Arte para todos.( reflexiones sobre cine).

Desde hace poco tiempo hemos encarado desde AULE humanidades y psicología una
nueva modalidad para el ciclo de cine que se viene realizando hace ya varios años. Esto
nuevo consistió en empezar a pasar en el ciclo de los jueves a las 20.hs películas que
estuvieran en cartelera en el cine platense, a esta dinámica la acompañamos con un
discurso en las aulas de ambas facultades acerca de la necesidad de popularizar el arte
(que por definición es de todos) y de lo paradojal que resulta el hecho de los precios
elevadísimos que hay que pagar hoy para ver una peli en el cine.
La cadena de cines tanto en La plata como en otras ciudades resulta sumamente
excluyente, si pensamos en el valor de las entradas y es aquí donde nos preguntamos
¿no es el arte de todos? ¿No es acaso un reflejo de nuestra sociedad y todos debiéramos
poder acceder a el?
Suele llamarse al cine el séptimo arte, consideramos que actualmente el acceso a esta
manifestación artística resulta vedado a la gran mayoría de la población y absolutamente
mercantilizado haciendo del cine ya no un lugar común, sino un lugar de encuentro
elitista.
En el ciclo pasamos películas que son de origen “pirata”,y aquí también nos detenemos
pensando cómo desde los medios y desde el discurso moral se defenestra al pirateo de
productos artísticos (ya sean películas o discos) resultando esta una critica ciega puesto
que el disco grabado o la peli bajada de Internet es hoy el acceso real, o por lo menos el
único acorde al bolsillo de la mayoría.
Relacionamos esta cuestión con la creciente crisis de nuestro país donde la brecha de la
desigualdad crece a pasos agigantados. Desde el FPDS intentamos una posible respuesta
por medio de la campaña contra el hambre y la inflación exigiendo el 0% del iva en los
alimentos de la canasta básica. La exclusión es palabra clave en estos tiempos de
sociedad de consumo y pobreza, los precios de todo se elevan constantemente y el que
no consume se queda afuera. Y el quedarse afuera hoy no es solamente no poder ir al
cine sino que implica no comer.
Es evidente que este sistema aliena cada vez más y le pone un cerco a la cultura, no solo
criminalizando y poniendo etiquetas a los que sufren, a los que luchan, sino también
quitándole al pueblo el acceso a algo tan sencillo como es ver una película en el cine.
Así se limita la proliferación de realizaciones valiosas en nuestra cultura y se excluye
una vez más.

Diana.