Observando la sonrisa de un angelito de Dios empec a pensar en la inconformidad del ser humano, a diario nos quejamos de lo rutinaria que

en ocasiones se vuelve la vida, nos quejamos de no tener nada nuevo que estrenar, de nuestro peinado, nos quejamos de hasta el mas mnimo y tonto detalle de nuestras vidas; nos echamos a morir con un simple resfriado y de la manera en que cambiamos y nos hacemos las victimas cada vez que nos enfermamos de alguna tontera que con un par de medicamentos y reposo se curara, hacemos todo esto sin pensar en todos los otros seres humanos que nos rodean y mucho ms importante aun sin darle gracias a Dios por darnos un da mas de vida, salud, amor y aun ms importante que seguimos a lado de nuestras familias, nos quejamos teniendo tantas cosas y no nos detenemos un momento a pensar en esas personas que sufren de enfermedades, o que no tienen donde dormir ni que comer. No pensamos un poco en todo lo que sufren aquellas personas que padecen de alguna enfermedad que te pone al abismo de la muerte como lo es el cncer; imaginemos por un momento todo lo que puede sufrir una persona que padezca esta enfermedad, dado que toda su vida cambia en un pequeo instante y que Sin embargo deciden luchar da a da contra esta enfermedad y tan solo piden volver a ver la luz del da una vez ms y poder vencer esta terrible enfermedad. Sera tan diferente el mundo si nos detuviramos a pensar en aquellos nios que a tan corta edad sufren con esta enfermedad, estos pequeos ngeles que a pesar de pasar por todo el dolor que causa el cncer se enfrentan a esta riendo y luchando por seguir disfrutando su niez, deberamos a prender de ellos y jams perder ese ngel que nos ayuda a enfrentar la vida con alegra. Demos a diario gracias a Dios por estar vivos y poder disfrutar sin lmites todo aquello que la vida nos regala, dejemos de ser tan materiales y disfrutemos nuestra salud y nuestra familia ya que nada es seguro y no los tendremos vida eterna