HABLANDO DE LA RELATIVIDADIugar en la primera infancia, pero el proceso contin a través de toda su vida, y este libro espera contribu a ello. He escogido su titulo porque creo que | conceptos no son cosas a las que se pueda embesti y agarrar. Le vienen a uno indirectamente, habland: Sobre cosas, mucho mejor que por ataque directo, La mente tiene un sistema de bloqueo cuando enfrenta con las érdenes de entender esto o aquello, y es necesario dejarla en un estado de relajacién Sé por experiencia que Ia advertencia de relajar puede ser autodestructora —nunca he tenido éxito combatir el insomnio hablindome a mi mismo d relajarme—, y quizé no deberia haber hecho tal adver- tencia. Sin embargo, pienso que estas lineas de Clough son adecuadas a la cuestién de adquirir conceptos: ALEste el sol sube lento, muy lento, Al Oeste, empero, ya esté claro el ciclo. Como he indicado antes, mantengo que los con- ceptos son mucho mas profundos que las palabras, y desde Iuego el hombre «piensa con sus manos», ganando conceptos y no necesariamente las palabras para describirlos. Pero debo fiarme de las palabras, sean cuales sean, y en esto he de tener cuidado. Para introducir conceptos nuevos para usted, debo usar solamente palabras que ya evoquen conceptos en su mente. Pero al hacerlo, debo escoger mis palabras con un cuidado extraordinario, pues escogerias equivoca- damente puede hacer que pierdan interés. Algunas palabras se vuelven insulsas al leerlas. Otras provocan un malicioso placer y desvian Ia atencién del asunto propiamente dicho. Tengo, pues, que tratar de seguir ina via media. Hablando de palabras, jqué hay de las deoria de la relatividady? Pienso ote cians de la relatividad <4 atraccién emotiva. Témese la palabra teorfa. ‘sn término dignificado, pero implica que es s6lo teoria, una especulacién, no un hecho, y nos la pregunta de si es verdadera o no. En cuanto relatividad, es un misterio polisilabico, y deja el te de relativo a qué. A menudo me sor- suplicéndole a Einstein que hubiera escogido titulo, pues su teoria es un hecho (en un sentido diré més adelante), y en ocasiones es dificil encon- en ella qué es relativo a qué. Pero el titulo esté tan ampliamente aceptado que seria pedante iarlo por otro, y acabo por rendirme y por dejar ‘@ refunfufiar de él. § Yolviendo a los conceptos, diré que pueden ser ‘Stiles de adquirir, pero parecen ser mucho mas difi- ‘elles de quitar. Puede que usted piense que se trata & escoger el mejor entre los conceptos, pero no hay sei cosa. Dos conceptos pueden luchar desesperada- create entre si, y levar a su poseedor a un estado Senético. Es lo que ocurre cuando introduce los con- ‘exptos relativistas en su mente, sin haberla purgado ‘antes de los conceptos newtonianos; y esta purga es peicticamente imposible de realizar por completo, ‘eesto que hemos ido creciendo con los conceptos newtonianos de espacio y tiempo, y la mayor parte del ssundo cientifico todavia los usa. El esquema usual de la educacién en estas materias = como sigue. Uno empieza por aprender la geome- ‘ria euclidea y la mecénica newtoniana, y acaba por hhacerse con los conceptos que (aunque Newton los expuso de forma mas explicita) han estado en ia cabeza de la humanidad durante muchisimo tiempo. A partir de aqui uno puede ponerse a estudiar Ia teoria especial de la relatividad mirando sus con- ceptos como modificaciones de los newtonianos. El aso final es estudiar Ia teorfa general de la relatividad como una modificacién de Ia teoria especial. Est seanama ciane el nracesa histérica v hav mucho aue