Está en la página 1de 262
< . as 45 JOSE DEL POZO Historia del vino chileno © 1998, JOSE DEL POZO ARTIGAS: Inscripcién N° 103.713 Santiago de Chile. Derechos exclusivos reservados para todos los paises por © Editorial Universitaria, S.A. Maria Luisa Santander 0447. Santiago de Chile. editor@universitaria.cl Ninguna parte de este libro, incluido el disefio de la portada, puede ser reproducida, transmitida o almacenada, sea por procedimientos mecénicos, épticos, quimicos 0 electrénicos, incluidas las fotocopias, sin permiso escrito del editor. ISBN 956-11-1735-5 Texto compuesto en tipografia Palatino 11/13 Se terminé de imprimir esta TERCERA EDICION en los talleres de Imprenta Salesianos S.A., General Gana 1486, Santiago de Chile, en octubre de 2004. www.universitaria.cl IMPRESO EN CHILE / PRINTED IN CHILE {NDICE Agradecimientos lu | La herencia indigena El aporte espafiol a comienzos de la época colonial Produccién y consumo de bebidas alcohdlicas durante el periodo colonial De la Colonia a las primeras décadas después de la Inde- pendencia: Mas continuidad que rupturas Capiruno 2 La renovaci6n de la viticultura a mediados del siglo xix Ta generaci6n de los fundadores de las grandes vinas de & Regién Central 63 Elnuevo contexto 24.4 La influencia de la viticultura francesa y la traida de las cepas bordelesas a Chile 65 Los empresarios vifateros: Retrato de una generaci6n 77 £ IS [sib Cariruto 3 De 1880 a 1938: Exitos y_limitaciones en una era de expansién 103 Productores y distribuidores: Nuevos y viejos nombres 104 Nuevos aportes extranjeros: Los “catalanes” y la aparicién de los bodegueros 107 Copyrighted material Estructura y funcionamiento de las vifias 113 Valor y rentabilidad de las vifias 415 Tecnologia y practicas productivas 120 Mano de obra iB Produccién y precios 149 La distribucién del vino: Agentes y mercados 152 Exportaci6n e importacion 157 El mercado interno: ;Quién consumia el vino? 162 El problema del alcoholismo 168 Politica y productores: Los intentos de organizacién de los vinateros y la legislacién sobre el vino 173 Captruto 4 Los afios de la produccién limitada y la época de la refor- ma agraria, 1938-1973 183 El vino dentro del marco global de la agricultura: Rasgos generales 184 Precios, rentabilidad y mercados exteriores 186 El alcoholismo, gproblema sin remedio? La cuestién de la comercializacion 192 La tributacion 197 Los aspectos tecnolégicos: ;Estaban las vifias bien equipa- das? 99 Los productores: Las mismas marcas, nuevas formas de organizaci6n de las empresas 206 Los industriales del vino y la diversidad de sus intereses__216 Las multiples organizaciones del mundo del vino 218 Los pequefios productores y las cooperativas 219 La época de la reforma agraria: El impacto en la organiza- cin sindical 224 Las vittas durante el gobierno socialista: Entre la asociacién y la expropiacién 232 Captruto 5 De 1973 hasta hoy: Liberalizaci6n de la produccién, crisis del mercado interno y auge exportador 237 El nuevo marco politico y su impacto para la agricultura 237 La produccién entre 1974 y comienzos de la década de 1990: Un periodo de violentos altibajos 239 Los productores: Nuevos empresarios, nuevos tipos de vi- fas 245 Las cooperativas: Estancamiento numérico y transforma- ciones administrativas 256 El auge exportador reciente: ;Cémo y por qué? 261 Cambios tecnolégicos y la busqueda de una nueva calidad de produccién 271 La situacién de los trabajadores: La disminuci6n de la mano de obra y las limitaciones de los sindicatos 274 Conclusion 279 Bibliografia 285 Glosario 299 Indic - indi : Agradecimientos La gestacin de este libro fue facilitada por la colaboracién de muchas personas, que de una u otra forma intervinieron en diferentes etapas y aspectos de la investigacién. Esto fue especialmente valioso cuando se trataba de acceder a fuentes locales o privadas, cuyo conocimiento y uso hubieran sido del todo imposibles sin la ayuda de ciertas personas. Es justo reconocer el aporte de ellas en estas paginas. A nivel general, debo agradecer primeramente a Rafael Baraona, que me abrié generosamente la biblioteca José Maria Arguedas, creada y dirigida por él, que encierra una valiosisima documentacién sobre el mundo rural. En ella pude no sdlo hacer lecturas de interés, sino ademas conversar —o mejor dicho escuchar— las muiltiples observaciones y conocimientos que Baraona tiene sobre el tema del vino. Rodrigo Alvarado Moore, que lleva en si mismo una buena parte de la historia del vino chileno de los tltimos treinta afios, fue otro personaje que me brind6 una ayuda inapreciable. Ademas de conver- sar varias veces conmigo, tuvo la gentileza de leer y de comentar los dos tiltimos capitulos del libro durante la fase de redaccién del ma- nuscrito, ayudando a precisar ideas y conceptos. Varias personas que conoci en Vina Santa Rita, la primera empresa que estudié al iniciar mi investigacién, merecen ser nom- bradas aqui. Debo comenzar por Rodrigo Buzeta, que en 1992 era el gerente de exportacién de la viiia, y que mostrando un gran interés por mi proyecto, me abrié las puertas de su empresa. Mi- guel Garcia-Huidobro, descendiente directo de los fundadores y duefios de esa misma vifia, me dio acceso a un archivo personal de documentos de época de Santa Rita, ademas de proporcionarme interesantes datos sobre sus antepasados. Julio Velasco, empleado de la vifia, facilité mucho mi estudio con las informaciones que él habia reunido sobre la historia de Santa Rita. De las otras vias que visité, debo mi reconocimiento a Claudio Cilveti, gerente de expor- ll tacién de Vifia Tarapacd, quien facilité mi visita a la emy establecié los contactos con otras personas de la vinta. Gr Rios, el endlogo de Cousifio Macul, pude consultar una his! de la empresa. Carlos Ruiz Tagle me ayud6é mostrandome gacién que él habia efectuado sobre la historia de la Vina Cot y Miguel Correa me dio a conocer fuentes primarias de Vin Las numerosas entrevistas que realicé no hubieran si sin la intervencién de algunas personas que fueron clav blecer los contactos. Una de ellas fue la endloga Adrian Curic6, que me presents a varias personas, técnicos y emp. diferentes vifias. Otro fue Hernan Navarro, dirigente sindi puso en contacto con varios obreros, activos y jubilados. Carlos Fuentealba, dirigente de renatravis, me permitid de varios papeles del archivo de esa organizaci6n, que fuerot el estudio de la situacién de los trabajadores. Claudio Hafe industria Raab y Rochette, hizo posible la utilizacién de los archivo de la empresa, ademas de facilitar dos entrevistas. En mis investigaciones en el Archivo Nacional, Siglo x tor, Juan Luis Martinez, fue de una gran amabilidad y Philippo Pszczolkowski, endlogo de la Universidad Catoli dié a mis diversas consultas con rapidez y eficiencia. Ent gas historiadores, agradezco las observaciones de Eduard José Bengoa y de Ximena Valdés en Chile; y en Mon Claude Morin, todos los cuales comentaron ciertos aspect , Tespon- mis cole- detalles sobre la historia del vifiedo de esa regién, que t tancia ha tenido para Chile. dié mi universidad, la ugam, fue de importancia capital, gracias a eso que pude recoger la mayor parte de los dat El servicio de publicaciones de la ugam contribuyé ademas miento al apoyo que siempre he encontrado en mi familia, lar en mi esposa Miriam, en ésta como en todas las inv que he realizado hasta ahora. Montreal, marzo de 1998 12 Introduccién Chile es conocido dentro de América Latina y en otras regiones del mundo por sus riquezas mineras y por su vino. Las primeras, sobre todo el cobre, han sido el objeto de importantes estudios histéricos desde hace ya tiempo. El vino en cambio, pese a la fama que muchos —con y sin raz6n— han pretendido darle, no ha concitado el interés de los investigadores. Esto no deja de ser sorprendente cuando se constata que en paises como Australia, Estados Unidos, Africa del sur y otros, donde el consumo del vino es menos masivo o donde el cultivo de la via es menos antiguo, existe desde hace afios una bibliografia cada vez mas nutrida al respecto. Tal vez una de las razones que explican esta situacién paradojal es el hecho que hasta hace muy poco, el vino era en Chile un producto destinado casi exclusivamente al mercado interno. Esto disminuia su atractivo como campo de estudio, ya que por distintas razones, que van desde la disponibilidad de fuentes a la importancia del comercio exterior para la economia chilena y la influencia de la teoria de la dependencia, los investigadores han privilegiado el estudio de aque - llos productos que se han exportado al mercado mundial, como el caso del trigo'. Para aquellos que se interesan en la historia de los conflictos sociales, el mundo del vino tampoco parecia muy atrayente, ya que su historia ofrece pocos casos de grandes huelgas. La excepcién ha sido el conflicto de los obreros vinateros de Molina de 1953, que dio lugar a un estudio sociolégico?. Es cierto que una de las motivaciones que tuve para decidirme a emprender esta investigacién fue la constatacin, en mi condicién de ‘Un ejemplo es el estudio de SERGIO SePULVEDA, El trigo chileno en ei mercado mundial, Santiago, Editorial Universitaria, 1959. %Se trata de la obra de HENRY LANDSBERGER y FERNANDO CANITROT, Iglesia, intelectuales y campesinos, Santiago, Editorial del Pacifico, 1967. 13 chileno residente en el extranjero, de los grandes progresos que expe- rimentaba la exportacién de vino chileno en Montreal, la ciudad donde vivo desde hace mas de 20 afios. Esto equivale a admitir que no estoy enteramente exento de las influencias recién sefialadas, ya que fue la etapa de auge internacional en la que el vino chileno entraba lo que me decidié a escogerlo como tema de estudio. En efecto, ese hecho me hizo plantearme una pregunta: {Por qué sola- mente ahora el vino chileno adquiria un nombre internacional, si era un producto tradicional del pais? De ahi partié mi proyecto de inves- tigacion. Aunque mi motivacién inicial fue responder a esa pregunta, pron- to me percaté de que ella no debfa transformarse en el enfoque principal del estudio. A ello concurrieron diversos factores, de natu- raleza heuristica y metodolégica. Por un lado, a poco de comenzar a leer sobre el tema, me di cuenta que antes de hacer un estudio monografico sobre las exportaciones, lo légico era conocer la historia general de este producto en Chile, con el fin de comprender cémo se habia llegado al brusco cambio reciente, que habia llevado al vino de producto orientado casi exclusivamente para el mercado interno a su vocacién exportadora. Segunda constatacién de perogrullo: Esta his- toria no existia. Esto en si me incit6 a hacerla, lo cual era un poderoso desafio, ya que ello me obligaba a explorar multiples aspectos de la historia de Chile. En efecto, debido a la naturaleza del tema, aunque los aspectos econémicos son los principales, también era natural incorporar los aspectos sociales (tanto del lado empresarial como de los trabajadores) asi como los tecnoldgicos, juridicos, politicos, e in- cluso los de la salud ptiblica a través del tema del alcoholismo. Asi, el estudio del vino permitia hacer una labor de historiador en su sentido amplio, es decir, el estudio del conjunto de la sociedad. Las fuentes Tal empresa debia chocar con dificultades heuristicas importantes. Contrariamente a los historiadores del vino en paises como Francia’, que podian apoyarse en una multitud de fuentes secundarias, com- puestas por estudios regionales y que abarcaban las diversas épocas Vase entre otras los estudios de GiLBeRT GARRIER, Histoire sociale et culturelle du vin, Paris, , Bordas, 1995 y el de MARCEL LACHIVER, Vins, vignes et vignerons. Histoire du vignoble frangais, Fayard, 1988, 14 de la historia, me di cuenta pronto que en la mayor parte de los casos debja comenzar desde cero, es decir, a buscar las fuentes primarias. Ahora bien, éstas no s6lo estaban dispersas sing que en algunos casos no existian. Una de las dificultades principales con que tropecé a este nivel fue la falta de documentos de archivo de parte de las vifas. En algunos casos, esto se explica porque algunas de las empresas estu- diadas han cambiado de duefi en los tiltimos afios, lo que implicé a menudo que muchos papeles se botaran a la basura. Pero atin en vihias que han permanecido en manos de la misma familia no ha habido mayor interés por guardar esos documentos 0 no siempre eran acce- sibles. No obstante, pude encontrar algunos documentos de archivo de gran interés sobre las viitas Santa Rita y Concha y Toro, para ver detalles del funcionamiento de esas empresas. El andlisis de las memorias escritas sobre vifias por ingenieros agrénomos, que constituia una fuente aparentemente promisoria, entreg6 bastante menos de lo esperado, ya que estos estudios, inevi- tablemente, se concentraban casi tinicamente en los aspectos técnicos del cultivo de la vifia, ante mi gran decepcién. El estudio de la situacién de los trabajadores tampoco era facil, debido a la tardia aparicién de las organizaciones sindicales en el campo y al poco espacio que estos actores han tenido en la prensa. A este respecto, si comparamos el estudio de los trabajadores de vias con los obreros mineros o de industrias urbanas, el lector mediana- mente informado percibira que sobre estos tiltimos hay testimonios mucho més numerosos y que ademas existen desde épocas bastante mas lejanas. En fin, otro obstdculo fue el escaso espacio brindado al mundo rural en los estudios regionales 0 dedicados a ciudades de provincia, por lo cual muy poco han aportado a la investigacién. Estas limitaciones pudieron ser compensadas gracias a la docu- mentacién encontrada en diversos lugares. En el Archivo Nacional (seccién Siglo xx) encontré materiales sobre la formacién de un cierto mimero de sindicatos de obreros de vifias. El examen de diarios de diversas épocas en la Biblioteca Nacional, en especial de diarios locales en regiones productoras de vinos, como en Curic6, me propor- cioné un interesante material para ver la influencia de la vitivinicul- tura en esa regién, los precios del vino, la oferta de maquinarias y otros aspectos semejantes. El archivo de la familia Errazuriz permitid ver desde adentro los detalles de la administracién de una de las grandes vifias, la Errézuriz Panquehue, a comienzos del siglo xx. Los documentos de intendentes hallados en el Archivo Nacional permi- 15 tieron ver una gran cantidad de detalles sobre el comercio licito e ilicito de alcohol en Santiago y provincias en diversas fechas. Ciertos textos autobiograficos, escritos por miembros de las familias duefas de vias, permitieron trazar el perfil social de los fundadores de estas empresas. Los testimonios orales fueron un aporte fundamental, sobre todo para conocer detalles de las condiciones de trabajo de los obreros. Ademias, esto me permitié hacer revivir las historias de los seres humanos, tanto los empresarios como los trabajadores, los técnicos y los politicos, que tuvieron algo que ver con ese producto. Quise en efecto —y eso tiene mucho que ver con mi manera de concebir y hacer la historia— poner carne y hueso en la historia que queria reconstruir, sin limitarme al andlisis de las tendencias generales o al estudio de las estadisticas. Limites del estudio Ante la vastedad del tema y las limitaciones de las fuentes, el estudio se enmarcé dentro de limites espaciales y cronoldgicos, que fueron definiéndose a medida que la investigacién avanzaba. A nivel geogra- fico, el estudio se concentré en el area de Chile central, mas exacta- mente en el territorio que va desde lo que era la antigua provincia de Aconcagua (hoy parte de la v Regién) hasta Talca (hoy vu Regién). La produccién vinera al sur del rio Maule, la de lugares como Chillan, Quillén, Concepcién y Cauquenes, no fue abordada sino de manera episédica. Esta decision se impuso por dos razones: Una, porque la region central tiene una particularidad que le da un caracter homogé- neo. Es el area donde se concentré el cultivo de las cepas de origen francés, mientras que la regi6n al sur del Maule siguié durante un buen tiempo especializada en el cultivo de la cepa de tipo pais, la heredera de las que trajeron los espafioles en la época colonial. La segunda razén fue el hecho que entre Aconcagua y Talca estan las principales virias del pais, las que desde hace mas de un siglo contro- lan la mayor parte del mercado interno y las que iniciaron las expor- taciones. A nivel cronolégico, el libro se limita a la época que ya desde mediados del siglo xx hasta nuestros dias. La época colonial y la primera fase del siglo xx son presentadas de manera bastante resumi- da en el primer capitulo. Esta decisién es la consecuencia légica de la limitacién anterior, la de estudiar la region de la cepa francesa; ahora 16 bien, ésta fue introducida en Chile solamente a partir de los afios en torno a 1850. Una tercera limitacién fue la de concentrar el estudio, a nivel de las unidades de produccién, principalmente a las grandes vifas, que han dispuesto de bodegas, de maquinarias y que operan bajo marcas conocidas. Esto deja de lado a los miles de medianos y pequeiios productores, generalmente anénimos, que conviven con los grandes, a menudo vendiéndoles parte de su produccién de uva. Sin embargo, algo se habla de ellos en la seccién dedicada a las cooperativas que empezaron a formarse en el pais desde fines de la década de 1930. Estos ejemplos dan una cierta idea de las dificultades que tuve que enfrentar para cubrir la gran diversidad de aspectos que aparecen en el libro. Si pese a ello persist en este enfoque, fue porque sigo pensando que era el tratamiento mas adecuado que, como historia- dor, queria ofrecer al lector: El de estudiar el conjunto del tema del vino en sus diversos aspectos. Aspectos teéricos Si bien el libro tiene en gran medida una vocacién factual, la de informar sobre los rasgos principales de una historia sobre un tema poco explora- do, varios de los temas estudiados permiten reflexionar sobre diversas hip6tesis e interpretaciones, lo cual lleva al historiador y al lector a interrogarse sobre aspectos importantes de la historia de Chile. Uno de ellos, a nivel social, es el de la naturaleza de la clase dirigente chilena. A través del examen del origen de las familias fundadoras de las principales vifias se observa que hay una interpe- netraci6n importante entre los empresarios mineros, industriales y de los banqueros con el mundo agricola, ya que las principales vihtas fueron obra de empresarios que se habjan enriquecido al exterior de la agricultura. Para épocas posteriores, los datos encontrados revela- ron que los productores de vino! seguian manteniendo actividades bastante diversificadas. Esto me llevé a plantearme preguntas sobre Aqui debe hacerse una distincién entre los duenos de las grandes vifias, a los cuales me refiero a menudo como “productores”, y los viflateros medianos o pequefios. Aunque todos “producen” vino, los primeros podrian ser denominados més bien como “industriales”, ya que ademas de producir el vino, lo embotellan y comercializan; por otra parte, durante largo tiempo esos empresarios compraron vino y uvas originarias de otras vifias mas pequefas. La palabra “productores” podria aplicarse de manera més restringida a estos tiltimos casos, que no hacen 7

También podría gustarte