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Hacia una nueva evangelizacin

Cmo valoramos en xito en la nueva evangelizacin


Filipenses 2:12-18 Los mega ministerios son gigantes con pies de barro, la iglesia ms grande de Chile se divide en medios de procesos judiciales y publicas peleas, una de las facciones ha sido denunciada pblicamente porque sus pastores obtuvieron licencias de enseanza media falsas, o en el mejor de los casos fraudulentas, hoy la justicia investiga el caso. La efectividad de esa denominacin siempre ha sido evaluada desde la gran cantidad de templos construidos, la cantidad de gente que asiste a sus cultos y el nivel econmico que han alcanzado sus pastores, no hablo del nivel social y cultural que sigue siendo deplorable, se han enriquecidos econmicamente pero siguen siendo los ignorantes y mediocres de siempre. Junto a lo anterior, no podemos negar que estamos asistiendo a un cambio cultural en la iglesia evanglica, no podemos pretender volver a las formas de evangelizar y medir el xito y la efectividad que tenamos hace algunos aos atrs. Estoy trabajando en un nuevo paradigma en el campo de la evangelizacin al cual le he llamado La nueva evangelizacin, no estoy hablando de un nuevo evangelio, sino de una nueva forma de ser evanglico, y dentro de esta nueva evangelizacin he buscado nuevos parmetros para medir el xito hoy quiero hablarles de cmo valoramos el xito en la nueva evangelizacin. Somos exitosos cuando nuestros discpulos mantienen un cambio. El escritor les pide a sus destinatarios que ahora que el esta lejos, continen obedeciendo a su enseanza, como si el estuviera presente. Esta actitud de obediencia en ausencia demuestra y hace evidente la condicin de salvos, de personas autnomas y auto controladas en funcin de sus creencias y no por temor al lder, el escritor les recuerda que Dios, segn su bondadosa determinacin, es quien les hace nacer los buenos deseos y quien les ayuda a llevarlos a cabo. Lo anterior presupone una nueva forma de construccin de poder y autoridad, ambos fundados en el amor, el cuidado y la enseanza El mejor regalo al trabajo evangelizador no es la cantidad de personas que llenan los templos, sino las vidas transformadas y enriquecidas, finalmente, nuestro trabajo lo est mirando Dios, y es valorados por el cambio interno y no por los logros numricos ni econmicos.

Wladimir Andrs Ponce Caroca July de 2013

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