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Viejitos deambulando por las calles con sus nios interiores aporreados; con recuerdos que se esfuman en veredas

que llevan sin cuartel hacia el olvido. Viejitos que tal vez fueron atletas o seores o doctores o eruditos o cantantes, ruiseores y poetas o tal vez tan solo fueron esa huella borrada por los vientos del olvido. Esos viejos que se esconden entre sombras de bancas ignoradas en las plazas que te ignoran; esos viejos resignados esperando intilmente el abrazo reticente de una muerte consolada. Esos viejos millonarios de memorias y de sueos destrozados en aicos y de lgrimas tragadas en torrentes por las largas letanas de una vida... Esos viejos que hoy miramos con recelo despreciando sus arrugas manifiestas son espejo, son imagen del maana que nos tiene desde siempre de objetivo

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