El Plan Micro-Regional ha probado ser una herramienta poderosa para la gestin de recursos, canalizndose cantidades importantes de recursos financieros

y materiales a las comunidades de la micro-regin. Ha permitido mayor eficiencia en la gestin de recursos y en la adquisicin y transferencia de conocimientos, capacidades y experiencias. Como instrumento poltico, tcnico, administrativo y de gestin del desarrollo propio, constituye un paso hacia la revalorizacin del derecho de estas comunidades indgenas a la autodeterminacin. Al enmarcarlas dentro de una visin integral y a mediano plazo, la planeacin ha otorgado una mayor integralidad a las distintas demandas planteadas y los proyectos formulados para darles respuesta. El hecho de relacionar una demanda con otra en un marco ms amplio aumenta el poder de gestin, al poder presentar la demanda como parte de un proceso de desarrollo y no como quejas aisladas. Como la expresin de una propuesta consensuada de desarrollo territorial en la que ya hay aporte, avances y resultados, modifica extraordinariamente la relacin entre el poder pblico y las comunidades o sus organizaciones (Eduardo Torres Navarrete, CAMPO), creando las condiciones para un movimiento gradual de la exigencia hacia la concertacin social amplia y autntica.