Está en la página 1de 1

Dante Taparelli y sus visitas guiadas al Cementerio El Salvador El domingo 14 de julio pasado lo encontr a Dante Taparelli en el Mercado Retro,

que l mismo fund hace diez aos en Rosario. Me acerqu para preguntarle por las visitas nocturnas guiadas que l organiza al cementerio El Salvador, por supuesto, con afn artstico. Nunca se me cruz pensarlo como una aficin necroflica, aunque algo de eso debe rondar por all. El asunto fue que le pregunt si algn visitante, entre los muchos que sacan fotografas entre los mausoleos y panteones en noches de luna llena o sin ella, entre mrmoles y granitos trados de Italia muchos de ellos, si alguna vez alguien, deca, le mostr una fotografa en la que se apreciara alguna figura digamos paranormal, dado el contexto tan especial. Entonces, Dante me sorprendi, al contestarme con cierto aplomo y frialdad: "Nunca me mostraron nada as. No podra ser de otra manera, en el cementerio todos estn muertos". Me impresion esa mezcla rara de pesimismo y objetividad. Esa opinin descarnada y cientfica, de la que un Mario Bunge podra no asombrarse y hacerse vocero. Luego me refiri que ya asistieron unas 8000 personas, a un promedio de 80 personas por visita. Pero a ese escepticismo haba que rascarle la ptina, que Dante, como buen artista, haba dejado acumular en su superficie para lucir de un modo y ocultar algo debajo de ella. La conversacin rumbe (un poco llevada por mis preguntas, lo reconozco) hacia los arcanos teosficos. Y, aunque no citamos esta palabra precisamente, hablamos del cuerpo astral, del doble etrico, de sus percepciones y de sus efmeras y vagas vinculaciones entre esas estructuras y el plano perceptivo de los vivos. Me habl de la Escuela Cientfica Basilio de Santa Fe a la que asisti asiduamente, y de lo rigurosa que es esa institucin para desmontar ficciones fantasmagricas y despejar nebulosas. Yo le habl de Rosala, quien era directora de la Basilio Rosario. Una experiencia extraa la de charlar con l, con sus tintes ominosos. Una sensibilidad insondable y algo oscura la de Dante Taparelli, llena de rincones sombros inexplorados, curiosa y angulosa, como sus visitas nocturnas entre mrmoles y granitos. Gustavo Cosolito

También podría gustarte