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Sofa

Sofa lleg a este mundo en una soleada, hmeda y fresca primavera. Como cualquier recin nacido, su nico objetivo era comer y crecer. Coma con tal entusiasmo y placer que no le daba tiempo a pensar en otra cosa. Llegada a cierta edad y, como no slo de pan vive el hombre, a Sofa le comenz a preocupar su futuro. Lo cierto es que esta inquietud coincidi con ciertos cambios en su cuerpo acompaados por bruscas variaciones de humor que le llevaban del llanto a la risa y del odio al amor pleno, como si viajara en una montaa rusa donde la deliciosa subida se ve rota por el vrtigo del inesperado abismo. Sofa pensaba en cmo le gustara ser de mayor, si todo lo que haba aprendido le servira para afrontar las dificultades de la vida. La vida, que hasta entonces haban sido comida, juegos y amigos, se le presentaba incierta y, a veces, sin sentido. Quera vivir libre y feliz. Sobre todo le preocupaba su aspecto, aunque bien haba aprendido que para ser feliz bastaba la belleza del alma que se cultiva con amor, trabajo y respeto. Lleg el primer calor del verano y con l tambin su ltimo sueo en el que no importaba ser polilla o mariposa, slo sentirse bien por dentro.

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