Entre el 9 y 12 de octubre, la Nación y el Distrito responderán a los efectos que
dejaría un sismo de 6,2 puntos en la escala de Richter sobre la capital del país, con una profundidad de 23 kilómetros.
El origen estaría en la denominada falla frontal de la cordillera Oriental. Los
tomadores de decisiones -tanto el presidente Álvaro Uribe como el alcalde Samuel Moreno- coordinarán las acciones a seguir en sus respectivas salas de crisis, en la Casa de Nariño y en el Palacio Liévano. El sitio de operaciones quedará en el Centro de Alto Rendimiento.
En mi opinión pienso que sería muy importante revisar las estrategias de
evacuación en Bogotá desde la base con los alumnos en los colegios a ver si los jóvenes y niños saben qué hacer en caso de una emergencia ya que ellos van a hacer los primeros afectados porque no saben cómo desplazarse o muy seguramente no saben cuál será su punto de encuentro sus salidas correspondientes y ahí es donde se encuentran las dificultades porque es donde se pierden y no saben qué hacer