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MONICIONES PARA EL DOMINGO II DE CUARESMA 2014

MONICION DE ENTRADA

En este segundo Domingo de Cuaresma, nos sugiere que en la vida slo es posible la transformacin, si tenemos presente la meta a la que queremos llegar. Pidamos al Seor en esta Eucarista, que nos conceda el privilegio de que Jess, sea nuestra meta y que podamos ser obedientes como El. Nos ponemos de pie para recibir al celebrante cantando.

MONICION DE LAS LECTURAS PRIMERA LECTURA: (Gen 12, 1-4)


La vocacin de Abraham es un acontecimiento, que nos muestra cmo hemos de responder a las invitaciones que el Seor continuamente nos hace, Dios lo llama a Abraham, l sabe que no tiene que dar un paso al vaco, sino a la plenitud de Dios. El Seor lo hace bendicin para todos los pueblos de la tierra. Escuchemos atentamente.

SALMO: 32.
SEGUNDA LECTURA: (2 Tim 1, 8-10)

En esta segunda carta a Timoteo, San Pablo nos comunica, que Dios nos da gratuitamente la salvacin, por medio de nuestro Redentor Jesucristo, quien vino a resplandecer la vida y la inmortalidad a los que creen en El. Escuchemos atentamente.

EVANGELIO:

(Mt 17, 1-9)

Nosotros, el pueblo de Dios, hemos sido llamados por El a una vocacin que nos debe llevar a ser iluminados por Jess. Al transfigurarse el Seor nos mostr su divinidad, as como los apstoles tambin lo contemplaron. Nos ponemos de pie para que escuchemos con atencin el evangelio.

MONICION AL OFERTORIO

Iluminados por la gracia de Cristo, acerquemos al altar estos dones de pan y vino que ofrecemos hoy, sern transformados en el cuerpo y la sangre de Cristo, que nos ayuda a vivir como verdaderos Cristianos.

MONICION A LA COMUNION

Dios nos ha mostrado a su Hijo predilecto, ahora nos lo da con su cuerpo y su sangre, que ahora se nos ofrece glorificado en la comunin. Vayamos con gozo a su encuentro y a gustar ya desde ahora la vida eterna. ANGELUZ

MONICION DE DESPEDIDA

Que la fe en Jess nos ayude a vivir fructuosamente nuestra existencia en este tiempo de cuaresma, siempre unidos a l y a nuestro prjimo, sabiendo que la misericordia de Dios es grande y que est dispuesto siempre a recibirnos. Nos despedimos cantando. HILDER COTRINA D.

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