las
adversidades individuales y comunitarias y puede ser aplicada en el campo personal, social,
laboral y religioso. Supone investigar las fuerzas de recuperacin de cada persona y grupo y ver
como mejor desarrollarlas.