La entrevista y el informe en el trabajo social Uno de los errores que cometemos los trabajadores sociales es rotular a nuestros asistidos

o en su defecto prejuzgarlo. En las entrevistas que realizamos a las personas para conocer sus necesidades y establecer cul puede ser la solucin a su problema efectuamos interpretaciones de las interpretaciones de lo que dicen. La dificultad es cuando caemos en el error de colocar en los informes sociales palabras como disfuncin , madre abandnica, rotulndolos, siendo otra la interpretacin de los hechos y, cayendo en un sociocentrismo. Nos olvidamos de que tenemos preconceptos y no lo controlamos. Se describe un hecho social desde una posicin de clase o status profesional en vez de buscar el sentido de dichos atributos en un modo de vida coherente y lgico, aunque degradado por la miseria y la explotacin (Guber:1990:90). Nuestra formacin universitaria y nuestro poder nos traiciona. Permanentemente estamos comparando lo que le pasa al otro con las practicas, valores y normas formales (Guber:1990:84) para as establecer cul es la desviacin. Por otro lado, est la gran dificultad de establecer un dialogo entre lo emprico y la teora que permita llevar a cabo un proceso de resignificacin. Esto nos impide ver la realidad en su profundidad y si de manera inmediata Cuando se llena un formulario para establecer si la persona est en situacin de riesgo social, los datos obtenidos de la entrevista son forzados a ser categorizados para que haya posibilidades de que la persona sea tipificada como en situacin de pobreza y exclusin social y recibir la ayuda. Se fuerza los datos desconociendo los sentidos propios de ese mundo social (Guber:1990:89) Las situaciones descriptas suceden porque se carece de instancias reflexivas en la prctica del trabajo social, no se abandona posiciones sociocentricas y etnocentricas que se hacen visibles en los informes sociales y en los discursos. Para ello es necesario como afirma Frederic la reflexin consciente del investigador en el campo donde trabajamos y adems problematizar nuestro mbito de vida profesional naturalizado. La antropologa y la etnografa es un espacio para romper con estos males.