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Universidad Nacional Experimental

“Francisco de Miranda”
Área: Cs. de la Educación
Aprendizaje Dialógico Interactivo
U.C. Comprensión de la Lectura y la Escritura
Prof. Carla Pineda

¿Para qué se escriben textos?


Puede parecer que la respuesta obvia a la pregunta “¿para qué escribimos un texto?”
es “para transmitir información”. Sin embargo, la mayor parte de nuestras interacciones
cotidianas no sirve para transmitir información (piénsese, por ejemplo, en una típica
conversación de ascensor), sino simplemente para
mantener las buenas relaciones sociales. Los textos
escritos suelen tener mayor valor informativo que las
interacciones orales, pero, de todos modos, lo cierto es
que no siempre se escriben para informar algo. Una
carta de amor, una postal navideña, el texto que lee al
actor al que acaban de conceder un premio, etc., son
textos que no dicen nada que el destinatario no sepa ya.
Su función es fundamentalmente expresiva, la expresión
de los sentimientos.

Incluso los textos que son informativos pretenden algo más que simplemente que el
lector sepa algo que antes no sabía. Un folleto de agencia de viajes transmite información
sobre lugares, precios, itinerarios; sin embargo, obviamente, a quien lo escribió no le basta
con que el lector tenga esa información: el objetivo básico de ese tipo de texto es vender un
viaje. En el formulario de una instancia existe un aparatado en el que debemos informar de
una serie de circunstancias, pero lo que verdaderamente nos interesa es el apartado en el
que solicitamos algo; la información que hemos aportado sirve para justificar la petición.

En la vida real, por tanto, es posible encontrar textos que satisfacen diversas
funciones comunicativas: con un texto podemos advertir al lector de algo (por ejemplo,
podemos cursar una denuncia en la administración advirtiendo del peligro de derrumbe de
un edificio); podemos hacer un petición a quien lo lea (por ejemplo, una carta comercial
solicitando material urgente); podemos felicitar al destinatario del mensaje (pensemos, sin
ir más lejos, en las postales de cumpleaños) o invitarlo a una boda (mediante la consabida
tarjeta de invitación). A menudo, sin embargo, con un texto se busca cumplir diversas
funciones sociales. Así, con una crítica de cine publicada en un periódico el autor puede
conseguir varios objetivos:
1.- Informar a los lectores del argumente, director, actores, condiciones de rodaje,
producción, etc., del film.
2.- Impresionar a los colegas de profesión con los conocimientos del autor sobre
cinematografía.
3.- Transmitir las emociones y sentimientos que le ha provocado la película.
4.- Despertar el interés de los lectores hacia la película y conseguir, de este modo,
que vayan a verla.

Es decir, una crítica cinematográfica puede contener pasajes de textos expositivos


(la presentación de la opinión del crítico), pero también puede incluir algo de texto
narrativo (una sinopsis o resumen del argumento) y de texto directivo (instrucciones sobre
qué películas hay que ir a ver y cuáles no). E, incluso, el emisor puede emplearlo para
expresar sus propios sentimientos. Lo fundamental, en todo caso, es determinar claramente
cuáles son los objetivos que pretendemos conseguir con el texto. De qué modo, en
definitiva, aspiramos a modificar los sentimientos, creencias, percepciones y opiniones de
la persona o personas a las que va dirigido nuestro escrito.

Ejercicio 1: El tema de un texto no está necesariamente relacionado con su finalidad. Los


siguientes fragmentos hablan sobre un mismo tema: la astrología. Sin embargo persiguen
metas diferentes. ¿Qué objetivo intenta conseguir el escritor de cada uno de ellos?

Texto 1

La mujer libra-hombre escorpión

La mujer Libra deberá apelar a todas sus considerables reservas de simpatía y tacto
para aprender a tolerar los accesos de melancolía y los largos silencios de este hombre. Él
no la ha abandonado: se limita a alejarse de la costa un poco más que de costumbre,
nadando por las aguas más profundas de loa meditación sobre los misterios de la vida, y no
necesita un custodio que flote junto a él. Prefiere emprender solo estas excursiones
nocturnas. La cháchara, o las preguntas insistentes como “¿En qué piensas?” o “¿Por qué
estás tan callado, cariño?”, las contestará con una mirada fría y más silencio. Incluso los
escorpiones más locuaces, con varios planetas en Géminis, Aries o Leo, tendrán momentos
de introspección.

Al comienzo, el hecho de que él se comunique mejor con una mirada, o quizá con
un toque, en tanto que ella se comunica mejor utilizando los medios que les fueron dados a
todos los seres humanos para comunicarse, verbalmente, con sonidos llamados palabras,
generará no pocas tensiones entre ambos. A un Escorpión, aunque sea muy gregario en
otras áreas de la vida, nunca le resultará fácil mostrarse excesivamente locuaz cuando
exprese sus sentimientos emocionales, sexuales o románticos. Si existe un aspecto Sol-
Luna armonioso entre sus cartas natales, ella entenderá esa actitud, empezará a medir sus
palabras y se comunicará más a menudo a través de su sonrisa radiante de Libra…y de un
elocuente silencio.

(L. Goodman [1980], Los signos de zodíaco y el amor. Barcelona,


Urano, 1988, pp. 742-743)

La astrología es una seudociencia particularmente difundida. Los estantes de las


librerías están atestados de libros sobre ese tema y casi todos los periódicos publican
diariamente un horóscopo. Según una encuesta Gallup de 1968, el 52% de los adolescentes
norteamericanos cree en la astrología, y una inquietante cantidad de gente de todas las
edades parece aceptar que alguna de sus antiguas pretensiones. Y digo “inquietante”
porque, si la gente cree en los astros y la astrología da miedo pensar en qué o en quién más
puede llegar a creer. Y es particularmente inquietante cuando, como el presidente Reagan,
tiene un inmenso poder para actuar sobre la base de estas creencias.
La astrología sostiene que la atracción gravitatoria de los planetas en el instante del
nacimiento ejerce cierto efecto sobre la personalidad. Esto resulta muy difícil de tragar, por
dos razones. a) no se indica ni mucho menos se explica, por medio de qué mecanismo,
físico o neurofisiológico actúa esta acción gravitatoria(o de la clase que sea), y b) la
atracción gravitatoria del tocólogo que asiste al parto sobrepasa con mucho la de los
planetas correspondientes. Recuérdese en la fuerza gravitatoria que ejerce un objeto sobre
un cuerpo-un recién nacido, por ejemplo-es proporcional a la masa del objeto e
inversamente proporcional al cuadrado de la distancia entre objeto y cuerpo…en este caso
el niño. ¿Significa esto que los niños nacidos de partos asistidos por tocólogos gordos
tienen rasgos de personalidad claramente distintos de los nacidos en partos asistidos por
tocólogos delgados?

(J. A. Paulos, 1998)


El hombre anumérico. El analfabetismo matemático y sus consecuencias,
Barcelona.

RESPUESTA PROPUESTA: (Ejercicio 1)


En el texto La mujer libra-hombre escorpión, tiene como objetivo principal
informar al lector de las características de una relación integrada por los tipos de personas
que aparecen en el título. Dejando de lado la credibilidad que cada cual otorgue a este tipo
de información, el texto expone unas características para informar de ellas al lector que se
acerca al libro al que pertenece este fragmento en busca de esa información. El tipo de
datos que se expone no precisa de una demostración científica (o quizá, no la admite), de
modo que simplemente se expone ordenadamente, se muestra al lector. Otro objetivo que
ha de conseguir el fragmente es interesar, resultar ameno y de agradable lectura. Para ello,
la autora recurre a ilustrar sus afirmaciones con imágenes o anécdotas que ejemplifican lo
expuesto.

RESPONDE EL OBJETIVO DEL 2do. TEXTO

Tomado de: Montolío. 2002. Manual práctico de escritura académica. Editorial Ariel.

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