Así es como yo lo hago. Cuando usted despierte en la mañana, dígase a sí mismo: "El orden divino se hace cargo de mi vida hoy y todos los días. Todas las cosas trabajarán por mi bien durante todo el día. Este es un día maravilloso y nuevo para mi. Jamás habrá otro día semejante a este. Estoy guiado por lo divino durante el día y todo lo que haga prosperará. El amor divino me rodea, me envuelve y avanza re en paz. Cuando mi atención se desvíe de lo que es bueno y constructivo, la devolveré inmediatamente a la contemplación de lo que es bello y bueno. Soy un imán mental que atrae hacia sí todas las cosas que serán para mí bendición y prosperidad. Hoy voy a obtener éxito en todas mis empresas. Me dirijo definitivamente a ser feliz durante este día". Comience de esta manera todos los días; entonces escoja así la felicidad, seréis una persona radiantemente feliz.