Está en la página 1de 1

Imagino que siento el primer beso, un beso que esperaba, labios clidos, suaves, que me besan intensamente.

Mi cuerpo empieza a temblar, empieza a descubrir que te deseo cada vez ms. T me desnudas, yo siento tus manos tibias sobre mi piel, manos que deseaba sentir, firmes, dulces y clidas. Tocas mis pechos, me haces gemir, me acaricias una y otra vez, tu piel ardiente envuelve la ma, me tomas en tus brazos, me aprietas a ti, siento tu cuerpo, duro y preparado para hacerme tuya. Recorres con tus labios hasta donde pierdo el sentido, yo recorro tu cuerpo con mis labios ardientes, y no dejo de saborearte, sabes a cuerpo de hombre ardiente, cierro los ojos... te quiero amar.

Me levantas suavemente, y acomodas mi cuerpo, para empezar a hundir tu miembro viril en mis adentros, dejndome sin conciencia, todo se ha detenido, solo existimos tu y yo en este momento. Mueves tus caderas para llevar el ritmo, hacindome sentir cada vez ms, mi cuerpo quiebra en todos los sentidos, sigo tu ritmo, mis caderas se mueven, me gusta lo que me das, y siento tu fuerza en cada movimiento, tu dureza de hombre, que me hace escapar un gemido al viento, uno tras otro, bates con fuerza controlada, das a mi cuerpo todo lo q hemos guardado durante tiempo y ahora podemos darnos los dos.

Ya no hay vuelta atrs, el tiempo se nos acabo, te abrazo y te beso, sintiendo que ser la ultima ocasin, te aprieto fuerte contra mi pecho, t me rodeas y abrazas con toda tu pasin. Ya no hay tiempo para amarnos, todo se queda en aquella habitacin, El tiempo corre afuera, volvemos a la realidad; todo termina como empezamos, con una mirada, con un beso, con un abrazo, y dicindonos adis.

También podría gustarte