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Carlota Mara

tena un problema;
se despert un da
con rabia y con pena.
Lo que le pasaba
Ni ella lo saba
Todo le enfadaba
Y le daba ira.

Pateaba en el suelo
Carlota Mara
gritaba y chillaba,
volcaba vajillas.
Ms furia senta,
se echaba en el suelo,
se morda entera,
se arrancaba el pelo.

Los padres, muy tristes llaman al
doctor:
Un viaje por barco
es la solucin.
Se suben a un taxi
que estaba esperando.
Carlota Mara
sigue pataleando.

El conductor dice
entre tanto ruido,
Bjenla pronto ,
con ella no sigo.
Bajan a la nia
que sigue rabiando,
cogen las maletas
y van caminando.



La ciudad entera
detiene su paso,
paran los autobuses,
camiones y autos.
Miran a esta nia
que sigue rabiando
mientras padre y madre
la van arrastrando.

Llegan justo antes
de que parta el barco.
Carlota Mara
casi queda abajo,
su furia es tan grande
que rompe el vestido,
la suben con cuerdas;
el barco ha partido.

Al capitn ruegan
que calmen a la nia.
Viene el capitn,
un ojo le guia.
Carlota Mara
se pone furiosa,
le ataca de frente
le quita la gorra.

Pero del estruendo
que hace Carlota Mara
levanta las olas
y el barco se inclina.
A los salvavidas!,
grita el capitn.
Corran a los botes
que va a naufragar!.

Quin lo dira Carlota Mara

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Y mientras se alejan
con gran pesadumbre
el barco muy blanco
ven cmo se hunde.
Mientras todos reman
directo a una isla,
Carlota, con rabia,
patalea y chilla.

Llegan a la isla:
todos se han salvado.
Pero Carlota Mara
sigue con el enfado.

Entonces marinos,
mozos, pasajeros,
su padre y su madre,
juntos la rieron,
todos a la vez
y unos ms que otros,
ronco el capitn
y todos furiosos.

Tal es el barullo
que hay en la isla
que mucho ms grita
Carlota Mara.
Y de pronto sienten
que la tierra brama,
miran hacia arriba:
el volcn estalla.







El volcn se calla,
de l sale humo,
ahora en la isla
no hay ruido ninguno.

Carlota Mara
se sienta en la tierra,
est muy cansada,
mas no siente rabia.
Y ni se da cuenta
Que la gente se alegra
Todos se abrazan
Un barco se acerca!

Arriba, ya en el barco,
la miran y tiemblan,
pero ella sonre:
el volcn recuerda.
Carlota Mara
observa el volcn
y sonre pues su rabia
por fin se pudo acabar.

El nuevo capitn
al otro comenta:
Qu nia ms dulce
Carlota Mara
El otro murmura:
Y quin lo dira.




Autora : Mara de la Luz Uribe.
Chilena.


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