Los conflictos ms difciles de solucionar en las organizaciones no son los que surgen de factores externos, sino los que

brotan de las propias rupturas interiores de sus miembros. Quien est en conflicto consigo mismo irradiar esa ruptura a su alrededor. La soberbia es uno de los vicios que generan mayores conflictos en las organizaciones. El soberbio se cree superior al resto y suele ser autosuficiente. Al creer que siempre tiene la razn, no har ningn esfuerzo en escuchar ni entender la posicin del otro; estar pensando en convencer o imponer su punto de vista, cegado en ocasiones por prejuicios hacia los dems. La soberbia impide tener una visin crtica sobre la propia realidad, creyendo que los problemas de las organizaciones obedecen siempre a falencias de terceras personas. Por ejemplo, un lder del rea evaluar duramente a un colaborador por ser negligente, pero no se preguntar si su propio estilo de liderazgo es el ms adecuado o si sus actitudes son las causantes de los problemas organizativos. Asimismo, un trabajador que tiene reas ciegas tender a criticar con facilidad al resto, pero tendr dificultad en generar propuestas proactivas. Recuerdo un dilogo ante un grupo de trabajadores, muy crticos hacia su jefe. Les pregunt qu haran ellos en su lugar, y no pudieron dar ideas constructivas. Otra caracterstica de la soberbia es la tendencia a buscar justificativos frente a los propios errores, o la dificultad de reconocerlos pblicamente por miedo a mostrarse vulnerables. Ser de gran utilidad en estos casos tener una sana desconfianza de uno mismo, aceptando la posibilidad de estar equivocado. La autntica humildad implica vivir en la verdad y estar abierto a las opiniones de los dems, valorando lo que cada uno tenga para aportarnos, sin actitudes defensivas, agradeciendo incluso las correcciones que nos permitan crecer como personas. Valorar a cada trabajador como persona nos impulsar a realizar el esfuerzo de entender a cada uno, escuchar y dejarme enriquecer por cada miembro de la organizacin. Solo quien vive en paz con Dios y consigo mismo podr ser artfice de comunin, unidad y reconciliacin con los dems