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Hemos avanzado. Desde la lucha por la reno de las revoluciones políticas y la revo-
supervivencia, pasando por el ojo por ojo y lución industrial. La burguesía pasó a deten-
las diversas formas de esclavitud; desde las tar el poder político como fruto de su hege-
guerras santas (alias cruzadas) a las guerras monía económica. La ciencia jugó un papel
rentables; desde las jornadas laborales inin- importantísimo, a través de los avances téc-
terrumpidas y sin descanso, a las 35 horas se- nicos; dio lugar a nuevos inventos pero tam-
manales (en algunos países). . . hemos avan- bién se convirtió a un discurso cada vez más
zado. Y esa es la esencia de nuestra cultura: poderoso: avance científico = progreso; es
Hay una estructura profunda que podemos un discurso en torno a la verdad, a la demos-
resumir en 1) dos estadios: Inicial-Final. Di- tración, al empirismo de la ciencia como po-
cotomía A ♦ Ω; 2) alguna clase de aconteci- sibilidad única. La fe en una mejora, en un
miento trascendental que abre el camino de destino feliz para la humanidad, en el impe-
A ♦ Ω, y 3) la irresistible creencia mesiánica rio de la razón, alumbró todas las manifesta-
de que el punto de llegada será mejor que el ciones sociales y culturales como resultado
de partida. La idea de que un acontecimiento de un hilo previo que provenía de Descar-
trascendental conlleva una mejora incompa- tes, Locke, Hume e incluso Francis Bacon.
rable en el curso de la historia (Jesucristo, La nueva sociedad precisaba de un proceso
Revolución francesa, Revolución soviética, acelerado de divulgación, de una desacrali-
Nuevas tecnologías de la era informática...) zación; se promovió el impulso de la crítica,
Quiere esto decir que la ruptura con el An- la libertad, la tolerancia, el diálogo, la divul-
tiguo Régimen, a la llegada de la Ilustración, gación del saber, se rompió el vínculo divino
no puso en cuestión en ningún momento el y se reivindicó la figura del artista, del genio
mecanismo conceptual de creencia en algo creador. Uno de los grandes lemas del siglo
mejor, en un destino universal (sólo se da una de las luces sería la divulgación del saber y
sustitución de Dios por la Razón, la idea de la cultura más allá de las fronteras del viejo
progreso). En el siglo XVIII se abrió un nu- régimen, en Universidades, museos, revistas.
evo mundo, ya enunciado por el Renacimi- Pero... eran relatos, discursos. La idea de
ento, que a su vez tendría como consecuen- progreso y final feliz de la historia se des-
cia el protagonismo de la burguesía en el ter- morona en nuestro siglo; el sujeto monolí-
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tico ya había comenzado a ponerse en duda
Universidad de Valencia
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más equitativa de los beneficios, pese al de- tos vuelve cada vez menos concebible la idea
sempleo y las desigualdades geográficas; la de una realidad. Así, la realidad pasa a ser
educación está dirigida hacia la mayor efi- plural, objetable; es el resultado del cruce
cacia del sistema social, hacia el logro de - o contaminación - de las múltiples imáge-
la especialización de los individuos. Junto nes, interpretaciones y reconstrucciones que
a todo lo anterior, nos hallamos en un mo- compiten entre sí, sin coordinación central,
mento de comunicación generalizada en el y que distribuyen los media. La pérdida de
que la extensión de las relaciones en el ti- sentido de la realidad quizás no sea, a fin de
empo y en el espacio se convierten en ilimi- cuentas, una gran pérdida. Fish lo formula
tadas; la tecnología ha permitido establecer indicando que se trata de regresar a una idea
medios de control electrónicos y que el cono- de la Verdad no monolítica, ya presente en
cimiento legitimado por los ordenadores sea los sofistas griegos, que sea el resultado de
tenido como real. Hemos llegado a una cul- un consenso, un acuerdo entre iguales que
tura del consumo en la que todo está mercan- permita fijar los mecanismos de interacción
tilizado, se producen necesidades y deseos; social. Incide en estos aspectos la nueva con-
el bagaje cultural y estético de la llamada cepción de la Retórica teorizada por Perel-
postmodernidad se opone al anterior econó- man, que insiste en la idea de la duda, en el
mico y funcional, todo tipo de producto está cuestionamiento permanente de la realidad.
sometido al mercado. La desindustrializa- Foucault pretende denunciar la naturaleza
ción de las ciudades las convierte en centros disciplinaria de la sociedad actual, tomando
de consumo. como fórmula general la prisión. De alguna
Según Baudrillard la postmodernidad se forma, la propia estructura social genera sus
separa de la modernidad cuando la produc- métodos de vigilancia y castigo en las distin-
ción de la demanda - de consumidores - devi- tas facetas de la vida humana, construyendo
ene esencial. Se habla de Los Angeles como enclaustramientos capaces de dirigir y perfi-
la primera ciudad postmoderna; el consu- lar el devenir vital del individuo, limitando
mismo no conoce límites, siendo capaz de sus posibilidades de elección y diseñando un
convertir cualquier cosa en un artículo de estatuto ético ante el cual toda desviación sea
consumo, incluso el significado, la verdad y punible; de esta forma el pensamiento indi-
el conocimiento; todo es fragmentario, hete- vidual es perfilado en el seno de la familia, la
rogéneo, disperso y plural, sujeto siempre a escuela, el ejército y el mundo del trabajo, y
las opciones de los consumidores. Esta frag- las desviaciones son castigadas con el refor-
mentación pone a prueba las concepciones matorio, el manicomio o la prisión (panóp-
de la verdad. Si es el consumo el que mueve tico). El individuo está pues condicionado
los engranajes; la coerción ya no es necesa- por el poder, atrapado en una telaraña de la
ria, el instrumento de control e integración que no puede escapar. Ya desde la antigüe-
social ha pasado a ser la seducción. dad, el “conócete a ti mismo” desplazó en su
La sociedad de los mass-media es una so- transmisión a través del pensamiento cristi-
ciedad transparente. Para Vattimo la intensi- ano al “cuida de ti mismo” original, donde
ficación de las posibilidades de información era una consecuencia lógica de éste. Medi-
sobre la realidad en sus más diversos aspec- ante un mecanismo similar, la confesión y la
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día económico, social y político de los gru- forma de vida, ese imaginario colectivo (ya
pos privilegiados. La puesta en marcha de individualizado). Es decir, pasamos de la vi-
una industria del entretenimiento y el pro- sión de Orwell a la visión de Huxley, en la
ceso de espectacularización es una consecu- que el ciudadano desearía su estado.
encia lógica del mecanismo de regeneración Reflexionando sobre Freud, escribe Terry
del sistema. Eagleton: Una vez que el poder se ha ins-
Althusser hablaba acertadamente del apa- crito en la forma misma de nuestra subjeti-
rato ideológico de Estado y ya desvelaba que vidad, cualquier insurrección contra él pa-
su actuación permeabilizaba las capas socia- recería suponer una auto transgresión. Si
les. Con el instrumental mediático a su ser- bien Eagleton ve en estas indicaciones una
vicio, la reproducción de las concepciones y inspiración idealista que conecta con la posi-
modos de vida se convierten en un hecho a ción de Gramsci sobre la cultura y visión del
escala planetaria y a un ritmo acelerado: es mundo y las relaciones de poder, nosotros
la violencia simbólica. Puede aceptarse que proponemos un giro de 180o a la expresión
esa violencia simbólica no provoca muertes, de Freud en torno a la sublimación: Si la cul-
pero difícilmente se podrá negar que sí escla- tura dominante (como imaginario colectivo)
viza cerebros (procesos difícilmente desliga- se inscribe en nuestra subjetividad (es subli-
bles del concepto de muerte). Para Antonio mada) no se producirá ninguna transgresión,
Méndez la asimetría es la caracterización de porque la norma, lo establecido, lo política-
las nuevas estructuras sociales; una asime- mente correcto, estará en relación directa con
tría creciente que aleja cada vez más a gran- esa visión de mundo.
des capas de la población de los beneficios El enmascaramiento, como dinámica del
tecnológicos aclamados por las clases domi- sistema para invisibilizar los procesos de do-
nantes y frente a la labor de super visión del minación, ha repercutido en todos los discur-
Estado - como indica la morfología -, uno sos, desde el histórico al científico, desde el
y desde arriba, la acción de los movimien- ideológico al epistemológico o al puramente
tos sociales podrá considerarse sub versiva convencional. Puede considerarse un micro-
mientras proceda desde la pluralidad y la sistema de impregnación que llega a los tex-
interacción desde abajo. Pluralidad e inte- tos (relatos) a través del oscurantismo y esto
racción se nos antojan términos necesarios se padece especialmente en las áreas de la
(aunque utópicos) en la sociedad actual y, so- cultura de élite (no popular ni masiva), de la
bre todo, en la que presumiblemente se nos educación, de la investigación. . .
viene encima con el nuevo milenio. La riqueza del momento que vivimos es-
El concepto gramsciano de hegemonía ha triba precisamente en la capacidad para te-
sufrido muy sutiles cambios en la sociedad ner una visión múltiple del mundo que nos
contemporánea. El borrado no es tanto el rodea. Desde nuestra perspectiva, la tesis
del poder hegemónico, el de la imposición, del pensamiento único como nueva ideolo-
sino que se ejerce mucho más sutilmente: Se gía del sistema neoliberal, no es más que
trata de que sea el lector (interpretante del un mito, una necesidad ontológica del sis-
discurso masmediático: quizás el único dis- tema para regenerarse. Ahora bien, las prác-
curso actual) quien solicite ese concepto, esa ticas de producción sígnica, la industria de
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