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La perrera.

Qu fieras corpreas se encuentran enjauladas? Las que estn llenas de rabia, con ganas de salir
a morder, a contagiar. En la perrera hay de todo: de la calle, negras, con manchas, amarillas,
pelonas, finas, gordas, anorxicas, ciegas, sin una pata, en celo, subterrneas y marginales.
Somos los cachorros de la perra madre, suprema, porque nos ha dado la gana ser las hijas malas y
bastardas de este sistema que impone cuerpos correctos, poses correctas, sexualidad correcta,
heterocentrada, genitalizada. De nias bien portadas, que no se emborrachan ni se drogan, que no
follan con desconocidos y menos por dinero, porque eso las convierte en putas, zorras, golfas,
perras, las deviene salvajes y hay que encerrarlas.
Nuestro objetivo es destruir las jaulas, los manicomios y la prisin, hacer estallar nuestra
sexualidad, sensualidad, esa que no le gusta ver, seremos obscenas, provocadoras y vulgares.
Precarias pero propias. Mranos que te atraparan las imgenes, lo esttico, el momento.
Somos perras, fieras en manada. Somos las abyectas para los abyectos y morbosos.

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