Walter Quinteros ha muerto. Confieso que esa noticia paraliz mi vida.

Pero luego de ese inmenso segundo, apliqu la respiracin baja, refluj las lgrimas, y una sincera alegra serena me hizo crecer desde entonces. Los que han conocido mi vida de estudiante, o de poltico, saben de la gran determinacin de Walter en mi formacin personal y profesional, durante y despus de esas experiencias conocidas como "Sociedad y Poltica", "MRS", "Nueva Universidad", "FTPIA" o las "Recuperaciones de Tierras", en Lima, Arequipa y Puno. La gran derrota de los aos ochenta nos encontr dbiles, y esa marea neoliberal lo sac del pas y a otros nos arrincon a la produccin en secreto (como Anbal Quijano), a la sobrevivencia, a la sumersin, al cinismo, y a la traicin. Pero el proyecto secreto de Walter era la formacin de personas, "cuadros" que les decan, que pudieran ser colocados en cualquier punto del planeta y fueran capaces de producir y reproducir los pensamientos y las actitudes adecuadas a la realidad en transformacin en ese punto. Cuando Vctor Ral Cadenas me dio esa noticia que me mat, en verdad hubiera muerto si ya no hubiera tenido la fortaleza del Siloismo en el que me entren Alberto Cano, y que me hizo ver que un hombre no muere cuando sus acciones en vida son continuadas por otros luego de su deceso. Esa inmortalidad del caso de Walter Quinteros, creo que est garantizada por la existencia de esos cuadros en el mundo, como este blogger annimo que fue su alumno en Puerto Rico, y que resea la Figura de Walter Quinteros tan bien que lo suscribo y recomiendo plenamente.

de Rodolfo Abarca, el El Domingo, 15 de enero de 2012 a la(s) 17:25